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El carbonero de Subiza

Parodia histórico-burlesca en un acto, dividida en tres cuadros, original y en verso

Salvador María Granés

Miguel Ramos Carrión



portada



PERSONAJES
  		ACTORES
 
BLANCA.SRA. RIVAS.
EL CARBONERO.SR. ROSELL.
TROTÓN DE LA PERCHA.SR. CASTILLA.
EL CONDE.SR. PONZANO.
MELENDO.UN PERRO, que no habla.
[EL CLARINETE].
[UN HERALDO].
Coro de ambos sexos.





Arriba[Acto único]


Cuadro I

 

Decoración en parodia de la primera de El molinero. Telón de selva al foro.

 

Escena I

 

Aparece el Coro formado en línea ocupando toda la extensión del proscenio.

 
CORO

 (Al público.) 

   La parodia que esta noche
   vamos a representar,
   al autor de El molinero
   no le puede incomodar.
   Harto sabe todo el mundo5
   que es costumbre inmemorial
    parodiar las producciones
   que han logrado gustar más.
¡Ay, ay, ay, que se gana dinero
con una zarzuela como El molinero!10
¡Ay, ay, ay, si yo fuera empresario...!
¡Canario!, ¡canario!, ¡canario!, ¡canario!


Escena II

 

Dichos, EL CONDE.

 
EL CONDE
      ¡Quién fuera Eguilaz!
      ¡Quién fuera Luque!
      ¡Quién fuera Salas!15
      ¡Quién fuera Oudrid!
      Que a una zarzuela
      más de cien noches
      hace que vaya
      todo Madrid.20
CORO y
EL CONDE
   La parodia que esta noche
   vamos a representar,
   al autor de El molinero
   no le puede incomodar.
   Harto sabe todo el mundo25
   que es costumbre inmemorial
    parodiar las producciones
   que han logrado gustar más.
¡Ay, ay, ay, que se gana dinero
con una zarzuela como El molinero!30
¡Ay, ay, ay, si yo fuera empresario...!
¡Canario!, ¡canario!, ¡canario!, ¡canario!
 

(Hablado.)

 
EL CONDE
Basta de música, hablemos
de lo que importa, navarros.
Ya sabéis la situación35
del país: todos clamamos
por un rey.
TODOS
¡Sí!
EL CONDE
Por un rey
puro, limpio, liso y llano,
que ande a pie, que siempre fume
tagarninas del estanco40
y que vaya cuando llueva
con paraguas y con chanclos.
TODOS
¡Eso! ¡Eso!
EL CONDE
Pues bien, hijos,
un alegrón voy a daros:
ese rey que os hace falta,45
yo le tengo.
UNOS
¡Viva!
OTROS
¡Bravo!
EL CONDE
Es decir, aún no le tengo,
pero le tengo encargado.
Y para que a mis gestiones
logre dar cima, marchaos,50
que la gente estorba en
los asuntos diplomáticos.
 

(Vanse todos.)

 


Escena III

 

EL CONDE, solo.

 
EL CONDE
Mire usted que es mucho cuento
lo que a mí me está pasando.
Sé que don García, el nieto55
del Cid, anda disfrazado
por Subiza; hace tres noches
recorro los tabernáculos
a ver si él está en alguno,
pero nada, no le hallo.60
Yo sólo sé que se oculta
bajo el nombre de Gonzalo,
mas como nunca le he visto,
¡ni sé si es feo ni guapo!
¡Repito que es mucho cuento65
lo que a mí me está pasando!


Escena IV

 

EL CONDE, EL CARBONERO.

 
EL CARBONERO

 (Con una espuerta de carbón a cuestas.) 

Voy a llevar dos arrobas,
y con éstas ya son cuatro
las que me debe el señor
Trotón. ¡Vaya un parroquiano!70
EL CONDE
¡Eh! ¿Quién llega? Un carbonero.
¡Ah! ¡Qué idea! Si este ganso
pudiera darme noticia...
¡Deteneos!
EL CARBONERO
¿Qué hay, mi amo?
EL CONDE
¿Conocéis alguien que ha poco75
viva en Subiza?
EL CARBONERO
No caigo...
¡Ah, sí! El hijo de la tuerta,
que nació anoche.
EL CONDE
(¡Qué bárbaro!)
Yo digo algún forastero...
EL CARBONERO
El último que ha llegado80
a Subiza soy yo.
EL CONDE
(¡Hola!)
EL CARBONERO
Y me dedico a este tráfico,
aunque he tenido en Madrid
un puesto mucho más alto.
EL CONDE
(¡Caracoles!)
EL CARBONERO
(Fui cochero...)
85
EL CONDE
(¡Qué sospecha! Hay algo extraño
en este hombre... Sus modales
son muy finos.)
 

(EL CARBONERO bosteza y se espereza.)

 
EL CARBONERO
¡Bah! Me marcho.
EL CONDE
No os iréis sin que primero
me respondáis. ¿Sois navarro?90
EL CARBONERO
De Mondoñedo.
EL CONDE
(Mentira.)
 

(Todo este diálogo muy rápido.)

 
¿Edad?
EL CARBONERO
Veintisiete años.
EL CONDE
(Justo: los mismos que el otro.)
¿Y vuestro nombre?
EL CARBONERO
Gonzalo.
EL CONDE
(Justo: el que usa don García.)95
¿Sois soltero o sois casado?
EL CARBONERO
Soltero.
EL CONDE
(Otro dato más.)
¿Sois valiente?
EL CARBONERO
Sí.
EL CONDE
(Otro dato.
El último, y si contesta
acorde, cuento acabado.)100
¿Sois nieto de vuestro abuelo?
EL CARBONERO
Sí.
EL CONDE
Pues de un leal vasallo
recibid el homenaje...

 (Arrodillándose.) 

EL CARBONERO
(A este hombre le falta algo.)
Alzad.
EL CONDE
(¡Qué amable!)
EL CARBONERO
Sin duda
105
os habéis equivocado.
EL CONDE
Bien, yo ya sé a qué atenerme:
sé quién sois, pero me callo.
 

(Se oyen dentro los primeros compases de la música con que sale BLANCA.)

 
EL CARBONERO
(¡Qué escucho! La voz de Blanca...
Si no se marcha este zángano,110
no podré hablarla.)
EL CONDE
¿Tenéis
algo que mandar?
EL CARBONERO
Te mando
que te largues.
EL CONDE
Obedezco.
(¡Victoria! Al fin le he encontrado.)

 (Vase.) 

EL CARBONERO
Voy a ver a la que adoro;115
pero hay que esperar un rato.
Mientras canta su romanza,
me oculto y estaré al paño.


Escena V

 

BLANCA, luego EL CARBONERO.

 
 

(Música.)

 
BLANCA

 (Vestida de molinera.) 

Una niña de treinta octubres
inocente y simpática soy120
y, aunque tengo un papá terrible,
por los campos solita me voy.
   ¡Ay, qué hermoso es,
    ay, qué gusto da
    correr por los prados125
   sin verme mi papá!
Disfrazada de molinera
al molino me fui del amor
y, aunque yo iba buscando trigo,
solamente hallar pude carbón.130
EL CARBONERO

 (Presentándose.) 

Yo soy tu amante carbonero.
Perdón te pido si te quemé;
pero soy todo un caballero
y lo quemado te curaré.
      ¡Niña gentil,135
       viva tu sal!
      Si yo soy la harina,
      tú eres el costal.
BLANCA
      ¡Mozo baril,
       viva tu sal!140
      Si tú eres la harina,
      yo soy tu costal.
 

(Hablado.)

 
EL CARBONERO
Herido de un estacazo
que me dio un hidalgo perro,
sólo por ir a pedirle145
catorce reales y medio
que me debe de carbón,
caí rodando en el suelo.
Con yerbas que tú conoces
salud y vida me has vuelto.150
Gracias por todo, muchacha,
y dime cuánto te debo.
BLANCA
Lo que yo contigo hice
no se paga con dinero.
Yendo a mis ocupaciones155
cierta noche, ¡bien me acuerdo!,
te hallé dando resoplidos
exánime, medio muerto.
De una taberna inmediata
traje un chico de lo añejo160
y, apenas bebiste un sorbo,
te levantaste tan fresco.
Estabas tan seductor,
tan hermoso, tan poético,
que verte y enamorarme165
fue lo mismo o poco menos.
¡Qué lástima que este hombre
-dije yo- sea carbonero!
EL CARBONERO
Gracias por esa alabanza,
aunque yo me la merezco.170
BLANCA
Mas ya sé quién eres.
EL CARBONERO
¿Sí?
BLANCA
Sé que eres un caballero
y que te llamas Gonzalo,
y que vives encubierto...
EL CARBONERO
¿Conque tú sabes...? ¡Caramba!175
Pues me alegro de saberlo.
BLANCA
No finjas más, es inútil.

 (Con misterio.) 

Conozco todo el secreto.
EL CARBONERO

 (Con misterio.) 

¿Sí?

 (Transición.) 

Pues adelante, chica;
mas de lo que pase luego,180
desde hoy me lavo las manos.
BLANCA
Buena falta te hace eso,
porque las tienes muy sucias.
 

(Se oyen dentro campanas.)

 
Mas ¿a qué tocan?
EL CARBONERO
A fuego.
BLANCA
Pues vete, que mi papá,185
como es del Ayuntamiento,
tal vez al incendio acuda,
y pudiera sorprendernos.
EL CARBONERO
Tienes razón, ya me voy.
Pero dime, hermoso dueño,190
bien mío, luz de mis ojos,
¿me amas?
BLANCA

 (Con pasión.) 

Sí.
EL CARBONERO
¿No es un camelo?
BLANCA
Por el mártir de Loarre...
¿Sabes quién fue?
EL CARBONERO
No.
BLANCA
Me alegro.
Pues, por ese mártir juro195
que te amo.
EL CARBONERO
¡Basta! Lo creo.
 

(Muy rápido.)

 
BLANCA
¿Y tú me amas?
EL CARBONERO
Como un bárbaro.
BLANCA
¿De veras?
EL CARBONERO
Como un camueso.
BLANCA
¿Me lo juras?
EL CARBONERO
Te lo juro.
BLANCA
¿Por quién?
EL CARBONERO
Por San Timoteo.
200
BLANCA
¿No me olvidarás?
EL CARBONERO
Jamás.
BLANCA
¡Serás mío!
EL CARBONERO
¡Hasta los pelos!

 (Con exageración y por todo lo alto.) 

¡Ay, mi gallarda pastora!
BLANCA
¡Ay, mi gentil carbonero!
 

(Vanse cada cual por distinto lado.)

 


Escena VI

 

EL CONDE, Coro, luego TROTÓN DE LA PERCHA.

 
 

(Música.)

 
TODOS
La campana tocando está a fuego;205
once campanadas creo que conté.
Por la lista de mi calendario
en San Ildefonso debe el fuego ser.
 

(Hablado.)

 
EL CONDE
Navarros, la cosa se ha puesto muy seria.
Ya no tiene nadie seis maravedís.210
El mal es profundo, atroz la miseria,
y un rey está a voces pidiendo el país.
El pueblo de hambre se come los codos,
dispersa se encuentra la navarra grey.
Un pendón buscamos que nos una a todos215
y ese pendón... sólo puede ser un rey.
Por eso aquí varias personas decentes,
de las que sin duda la primera soy,
hemos dicho: ¡basta de paños calientes!
Y a alzar un monarca nos juntamos hoy.220
Por Trotón, señores, tan sólo se espera
y falta a la cita que yo ayer le di.
¡Ya me lo esperaba, porque es un... gatera!
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Mientes, embustero! Trotón está aquí.

 (Con exagerado sonsonete.) 

Yo soy de la Percha el conde opulento,225
altivo y honrado como no habrá tres;
y si empeño alhajas al veinte por ciento
por filantropía solamente es.
Yo solo ha dos lunas, es decir, dos meses,
veo que en Navarra no queda un doblón.230
Ninguno me paga ya los intereses.
Conque, caballeros, aquí está Trotón.
¿Qué quiere Navarra?
EL CONDE
La cuestión abordo.
Rey es lo que quiere la navarra grey.
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Más alto.) 

¿Qué quiere Navarra?
EL CONDE
Pero ¿está usted sordo?
235
Ya se lo hemos dicho: lo que quiere es rey.
TROTÓN DE LA PERCHA
Pues yo tengo uno.
EL CONDE
¿Sí?
TROTÓN DE LA PERCHA
De rechupete.
CORO
¿Quién es?
EL CONDE
Hablad pronto.
CORO
¿Dónde está? Decid...
TROTÓN DE LA PERCHA
Tiene noble aspecto..., años veintisiete,
se llama García y es nieto del Cid.240
EL CONDE
Pues con eso basta. Sirve para el caso.
TROTÓN DE LA PERCHA
Alcémosle al punto.
EL CONDE
Grita general.
TODOS
¡Viva! ¡Viva! ¡Viva!
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Conoceisle acaso?
CORO
Nunca le hemos visto; pero eso es igual.
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Unión entre todos!
EL CONDE
Que no haya más cisma.
245
 

(Rumor del Coro.)

 
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Silencio!
CORO
¡A las armas!
EL CONDE
Arriba el pendón.
TROTÓN DE LA PERCHA
Al que dé otro grito le rompo la crisma.
EL CONDE
Mirad que es muy bruto, conque así... chitón.
 

(Música.)

 
EL CONDE y
CORO

 (Unos a otros.) 

   ¡Silencio, señores!
   ¡Silencio absoluto!250
   Que el Conde es muy bruto
   y manda callar.
   Sacad los garrotes

 (Sacando cada cual un garrote de debajo de la capa, en las que han permanecido embozados desde su salida.) 

    y, si alguien viniera,
   ¡que muera!, ¡que muera!255
   Abridle en canal.
Si algún polizonte vigila escondido
y darnos intenta la gran desazón,
de un palo en la nuca dejadle tendido,
no vaya a llevarnos a la prevención.260
 

(Himno de Riego en toda su plenitud. Todos salen gritando y enarbolando los garrotes.)

 




Cuadro II

 

Mutación a la vista.

   

Decoración corta de casa blanca. Fogón bajo con chimenea de campana. Accesorios de cocina, cacerolas, sartenes, etcétera. Una escoba. Balcón a la izquierda.

 

Escena I

 

EL CONDE y TROTÓN DE LA PERCHA.

 
EL CONDE
Pues bien, señor de Trotón,
hablaré con claridad.
Yo amo a vuestra hija.
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Cómo!
EL CONDE
Con buen fin.
TROTÓN DE LA PERCHA
Dicho se está.
EL CONDE
Y vengo a pedir su mano.265
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Su mano?
EL CONDE
Sí; y lo demás,
porque con su mano sola
yo no me puedo casar.
TROTÓN DE LA PERCHA
Bien, no tengo inconveniente.
Mi Blanca vuestra será.270
EL CONDE
Ahora oíd: hace tres noches,
por una casualidad,
yo estaba haciéndole el oso
metido en aquel portal.
De pronto vi a un caballero275
de porte altivo y marcial,
cuyo rostro se ocultaba
bajo un oscuro antifaz,
subir por ese balcón.
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Ay, honra mía!
EL CONDE
¡Escuchad!
280
Vi que Blanca le esperaba;
vi que él consiguió trepar;
vi que los dos se ocultaron
y luego... ya no vi más.
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Muy rabioso.) 

¡Mentira!
EL CONDE

 (Muy rabioso.) 

¡Cómo!
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Con naturalidad.) 

¡Mentira!
285
EL CONDE
¡No! Verdad.
 

(El mismo juego.)

 
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Cómo!
EL CONDE
Verdad.
Pero yo la quiero tanto,
que paso por todo.
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Ah!
EL CONDE
Y me casaré con ella.
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Oh!... No puede ser; no hay tal...290
¿Mi hija hacer eso? ¡Imposible!
EL CONDE
Pues bueno, si lo dudáis,
vigiladla, y esta noche
os podéis asegurar.
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Y a qué hora viene ese pillo?295
EL CONDE
A las tres o poco más.
TROTÓN DE LA PERCHA
Muy tarde es eso... Y a mí
no me gusta trasnochar.
Mas se me ocurre una idea.
Sí, todo se arreglará.300
Yo tengo un perro..., Melendo...
EL CONDE
Le conozco.
TROTÓN DE LA PERCHA
Un animal
como vos no visteis otro.
Cuando me vaya a acostar
le saco de la perrera305
y le suelto en el corral.
EL CONDE
¡Soberbia idea!
TROTÓN DE LA PERCHA
A las tres
llega el osado galán;
salta la tapia; Melendo
se lo merienda y en paz.310
EL CONDE
Bien pensado. Adiós, Trotón.
TROTÓN DE LA PERCHA
Adiós, Conde, y descuidad.
EL CONDE
Esta noche el buen Melendo
me libra de mi rival.

  (Vase.) 

TROTÓN DE LA PERCHA
¡Ay, honra mía querida!315
Pronto te voy a vengar.


Escena II

 

TROTÓN DE LA PERCHA.

 
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Conque entra de noche un hombre?
¿Quién sabe a lo que vendrá?
Puede ser algún ratero
que fingiéndose galán,320
sabiendo que me dedico
al oficio de prestar,
se lleve la mejor noche
una levita o un frac;
y me vea en el conflicto,325
si lo vienen a sacar,
de perder prenda y dinero,
y me formen además...,
¡ay, honra mía adorada!,
una causa criminal.330
Nada, yo le suelto el perro
y Dios haga lo demás.

 (Vase.) 

 

(Sinfonía en la orquesta. Apenas se han oído los primeros compases, aparece en escena y permanece en ella durante la sinfonía un arrogante perro de Terranova con un cartel colgado del cuello, que en letras grandes dice: «Soy Melendo». Acabada la sinfonía, se presenta EL CARBONERO y despide al perro, que sale de la escena. Donde no haya un perro tan sabio, puede sacarle TROTÓN DE LA PERCHA con una cadena.)

 
 

(Música.)

 
EL CARBONERO

 (Entrando.) 

¡Nadie!... ¡Nadie!.... ¡De la cita
la coqueta se olvidó!...
Se ha dormido la maldita335
y un mico me ha dado de marca mayor.
¡Cantaré una romanza entre tanto,
a ver si despierta oyendo mi voz!
Aunque soy carbonero, bien mío,
no temas, no temas que manche tu honor.340


Escena III

 

BLANCA, EL CARBONERO, [EL CLARINETE].

 
 

(Hablado.)

 
BLANCA

 (Con pasión.) 

¡Gonzalo mío! Al fin vengo.
EL CARBONERO

 (Con frialdad.) 

Creo que han dado las tres.
BLANCA
Hace poco.
EL CARBONERO

 (Con acento amenazador.) 

¿Qué hora es?...
BLANCA
Mira el reloj.
EL CARBONERO
No lo tengo.
BLANCA
Son lo más las tres y siete.345
EL CARBONERO
Pues yo a las tres he llegado,
y media hora ha durado
el solo de clarinete.
EL CLARINETE

 (Desde la orquesta en voz muy alta.) 

Cuarenta minutos.
EL CARBONERO
¿Ves?
Y he cantado una romanza.350
BLANCA
Dispénsame la tardanza.
Ha sido por tu interés.
Dar orden oí a mi padre
de dejar suelto a Melendo
y que ladre estoy temiendo.355
EL CARBONERO
Bueno, déjale que ladre.
BLANCA
Mas si acaso el animal
intenta seguir tus pasos...
EL CARBONERO
Traigo yo para estos casos
morcilla municipal.360

  (Enseñándola.) 

BLANCA
Es que sospecho, ¡ay de mí!...
EL CARBONERO
¡Habla, voto a Belcebú!
BLANCA
Que papá sabe que tú
vienes por la noche aquí.
EL CARBONERO
¡Caracoles! Esto es grave.365
BLANCA
Y si lo sabe, ya ves...
EL CARBONERO
Es verdad; lo mejor es
marcharme por si lo sabe.
BLANCA
¡Huye! Gente viene.
EL CARBONERO
Ya
miro en peligro mi vida.370
BLANCA
¡Si te ven, estoy perdida!
EL CARBONERO
¡Adiós y expresiones!

 (Vase por el balcón.) 



Escena IV

 

BLANCA, TROTÓN DE LA PERCHA.

 
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Que ha visto huir al otro.) 

¡Ah!
BLANCA
¡Matadme!
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Bondad divina!
De mi afrenta soy testigo.
¿Quién estaba aquí contigo?375
¿Qué hacíais en la cocina?
¡No lo niegues! Es en vano.
Yo sé que aquí ha entrado un hombre.
¿Quién era?
BLANCA
¡Matadme!
TROTÓN DE LA PERCHA
¡El nombre,
el nombre de ese villano!380
BLANCA
¡Matadme!
TROTÓN DE LA PERCHA
Cero y van tres.
Que hables es lo que yo quiero.
Habla, infame, habla primero.
Ya te mataré después.
 

(Ladra el perro dentro.)

 
¿Oyes?
BLANCA
¡Ah!
TROTÓN DE LA PERCHA
Tu seductor
385
con el perro ha tropezado.
BLANCA
¡Cielos!
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Pues ya está aviado!

  (Asomándose al balcón.) 

¡Chucho!... ¡Melendo! ¡Valor!
 

(El perro ladra más fuerte.)

 
BLANCA
¡Padre, que es a mí a quien muerde!
TROTÓN DE LA PERCHA
No, es a él.
BLANCA
No, que es a mí.
390
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Y aunque te mordiera a ti,
maldito lo que se pierde!


Escena V

 

Dichos, EL CONDE.

 
EL CONDE
Debajo de ese balcón
han encontrado a Melendo.
Está muriendo.
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Muriendo?
395
BLANCA
(¡Se ha salvado!)
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Maldición!
EL CONDE
Al asesino entrar vi.
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Dónde ese infame se esconde?
Que cierren las puertas, Conde.
EL CONDE
No se escapará de aquí.400

 (Vase.) 



Escena VI

 

BLANCA, TROTÓN DE LA PERCHA y EL CARBONERO.

 
EL CARBONERO

 (Despavorido y con la morcilla en la mano.) 

(¡Lo maté, cielo divino!
¡Mi horrible crimen me asombra!
¡Aparta, pálida sombra!

 (Imita un ladrido.) 

¡Lo maté! Soy asesino.)
TROTÓN DE LA PERCHA
Un hombre aquí... ¡Maldición!405
EL CARBONERO

 (Reparando en TROTÓN DE LA PERCHA.) 

¡Cielos!
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Quién sois, caballero?
EL CARBONERO
Ya lo veis: el carbonero...
que vino a traer carbón.
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Ah! ¡Qué idea! Si éste accede,
me salva de un compromiso.410
Vengar la ofensa es preciso
y este hombre vengarla puede.

 (Acercándose a EL CARBONERO.) 

Tú del que manchó mi honor
con ese crimen horrendo,
del que asesinó a Melendo415
vas a vengarme.
EL CARBONERO
¡Señor!...
TROTÓN DE LA PERCHA
Júrame al vil encontrar,
jura volverme la calma,
júrame romperle el alma
a escape, sin vacilar.420
EL CARBONERO
¡Yo!...
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Jura!
EL CARBONERO
¡No puedo más!
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Vacilas? ¡Cobarde eres!
EL CARBONERO
Pero ¿sabes lo que quieres?
BLANCA
¡No jures!
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Empuñando la escoba.) 

¡Infame!
EL CARBONERO

 (Interponiéndose.) 

¡Atrás!
 

(Música.)

 
EL CARBONERO
   Detente, no seas bárbaro.425
TROTÓN DE LA PERCHA
      La voy a dividir.
EL CARBONERO
   Si un palo quieres darle,
      atízamelo a mí.
BLANCA
      ¡Gonzalo! ¡Papaíto!
TROTÓN DE LA PERCHA
      ¡Atrás!
BLANCA
¡Perdón!
TROTÓN DE LA PERCHA
Atrás.
430
   Merece veinte palos
    y se los voy a dar.
EL CARBONERO
   No pegues a tu hija,
   que ya es mayor de edad.
   Aquél que pega a un hijo435
   se expone a que después
   el hijo se incomode
   y se la pegue a él.
 

(Durante los versos anteriores, EL CARBONERO ha tomado la mano de TROTÓN DE LA PERCHA y, distraído, le deja en ella la morcilla de estricnina, que no ha soltado desde que aparece en escena.)

 
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Al oír las últimas palabras de EL CARBONERO deja caer al suelo la escoba que empuñaba y tenía ya levantada sobre BLANCA.) 

      ¡Ah!
   Anciana mano mía,440
   ¿por qué convulsa estás?

 (Reparando en lo que tiene en ella.) 

Mas, ¿qué es esto? ¡Morcilla!... ¡Morcilla!...
¡Morcilla en mi mano!... ¡Qué es esto, gran Dios!
¡Qué sospecha!... ¡Tan sólo este tío
en esta cocina mi mano estrechó!445
De Melendo es este hombre asesino.
¡Este tío es quien roba mi honor!
EL CARBONERO y
BLANCA
Aunque vendo castañas asadas,
arrostrando la lluvia y el frío,
con mi moño y mis medias caladas450
soy la reina para mi querío.
 

(Todo esto con acento trágico hasta el instante en que, acelerando el tiempo de la música, ésta se convierte en un bolero. Entonces los tres personajes sacan del bolsillo cada cual un par de castañuelas y bailan el bolero acompañando su canto.)

 
 

(Hablado.)

 
 

(Todos los personajes vuelven a quedarse muy serios tomando actitudes dramáticas.)

 
TROTÓN DE LA PERCHA
(¡Calma!)

 (A EL CARBONERO.) 

¿Recuerdas que yo
la mano te he dado aquí?
EL CARBONERO

 (Turbado.) 

Sí, señor.
TROTÓN DE LA PERCHA
¿No se la di
a otro?...
EL CARBONERO

 (Turbado.) 

Yo creo que no.
455
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Cuán fácilmente se pilla
al que la ley atropella!
Todo crimen deja huella...

 (Con acento terrible.) 

¡Mira!...
EL CARBONERO y
BLANCA
(¡Cielos! ¡La morcilla!)
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Ay! Yo mi casa te abrí,460
yo vengarme te encargué,
yo tu carbón te compré...
¡y me lo pagas así!...
¡Infame!... Por desleal
mereces volverte tísico...465

 (Con profundo sentimiento.) 

Me has quitado un perro físico
y me has dado otro moral.

 (Encolerizándose de repente.) 

Disponte a reñir.

 (Cogiendo otra vez la escoba.) 

EL CARBONERO
¡Me aterro!
TROTÓN DE LA PERCHA
¡En guardia!
EL CARBONERO
¡No, por mi nombre!
TROTÓN DE LA PERCHA
Si no lidias como un hombre,470

 (Metiéndole casi la morcilla en la boca.) 

te mato como tú al perro.
EL CARBONERO
Pero dejad que os explique...
TROTÓN DE LA PERCHA
Mi honor quedará vengado.

 (Va a lanzarse sobre él. En este momento se oyen cuatro pausados aldabonazos y, luego, un repique. TROTÓN DE LA PERCHA queda inmóvil en la actitud que le sorprendió este incidente y lo mismo los otros dos personajes.) 

¡Silencio!

 (A media voz.) 

EL CARBONERO
¡Llaman!
BLANCA
Han dado
cuatro golpes y repique.475
 

(Actitudes melodramáticas. De pronto rompe una murga fuera tocando la habanera No me lleves a Paul.)

 
EL CARBONERO

 (Con la mayor naturalidad.) 

Es una murga.
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Honra mía!
¡Mi afrenta ese son pregona!
BLANCA
No; ¡conozco de Pamplona
la alegre trompetería!


Escena VII1

 

Dichos, EL CONDE, el Coro y la Murga.

 
TODOS
Felices noches.
EL CARBONERO
¿Qué pasa?
480
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Quién busca a Guillén Trotón
y se entra aquí de rondón
como Pedro por su casa?
EL CONDE
Es la gente de Pamplona,
a quien su entusiasmo guía,485
y busca al rey don García
para darle su corona.
EL CARBONERO
(¡Gran Dios!)
TROTÓN DE LA PERCHA
Mi rey no está aquí.
EL CONDE
Sí está; y tú no has sospechado
quién es porque está tiznado.490
TROTÓN DE LA PERCHA
Luego... ¿el rey es ése?

 (Señalando a EL CARBONERO.) 

EL CONDE
Sí.
EL CARBONERO
(¡Me partió!)
BLANCA
¡El rey!
EL CARBONERO
(Hay que hablar.)

 (Queriendo tomar aire y acento majestuoso.) 

¡Yo soy el rey don García!
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Honra mancillada mía!
¡Ya me tengo que aguantar!495
 

(Música.)

 
BLANCA
¡Es el rey!
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Es el rey!
EL CARBONERO
(¡Vaya un lío!)
CORO
Todo el pueblo te aclama a la vez
y por ti sus pendones levanta
y tenerte desea por rey.
BLANCA
La corona a mi amor te arrebata.500
No la aceptes, renuncia, mi bien.
TROTÓN DE LA PERCHA
Este acero no puede vengarme;
no me sirve, lo voy a romper.
 

(Parte la espada y arroja sus pedazos. Rompe en la orquesta el vals. EL CONDE se coloca en el centro con el pendón en la mano; uno del Coro le pone un capuchón y él lleva el compás haciendo de bastonero. Los demás bailan alrededor. Termina el vals.)

 
 

(Hablado.)

 
 

(Música en la orquesta.)

 
EL CARBONERO

 (Muy serio.) 

Bien, yo acepto la diadema
que me regala Pamplona.505
BLANCA
¡Ah!
EL CARBONERO

 (En voz baja a TROTÓN DE LA PERCHA.) 

Tengo deudas contigo.
TROTÓN DE LA PERCHA
Una, señor... Y muy gorda.
EL CARBONERO
Para pagarte esa deuda
yo te empeño mi corona.
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Examinándola y tocándola en la piedra que saca del bolsillo.) 

¿Es fina?...
EL CARBONERO
Creo que sí.
510
TROTÓN DE LA PERCHA
Bien, te daré media onza.

 (Se la da.) 

La prenda que te has llevado
vale más, pero no importa.

  (Ha sacado durante los dos últimos versos un tintero de cuerno y escribe.) 

Ahí tienes la papeleta.

  (Dándosela.) 

EL CARBONERO
Caballeros, a Pamplona.515
BLANCA
¡¡¡Y decía que me amaba!!!
EL CARBONERO
(Su llanto me da congoja.)

  (Adelantando, y con gran brío, a BLANCA.) 

Nieta de tu abuelo... ¡Hurra!
Que si se arma el rifirrafe
reina te haré de... ¡Getafe!,520
¡¡de Pozuelo!!... y ¡¡¡Miguelturra!!!
TODOS

 (Como un eco.) 

¡¡¡Hurra!!!
 

(Todos salen con gran algazara.)

 
 

(Música en la orquesta.)

 




Cuadro III

 

Mutación a la vista.

   

Exterior en caricatura del castillo de TROTÓN DE LA PERCHA. A la derecha, un torreón de una vara de altura. Una luna desmesuradamente grande formada de un pandero amarillo con una vela encendida. Sobre la puerta del castillo una muestra que dice: «Se da dinero sobre alhajas y ropas en buen uso».

 

Escena I

 

BLANCA, en el torreón. EL CONDE y TROTÓN DE LA PERCHA, abajo.

 
BLANCA
Redonda luna de color de yema,
lámpara agonizante de petróleo,
farol de contratista a quien no pagan,525
       queso de bola,
si ves al adorado dueño mío,
dile que estoy aquí tomando el fresco
y llévale de mi cariño en prenda
       este estornudo.530

 (Estornuda fuertemente.) 

TROTÓN DE LA PERCHA

 (A EL CONDE.) 

¿La veis? Siempre en el balcón.
Aunque estamos en enero
y a seis grados bajo cero,
ella aguarda a ese bribón.
EL CONDE
¿Y bien? Dejadla que aguarde.535
TROTÓN DE LA PERCHA
Es que son más de las nueve;
y una doncella no debe
irse a la cama tan tarde.
EL CONDE
Por lo mismo que es doncella
que trasnoche no me extraña;540
yo le quitaré esa maña
cuando me case con ella.
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Aún persistís?
EL CONDE
¿Por qué no?
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Después de lo que sabéis!
EL CONDE
Veo que no conocéis545
qué clase de hombre soy yo.
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Y si ella os niega su fe?
EL CONDE
Bueno, ¿y qué?
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Y si ella se casa
a disgusto?
EL CONDE
¿Y qué?
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Y si pasa
luego algún percance?
EL CONDE
¿Y qué?
550
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Y si...?
EL CONDE
Conde de la Percha,
si consentís, nos casamos,
pase lo que pase.
TROTÓN DE LA PERCHA
(¡Vamos,
este hombre es de gutapercha!)
EL CONDE
Conque abur, que os incomodo,555
y además me estoy durmiendo.

 (Hace que se va y vuelve.) 

¡Ah! ¿Cómo sigue Melendo?
TROTÓN DE LA PERCHA
Ya está curado del todo.

  (Con acento sombrío.) 

Un médico de Bilbao,
y que por puro deleite560
cura perros, le dio aceite
de hígado de bacalao.
EL CONDE
Pues me alegro. A pierna suelta
voy a dormir. ¿Y vos?
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Muy dramático.) 

¡Yo!
¡Dormir yo sin honra! No.565

  (Transición.) 

Me voy a dar una vuelta.
 

(Vanse por distintos lados.)

 


Escena II

 

BLANCA.

 
BLANCA
Su tardanza no me explico.
¡Tarde su desdén conozco!
 

(Ruido dentro.)

 
¿Qué escucho? ¡Es él! ¡Reconozco
el trote de su borrico!570


Escena III

 

BLANCA y EL CARBONERO.

 
BLANCA
¡Gonzalo!
EL CARBONERO
¡Mi Blanca!
BLANCA
Pon
contra este muro agareno
la escalera del sereno
y súbete al torreón.
 

(EL CARBONERO coloca la escalera y sube por ella hasta el torreón.)

 


Escena IV

 

Dichos, TROTÓN DE LA PERCHA.

 
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Cielos! ¡No me engaño, sí!575
Es él, pelando la pava.
¡Ay, honra! ¡Esto te faltaba!
¿Qué habrá sucedido aquí?
¡Me devora la ansiedad!
¡Ah!

  (A un músico de la orquesta.) 

Usted que todo lo ha visto,
580
mi honor, mi honor..., ¡vive Cristo!,
¿cómo está?
UNA VOZ

 (En la orquesta.) 

¡Sin novedad!
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Tranquilizándose algo.) 

No importa, haré que este nene
no se me suba a la parra.
Alerta, rey de Navarra,585
que un padre a zurrarte viene.
EL CARBONERO

 (Dándose tono.) 

¡Soy tu rey!
TROTÓN DE LA PERCHA
Basta de charla.
Sin duda lo has olvidado;
¡tu corona has empeñado!
EL CARBONERO
Pues vengo a desempeñarla.590
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Cómo?
EL CARBONERO
Como se me exija.

 (Aparte a BLANCA.) 

Dame ocho duros a crédito.

  (Se los da.) 

Ahí va tu media onza.

  (Arrojando el dinero a TROTÓN DE LA PERCHA.) 

¡El rédito
es casarme con tu hija!
TROTÓN DE LA PERCHA
¿De veras? ¿No es un ardid?595
EL CARBONERO
Te lo juro a fe de honrado.
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Bien! ¡Hija, ya le has pescado!
¡¡Adentro, nieto del Cid!!
 

(EL CARBONERO entra en el torreón, pero permanece con BLANCA a la vista del público.)

 
Hoy entra en el torreón,
¡mañana a la Vicaría!600
¡Honra mancillada mía,
ya te he dado un buen jabón!


Escena V

 

Dicho, EL CONDE, que llega muy sofocado. [Pueblo y UN HERALDO].

 
EL CONDE
¡Trotón! ¡Trotón!
TROTÓN DE LA PERCHA
¿Quién me llama?
EL CONDE
Oye el acontecimiento
que he sabido en el momento605
de ir a meterme en la cama.
¡No es el rey el carbonero!
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Aterrado.) 

¡¿Qué dices?!
EL CONDE
¡Nos ha engañado!
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Cómo!
EL CONDE
Al rey lo han encontrado
vestido de molinero.610
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Santa Virgen de la Vela!
Y el otro, ¡suerte cruel!,
¿dónde ha parecido?
EL CONDE
¡En el
Teatro de la Zarzuela!
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Desesperado.) 

Y yo que pensaba, ¡tonto!,615
lavar mi honra hace un instante.

  (A gritos.) 

¡Baje usted acá, tunante!
EL CARBONERO
¿Quién llama?
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Baje usted pronto!
 

(A los gritos acude toda la gente.)

 
EL CONDE
Ilustre navarra grey,
este hombre nos ha engañado.620
¡Es un noble disfrazado,
mas no el verdadero rey!
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Yéndose hacia él violentamente.) 

¿Quién eres?
EL CARBONERO
(¡Me descalabra
si la farsa le incomoda!...)
¡Soy... un carbonero en toda625
la extensión de la palabra!
TODOS
¡Ah!
EL CARBONERO
Oíd lo que pasó aquí:
éste por rey me tomó;

 (Por EL CONDE.) 

yo le decía que no
y él se empeñaba en que sí.630
Me presté a hacer la parodia
y rey de un minuto he sido,
mas ya estoy arrepentido
y canto la palinodia.
TROTÓN DE LA PERCHA
¡Renuncia a mi hija! ¡Ya635
todo acabó entro los dos!
UN HERALDO

 (Que llega apresuradamente.) 

¡Este pliego para vos!

 (Se lo da a EL CARBONERO.) 

EL CARBONERO

 (Después de abrirlo con extrañeza.) 

¡Del rey verdadero!
TODOS
¡Ah!
EL CARBONERO

 (Leyendo.) 

«Sé, bribón, con qué eficacia
has sabido parodiarme,640
y en lugar de incomodarme
me ha hecho muchísima gracia.
Que no tengo alma de risco
probaré haciéndote noble;
te nombro Barón del Roble,645
Duque del Cok y del Cisco».
TROTÓN DE LA PERCHA

 (Abrazándole.) 

¡Yerno de mi corazón!
EL CONDE

 (Abrazándole.) 

Permitidme que os abrace.
BLANCA
¡Mi amor!
EL CARBONERO
¡Qué buen desenlace
ha tenido la función!650
BLANCA
No, que aún puede acabar mal.
EL CARBONERO
Desecha ese ruin recelo.
Ya estoy indultado. Apelo
al sufragio universal.

  (Al público.) 

¡Si me dais una paliza,655
rompo este pliego y el sobre!
Tened compasión del pobre
carbonero de Subiza.
 

(Música.)

 
 

(Todos los personajes se colocan en fila con bandurrias en el proscenio, o imitando con la mano tocar la jota de El molinero, haciendo sólo los fuertes con la voz.)

 






 
 
FIN DE LA PARODIA
 
 


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