1101
Mi espíritu se acongoja por lo que perdió y se lanza por completo al tiempo que fue. PETRONIO, Satyricon, c. 128. (N. del T.)
1102
Poder gozar de la vida pasada es vivir dos veces. MARCIAL, X, 23, 7. (N. del T.)
1103
Abandonamos la naturaleza tomando al pueblo por guía, el cual no hace sino extraviarnos. SÉNECA, Epíst. 33. (N. del T.)
1104
Antepongo mi placer a todas las vanas habladurías. CICERÓN, de Officis, I, 24. (N. del T.)
1105
Que para sí guarden las armas, los caballos, los dardos, la maza, la pelota, la natación y la carrera; que a nosotros ya machuchos nos dejen las tabas y los dados. CICERÓN, de Senect., c. 16. (N. del T.)
1106
Diluye en tu prudencia un grano de locura. HORACIO, Od., IV, 12, 27. (N. del T.)
1107
Para un cuerpo débil es insoportable la más mínima sacudida. CICERÓN, de Senect., c. 18. (N. del T.)
1108
Un espíritu enfermo nada puede soportar de incómodo. OVIDIO, de Ponto, 18. (N. del T.)
1109
Lo que está ya cascado se quiebra al más leve empuje. OVIDIO, Tris., III, 11, 22. (N. del T.)
1110
Languideciendo con el cuerpo hacia ningún objeto se encamina. PSEUDO-GALLUS, I, 125. (N. del T.)