Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

301

La introducción de Riquer a su edición de Avellaneda, I, lxxxi-lxxxii.

 

302

Juergen Hahn, «El capitán cautivo: The soldier's truth and literary precept in Don Quijote, Part I», Journal of Hispanic Philology, tomo 3 (1979 [1980]), 269-303.

 

303

«Autobiografía y ficción: El relato del Capitán cautivo (Quijote, I, 39-41)», Anales Cervantinos, tomo 15 (1976), 149-55 y «Más sobre autobiografía y ficción en el Quijote», Anales Cervantinos, tomo 16 (1977), 253-54.

 

304

Quiero agradecer a Alan S. Trueblood la lectura de este artículo y sus profundos y útiles comentarios sobre el mismo. La traducción es de la redacción de la Nueva Revista de Filología Hispánica.

 

305

La tasa de la primera parte está fechada el 20 de diciembre de 1604; el libro no tiene colofón, pero los preliminares de la segunda edición, hecha en Lisboa, están fechados el 26 de febrero y el primero de marzo de 1605. Si no fue publicada en enero debe haber aparecido en los primeros días de febrero.

 

306

Porque la quinta edición -que por cotejo puede deducirse que se basa en la cuarta- tiene una aprobación fechada en julio de 1605 (Leopoldo Rius, Bibliografía crítica de las obras de Miguel de Cervantes Saavedra, I (1895; reimpr. New York: Burt Franklin, 1970), 8-10).

 

307

Las pruebas que presenta el texto también apoyan la opinión de que las incongruencias pertenecen más a Cervantes que a los impresores. En II, 4, Sancho explica a Sansón Carrasco que el robo del burro ocurrió mientras él dormía, claro intento de justificar el no haberse mencionado el robo en la primera parte. El primer pasaje interpolado nos recuerda quién era Ginés de Passamonte, algo que no esperaríamos si ese trozo se hubiera omitido accidentalmente en la primera edición, ya que la aventura de los galeotes había ocurrido en el capítulo anterior. Por último, la palabra «rucio» se usa primero en este pasaje interpolado (nota 16 del editor Diego Clemencín al capítulo I, 23; utilizamos la reedición de la suya por Editorial Castilla: Madrid, 1966); la palabra se usa sobre todo en la segunda parte. (Mi agradecimiento a A. D. Kossoff por señalarme este hecho, y a Enrique Ruiz-Fornells por facilitarme la página con la palabra «rucio» de sus concordancias del Quijote.)

 

308

«Revisión in Don Quixote, Part I», en Hispanic studies in honour of I. González Llubera (Oxford: Dolphin, 1959), pp. 347-66. El título del capítulo 10 anuncia la aventura de los yangüeses, que tiene lugar en el capítulo 15. Encuentro la explicación de Stagg más convincente que las teorías de Pierre Ullman («The heading of chapter X in the 1605 Quijote», FMLS, tomo 7 (1971), 43-51).

 

309

Obras completas, I: Don Quijote de la Mancha, seguido del Quijote de Avellaneda, ed. Martín de Riquer, 3.ª ed. (Barcelona: Planeta, 1968), p. 234. Esta edición de Riquer, mucho menos conocida que la de Clásicos Z, incorpora, sin embargo, sus anotaciones más recientes.

 

310

Compárese, por ejemplo, su llanto en II, 396, 19-397, 5: I, 52.