21
Mil, dice la copia de nuestra referencia.
22
De Segovia, según el citado manuscrito.
23
Aquí entra una nueva laguna en el referido manuscrito.
24
Cristóbal
de Aguilar fue hijo del licenciado Marcos de Aguilar y de una
india, «en quien lo hobo en esta isla
Española, asegura Oviedo, e valiente mancebo por su persona
e hombre de bien»
. Contaba entonces de veintisiete a
veintiocho años de edad, y había andado ya «en las armadas de la guerra que se han fecho en
la tierra del Perú»
; y con Benalcázar en la
conquista de Popayán y provincias de Lile.
25
Blas de Medina era
natural de Medina del Campo, donde nació en 1519. Se
había hallado en el Perú desde hacía siete u
ocho años «descubriendo e
poblando tierras nuevas»
, y con Benalcázar en las
provincias de Quito y en la conquista de Popayán y en los
posteriores alzamientos de los naturales de sus vecindades, y en la
fundación de la villa de Timaná.
26
Ampudia o Empudia.- El P. Carvajal, como se ve, le llama Pedro, y asegura que era natural de Ciudad Rodrigo. Fernández de Oviedo le da por nombre Juan, y por patria a Empudia. De su firma que se ve al pie de uno de los documentos, no puede deducirse el nombre, porque no lo puso.
¿Quién está en la verdad? Ya que el P. Carvajal trató a Empudia diariamente durante varios meses, debemos preferir su testimonio al del cronista de Indias, que no llegó a conocerle, por haber muerto durante el viaje, el 20 de mayo de 1542.
Por real cédula de 31 de enero de 1539 se despachó título de regidor de la ciudad de Popayán a Juan de Empudia, a condición de presentarlo en el Cabildo dentro del plazo de quince meses; y por otra de la misma fecha se mandó al lugarteniente de la provincia de Quito que no se le quitasen los indios que tenía encomendados sin ser antes vencido por fuero y por derecho en forma. Archivo de Indias, 109-7-1.
Es posible que Oviedo haya confundido a este Empudia con el otro, si bien tuvo noticia de que había muerto en el Amazonas a manos de los indios.
27
«Y no había otra cura sino cierto
ensalmo»
... Prescindiendo de la falta de medicinas con
que se hallaban los expedicionarios, es lo cierto que entonces, y
aun mucho después, fue muy usado este sistema de curar en
América, que contribuyó bastante a fomentar la
superstición de indios y negros. Son muchos los reos que por
esta causa hubieron de procesar los tribunales del Santo Oficio en
Lima, México y Cartagena de Indias.
28
Cristóbal Enríquez.- Oviedo le llama equivocadamente Francisco, y en otras ocasiones le designa con el apellido de Manrique. Fue natural de Cáceres y comendador no sabemos de qué orden. Nacido en 1514, había pasado a Indias hacía sólo tres años cuando salió de Quito don Gonzalo Pizarro.
29
Hasta aquí llega la laguna referida.
30
Diez mil, según la otra versión.