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81

El ser esta carta la contestación a una del señor Cepeda, fecha 11 de septiembre de 1839, nos ha guiado para colocarla en este lugar. En el sobre se lee: «Condado de Niebla.- Sr. D. Ignacio Cepeda, en Almonte»; y se ve claramente la cifra «1839» en el sello de la Administración de Correos de Sevilla.

 

82

Alude sin duda a lo que dijo en la carta anterior: que tendría que separarse de su madre o resolverse a acompañarla en su viaje a Galicia, donde residía su padrastro, el señor Escalada.

 

83

El señor Cepeda se preparaba entonces en Almonte para recibir la investidura de Licenciado en Leyes, pero lo delicado de su salud retrasó ese acto hasta el 18 de febrero de 1840.

 

84

El señor Cepeda debió acudir galantemente al dulce requerimiento hecho en la carta anterior, pues la presente y las diez que le siguen fueron escritas indudablemente en Sevilla en noviembre y diciembre de 1839 y mandadas por confidente, o por el correo interior, a la Posada de la Castaña. Ninguna de las once tiene fecha, descuido corriente en su autora, por lo que han sido ordenadas (sin presumir del acierto) según los grados de pasión que acusan en el abrasado corazón de la poetisa.

 

85

Obsérvese la distracción que sufre la escritora. No era viernes cuando escribía, sino sábado, día en que se había repartido en Sevilla el correo general, como ha dicho en el principio de esta carta.

 

86

Obsérvese la graciosísima corrección que así misma se hace la poetisa, aparentando retirar los conceptos emitidos con tanto fuego y verdad como ternura y delicadeza.

 

87

La señorita Concepción Noriega repetida vez citada.

 

88

Ignoramos si llegó a publicarse.

 

89

Impresos con el título A un jilguero, en la colección de 1841.

 

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En el sobrescrito se lee: «Sr. D. Ignacio Cepeda, en S. M.».