Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
Indice
Abajo

Carta de Esteban Echeverría a Juan Bautista Alberdi (23-6-1849)

Esteban Echeverría

Leonor Fleming (ed. lit.)






ArribaAbajoOriginal manuscrito

Sobre lacrado con el destinatario

Sobre lacrado

Hoja 1, recto

Hoja 1, recto

Hoja 1, vuelto

Hoja 1, vuelto




ArribaTranscripción1

Sr. Dr. Juan Bautista Alberdi.

Valparaíso.

[Montevideo]

Junio 23, 1849

Querido Alberdi: Mucho tiempo hace que no recibo carta suya. Aprovechando un momento disponible me ciño a escribirle cuatro letras para hacerme presente a sus recuerdos.

Con ésta van 20 ejemplares de un poema sobre la Insurrección del Sud para que me los ponga en venta, o si no hay quien los compre, los distribuya entre los compatriotas. Su producto me lo enviará todo invertido en ejemplares del Viaje de Sarmiento, cuya publicación hemos visto anunciada y esperamos con ansiedad. Si tal viaje no se ha publicado aun, lo reemplazará usted con la Vida de Quiroga, librito muy buscado aquí.

¿Por qué no mandan lo que publican? El verdadero teatro del pensamiento de los proscriptos argentinos es el Río de la Plata. ¿Creerá usted que Sarmiento y sus escritos eran casi desconocidos en su país y que fue preciso que mi voz se alzase para que su nombre y su Quiroga adquiriesen alguna popularidad entre nosotros?

Bastante digo de los demás escritores nuestros de allende los Andes.

Se olvidó usted de enviarme el Silabario de Sarmiento y las leyes y reglamentos sobre Instrucción pública en Chile, que le pedí. Vuelvo ha hacerle el encargo.

También me vendría bien un ejemplar de la América poética, en reemplazo del Viaje de Sarmiento, si no ha salido, o unido a él; si el presunto líquido producto de la venta del Poema da para tanto.

Nada de política: estoy empachado con ella. Me da náuseas cuanto veo y oigo. No es poco alivio poder distraerse, apartar la vista de tanta inmundicia y sangre, haciendo poéticas. Después de haber renunciado por tanto tiempo a la poesía, estoy casi tentado por desahogo, por desesperación, por no sé qué... a engolfarme todo entero en ese mundo ideal. Vale más eso que revolcarse en la pocilga blasfemando y gruñendo como uno de tantos puercos.

Juan María me ha olvidado completamente: le hago muy distraído. Va para dos años que solo sé de él por diz que.

Recuerdos a todos mis amigos y usted disponga de todo el afecto de

E. Echeverría.

P. D.: Van también con el portador, 10 ejemplares de un folleto sobre el asesinato de Varela con el mismo fin que los otros. Su producto inviértalo en los libros indicados.





Indice