1
Acerca de las
resistidas relaciones intergenéricas, es esclarecedor
encontrar en Galdós tempranos indicios de acercamiento entre
narrativa y drama, más tarde rescatados por Max Aub cuando
realizaba paralelas operaciones con el cine y la literatura,
aproximación más resistida aún: «[...] en Literatura no debemos condenar ni temer
el cruzamiento incestuoso, ni ver en él la ofensa más
leve a la santa moral y a las buenas costumbres. De tal cruce no
pueden resultar mayores vicios de la sangre común, sino
antes bien depuración y afinamiento de la raza y mayor
brillo y realce de las cualidades de ambos
cónyuges»
. Benito Pérez Galdós.
Prólogo a Casandra. El autor del Laberinto
mágico retoma el pasaje en la nota introductoria a su
novela / guión Campo francés, 1942 concebida
y escrita cinematográficamente. Para Aub (1965) basta
leer cine donde Galdós dice teatro porque el arte del
cine, al que reconoce una notable influencia en la novela de su
tiempo, «es imagen, es decir
literatura»
. Y tomando un cita de Calderón,
añade «"Ilusión que se ve,
ilusión que se escucha"»
. (Aub, 1966: 6).
2
Si de intermedialidad se trata, Berg (2002) ha demostrado en recientes análisis que el cine o la televisión parecen ser los medios más apropiados para la concurrencia de géneros.
3
El Quijote teatral de 1992 es una versión corregida del Chisciotte de 1983 que Rafael Azcona, Tullio Kezich y Maurizio Scaparro habían elaborado para teatro, cine y televisión, continuando el ciclo dedicado a la utopía. En ese espacio el dramaturgo italiano se había ocupado de Hamlet y Cyrano. (V. Sagarra, Joan de, Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes). Por su parte, el guionista riojano contaba entonces con una sólida trayectoria como autor de una larga lista de guiones originales y de adaptaciones cinematográficas o escénicas, entre las que figuran varios clásicos de la literatura española y universal, como La Celestina, Tirano Banderas y Memorias de Adriano. V. obra completa en Macciuci, 2001.
4
Allen, 1983.
5
Azcona-Scaparro, 1992. En adelante se citará por esta edición, precedida por la fórmula abreviada Fragmentos, para distinguirla de las referencias a la novela de Cervantes. El subrayado es mío.
6
Término quizás inadecuado ya que la adaptación no se organiza mediante de la estructura clásica de actos y escenas, son más bien cuadros a modo de episodios o capítulos con relativa autonomía.
7
Lamentablemente no he podido conseguido información acerca de cómo fueron llevados a escena los mencionados rótulos.
8
El subrayado es mío.
9
El pasaje cervantino corresponde al capítulo I, 13, no al I, 3 de la investidura.
10
V. Macciuci, 2004.