381
Ibíd., pág. 189.
382
«Hidalgos y burgueses...», pág. 215.
383
José Ortega y Gasset, La deshumanización del arte, Madrid, Revista de Occidente, 1976 (11.ª ed.), pág. 35.
384
Meditaciones del Quijote, Madrid, Espasa-Calpe, 1964, pág. 16.
385
Tiene interés sobre este tema el ensayo del prof. Mariano Baquero Goyanes «La novela como tragicomedia: Pérez de Ayala y Ortega y Gasset», así como el titulado «Perspectivismo y contraste en Pérez de Ayala», ambos recogidos en el libro Perspectivismo y contraste, cit.; en pág. 170 afirma: «Es decir, que las más características narraciones de Pérez de Ayala, según lo revelan las observaciones y comentarios contenidos en ellas mismas, vienen a ejemplificar, en la práctica, lo que Ortega sostenía ante las páginas del Quijote.»
386
Ángeles Prado, «Pérez de Ayala y su Viaje entretenido al País del Ocio», Revista de Occidente, 3.ª época, núms. 5-6 (marzo-abril, 1976), págs. 79-82. Sobre las características de su «generación» vide el estudio de Juan Marichal La vocación de Manuel Azaña, Madrid, Edicusa, 1971, esp. cap. III, « La crisis de identidad española», págs. 55-77.
387
Prólogo a O. C. de Pérez de Ayala, vol. I, pág. XXVII.
388
Recogida por Andrés Amorós en La novela intelectual..., pág. 347.
389
Así lo ha visto Norma Urrutia, Op. cit., pág. 13.
390
Es de interés lo que sobre los personajes ayalianos y los de Unamuno dice Guillermo de Torre en «Un arcaizante moderno: Ramón Pérez de Ayala», recogido en su libro La difícil universalidad española, Madrid, Gredos, 1965, págs. 163-199; vide esp. págs. 183 y 195.