191
De manera general, en la estrofa se alaba la fuerza y nobleza de los caballos que entran en la plaza. (N. del E.)
192
«Córdoba»: Peña dice: «A quien con emulación iba siguiendo la castellana de los Córdobas en la cuadrilla del famoso Duque de Sesa, que mostró la ostentación y bizarría que suelen los de su Casa. Sacó trompeteros a caballo con sayos vaqueros de raso verdemar, vateados de pasamanos de oro, […] Seguíanle treinta y cuatro caballos rucios […]» (Simón Díaz 243-4). (N. del E.)
193
Los Córdoba eran una de las familias con mayores éxitos militares en la España de los siglos XV, XVI y XVII. (N. del E.)
194
Se refiere a la plata. En la versión del poema recogida por Soto se dice «tierra». (N. del E.)
195
Color «verdemar» (Simón Díaz 243) o «verdegay» (Simón Díaz 239), según las crónicas y relaciones de sucesos de la época. (N. del E.)
196
Veinticuatro. (N. del E.)
197
Las cañas. (N. del E.)
198
Llega la última de las bandas de músicos, la de la cuadrilla del Duque de Cea. (N. del E.)
199
Peña dice: «Últimamente, cerrando estas tan grandiosas ostentaciones, entraron los caballos del Duque de Cea, don Francisco de Sandoval y Rojas, con la grandeza heredada de su abuelo y padre. Sacó cuatro trompetas en cuatro frisones, vestidos de sayos de vaquero de raso azul, largueados de pasamanos de plata, […] Entró veinticuatro caballos con ricos jaeces de perlas, aljófar, oro, plata y granates […]» (Simón Díaz 244). La palabra «Sando», por lo tanto, parece referirse aquí a la familia de los Sandoval.
Soto, por su lado, dice: «que la gloria dejando da a la arena». (N. del E.)
200
Soto: «prodigio». (N. del E.)