Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
Indice
Abajo

Babar: revista de literatura infantil y juvenil - Núm. 18, julio 1995



Imagen



  —1→  

ArribaAbajoSumario

BABAR n° 18. Revista de Literatura Infantil y Juvenil.

Julio 1995.

Tirada 500 ejemplares.

Edita: LIBRO CLUB DE ARGANDA.

C/. Siete Picos, 41.

Tel.: (91) 871 2085.

28500 Arganda del Rey - Madrid.

Composición: EDIPLUS, S.L.

LIBRO CLUB DE ARGANDA.

Presidencia: Marta Vidal.

Secretaría: Eva García.

Administración: Rubén Martín.

Consejo de redacción:

Nuria Fernández.

Vanessa Gordo.

Teresa García.

Pablo Cruz.

Mónica Puentes y David Martín.

Coordina: Antonio Ventura.



  —2→  


ArribaAbajoAlicia Cañas

Imagen

  —3→  

Alicia Cañas Cortázar, nació en la Rioja y realizó sus estudios de Bellas Artes en Madrid, en la facultad de San Fernando.

Desde bien joven se interesó por el mundo del arte, le apasiona la literatura, la música y en especial la pintura.

Un buen día comenzó a acercarse más y más a la ilustración, hasta que hizo de ella su profesión, convirtiéndose así en una creadora incansable.

Cuando nos habló de su trabajo descubrimos la pasión que esta mujer pone en cada una de sus ilustraciones; ¡Claro que... esto lo podemos percibir con tan sólo echarlas una ojeada!

Lleva alrededor de ocho años ilustrando libros para jóvenes y niños, llegando a ser muchos de ellos verdaderas obras de arte. Es la ilustradora de textos en castellano, de autores como: Naguib Mahfuz, Shakespeare, J. R. R. Tolkien, Oscar Wilde... por citar unos cuantos.

Su obra en general es riquísima en colorido, aunque también tiene ilustraciones en blanco y negro. Los personajes creados son de todo tipo; duendes, brujas, animalillos inexistentes, insectos que toman vida, personajes históricos, etc., bien podríamos hacer una lista infinita con ellos.

  —4→  

En cuanto al tipo de dibujo, oscila entre la sencillez Aventura en el gris y el virtuosísimo con todo tipo de detalles Cuentos completos de Wilhelm Hauff.

Destaca el movimiento, la expresividad de los personajes, sus rostros. Cada uno reflejando una personalidad, una vida diferente; porque todos sus personajes cobran vida saltando del papel a nuestras mentes.

Centrándonos en el colorido, Alicia juega con todas sus pinturas de madera para adornar el papel con toda clase de tonos. A veces sus ilustraciones como en un alarde de fuerza y picaresca rompen con el recuadro en el que se encuentran esparciéndose por el resto del papel.

Formas, contornos, matices... completan la riqueza de un estilo muy marcado, que deja paso a la imaginación creando fantásticas atmósferas que nos muestran la gran sensibilidad de esta ilustradora.

Públicamente damos las gracias a Alicia por su amabilidad y su colaboración.

  —5→  

ArribaAbajoEntrevista

1.- ¿Cómo llegaste a dedicarte profesionalmente a la ilustración?

Empecé pintando, hice Bellas Artes, lo completé con dibujos que estaban cerca del mundo de la ilustración y pensé que era un camino precioso, me lancé y dejé de pintar.

2.- ¿Cuánto tiempo llevas en la profesión?

Si no recuerdo mal, unos 8 años y medio.

3.- ¿Tienes algún personaje pintado por ti que te guste especialmente?

Quizá los que me invento que no se sabe qué son, si personas, animales o qué.

4.- ¿Tienes personajes que se repitan?

La verdad es que hasta ahora no, pero precisamente en estos momentos tengo un personaje al que me gustaría darle una continuación. Encuentro preciosa esa posibilidad, es como completar una historia con más historias.

5.- ¿Qué materiales sueles utilizar en tus ilustraciones?

Básicamente lápices de colores, son mis preferidos, a veces de base acuarelas sobre papel blanco reforzado con lápices.

6.- ¿Qué te resulta más difícil, ilustrar libros infantiles o juveniles?

  —6→  

Los que más me gustan son los juveniles, dentro de los infantiles los que más me cuestan son los «más infantiles», me siento incapaz de hacerlos.

7.- ¿Ha habido alguna persona que haya sido una influencia importante en tu carrera?

Realmente no, he visto mucha ilustración y muchos cómics, yo empecé con un estilo creado. Las influencias que he tenido han sido generales, no ha habido personas concretas.

8.- ¿Te has encontrado con algún texto que te haya sido especialmente difícil de recrear?

Sí, los actuales, me encantan los que están situados en épocas indefinidas o pasadas. Te permiten un juego muy interesante, ropajes, edificios...

9.- De todos los libros que has ilustrado, ¿con cuál o cuáles te sientes más satisfecha?

Hombre la verdad que con los «Cuentos completos» de Wilhelm Hauff y con el de Tolkien «Gil, el pagès de Ham».

10.- ¿Te lleva mucho tiempo ilustrar un libro?

Un cuento aproximadamente un mes o mes y medio.

11.- ¿Has ilustrado libros de texto?

He ilustrado pocos pero con mucha libertad, trabajando a gusto. Sobre todo han sido de lectura, música.

12.- ¿Además de la ilustración de libros te dedicas a otro tipo de trabajos relacionados con la pintura?

Ahora no.

13.- ¿Qué ilustraciones te gustan más?

Sobre todo los clásicos, Sendak y Doré. Me gustan los barrocos, bien trabajados, también los que hacen dibujos muy sencillos, los dos extremos.

  —7→  

14.- ¿Encuentras alguna relación interna entre las distintas artes, pintura, música, cine...?

Por supuesto, siempre. La sensibilidad para captar, ese algo que hay detrás de cada arte.

15.- ¿Crees que existe una evolución en el arte?

Creo que en estos últimos años sí, hasta ahora, dentro del siglo XX, se ha hecho un arte un poco bazofia, todo estaba permitido, todo vale, creo que ahora a causa de la situación económica la gente se lo piensa más antes de comprar un cuadro, ya no cuela tanta porquería. Me entusiasma el arte abstracto, con un equilibrio. Ahora se hacen buenos abstractos y buenos realistas.

16.- ¿En qué estás trabajando ahora?

En un cuento, en dos a decir verdad, uno de ellos espero que sea un álbum, el otro es para una editorial norteamericana. Es una especie de libro-juego pero de una forma cerebrada, situado en un escenario donde ocurren cosas, buscar a través de pistas. Quiero utilizar ese mismo personaje para otros libros de este tipo.

David Martín

Marta Vidal





  —8→  

ArribaAbajoLiteratura Infantil


ArribaAbajoColección «Saco de...» La Galera

Imagen

Seis títulos inauguran la nueva colección «Saco de...» publicada por la editorial La Galera.

Un saco en el que encontramos personajes típicos de los cuentos tradicionales brujas, gigantes, dragones...

En Saco de Brujas aparece la historia de Flordecol, una adaptación de un cuento popular de la costa del Mediterráneo. El texto es de Miquel Desclot y las ilustraciones de Asun Balzola.

Otro Saco es el de las Hadas; en éste encontramos la adaptación de un cuento popular español «La cesta del hada», con texto de Roser Ros e ilustraciones de Arnal Ballester.

Imagen

En Saco de Gigantes tenemos el cuento «Érase un gigante». Es una versión de un cuento popular vasco, cuya adaptación literaria es de Gabriel Janer Manila y las ilustraciones son de Pep Montserrat.

El cuarto Saco es el de los Enanos. «Reineta» es la adaptación que Caterina Valriu ha realizado sobre un cuento popular catalán, y las ilustraciones que lo acompañan son de Joma.

No podrían faltar dos Sacos sobre dos personajes típicos de los cuentos tradicionales: un Saco de Dragones y otro de Diablos.

  —9→  

Imagen

Imagen

En Saco de Dragones encontramos la adaptación de una leyenda que proviene de China y que está realizada por Pep Coll, e ilustrada por Miguel Calatayud.

Imagen

Los Diablos están representados por la adaptación que Teresa Durán ha realizado de un cuento popular mediterráneo, ilustrado por Jesús Gabán.

En estos seis libros encontramos ilustraciones a color y en blanco y negro, que se alternan con un texto breve, y de corte tradicional. En un formato de álbum pequeño, con pastas duras, estas seis historias presentan cuentos que provienen de la tradición de los cuentos maravillosos.

Imagen

Una colección que además de estar dirigida a primeros lectores puede ser disfrutada por cualquier lector, sea cual sea su edad. La calidad de sus textos, la variedad y belleza de sus ilustraciones, y el cuidado de la edición hacen de estos libros objetos de una gran belleza.

Ester García



  —10→  


ArribaAbajoLibros


ArribaAbajoEl abismo de Maracot

Imagen

Arthur Conan Doyle.
Traducción: Javier Martín Lalanda.
Anaya. Madrid, 1994.

El abismo de Maracot es además del título del libro, el del primero de los tres cuentos allí recogidos. El que fuera el padre de Sherlock Holmes nos introduce en el fondo del océano, en un mundo totalmente nuevo y desconocido. Un nuevo universo se abre a nuestros ojos y es inevitable la sorpresa ante la abundancia de la fauna marina. Una apasionante historia fantástica llena de suspense dentro de la ciencia ficción. Por otro lado sus tres personajes hacen que ni los más avanzados estudios científicos ni el amor queden sin tratar.

El terror en la Sima de Blue John es otra aventura que tiene lugar en tierra firme, en el interior de una gruta. Esta vez no es un mundo nuevo el que se presenta sino la presencia de una terrible bestia de origen y raza desconocidos. Un personaje débil y enfermo pero no por ello menos audaz se introduce en el interior de la Sima con la esperanza de demostrar la existencia de tan horrible monstruo, esto desencadenará el desarrollo de la historia.

Por último tenemos El horror de las alturas que es para mí la más increíble de las tres historias. Al contrario que en las anteriores el tema de ésta es realmente original: la certeza de que el espacio aéreo está plagado de junglas y monstruos que habitan en él. Un piloto de la primera época de la aviación emprende un arriesgado vuelo en busca de pruebas que demuestren la existencia de este nuevo mundo. Se inicia así una aventura que conoceremos a través de un libro de vuelo que por estar incompleto provoca en nosotros ese desasosiego que dejan los finales abiertos.

Estrella Escriña



  —11→  

ArribaAbajoLos derechos torcidos

Imagen

Mariano Vara.
Colección Sueños de Papel.
Luis Vives. Zaragoza, 1994.

Cada lágrima derramada por un niño abandonado o hambriento, o por un esclavo privado de su libertad, borra las hermosas palabras que un día decidieron hacer de los hombres seres iguales. Palabras que otorgan la dignidad, la justicia y la paz a aquellos que luchan entre los escombros de la casa destruida por las bombas, a aquellos que con fe tratan de curar las heridas de sus corazones; a aquellos que se preguntan por qué el tal «Occidente» ha creado un Tercer Mundo en el que los han instalado sin más.

Ninguna de las palabras que componen la Declaración Universal de los Derechos Humanos pensó nunca que el hombre las dejaría olvidadas convirtiéndolas en «sueños de papel».

Las historias que nos narra Mariano Vara en este libro son reales. Quizá por eso superan la fantasía de los bellos cuentos de hadas o de las más fabulosas novelas de aventuras.

Es posible que los personajes de estos siete relatos jamás hayan oído hablar de derechos o de justicia, pero estoy segura de que todos, en su miseria, son capaces de demostrar lo que nosotros, en nuestra abundancia, hemos olvidado: Solidaridad. Ante la deformidad de su hijo, y a pesar de su pobreza, Juan no duda en acudir a la gran ciudad en busca del médico en quien ha puesto todas sus esperanzas para curar a su primogénito. Sin embargo, un pobre indio como él no encuentra más que trabas y negativas.

Shelma reúne el valor suficiente para huir de quien debe ser su marido por decisión de su padre. En su huida conocerá el verdadero amor.

Moheb llora en la soledad de un pequeño sótano que alberga a varios inmigrantes de Marruecos. España no parece ofrecerle la opulencia que él había esperado, ni siquiera un poco de ayuda.

Mariano Vara en «Los derechos torcidos» ha querido reflejar las desigualdades establecidas en la sociedad, denunciando algunas de las injusticias más grandes de este mundo: esclavitud, racismo, abandono de menores... A pesar de la crudeza de algunas de las narraciones, el autor ha conseguido plasmar una belleza narrativa en un libro que sin duda te hará reflexionar.

Ana María García



  —12→  

ArribaAbajoHáblame del sol

Imagen

Ángel Esteban.
Ilustraciones del autor.
Colección Altamar.
Bruño. Madrid, 1994.

En otoño, esa época en la que los árboles se desprenden de sus hojas, cubriendo el suelo con un manto que parece de oro, nacieron tres pequeños ratones. Ellos crecerían y se relacionarían, pero el amor de sus padres nunca cambiaría..., por la necesidad o tal vez avaricia, esto no ocurrirá, ya que siendo muy pequeños los ratones pierden a sus padres y es el abuelo quien aún sin creerlo cuidará de los pequeños. Todo parecía haberse calmado, pero entonces «Tres», el más pequeño observó la aparición de una luz que procedía del techo, amarillenta y tenue que sólo duraba unos instantes, y luego desaparecía. El abuelo entonces supo que llegaría la pregunta:

«-¿Qué es?

-Nada, no tiene importancia.

-Pero dime qué es...

-Es el sol.

-Háblame del sol...»

A partir de entonces su vida cambió por completo, ya no eran sólo juegos, quería saber acerca del exterior, acerca del sol...

Este cuento escrito e ilustrado por Ángel Esteban con unos extraordinarios dibujos, que ayudan al lector a comprender mejor el contenido, es digno de ser leído por los pequeños, ya que acercará a aquellos que aún no lo estén hacia ese mundo de seres que tenemos tan cercanos, que de una forma u otra también intentan sobrevivir en este mundo tan hostil... LOS ANIMALES.

Ainhoa Galíndez



  —13→  

ArribaAbajoDe este lado del silencio

Imagen

Jorge Juan Martínez.
Alfaguara.
Madrid, 1994.

De este lado del silencio narra la historia de un joven que tras un accidente de tráfico pierde a su mejor amigo y la facultad del habla. Este acontecimiento marca una nueva etapa en su vida que después de un largo periodo de hospitalización le devolverá a la rutina diaria de las clases.

Este nuevo retorno supone una dura tarea de incorporación al grupo de jóvenes compañeros debido a su dificultad de comunicación, lo cual no le impedirá tiempo después compartir su amistad con los que serán sus mejores amigos.

La vuelta a la vida de este joven quedará recogida en un diario escrito por el propio protagonista donde muestra la doble personalidad del sufrimiento y el amor.

Es un relato corto y continuado en el que brotan ciertos matices de espiritualidad y encanto. El problema juvenil permite reflejar con claridad el sí a la amistad, la tolerancia y la lucha por la vida. La narrativa cuenta con un lenguaje coloquial y sin escrúpulos que, sin duda, hace llamada directa a la realidad.

Jorge Juan Martínez ha querido mostrar el cruel destino que a veces se nos puede marcar y que hoy tan cerca está de nosotros, jóvenes y adultos, pero en su profundidad denota el lema de que no sólo la palabra permite comunicarnos con el mundo que nos rodea, pues la acción humana puede y de hecho prevalece en muchas ocasiones en nuestra propia vida.

Arancha Serna



  —14→  

ArribaAbajoSin billete de vuelta

Imagen

Alfredo Gómez Cerdá.
Ilustraciones de Teo Puebla.
Alfaguara.
Madrid, 1994.

En el tren de la vida, todos tenemos un billete de ida, una ilusión y un pasado, sencillo equipaje para un tortuoso viaje.

Sin billete de vuelta es la historia de la vida, la historia de unos pocos, Darío, Martín, Rafael, Tiquio, Damián y Matías, y sin embargo es la historia de todos y cada uno de nosotros. Alfredo Gómez Cerdá nos narra, con la sensibilidad y particularidad a la que nos tiene acostumbrados, seis relatos muy especiales.

En la estación de Sants (Barcelona) nuestro amigo Alfredo se encuentra con una extraña invasión de ancianos, sorprendido por este hecho y movido por la curiosidad se acerca al grupo de viajeros para saber a qué se debía esa concentración, rápidamente se integra en el grupo y escucha atentamente el paso de la vida de algunos de los personajes componentes de tan enigmático grupo, crónicas de las gentes que tomaron un día desde el tren de la vida la decisión que marcaría éstas para siempre.

Una novela con un suspiro, un llanto y una reflexión...

Miguel Ángel Dorado



  —15→  

ArribaAbajoEl mundo de Sofía

Imagen

Jostein Gaarder.
Traducción de Kirsti Baggethun y Asunción Lorenzo.
Ediciones Siruela.
Colección Las Tres Edades n° 35.
Madrid, 1994.

¿Sabes la diferencia entre un sofista y un filósofo?

Sólo se me ocurre decir que la humanidad está llena de sofistas y que hay escasez de filósofos, pues a medida que nos hacemos adultos perdemos la curiosidad por las cosas y lo transformamos todo en algo habitual. ¿Para qué pensar? ¡Qué tontería! Las cosas son así porque sí (es más cómodo que dar explicaciones) ¿O estoy confundida?

A Sofía jamás se le había ocurrido pensar cosas semejantes hasta que inesperadamente encuentra un sobre en su buzón en el que se formulan dos preguntas:

-¿Quién eres?

-¿De dónde viene el mundo?

A raíz de este encuentro se produce un cambio en su vida, pues las cosas del colegio y lo que habla la gente dejan de tener importancia para ella.

Un misterioso filósofo -a través de un curso de filosofía por correspondencia- va abriendo los ojos de la muchacha, permitiéndole acceder al mundo del pensamiento y de la razón, permitiéndole sentir sensaciones y formularse razonamientos que jamás hubiera pensado tener.

Viendo a su madre, que vive el trabajo y su rutina, desea seguir el curso de filosofía que ahora le llega a través de un perro amaestrado en vez de por correspondencia, y además, comienza a recibir postales para una chica desconocida, llamada Hilde   —16→   Woller Knag. El misterio se agranda y junto a él, el deseo de conocer al desconocido profesor.

¿Qué relación tienen Hilde y el filósofo?

En su habitación aparecen: un pañuelo rojo, una cartera verde, un calcetín blanco... ¿Pertenecen estas prendas a Hilde?

Con el paso de los días observamos cómo Sofía mejora en su capacidad de razonamiento y expresión, y cómo, paso a paso, resuelve este misterioso puzzle compuesto de múltiples piezas.

El mundo de Sofía es una novela que nos presenta la Historia de la Filosofía desde sus principios hasta nuestros días. Comenzando por los filósofos de Grecia como Tales o Heráclito, pasando después por Sócrates y Aristóteles; más tarde aparecerán Descartes, Spinoza, Locke, Kant, y llegando hasta Freud.

Además de ser una introducción a la Filosofía es una novela con una importante tensión narrativa y un misterio constante. Las voces de la muchacha y el filósofo se alternan de manera sutil ayudándonos a abrir los ojos...

Jostein Gaarder ha construido una excelente novela que facilita el encuentro con el sentido de la vida, con nuestras propias respuestas a los interrogantes que aquella nos plantea.

Mariola Rodríguez



  —17→  

ArribaAbajoManolito Gafotas

Imagen

Elvira Lindo.
Ilustraciones de Emilio Urberuaga.
Algaguara. Madrid, Septiembre 1994.

Este libro narrado por Elvira Lindo, es un libro muy divertido y de sencilla lectura (a partir de 12 años).

Narra sucesos de la vida de «Manolito Gafotas» junto a su abuelo «Superpróstata», su hermano «El Imbécil», y sus amigos: Yihad, Susana y el «Orejones López». Es «Manolito Gafotas» el que narra en primera persona los sucesos que ocurren en su barrio, Carabanchel. Y lo cuenta con palabras que ha ido atrapando de la calle y de sus mayores, de un modo acorde con su edad, nueve años.

El libro contiene simpáticas ilustraciones de Emilio Urberuaga, lo que hace su lectura más entretenida.

Yo personalmente os animo a que lo leáis, porque a través de los ojos de Manolito Gafotas la infancia se descubre como el mejor momento de la vida. Como él diría: LA INFANCIA MOLA MUCHO, MOLA UN PEGOTE...

Patricia López



  —18→  

ArribaAbajoEl verano de Aviya

Imagen

Gila Almagor.
Ilustraciones de Edouard Bertrand.
Traducción de Carlos Silveira.
Colección: La Joven Colección.
Lóguez Ediciones. Salamanca, 1994.

Aquel sería un verano que Aviya nunca olvidaría. Habían transcurrido cinco años recibiendo con impaciencia cada una de las cartas de su madre y preguntándose cuándo sería su próxima visita al internado. La enfermedad que padecía la obligaba a permanecer grandes períodos de tiempo hospitalizada y le hacía imposible el estar junto a ella. Mientras, la pequeña tenía que conformarse con leer las cartas que le enviaba ocasionalmente, y con soñar, totalmente despierta, con un padre al que solía ver en fotografías que guardaba escondidas, pero al que nunca llegó a conocer.

Sin embargo, la última visita de su madre no había sido como las anteriores: había decidido sacarla del internado y llevársela a vivir con ella durante todo el verano. Aviya había recibido la noticia con gran alegría. Era lo que había estado esperando desde hacía mucho tiempo, pero sabía que cualquier cambio brusco de humor, cualquier cosa que pudiera decir o hacer podría empeorar el estado de salud de su madre, que sufría agudas crisis nerviosas causadas por su pasado.

Aviya conocía de sobra aquel pasado. Es más, se lo recordaba a menudo el vistoso número tatuado en el brazo de su madre, que representaba amargamente el horror vivido, años atrás, en el campo de concentración alemán.

Gila Almagor narra, a través de la historia de Aviya y su madre, el rechazo que muchos judíos tuvieron que sufrir en su propio país, al regresar como supervivientes del holocausto nazi.

Mónica Puentes



  —19→  

ArribaAbajoLa explosión en la calle Ahalan

Imagen

Daniella Carmi.
Traducción de Carlos Silveira.
Colección: La joven Colección.
Lóguez Ediciones. España,1994.

Samir e Ilana son una pareja muy especial aquí, en Israel. Ella es de procedencia judía y él árabe. Nadie apuesta por aquí por este tipo de parejas...

Pero ellos no son religiosos y viven muy felices. Además tienen una hija de doce años, Natasha, que es la narradora de nuestra historia.

Samir trabaja de abogado, Ilana cuida de la casa y Natasha estudia y se va al río a imaginar con Yan (su amigo); hasta que se dejó oír la explosión...

Esa misma noche Samir fue detenido en su propia casa como presunto culpable de la explosión de una bomba en una tienda de su barrio cuyo propietario era judío...

Los días pasan, las pruebas no existen, pero Samir sigue enjaulado.

Ilana luchando, arañando por la libertad de su compañero y Natasha sufriendo los cambios, las miradas de la gente, sus amigos...

Toda la narración de la historia está impregnada de sentimientos profundos, y es en sí una propuesta para la paz entre los pueblos judío y palestino, un reclamo a la libertad de creencias... El libro tiene unas cuantas ilustraciones que merecen tu atención.

Sergio A. González



  —20→  

ArribaAbajoTom, el de la sexta luna

Imagen

Florence Reynaud.
Traducción de Maribel G. Martínez.
Colección: La Joven Colección.
Lóguez Ediciones. Salamanca, 1994.

Tom y Jenny son una pareja de jóvenes que se quieren, pero que tienen la desgracia de vivir en la ciudad de Nueva York, una más de todas las que van a ser destruidas por el grave conflicto mundial que se avecina.

El fin tan próximo a ellos hace que Tom, de ascendencia india, comience a inquietarse y a intentar descubrir cómo era la vida de sus antepasados en las antiguas y verdes praderas donde vivían.

Por eso, comienza a visitar a los últimos indios residentes en Nueva York, para preguntarles y hablar con ellos.

Poco a poco, comienza a sentir la llamada de su sangre, y se convierte en el cabecilla de un grupo de indios que salen de la ciudad en busca de su vieja y perdida manera de vida, al aire libre y en las praderas de Canadá.

Jenny, que no partió con Tom cuando éste y el grupo de indios dejó la ciudad, salió de ella más tarde, cuando se había convertido en una ciudad muerta después de la catástrofe mundial.

¿Conseguirá encontrase con Tom?

El libro está recomendado para lectores de diez a trece años, y creo que está escrito en un lenguaje suficientemente claro como para que extraigan la denuncia que la autora hace, además de esa llamada hacia una vida más natural y menos dañina para nuestro gran hogar, la Tierra.

David Saco





  —21→  

ArribaAbajoLibros Documentales


ArribaAbajoColección «La huella del hombre»

Imagen

Piero Ventura.
Colaboradores: Marx Casalini, Laura Battaglia, Marias Murgo Ventura, Antonella Taffolo.
Traducción de Juan Vivanco.
Everest. León, 1993.

«La huella del hombre» es paradójicamente, una de las máximas preocupaciones del propio hombre. A este Homo Sapiens Sapiens -a cuya especie pertenecemos cada uno de nosotros-, le interesa averiguar cuáles eran sus modos de vida, comportamientos sociales e individuales; en definitiva cuáles fueron las causas del Homo Sapiens Sapiens actual y, cómo no, cuáles fueron las causas que produjeron esas huellas.

La editorial Everest, ha tratado de descubrirnos una visión histórica de cada uno de los rastros más importantes que nuestros antepasados nos dejaron como legado. Esta visión didáctica, a través de la historia del hombre, está ilustrada con claros esquemas y sencillos dibujos que aclaran lo que en el texto se nos comenta.

  —22→  

Esta colección intenta acercar, cuál ha sido la evolución, desde la prehistoria hasta la época actual, de cualquier objeto, costumbre o modo de vida, todo esto entrelazado con imprescindibles tintes de Historia básica. Es decir, queda resumida la historia global del hombre con la evolución de cualquier utensilio, comportamiento que ha sido o mejor dicho que fue creado por el hombre.

Imagen

Actualmente la mayoría de la población puede disfrutar de un lugar techado y cuya propiedad sólo pertenece a un pequeño número de individuos (se suele denominar a este pequeño conjunto de individuos que viven bajo el mismo techo, familia), los cuales poseen las llaves que permiten abrir la puerta de entrada a este lugar, al cual denominamos en su día CASA... pero, parémonos a pensar cómo fueron las casas de nuestros antepasados neolíticos, los distintos tipos de casas romanas, los famosos castillos que podemos ver en las películas de la Edad Media o las casas del siglo XVII, las cuales según en el país europeo que nos encontrásemos serían de un modo o de otro; o quizá, cómo se construiría en piedra, en madera o en ladrillo o en hormigón armado o quizás en hierro y por qué fueron cambiando los materiales de construcción.

O algo tan sencillo como los sistemas de calefacción o cómo se introduce   —23→   el agua en el interior de las casas; podemos dar gracias al álbum «Las casas» saber, más o menos, cómo funcionan debido al sencillo esquema que nos ilustra los mecanismos de estos sistemas tan comunes como desconocidos para la mayoría de nosotros.

Después de analizar la evolución de las casas, podemos preguntarnos si algo tan imprescindible como cotidiano, como es la ropa, ha sufrido alguna evolución a lo largo de la historia y si ha sido así de qué manera ha evolucionado y por qué. Abriendo el álbum «Los vestidos» podemos conseguir una pequeña visión global de la evolución de las telas, modos de producción y la relación vestido-clase social.

Imagen

¿Cómo y con qué se vestían los hombres de la prehistoria? ¿Qué es un perizoma o un kacasins? ¿Qué significado tenían los vestidos en el Egipto de los antiguos faraones? ¿Cómo se curtían las pieles? ¿Cuál es el proceso que sigue la lana, desde que se trasquila la oveja hasta que se convierte en tejido? La respuesta a estas preguntas y a muchas curiosidades más se pueden aclarar acercándose al álbum «Los vestidos».

  —24→  

Si seguimos reflexionando acerca de los objetos que comúnmente utilizamos, podemos pensar cómo se comunicaban entre sí nuestros tatarabuelos. Antiguamente, si nos situamos en el antiguo Egipto, el vehículo de comunicación parecía que eran los jeroglíficos. Estos misteriosos medios de comunicación se descubren ante nosotros en el siguiente álbum, «La comunicación». Es curioso averiguar a través de este álbum, cuál fue el origen de nuestro alfabeto, o el origen de los periódicos actuales, la obligada mención, en esta pequeña investigación a la imprenta de Gutemberg, hallar el origen y funcionamiento del teléfono, actual quebradero de cabeza de multitud de padres con sus hijos; es cómodo ver cualquier programa de televisión -por malo que sea, actualmente abundan de modo alarmante- pero ¿es tan sencillo todo como parece?

Imagen

Realmente, se han producido multitud de avances, los cuales nos han facilitado notablemente nuestro modo de subsistir (en tiempos pasados) y sobre todo nos han producido un modo de vida realmente cómodo. Todo evoluciona, incluso, aunque parezca mentira, los alimentos han evolucionado. El hombre, debido a sus avances técnicos, avanzó en la obtención de sus alimentos, haciendo que éstos fuesen de mayor calidad   —25→   (para alargar su longevidad) y que se produjesen en mayor cantidad. El álbum «Los alimentos» nos invita a conocer cuál era el modo de alimentación del hombre a lo largo de la historia. También, mediante unos esquemas clarificadores, nos enseña cómo se producía el pan, cuáles son las actuales máquinas que utilizamos para recolectar, cuál es el proceso de enlatado o las técnicas de conservación de los alimentos; o quizá, cuáles fueron los alimentos que «tomamos prestados» de nuestra explotación americana. O cuáles son las dietas adecuadas, no las que se inducen mediante «fantástica» publicidad, para el gasto energético que se produzca.

¿Sabíais que mediante hibridaciones se pueden conseguir productos nuevos (normalmente se emplea en la fabricación de nuevas frutas)?

Pero esta didáctica colección no acaba aquí; puedes descubrir el avance de los transportes, cómo y por qué evolucionaron los transportes, cuáles son los antepasados de nuestros coches, trenes y barcos actuales y sobre todo, cómo consiguió el hombre «conquistar» la atmósfera y hacer de ella un medio para poder transportarse. Todo esto y mucho más se puede aprender en el álbum «Los transportes».

Todos estos avances anteriormente comentados, han debido de ser producto de la tecnología. En el álbum «La tecnología» podrás encontrar respuesta a muchas cuestiones acerca de este abstracto pero apasionante tema.

Esta colección de álbumes se puede decir que es una síntesis de la historia del hombre a través de las huellas que dejaron. Son álbumes perfectamente encuadernados, acompañados de sencillas ilustraciones que actúan como el complemento ideal del texto didáctico dirigido a un público infantil y juvenil intrigados por conocer su pasado para poder intentar comprender el presente.

NOTA: Estos álbumes también pueden ser utilizados tan sólo por aquellas personas, independientemente de edad, religión, sexo, raza o procedencia, que estén dispuestas a aprender del antiguo Homo Sapiens Sapiens.

Vanessa Gordo



  —27→  

ArribaAbajoColección «Los Piratas»

Editorial S.M.

Bando.

A todos los que se sienten niños:

Se hace saber que se acabaron los momentos de aburrimiento. Ya no habrá más insoportables tardes lluviosas sin saber qué hacer, ni días en los que ningún juego te puede entretener.

Se comenta que existen unos pequeños libros, grandes de contenido, en los que podréis introduciros y compartir con sus protagonistas maravillosas peripecias.

Entre los más sabios se rumorea que son los piratas los que han traído a nuestras costas estas aventuras, y entre las gentes se las conoce como la colección de «Los Piratas» del Barco de Vapor.

En sus múltiples travesías han conocido a los mismísimos personajes que aparecen en sus cuentos. Acompañaron a Tic y Tac en «El viaje». Sin duda se vieron sorprendidos porque «Antón quiere ser dragón», y se divirtieron mucho con «Margarita Metepatas», a la que ellos mismos pusieron el mote.

Navegando por lejanos mares, se dieron un chapuzón con «La ballena en la bañera», y descubrieron a una niña que no temía ni a los vampiros ni a las brujas, porque «Ada nunca tiene miedo».

Cierta vez echaron anclas en una isla donde todos se preguntaban «¿Qué le pasa a Momo?». Nunca lograron descubrirlo, aunque esa es otra historia.

  —28→  

Nunca olvidarán sin duda, todos los amigos que hicieron en sus viajes, como «Flon-Flon y Musina», la «Abuela de arriba y abuela de abajo», «Carolina cabeza hueca», el «Murciélago Aurelio», «Max, y la princesita que quería ser...»

Los piratas pusieron mucho esmero en encuadernar y poner ilustraciones a sus cuentos, llenas de toda la fantasía y emoción que vivieron en sus viajes.

Nuestros amigos al despedirse juntaron a «LA» con «BIO» y nos dejaron un bonito recuerdo: «Besos».

Imagen

Imagen

Imagen



  —29→  

ArribaAbajoEntrevista

-¿Cómo nace la colección Los Piratas?

En realidad no es una colección, sino una serie de la colección «El Barco de Vapor». Por eso en su logotipo lleva tres piratas precedidos de tan conocido barco de vapor.

Esta serie se crea porque en la colección quedaba por cubrir un tramo de edades, el paso de la lectura mecánica a la lectura comprensiva.

-Hemos observado que la mayoría de los libros han sido publicados en otros países. ¿Ha sido el éxito que en ellos ha tenido el factor determinante para incluirlos en la colección?

Si llamas éxito a la calidad, sí que para nosotros es un factor determinante. Sin embargo si te refieres a las ventas, no podemos saberlo. Ya que casi todos los libros de autores extranjeros se han publicado a la vez, o inmediatamente después, que en su país de origen. De todas maneras, el setenta por ciento de los libros incluidos en «Los Piratas» son de autores e ilustradores españoles.

-A la hora de crear una colección, ¿prefieres asumir el riesgo de editar libros nuevos o reunir títulos que ya han estado publicados?

Para un editor siempre supone un riesgo crear una colección, ya sean libros nuevos o libros publicados. Pero siempre es más gratificante poder contar con novedades.

  —30→  

Imagen

-¿Qué temas has elegido? ¿Por qué?

No he elegido ningún tema. Pretendo que sean libros que faciliten una visión más amplia de entender todo, más abierta, más creativa, dando oportunidad a la diferencia... Pienso que no es necesario que un libro aborde un tema de integración para estar fomentando esos valores.

-¿Cómo son las historias?

Cada historia es distinta de las demás, pero todas esconden una propuesta que estimule lo fantástico, lo ilógico, la discrepancia tanto en la forma como en el fondo. Es decir propuestas que estimulen el pensamiento divergente.

-¿Cuántos libros componen la colección?

Imagen

Actualmente, la colección está formada por treinta títulos y pensamos seguir publicando más.

-¿Crees que los más pequeños pueden aprender a amar la literatura en las aulas?

Por supuesto que sí. Los maestros, sobre todo en las primeras edades, están haciendo una gran labor para animar a los chicos a leer y a amar los libros.

Mónica Ruiz

Eva García





  —31→  

ArribaAbajoÁlbumes


ArribaAbajoEl soldadito de plomo

Imagen

Hans Christian Andersen.
Ilustraciones de Fred Marcellino.
Traducido por Tor Seidler.
Destino. Septiembre, 1994.

Un cuento clásico, un relato de aventuras, una entrañable historia de amor... El soldadito de plomo.

Una vez más, Hans Christian Andersen nos envuelve con su poesía en un mundo en el que realidad y fantasía se confunden, traspasando la difusa línea que las separa.

Con la narrativa clara y directa que le caracteriza, y que le hace llegar con fuerza a niños y mayores, transporta al lector a una jornada de sueños y regalos, a una noche en la que cobran vida muñecos y juguetes. Y nos presenta al protagonista de la historia: el soldadito de plomo, con una sola pierna, que, de entre sus hermanos «fue el único destinado a aventuras gloriosas», y en las que en ningún momento le faltó la constancia y la valentía:

«Soldado mantente firme

que la muerte es sólo un juego».

Nuevamente se pone de manifiesto una características de las fábulas de Andersen que Carmen Bravo-Villasante expresa tan acertadamente en su frase: «La poesía encubre una lección no menos bella y maravillosa».

En esta ocasión, el texto aparece sumergido en un contexto de bellísimas ilustraciones realizadas por Fred Marcellino, como el barco en el que viaja nuestro soldadito se sumerge en las aguas de un canal en una de ellas, cargadas de fuerza, de movimiento y de magnetismo. La luz y el color cobran un papel relevante, dando vida a las imágenes y realzando los detalles.

En definitiva, una obra de arte muy bien presentada que invita a recrearse en la lectura y en la ilustración.

Nuria Fernández



  —32→  

ArribaAbajoEl sueño de Fellini

Imagen

Mónica Sangberg.
Ilustraciones de Letizia Galli.
Traducción de Xavier Lloveras.
Destino. Barcelona, 1994.

Había una vez un chico sentado en la arena, que no desperdiciaba el tiempo si no era con su imaginación. Se llamaba Federico, y ya desde pequeño le gustaba contar, inventar y formar historias llenas de personajes, guiado por un extraño deseo de explorar. De noche llegaba muy alto, hasta ver surgir historias divertidas, colores y acrobacias. Por eso deseó escapar, y acudir a donde más falta le hacía: el Circo, en el que no faltaba ninguno de sus habituales personajes, como la deliciosa Celsomina, payaso de vocación, que se presentó como alguien a quien Federico tenía que haber imaginado.

El Circo, de eso se dio cuenta Federico, llenó de repente un hueco que en él seguía vacío, pero que no podía rellenar de la manera más fácil. Él era mago, todos lo decían, pero jamás vio a la gente delante de su locura, que utilizaba en soledad. Aun así, la Luna no le abandonó, cualquiera que fueran sus intenciones, y se alejó huyendo de la gente, sino que ayudó a Federico a dejar de contarse sus propias historias, de jugar a solas con su otra cara pálida y alargada, de parecer extraño y retraído, y su maravilloso mundo dejó perplejos, angustiados de felicidad, a todos los que tuvieron la oportunidad de verle, iluminado por un gran rayo de luz, en medio de la pista del circo, o como quiera que se llame esto que nos envuelve, y que queramos o no, no es un sueño.

Las ilustraciones de Letizia Galli son un buen medio para expresar, de forma evidente, y además hermosa, las emociones que no puedan hallarse en la simple lectura de signos sin color ni rostro. Un breve texto es la excusa perfecta para presentar la cegadora luz de una luna radiante, pero ¿cómo dibujar la alegría de un sueño?

Pablo Cruz



  —33→  

ArribaAbajo¿No duermes, Osito?

Imagen

Martin Waddell.
Ilustraciones de Bárbara Firt.
Traducción de Esther Roehrich-Rubio.
Kókinos. Madrid, 1994.

Se podría decir que éste es un álbum de osos... pero nos equivocaríamos. Éste es un álbum que va más allá de lo que en el texto se nos relata; autor e ilustradora juegan con sus creaciones, entrelazándolas de tal manera que se produce lo que se podría denominar el «efecto postlectura», -aquel efecto que hace que el lector reproduzca el álbum (como conjunto), y lo refiera a la realidad-. Esta pareja de osos, el Oso pequeño y el Oso grande, inspiran en el lector, ternura y cierta melancolía de «aquellos maravillosos años». Tal vez, como lectores, nos podríamos introducir en este Oso pequeño y poder sentir sus miedos hacia aquello que le resultaba desconocido y que antaño, fueron, seguramente, sentimientos que invadieron nuestro pequeño ser. Este relato de «descubrimientos naturales» está acompañado de textos visuales -ilustraciones-, producto del carboncillo y de tonos serenos y mates. Estas ilustraciones son las responsables de la ternura que despiden todas y cada una de las páginas de este álbum. Degustar estas ilustraciones puede producir ciertas sensaciones de carácter inefable. Muestran, con gran realismo, una noche de estos osos humanizados. Este realismo lo refiero, al conseguido efecto de lo que cada oso siente en cada lámina (valga la redundancia), eso sí, asociado a la lectura del simple aunque delicado y puntual texto.

Todas y cada una de las láminas esconden multitud de misterios y pequeños detalles que hacen de este álbum, un álbum con una dualidad en su lectura. Excelente álbum que puede llegar a tocar esa parte de nuestro yo, que hace tiempo abandonamos en el desván del recuerdo. Por último, una pequeña observación; ¿podéis adivinar, cuál era el libro que leía el Oso grande?

La clave, está en las ilustraciones y en cada uno de vosotros.

Vanesa Gordo



  —34→  

ArribaAbajoEl canto de las ballenas

Imagen

Dyan Sheldon.
Ilustraciones de Gary Blythe.
Traducción de Esther Roehrich-Rubio.
Kókinos. Madrid, 1995.

«Avanzaban danzando a través de las aguas», le dijo su abuela a Lili. Y comenzó a contarle la historia más bella: cómo escuchar el canto de las ballenas.

La abuela retrocede a una época en la que todavía las ballenas vivían libres en los océanos, y ella se sentaba en el muelle para verlas pasar, les regalaba una caracola a cambio de oírlas cantar. Pero no todos creen que las ballenas canten, el tío Federico sólo conoce de las ballenas su carne, su grasa y sus huesos. A Lili le gusta más la historia de la abuela, por ello se va al muelle y les ofrece una flor. En la noche vuelven las ballenas y Lili las oye cantar.

Esta historia podría haberse contado sólo con imágenes, pues las ilustraciones que ocupan, prácticamente, el álbum lo narran todo: el rostro de Lili escuchando, la danza de las ballenas, la caracola en la playa esperando para ser ofrecida a las ballenas, la flor de Lili meciéndose brillante entre las olas.

Gary Blythe ha utilizado una técnica pictórica (óleo sobre tela o acrílico) que resalta los detalles, refleja los cambios de luz y sombra, de tal manera que plasma de forma magistral, junto con el texto, aquello que un cuento sugiere en la infancia: que la ficción es parte fundamental en la vida y que la realidad para los niños puede ser otro cuento.

Teresa García



  —35→  

ArribaAbajoEl hombre, el árbol y el camino

Imagen

Juan Farias.
Ilustraciones de Juan Ramón Alonso.
Colección: Los Ilustrados del Barco de Vapor.
Editorial S.M. España, 1994.

En este sencillo álbum, se combinan un texto de fácil lectura, con unas ilustraciones en vivos colores que reflejan su contenido.

Con ello, autor e ilustrador, pretenden transmitirnos la vital importancia del árbol para el ser humano. De cómo el hombre a lo largo de su camino, ha ido recurriendo al árbol para obtener de él aquello que necesitaba: protección, seguridad, alimento, defensa... y cómo de esta necesidad diaria, ha surgido una estrecha relación entre ambos.

Creo que este relato pretende hacernos ver el importante papel que la Naturaleza, simbolizada bajo el árbol, desempeña en nuestras vidas. De cómo, siempre, tras el paso del tiempo, nos ha proporcionado aquello que requeríamos sin darnos de lado... sin pedirnos más a cambio, que conservemos lo natural, para que éste, nuestro entorno, pueda seguir llevando a cabo su papel.

Un bello libro de pastas duras, que merece ser leído por los que día a día dejan su huella en el camino.

Carolina Alda



  —36→  

ArribaAbajoEl árbol inquieto

Imagen

Miguel Calatayud.
Colección: Los Ilustrados del Barco de Vapor.
Editorial S.M. Madrid, 1994.

Nuestro amigo, el árbol errante, no tiene nombre, pero tiene algo que ningún árbol posee: la capacidad de moverse, de andar, de saltar...

¡Qué tontería! Para qué querría un árbol hacer todo eso. Pues a nuestro amigo le salva la vida. Mientras sus compañeros se quemaban en el bosque en un terrible incendio, él huía, poniéndose a salvo.

Todo quedó enterrado por las cenizas, por los troncos ennegrecidos y las piedras calcinadas.

En el pueblo cercano al bosque muchos vieron al árbol saltarín, y siguieron sus pasos; éste se interesaba por la Naturaleza, le encantaban los colores de los hermosos paisajes del mundo y las criaturas que lo pueblan. Pero también visitaba la ciudad: allí todos tienen tanta prisa... Vienen y van y miran sus relojes, así que nadie se percató de su presencia; conoció árboles de muchos tipos, pero el más extraño sin duda, el que más le sorprendió, fue uno llamado árbol de Navidad.

Ahora el árbol inquieto se dedica a defender el medio ambiente, y lucha para que el desastre que le obligó a abandonar su bosque y a sus amigos, no vuelva a repetirse.

«El árbol inquieto» ha obtenido el premio internacional de ilustración de la fundación Santa María, 1993. Sus ilustraciones gozan de gran expresividad y gran armonía de colores y estoy segura de que te encantaran.

El mensaje que este libro nos manda, es un grito de esperanza de salvación del planeta en que vivimos. Será interesante que lo leas, te gustará.

Beatriz Ruiz



  —37→  

ArribaAbajoCambios

Imagen

Anthony Browne.
Traducción de Carmen Esteva.
Colección: A la orilla del viento.
Fondo de Cultura Económica. México, 1993.

Ya desde por la mañana José notó algo extraño en la cocina. El mango de la tetera dibujaba dos felinas orejas y del botón del encendido surgía un rabo tigrés.

No había duda, la tetera se estaba convirtiendo en gato.

«Las cosas van a cambiar», había dicho su padre antes de salir de casa.

José pasa a su habitación donde la cama de Van Gogh, hecha suya, le invita a pasar.

De su pantufla sale un ala. Asombrado se queda mirándola.

No es que sucedan cosas así todos los días pero desde hace poco la casa de José no para de sorprenderle.

En el servicio la situación es la misma. Todo cambia, es cierto, pero ¿era eso a lo que se refería su padre?

La incertidumbre y su imaginación se mezclan.

Entrelazados se plasman en los dibujos de Anthony Browne y forman un puente entre el mundo de José y el lector. Juntos hacen un viaje inolvidable para descubrir por fin cuál es el cambio. La sugerencia está hecha.

Jacinta Casado



  —38→  

ArribaAbajoAlex quiere un dinosaurio

Imagen

Hiawym Oram.
Traducción de Catalina Domínguez.
Colección: A la orilla del viento.
Fondo de Cultura Económica de México. México, 1993.

Alex llora, quiere tener como mascota un dinosaurio. Así que se lo dice a su abuelo y se van a la Dino-tienda que es un lugar muy grande donde puede encontrar a su dinosaurio. Pero Alex está indeciso, ¡hay tantos! Al final decide llevarse un masospódilo hembra a la que llamará Fred.

Pero Alex no sabe lo que es criar una mascota tan grande y le va a acarrear más de un problema. Porque Fred come mucho, necesitará limpiarse, dormir, habrá que llevarla al veterinario y no será bien recibida por la profesora. Todo esto a lo que no está acostumbrada Fred la cansará y molestará a sus padres porque causará muchos desperfectos. Así que un día deciden pasearla por un bonito campo donde Fred quería ir y, cuando llegó, se encontró con muchos parientes. Pero Alex no quería que se fuera, quería a Fred.

Verónica López



  —39→  

ArribaAbajoGuía de monstruos y otros seres fantásticos

Imagen

Cristina Cappa Legora.
Ettore Maiotti.
Saro de la Iglesia.
Anaya. Madrid, 1994.

Aacute;lbum infantil, Guía de monstruos y otros seres fantásticos, descripción en clave lúdica de estos seres narrada de forma sencilla y guasona, y acompañada por dibujos que ilustran tanto los monstruos como la ironía con que son tratados, es lo más parecido a un breve compendio de todas esas extrañas criaturas que la imaginación humana ha sabido inventar tal vez para explicar de algún modo más fantasioso, y por eso también más didáctico (utilizando para ello el cuento, la leyenda, la fábula... oral o escrita) aquello que le intriga, desconoce, teme, divierte, ridiculiza, cuestiona... o simplemente entretiene, sin mayores aspavientos; por eso su función es básicamente lúdica. Narraciones que cosquillean la imaginación, alientan la curiosidad, quizá enseñan. Son personajes tales como gigantes buenazos y terriblemente glotones, animales mitad pez mitad oca, aves emplumadas, fantasmas irredentos de repentinas apariciones, palacetes en rincones borrascosos, pérfidos acechadores nocturnos, sorpresas que guardan los bosques, abominables hombres de las nieves, o, más modernos, bestias antediluvianas al estilo del Monstruo del Lago Ness, Escocia. Se pueden creer o no: pero hacen pasar algunas noches.

Otras de estas narraciones y personajes, sin embargo, contienen un gran significado y vienen a simbolizar hechos, de otra forma posiblemente no tan abarcable, que hacen más explicativos mediante alegorías las más de las veces personificadas en seres con rasgos animales o humanos.

  —40→  

Abundan aquellas que tratan la creación del mundo; alientos que se tornan ventiscas, furias que son tormentas, gruesos brazos extendidos igual a mares, o musculosos y estoicos atlantes que sostienen sobre sus hombros el peso del mundo. Otros hablan del bien y del mal: Belcebú y sus colaboradores (Ch'e-yen, Tengu, Rakassa..., hasta mil) tan seductores y engañosos que engatusan al hombre y le pierden. Gran parte de estas criaturas broncas tienen por objetivo los niños: brujas, cocos, hombres del saco..., que raptan y devoran, escondidos bajo una cama o en un armario, a los más desobedientes... Pero los hay también benefactores y juguetones (aunque en ocasiones sus gracias puedan resultar excesivas) tales como lo gnomos, hadas, héroes..., que vienen a contrarrestar la furia destructora de tanta gorgona, troll y basilisco desmadrado. Cerbero es el guardián y custodio del Reino de los Muertos.

Algunos plantean enigmas: Ave Fénix, el Grifo, Minotauro...

La lista sería interminable pero, al fin y al cabo, cada cual ocupa el sitio que le corresponde, su justo lugar:

Leviatán, «un pez enorme, monstruoso... es ferocísimo y tiene una fuerza extraordinaria». Las Grayas, de carácter «envidioso, celoso y pendenciero, pero con un gran sentido familiar». Los Ogros, los cuales «si, al llegar a casa, no encuentran la mesa puesta y la chimenea encendida, las ogresas pueden tener problemas. O el Vampiro, con gran poder de seducción sobre las jóvenes, a las que «conquistan gracias a su aspecto de intelectual frágil, noble, y necesitado de afecto».

En fin, como la vida misma.

José Ángel Esteban





  —I→  

ArribaAbajoHomenaje a Ángel González

Imagen

  —III→  

... porque, en último extremo,
uno tiene conciencia
de la inutilidad de todas las palabras.


Ángel González
(Palabra sobre palabra. Barral Editores)
               




  —IV→  


ArribaAbajoCiudad de palabras


No creo que mis palabras
sean leídas como yo las siento.
No creo que aquel el cual osa a abrir la presa de mi alma
y deja escapar «Palabra sobre palabra»
sea capaz de descifrar lo que fluye de mi pluma.  5
Tal vez la razón sea, que nunca pudo
distinguir la realidad del mundo metafísico.
Tal vez; sea la derrota de la ideología;
espero...

¡Sí! Soy aquella que nunca entendió tus palabras,
que prefirió acunarse entre el ayer para,  10
posteriormente, tener sed de nostalgia.
No creo que nunca me perdone el haber
liberado osadas palabras sobre aquellos papeles vírgenes,
-quizá, lo único virgen que exista-;
pero fueron palabras de la nostalgia, fruto del  15
pasado, del recuerdo y la añoranza;
palabras solitarias que se recrearon en mi alma vacía,
y, finalmente se proyectaron en la luz de tu aura.

Esta aprendiz de pintora,
que al igual que él, utiliza  20
como pincel, una pluma;
como paleta, el corazón;
como pintura, el alma;
como caballete, la razón:
y como inspiración, tu amor;  25
recrea su ilusión en baños de sentimentales boleros,
amando cada día más, lo que en un pasado, perturbó su razón.
Atendiendo a cuestiones y pretextos metafísicos,
que devuelvan aquella parte ociosa
que en cruentas batallas pasadas se perdió.  30
—V→
De profesión: Licenciado en Derecho.
Vocación: Poeta.
Pasión frustrada: Cantautor de boleros o quizás pintor.
Esclavo del recuerdo y amante de lo bello,
domador de palabras, restaurador de extraños vocablos,  35
amante de aquellas almas solitarias que vagan
entre los críticos tiempos del horror y la mentira.
Y aún me pregunto: ¿Cómo es posible, seguir siendo poeta
en esta árida letrina? ¿De dónde proceden, los frescos
sentimientos y veraces palabras  40
que dan vida al inanimado trono de vida muerto,
que componen tus libros, dime,
de dónde proceden?
Mientras, sólo espero,
viendo desde lo alto de la colina  45
aquella ciudad de palabras.

Vanessa Gordo

  —VI→  


ArribaAbajo


Cuando la ira
va más allá del grito
y se cristaliza
en el propio silencio,
y recoge mi imagen  5
en un reflejo,
desdibujado,
incierto,
para esculpirla,
después,  10
en un paraje adverso.
    Cuando se levanta
desafiante,
cual afilado puñal
y se clava en la herida abierta,  15
arrancando de mí
un lamento
que rasga el horizonte,
lejana proximidad,
y rompe en mil pedazos  20
la noche.
Altiva,
discreta,
aprendiz y
maestra.  25
Dulce y
amarga
(por momentos),
reina y
esclava.  30
Contenida,
descarada,
humillante,
a veces,
humillada.  35
    Cuando la ira despierta
y pretende llenar
con su desazonante presencia
un vacío,
mi vacío,  40
golpeando con el látigo
de la impotencia,
es el momento
de la constancia
y la fuerza,  45
es el momento
de la libertad
y el respeto,
es el momento
de la lucha  50
y la victoria
    Es el momento
de la esperanza
(«(...) que ahí
estaba  55
ella
en el sitio y la hora de la ira»).

Nuria Fernández

  —VII→  

«Pero el tiempo no existe,
y tienes prisa:
no hay sitio para ti en el descampado
donde habitas».


(Ángel González)                





ArribaAbajo


Mañana despertarás,
libre de dolor, espantos y tristezas.
Eso te dijeron.

Quemaste tu traje
cosido con jirones de ilusión y obligación;  5
perdiste la memoria buscando
lo que no pudiste aprender a nombrar;
te arropó un manto de ceniza
y dormiste en el desierto.

Llegó mañana, te despertó el invierno.  10
Sentiste que eras un hombre,
que hoy fue ayer y mañana era hoy.

Teresa García



  —VIII→  

ArribaAbajoDesnudarte



¿Qué ocultas?
¿...qué?
tras ese rostro de pícaro
adolescente
-nada de lo que parece
existe
o es,
transmites...  5

Eyaculas una tras otra
frases
orgásmicas,

de pobres
idealistas impotentes
frustrados,

transportas...  10

Sostienes la antorcha de la
utopía,
ironía

¿qué hago yo con una antorcha en la mano?
Subyace el amor  15
a los pies de una sombra...

Afirmas...

Por qué dibujar la rutina,
como si pareciese rutina,

sostienes...

descubrirte, destaparte  20
y verte
y alegrarme

observando
desnudo
al poeta.

Miguel Ángel Dorado



  —IX→  

ArribaAbajoEl quinto andamio

(Causas paralelas)





I

Arrojar detrás de mí todas las cosas
es como esperar a no sangrar demasiado,
porque mis motivos
-al igual que mis rencores-,
siguen siendo importantes.  5

Subir al quinto andamio
es cuestión de fuerza,
-¿voluntad?-,
por eso vivo entre toneles,
medio vacíos, medio llenos,  10
mientras la lluvia gotea, pero muy despacio,
y la madera...
que el tiempo lo merece, aunque haga esperar.

Construir el quinto andamio
es asegurarse de seguir solo, permanecer a la escucha  15
sin hablar apenas nada,
sin preguntar.

(Y entender lo que esto significa
es tan legítimo
como alejarse huyendo,  20
la mayor parte de las veces
es tan gratificante... como justo.)


II

¿Qué cabe esperar?

Pablo Cruz



  —X→  

«Esto es un poema.
Aquí está permitido
fijar carteles,
tirar escombros, hacer aguas...»
CONTRA-ORDEN (POÉTICA por la
que me pronuncio
ciertos días.)


Ángel González.                





ArribaProhibido fijar carteles



Toda iglesia tiende naturalmente a la inquisición:
por miedo por piedad por placer
o por enmendar la plana al hombre
que disfruta goza sufre implora
lo que sea  5
la desnudez bárbara de su extravío.

Toda inquisición se transforma terriblemente en oficio:
corpus oblicuo y trajano que ofusca ciega
adolece la cuarentena física o moral del hombre:
honda cualidad de sed  10
promiscua tierra de nadie
no hay dureza más turbia y expuesta
accesis misiva urgente
que esta perfecta soledad de nombre:
aprendizaje de exilio
enseñanza de peregrinaje  15
voz en ascuas
voz nula voz sola entre voces
desde luego el bosque no tapa los árboles.

Todo oficio corre ineludible su disfrute:
los que enuncian los postulados  20
los que los argumentan
los que glosan minuciosamente las impunidades:
los papas detentores
—XI→
de las fórmulas redimidas del extravío
aquellos que tras cometerlo  25
lengua palabra voz semen
ponen cerco al crimen
indispensable diccionario de salvedades:
no perdona el pasado al presente.

Toda iglesia tiende a la inquisición  30
toda inquisición se transforma en oficio
todo oficio corre ineludible a su disfrute.

Desde el comienzo de los comienzos
desde que somos carne
hemos aprendido
que ser encrucijada o frontera  35
piel de sur cuerpo entre sombras
prófugo del lugar de sitio
es casi una actitud moral obligatoria
ante lo tiempos que corren:
pisadas de grey nerviosa de crucicirco.  40

Seca noche de alcohol y muchedumbre
fecundo y oráculo residente
no es esta ahora la protesta común.
Llave Maestra Efigie Sublime Canto
este es el alarido excluyente.  45

Así también la pausa y compadreo con el pánico
las consignas:
los arboles tapan el bosque.

José Ángel Esteban



  —XII→  
El espejo se contempla en mi rostro con
                desinterés frío,
seguro
de que él es él y yo su circunstancia.

Ángel González.
(«Deixis en Fantasma»). Hiperión.







Indice