Artificios naturales

Nila López

  —7→  

a Julio

  —[8]→     —9→  
  —[10]→     —11→  

Si probara
para Myriam Sienra Zavala
	Si probara
	decir y desdecirme.
	Si perdiera
	el miedo ante las teclas.
	Si empezara	5
	de nuevo desprevenida
	y sin cláusulas
	borrando los estigmas,
	suponiendo que el verso
	se escribe sencillamente	10
	sin luz de luna
	ni otros artificios naturales
	tal vez me atrevería
	hasta ser poeta.

  —12→  

- I -

para Josefina Plá

Archibald me decía: palpable debe ser tu criatura como fruto redondo. Pienso en la circularidad del círculo: deben faltarte palabras.  5

—13→

Las letras se derrumban. Algo punzante hiere mi página. Este poema no significa nada pero ahora soy con él una enramada.  10 Quiero contarte cuán desconfiada crece la raíz del drama mientras hacemos pactos inútiles en el zaguán del escándalo  15 anticipándonos al miedo, perseguidos por capitales pecados, preguntando quién es mejor, es bueno o es peor, qué razón como don Juan atropellamos,  20 qué virtud escarnecemos, a qué justicia burlamos o quién nos burla a nosotros, qué personas vendemos, cuál delirio provocamos.  25

  —14→  

- II -

Yo te sigo los pasos, mascarita. No me persigas más. ¡Misericordia! Sin voz, sin sortilegios,  5 retórname esa prenda, anula esta pasión por encontrarte, aparta de mí tu melodía, poesía, poesía heterogénea del tiempo  10 huye, aléjate de mí.

—15→

Mi rosa alcanzó su plenitud, déjala ahora marchitarse, que igual la sobrevivo. Permíteme escucharte desde lejos,  15 alterar el sentido del beso, cornificarte al fin en este parto con dolor y sin remordimientos. ¡Soy culpable!  20

  —16→  

Sí, reúnanse en mí todas las voces

para Carlos Colombino

Sí, reúnanse en mí todas las voces, griten desde este sur las viejas rabias. Susurren los secretos más audaces, clamen, propongan, digan sus plegarias.

—17→

Expándanse en el círculo de sueños  5 que en sopor se debaten esperando. Alcancen los minúsculos peldaños de un cielo que nos nutra redimiendo.

  —18→  

Intrusa en esta jungla de detalles
Para Meme Perasso
	Intrusa en esta jungla de detalles,
	informes, genocidios y momentos,
	la antepenúltima bomba de Irán,
	y el desconcierto del amarillo sol
	que llega aun así cada mañana,	5
	a veces tengo ganas de esfumarme,
	convertirme en manchón de la pantalla,
	llorar abiertamente y sin testigos,
	reírme de maldades cotidianas,
	pedirles que comprendan mi estupor,	10
	contarles cuentos claros, novedosos,
	hacer la historia otra, a mi manera,
	develar los misterios de la imagen,
	ser sólo camarógrafa del día.

  —19→  

Levántate
para Susy Delgado
	Levántate.
	Si de tanto esperar
	debes morir,
	hazlo para nacer al fin
	con otro grito	5
	que no pida
	rosarios, dedales, cacerolas.
	Álzate
	y en los canales
	del siglo que se acaba	10
	batallemos.

  —[20]→     —21→  
  —[22]→     —23→  

La nube
	La nube
	ha formado un castillo
	exactamente como lo busqué.
	Una bocina suena.
	La nube	5
	es un fantasma sobre el verde.
	Ya de todos los sueños que he tenido
	me quedan solamente las preguntas.
	¡Devuélvanme a las cosas!

  —24→  

De tanto
	De tanto
	no creer y creer en todo
	de pronto
	soy sólo una mujer
	que asume su destino.	5
	Ya no tengo doble
	en esta noche.

  —25→  

Este domingo me he quedado sin llaves
Para Rachel Stawer
	Este domingo me he quedado sin llaves.
	Sin casa.
	Sin parientes.
	Sin susto.
	Sentada al lado de las puertas.	5
	Son dos
	y mi ventana
	tiene tres cocinas.
	Yo
	desordeno el mundo	10
	para que así
	se ordene.

  —26→  

Allá, raíz
	Allá, raíz,
	había sequía.
	Aquí, montaña,
	había inundación.
	Pero me entrego a ti	5
	ya sin embargos.
	He tomado mis recaudos.
	La maldición
	se ha puesto del revés
	y es bendición.	10
	La vida
	vuelve a entrar
	en su carril.

  —27→  

Ayer
	Ayer,
	pretérito perfecto,
	dijiste: es mi sino.
	Callé entonces.
	Callamos, sordos.	5
	Quizás fue demasiado fácil
	sentirnos dos náufragos amantes
	pues a nadie había que demandar
	los réditos de cada encuentro.
	Hoy, conjugados,	10
	batimos libres las alas.

  —28→  

De guardia me mantenía
	De guardia me mantenía
	hasta desarmarme ante ti,
	mi continente.
	¿Qué homínidos tramaron nuestro amor?
	¡No me des con la puerta en las narices!	5
	Que el eco de mi sílaba
	te llegue y te sacuda.

  —29→  

Ya no señalas días

Ya no señalas días en tu pura geometría. Mi piel en otro extremo roba su vuelo a la mañana perdurable.  5

—30→

Dos pupilas infantiles revuelven la placidez recreándose con el instante que cierra, tentador,  10 un segundo más en el reloj de arena del vecino.

  —31→  

Comunes lugares

Porque el rosal ha dado otro capullo inesperadamente, en este enero salimos a cantar desde la tarde, terrestres y comunes pero juntos.

—32→

Inquirimos muy poco y sí sabemos  5 espantar sin los puños al temor; vale más la ternura del abrazo, esta limpia sonrisa compartida.

—33→

Y en el fuego sencillo y susurrante donde el amor es más que un vocerío  10 este mundo real y el que inventamos

—34→

nos muestran sus paisajes, sus colores, nos ofrecen la paz y las pasiones más allá de las trampas del destino.

  —35→  

Todos los reinos perdidos de mi cuerpo
	Todos los reinos perdidos de mi cuerpo
	limitan esta siesta con el tuyo.
	Concédeme el don de reconocerte,
	tan cerca de tu boca mi suspiro,
	mostrarte que el reclamo del deseo	5
	puede ceder, sutil, su privilegio
	al antiguo llamado del espíritu.

  —36→  

Sobre la hoja que ningún viento arrastra

Sobre la hoja que ningún viento arrastra y la ola esperando su primigenio impulso se estaciona el recuerdo: la hipoteca de un sueño, su sol de medianoche  5 esquivando la sombra de este tiempo que a pesar del ayer inauguramos.

—37→

Sin trámites me acercas tu sonrisa. Te doy, sin prevenciones, la mía.  10 ¿Desde cuándo se estaban esperando?

  —38→  

A los campos emigra la esperanza
	A los campos emigra la esperanza:
	a comprender por qué una sola planta,
	una estrella, un abrazo bien dado
	suspenden tanto al mundo en su vacío.

  —39→  

Siento mis pies
	Siento mis pies
	como dos brújulas sorprendidas,
	y tus pasos detrás.
	Despierta, mi ángel,
	duerme a mi bestia	5
	como un niño
	recompone su juego,
	el ritmo,
	la síntesis,
	asunto arriesgado,	10
	el tono.
	Despierta, mi ángel,
	toma mis falsos nombres,
	usados y dejados.
	¡Acógeme en tu cielo!	15

  —40→  

En cada poro mío
	En cada poro mío
	está tu olor grabado.
	Vengo del desamor,
	de una larga tristeza.
	Vengo a acunarme en ti,	5
	mi compañero,
	en ti que has convertido
	lo imposible en posible
	y eres dueño
	del tronco elemental	10
	de mi canción.

  —41→  

Te quiero así
	Te quiero así,
	con ese brillo intenso
	que en llama se transforma
	entre tus manos.
	Te quiero a ti	5
	con todos tus rincones,
	con tu humor luminoso,
	con tu nombre de mes
	y tu pureza.
	Con los cuatro elementos	10
	de Empédocles,
	con mi aire y el fuego,
	con tu tierra y el agua
	te quiero
	mío como la luna,	15
	satélite incesante
	que me impulsas
	hacia la catarata de tus besos.

  —42→  

Ligaduras etéreas

Ligaduras etéreas me ciñen todavía. Desátame, mi amor, respira mi arrebato, rompe conmigo el límite  5 de todos los futuros. Desátame, mi amor, quítame la insignia de las indiferencias, abre de par en par  10 tus ventanillas, confronta las distancias, defíneme este espacio.

—43→

Suéltame ahora, no desdeñes mi arrullo,  15 toma mi mano, olvida en una esquina la historia que ha pasado. Toma mi mano, amor, cálzame los zapatos del tacto:  20 entre los minerales y la estrella puedo sentir que, afín a ambos, titila con tu magia el universo.

  —44→  

Tu boca
	Tu boca
	sabe a fruta estival
	y mis labores
	forman su centro
	allí donde tú estás.	5
	En cada itinerario
	de sorpresas,
	en la suave travesía
	de tus ojos,
	en tu ir y venir	10
	de pececillo,
	en tu quietud,
	taurino,
	en la aventura interminable
	de tu alma absoluta,	15
	en el vaivén
	de cada célula
	que sin marcha nupcial
	en mí inauguras.

  —45→  

La sábana no sabe que sin ella
	La sábana no sabe que sin ella
	igual festejaremos el estreno,
	y la flor que flor regala al día
	nos hallará desnudos otra vez.

  —[46]→     —47→  
  —[48]→     —49→  

En tropel resonante

Para Adolfo Ferreiro

En tropel resonante como en toda comedia, con falso buen talante me pliego a la parodia. Miro tu tarjeta postal,  5 escucho el grito psicodélico, palpo la baldosa octogonal en un vodevil agónico. Convertida en soldado, retornando al neolítico,  10 me aparto del sidado con mueca alcanforada. El guiño de la droga sigue su marcha pautada y el oportunista monologa  15 con una computadora.

—50→

Aprieto el acelerador ante la mesa examinadora que diligente y con ardor exige raza, sexo, edad.  20 Sin esquivar el estado civil, por favor, qué contrariedad, más que nunca soy del ovil, ¡propónganme una eutanasia! Que el recurso del poder  25 y los caprichos del ansia en eunucos, qué joder, se transformen sin querer.

  —51→  

Clavado en el planeta

Clavado en el planeta, apabullado por la lógica de tu propio ajedrez rutinario, mueres a veces y resucitas en el dialecto del aguacero.  5 Entre halagos y denuncias sopesas la invitación: ¿Ópera rock o un entremés? Tu compleja medusa dilatoria exhibe el gesto  10 mordido en la pregunta:

—52→

¿Qué perfume es el que usas? ¿De qué marca es la corbata? Un museo de frustraciones se levanta a tu alrededor.  15 Homo sapiens sapiens sapiens, la escalera mitológica te ha olvidado en un peldaño. Recemos también nosotros para que pocos se enteren  20 que descendemos del mono.

  —53→  

Muy curioso el testimonio

para Antonio Carmona

Muy curioso el testimonio de canales y de radios: sigue moviéndose el mundo con mil millones de ciegos.

—54→

Los periódicos informan  5 sobre la cena benéfica mostrando elocuentes fotos del accidente de tránsito.

—55→

Airadas, cuatro protestas llegan a la redacción:  10 han cambiado los epígrafes.

—56→

Por obra de los tipógrafos el decisivo filántropo aparece estrangulado.

  —57→  

Sin plumas, desde el barco
	Sin plumas, desde el barco,
	pequeña y sufriente pasajera,
	la prostituta busca empleo
	con su cuerpo encerrado
	en un piano inservible	5
	que le narra secretos
	de trenzas y perfumes,
	y de un hombre que murió
	con su fusil inútil,
	sin la gloria esperada.	10
	¿Qué signos, qué teclados
	habrá que componer
	para salir del cuento
	y reinventar la música?

  —58→  

Para nada me importa el Pentágono
para Francisco Pérez-Maricevich
	Para nada me importa el Pentágono
	porque el indio
	ayer en el Chaco
	enredado en su fábula dijo:
	ochocientos millones	5
	seiscientos mil años cumplí.
	Mi nombre es Dios
	y mi casa Yvaga.
	Vine aquí a buscar caña
	para otro dios, Aprajam,	10
	y me la estoy bebiendo yo
	pues no tengo mujer
	ni hijos ni padres.

  —59→  
  —[60]→     —61→  

Mitos, raíces y preguntas

para Lilian Stratta

¿Fui Eurínome desenfrenada como paloma en la ola universal? ¿Qué criatura perenne transitó las edades del Hombre, consumió sus panes,  5 declaró sus guerras, profetizó con la Madre Tierra y sostuvo sus cielos sobre el hombro para darme formal nacimiento? ¿Fui la creadora Atenea  10 o una de sus sacerdotisas? ¿Fui Metis disfrazada y vagabunda o Afrodita surcando la mar, adornada con hierbas y gorriones?

—62→

¿Me cuidaron las cuatro Estaciones  15 como a Hera, con manzanas doradas? ¿Con qué rayo orgulloso me hicieron? ¿Fue Hestia la madre de mi madre o fue Dafne mi abuela y Apolo mi abuelo? ¿Cuántas flechas y antorchas  20 encendieron por mí? ¿Soy hija de Zeus o de Eros? ¿Alcestis me dio protección o Ifigenia después me cuidó? ¿Fui la fiel Deyanira  25 o amazona en el cuerpo de Hipólita?        (Si el oráculo hablara       el temor pasaría,       la duda no vendría       a despintar mi ruta.)  30

  —63→  

Acto de fe

in memoriam JLB

A veces con el otro, con el mismo, el oro de los tigres y la rosa profunda te escucho, mi hacedor  5 y contigo pregunto de qué Adán anterior al paraíso somos los hombres un espejo roto. Sueño a tu lado la espada y la balanza  10 y el otro idioma, el álgebra.

—64→

Comprendo cuánto duele tu intangible penumbra, la ceguera. Reedito con tu júbilo el misterioso amor de las cosas  15 que nos ignoran y se ignoran. Invento tus palabras al leerlas y en dos ociosas líneas renazco al hábito de urdir endecasílabos mientras destejo sola  20 el duro laberinto de tu fe.

  —65→  

Asegúrame saber

para Maluli Vera

Asegúrame saber que lo que ayer te dijeron es lo mismo que repites. Sólo entonces confiaré en ti como en la bruja que remienda el circo  5 desde el destierro y la ignominia.

—66→

Con tu razón y la evidencia, la fantasía y tu delirio, los rumores interminables, ojos espías entre visillos,  10 con estas cruces trasnochamos y en cien remedos nos perdemos.

—67→

Vamos cambiando de lugar pero las mañas permanecen. Mudamos también de semblante  15 y aunque los años nos perdonen, todas las otras que ya fuimos se disputan el reparto sin que ninguna corra el riesgo de ser la primera actriz  20 en la vida y su espectáculo.

  —68→  

Por variados caminos

para Carlos Villagra Marsal

Por variados caminos, dispersa casi siempre pero voluntariosa, espero que alguien llegue o que no venga nadie  5 a turbar mis afanes, la dicha indescriptible de lavar la verdura y ordenar los pinceles de Giovanna y Adriana.  10

—69→

Muchas voces me llaman, y en el absurdo empeño de responder a todas, confundo viejas márgenes, me enredo en el doméstico  15 trajín del escritorio, escondo los horarios y organizo pretextos más allá o aquí mismo. Por eso es que a menudo,  20 desde esta fortaleza, pido perdón mil veces por no ser la heroína que mis hados buscaron.

  —70→  

Geografía personal
para Alicia Campos Cervera
	Tus costas me permiten
	apresar la eternidad,
	crecer en resonancia
	de mareas antiguas,
	perpetuar el oro	5
	de altas cimas,
	admirarte desde la isla das Cabras,
	Río,
	orillarte, Bahía
	y vibrar con tu son,	10
	extrañarte en penumbras,
—71→
	Buenos Aires,
	yo llevo tus banderas
	y roca puedo ser
	en cada acantilado de Recife,	15
	olvidarme de todo
	en Fortaleza,
	subir hasta Belén,
	descender a Piçarras,
	pasear después Manaos	20
	más allá del río Negro,
	asir del Amazonas hasta Lima
	la furia ancestral
	de los huesos de América.
—72→
	Tus costas me permiten	25
	arrullarme con historias
	del Cuzco,
	apoyarme en tu hombro
	en Macchu Picchu,
	regresar hasta Olinda,	30
	hacia la artesanía del color,
	saltar a la doliente serranía
	de Santa Cruz
	y conocerte luego raudamente,
	México de mis sueños.	35
	Tus costas me permiten
	volar hacia New Orleans,
	quedarme para siempre
—73→
	dulcemente enamorada
	de San Francisco,	40
	marearme en medio de la niebla,
	New York,
	en cada candileja de tu Broadway,
	temblar cuando florecen
	los cerezos de Washington,	45
	sentir toda mi sangre mezclada
	en Minneápolis,
	en Iowa saberme
	pequeña agricultora
	y en Kansas una isla	50
	con recuerdos certeros
	de la patria lejana.
—74→
	Tus costas me permiten
	tocar mi atávico organismo,
	el canto de los cantos,	55
	la fiebre de las fiebres,
	la danza de las danzas
	en Antigua Guatemala
	mirando revolverse
	en sus volcanes	60
	mis densas ilusiones.
	Así, pausadamente
	construyo el esqueleto
	de mi propio planeta,
—75→
	lo completo	65
	asombrada todavía
	de tanto vuelo azul
	hasta Madrid,
	del más profundo origen
	de Toledo,	70
	de la cálida, generosa Sevilla,
	mi Consuelo,
	de Alicia
	empezando de nuevo
	en Barcelona.	75
—76→
	Así, pausadamente,
	construyo tu esqueleto
	recordando
	una lánguida lágrima
	en París	80
	con esta infinita añoranza
	de tus calles rojas
	y mi río, su gente,
	las cigarras,
	mi sitio, Paraguay.	85