Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

881

La obra literaria de Segundo Serrano Poncela es extensa. Ante la imposibilidad de consignar aquí toda su producción, quiero recordar algunos de sus trabajos ensayísticos como El pensamiento de Unamuno (México, F.C.E., 1953), Antonio Machado: su mundo y su obra (Buenos Aires, Losada, 1954), Formas de vida hispánica (Garcilaso, Quevedo, Godoy y los ilustrados) (Madrid, Gredos, 1963) o Estudios sobre Dostoievski (Caracas, Universidad Central de Venezuela, 1971). Por otra parte, al inicial volumen Seis relatos y uno más (México, Gráficas Panamericana, 1954) siguieron las narraciones incluidas en La venda (Buenos Aires, Sudamericana, 1956), La raya oscura (Buenos Aires, Sudamericana, 1959), Un olor a crisantemo (Barcelona, Seix Barral (Biblioteca Breve, 157), 1961) y la novela Habitación para hombre solo (Barcelona, Seix Barral (Biblioteca Formentor), 1963), entre otros. La actual validez de sus escritos sobre literatura y la calidad de sus narraciones justifica y exige la reedición de una obra que, como la de tantos otros republicanos, continúa desterrada de la historia de la crítica y de la literatura españolas dos décadas después del final del exilio político de 1939.

 

882

Quiero agradecer a la profesora Nieves Serrano, hija de Serrano Poncela y depositaria del archivo familiar del escritor en Caracas, la noticia de la existencia del texto de Esa verde salamandra, que no he podido consultar, y, sobre todo, su amabilidad al proporcionarme una copia de El Caudillo, compuesta por 195 holandesas mecanografiadas, que me ha permitido elaborar el presente trabajo.

 

883

Las gestiones para publicar El Caudillo se fueron dilatando hasta coincidir con las que el autor emprendió para que se editara La Viña de Nabot, su novela más ambiciosa, a la que había dedicado los esfuerzos de muchos años, y que concluyó en 1968, según afirmó en carta enviada a Max Aub el 22 de junio de ese año. Probablemente el interés de Serrano Poncela por esta obra, que la casa editora Joaquín Mortiz rechazó alegando razones económicas derivadas de su extensión -como así se lo comunicó Max Aub a su autor, en carta fechada en México el 12 de diciembre de 1969-, y que acabaría apareciendo de forma póstuma (Madrid, Albia (Albia Literaria, 16), 1979; Barcelona, Plaza y Janés (Biblioteca Letras del Exilio), 1986, 2ª. edición, prólogo de Francisco Tovar), relegó a un segundo lugar el deseo de ver impreso El Caudillo.

 

884

La copia sin fecha de El Caudillo que he utilizado contiene cifras contradictorias cuando se alude al tiempo en el que Franco ostentó la jefatura del Estado. Sirva como ejemplo, no sólo de las correcciones realizadas sino de la precipitación con que debieron de hacerse, las menciones a «cinco lustros» y «siete lustros» que podemos leer en la página 182.

 

885

Se trata de un procedimiento de composición habitual en la obra narrativa de Serrano Poncela, donde la intertextualidad, profusamente utilizada, cobra significados diversos. La mitología griega, a través de la Ilíada y la Odisea, le sirve en Habitación para hombre solo (ob. cit.), junto con otros textos de la literatura universal, para establecer analogías con el protagonista, un republicano español exiliado en los Estados Unidos de América, como he señalado en mi trabajo «Literatura y exilio en Habitación para hombre solo, de Segundo Serrano Poncela» (Guaraguau. Revista de Cultura Latinoamericana, Barcelona, 5 (otoño 1997), pp. 29-51).

 

886

La atracción de Serrano Poncela por el personaje de las tragedias sofocleas le llevó a componer el cuento «Edipo», publicado en su primer volumen de narraciones (Seis relatos y uno más, ob. cit., pp. 39-47) y reeditado en Los huéspedes. Relatos (Caracas, Monte Ávila Editores, 1968, pp. 33-38). Por otra parte, en su libro La Literatura Occidental (Caracas, Universidad Central de Venezuela, Ediciones de la Biblioteca (Colección Arte y Literatura, 40), 1971, pp. 23-25) consideró la tercera tragedia de La Orestíada, Las Euménides, la mejor de Esquilo, y destacó su repercusión en la literatura contemporánea en la obra de Eugene O'Neill, Mourning Becomes Electra (1931).

 

887

La vuelta: 1964 (en Las vueltas. Obras incompletas de Max Aub), México, Joaquín Mortiz, 1965, pp. 51-114).

 

888

Las alusiones a España que Serrano Poncela incluyó en su correspondencia con Max Aub revelan el vivo interés que mantuvo siempre por su país, pero también la vergüenza y el desánimo que las noticias que le llegaban causaron en él. A título de ejemplo puede tomarse la calificación de España como «Limbo entristecido» (carta del 19 de abril de 1960), «corral de labriegos» (carta del 11 de octubre de 1961) o «corral hispano» (carta del 30 de enero de 1964). El 29 de enero de 1969, después de haber concluido la primera versión de El Caudillo, Serrano Poncela informaba a Aub de la prohibición de la censura en relación con su libro Los huéspedes (ob. cit.), y escribía: «¡Bendito país, el nuestro, con su anciana momia hemipléjica a la cabeza y un rebaño voraz e indiferente alrededor!».

 

889

En una de las extensas acotaciones Serrano Poncela vertió la duda que hubo de presidir el proceso de escritura de El Caudillo: «Después alza su sombrero hongo y saluda hacia un invisible público (o hacia los espectadores si esta escena fuese alguna vez representada)» (p. 79).

 

890

Carta a Max Aub, fechada en Caracas el 11 de junio de 1965.