701
Catálogo de Cortes de los antiguos reinos de España, pág. 61, Colmenares, Hist. de Segovia, cap. XXXII, § X.
702
Enríquez del Castillo, Crón. del Rey D. Enrique IV, cap. CXXIV.
703
Enríquez del Castillo, Crón. del Rey D. Enrique IV, cap. CXLIV.
Hernando del Pulgar afirma que acudieron a la villa de Ocaña, además de los prelados y caballeros, los procuradores, que «juraron a la Princesa por legítima subcesora destos reinos.» Crón. de los Reyes Católicos, part. I, cap. V.
704
«Donde llegados, vinieron muchos de los grandes del reino, así perlados, como caballeros. Verdad es que todos ellos estaban ganosos de sosiego... pero los más de ellos estaban aficionados a la Princesa doña Isabel, e no sin cabsa, ca bien sabían el deshonesto vivir de la reina doña Juana, por donde sospechando, afirmaban que aquella hija más fuese ajena que del Rey.» Enríquez del Castillo, Crón. del Rey D. Enrique IV, cap. CXLV.
705
Crón. del Rey D. Enrique IV, cap. I.
706
Dice Alonso de Palencia que el Conde de Benavente, de orden de Enrique IV, labró en Villalón moneda de plata y cobre de baja ley y muy mala.
707
Enríquez del Castillo, Crón. del Rey D. Enrique IV, cap. CLXIII.
708
Ley 13, tít. X, lib. III, Fuero Real.
709
Enríquez del Castillo, Crón. del Rey D. Enrique IV, cap. X.
710
Pulgar, Crón. de los Reyes Católicos, part. II, cap. I; Colmenares, Hist. de Segovia, capítulo XXXIV, §§ I y II; Cascales, Disc. hist. de Murcia, disc. XII, cap. I.
El Rey se hallaba a la sazón en Zaragoza, por lo cual no fue jurado hasta pasados algunos días, jurando él personalmente, como lo hizo la Reina, guardar sus privilegios y franquezas a los castellanos.