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El mejor alcalde, el rey

Famosa comedia

Lope de Vega


[Nota preliminar: Edición a cargo de Teresa Ferrer Valls. Grupo de investigación DICAT. Proyecto TC/12.

Para esta edición de El mejor alcalde, el rey, dentro de la Colección Canon 60, me he basado en el texto publicado en la Veinte y una Parte verdadera de las comedias del Fénix de España, frey Lope Félix de Vega Carpio, Madrid, viuda de Alonso Martín, 1635, que he cotejado con la suelta de esta obra publicada en Madrid, imprenta de Antonio Sanz, 1741, y con la edición de Juan Eugenio Hartzenbusch, incluida en Comedias escogidas de Frey Lope Félix de Vega Carpio, tomo I, Madrid, Rivadeneyra, 1859 (BAE, tomo XXIV), que aporta algunas buenas enmiendas y adiciones. He revisado de nuevo mi anterior edición de la obra, incluida en Teresa Ferrer, Lope de Vega: Peribáñez y el Comendador de Ocaña; El mejor alcalde, el rey, Barcelona, Planeta, 1990.]



PERSONAS QUE HABLAN EN ELLA
 

 
SANCHO.
DON TELLO.
CELIO.
JULIO.
NUÑO.
ELVIRA.
FELICIANA.
JUANA.
LEONOR.
EL REY DE LEÓN.
EL CONDE DON PEDRO.
ENRIQUE.
BRITO.
FILENO.
PELAYO.
[CRIADOS.]
[VILLANOS.]





ArribaAbajoActo I

 

Sale SANCHO.

 
SANCHO
   Nobles campos de Galicia
que, a sombras de estas montañas
que el Sil entre verdes cañas
llevar la falda codicia,
dais sustento a la milicia5
de flores de mil colores;
aves que cantáis amores,
fieras que andáis sin gobierno,
¿habéis visto amor más tierno
en aves, fieras y flores?10
   Mas como no podéis ver
otra cosa en cuanto mira
el sol más bella que Elvira,
ni otra cosa puede haber;
porque habiendo de nacer15
de su hermosura en rigor
mi amor, que de su favor
tan alta gloria procura,
no habiendo más hermosura,
no puede haber más amor.20
   ¡Ojalá, dulce señora,
que tu hermosura pudiera
crecer, porque en mi creciera
el amor que tengo agora!
Pero, hermosa labradora,25
si en ti no puede crecer
la hermosura ni el querer
en mí, cuanto eres hermosa
te quiero, porque no hay cosa
que más pueda encarecer.30
   Ayer las blancas arenas
de este arroyuelo volviste
perlas cuando en él pusiste
tus pies, tus dos azucenas;
   y porque verlos apenas35
pude, porque nunca para,
le dije al sol de tu cara,
con que tanta luz le das,
   que mirase el agua más,
porque se viese más clara.40
   Lavaste, Elvira, unos paños,
que nunca blancos volvías,
que las manos que ponías
causaban estos engaños.
Yo, detrás de estos castaños,45
te miraba con temor,
y vi que amor, por favor,
te daba a lavar su venda:
el cielo el mundo defienda,
que anda sin venda el amor.50
   ¡Ay, Dios!, ¿cuándo será el día
-que me tengo de morir-
que te pueda yo decir:
Elvira, toda eres mía?
¡Qué regalos te daría!55
Porque yo no soy tan necio
que no te tuviese en precio,
siempre con más afición,
que en tan rica posesión
no puede caber desprecio.60
 

(Sale ELVIRA.)

 
ELVIRA
   ¿Por aquí Sancho bajaba,
o me ha burlado el deseo?
A la fe que allí le veo,
que el alma me le mostraba.
El arroyuelo miraba65
a donde ayer me miró:
¿si piensa que allí quedó
alguna sombra de mí?,
que me enojé cuando vi
que entre las aguas me vio.70
   ¿Qué buscas por los cristales
de estos libres arroyuelos,
Sancho, que guarden los cielos,
cada vez que al campo sales?
¿Has hallado unos corales75
que en esta margen perdí?
SANCHO
Hallarme quisiera a mí,
que me perdí desde ayer;
pero ya me vengo a ver,
pues me vengo a hallar en ti.80
ELVIRA
   Pienso que a ayudarme vienes
a ver si los puedo hallar.
SANCHO
¡Bueno es venir a buscar
lo que en las mejillas tienes!
¿Son achaques o desdenes?85
¡Albricias, ya los hallé!
ELVIRA
¿Dónde?
SANCHO
En tu boca, a la he,
y con estremos de plata.
ELVIRA
Desvíate.
SANCHO
¡Siempre ingrata
a la lealtad de mi fe!90
ELVIRA
   Sancho, estás muy atrevido.
Dime tú: ¿qué más hicieras
si por ventura estuvieras
en vísperas de marido?
SANCHO
Eso, ¿cúya culpa ha sido?95
ELVIRA
Tuya, a la fe.
SANCHO
¿Mía? No.
Ya te lo dije, y te habló
el alma y no respondiste.
ELVIRA
¿Qué más repuesta quisiste,
que no responderte yo?100
SANCHO
   Los dos culpados estamos.
ELVIRA
Sancho, pues tan cuerdo eres,
advierte que las mujeres
hablamos cuando callamos,
concedemos si negamos.105
Por esto, y por lo que ves,
nunca crédito nos des,
ni crueles ni amorosas,
porque todas nuestras cosas
se han de entender al revés.110
SANCHO
   Según eso, das licencia
que a Nuño te pida aquí.
¿Callas? Luego dices sí.
Basta, ya entiendo la ciencia.
ELVIRA
Sí, pero ten advertencia115
que no digas que yo quiero.
SANCHO
Él viene.
ELVIRA
El suceso espero
detrás de aquel olmo.
SANCHO
¡Ay, Dios,
si nos juntase a los dos,
porque si no, yo me muero!120
 

(Escóndese ELVIRA y salen NUÑO y PELAYO.)

 
NUÑO
   Tú sirves de tal manera
que será mejor buscar,
Pelayo, quien sepa andar
más despierto en la ribera.
   ¿Tienes algún descontento 125
en mi casa?
PELAYO
Dios lo sabe.
NUÑO
Pues hoy tu servicio acabe,
que el servir no es casamiento.
PELAYO
   Antes lo debe de ser.
NUÑO
Los puercos traes perdidos.130
PELAYO
Donde lo están los sentidos,
¿qué otra cosa puede haber?
   Escúchame: yo quijera
emparentarme.
NUÑO
Prosigue
de suerte que no me obligue135
tu ignorancia...
PELAYO
Un poco espera,
   que no es fácil de decir.
NUÑO
De esa manera, de hacer
será difícil.
PELAYO
Ayer
me dijo Elvira al salir:140
   «A fe, Pelayo, que están
gordos los puercos».
NUÑO
Pues bien;
¿qué la respondiste?
PELAYO
Amén,
como dice el sacristán.
NUÑO
   Pues, ¿qué se saca de ahí?145
PELAYO
¿No lo entiendes?
NUÑO
¿Cómo puedo?
PELAYO
Estó por perder el miedo.
SANCHO

 [Aparte.] 

(¡Oh, si se fuese [de] aquí!)
PELAYO
   ¿No ves que es resquiebro y muestra
querer casarse conmigo?150
NUÑO
¡Vive Dios!
PELAYO
No te lo digo,
ya que fue ventura nuestra,
   para que tomes collera.
NUÑO
Sancho, ¿tú estabas aquí?
SANCHO
Y quisiera hablarte.
NUÑO
Di.
155
Pelayo, un instante espera.
SANCHO
   Nuño, mis padres fueron como sabes,
y supuesto que pobres labradores,
de honrado estilo y de costumbres graves.
PELAYO
   Sancho, vos que sabéis de amores,160
decir una mujer hermosa y rica
a un hombre, que es galán como unas frores,
   «gordos están los puercos», ¿no inifica
que se quiere casar con aquel hombre?
SANCHO
¡Bien el requiebro al casamiento aplica!165
NUÑO
   ¡Bestia, vete de aquí!
SANCHO
Pues ya su nombre
supiste y su nobleza, no presumo
que tan honesto amor la tuya asombre:
   por Elvira me abraso y me consumo.
PELAYO
Hay hombre que el ganado trai tan fraco170
que parece tasajo puesto al humo.
   Yo cuando al campo los cochinos saco...
NUÑO
¿Aquí te estás, villano? ¡Vive el cielo!
PELAYO
¿Habro de Elvira yo, son del varraco?
SANCHO
   Sabido, pues, señor, mi justo celo...175
PELAYO
Sabido, pues, señor, que me resquiebra...
NUÑO
¿Tiene mayor salvaje el indio suelo?
SANCHO
   ...el matrimonio de los dos celebra.
PELAYO
Cochino traigo yo por esa orilla...
NUÑO
Ya la cabeza el bárbaro me quiebra.180
PELAYO
   ...que puede ser maeso de capilla,
si bien tiene la voz desentonada,
y más cuando entra y sale de la villa.
NUÑO
   ¿Quiérelo Elvira?
SANCHO
De mi amor pagada,
me dio licencia para hablarte ahora.185
NUÑO
Ella será dichosamente honrada,
   pues sabe las virtudes que atesora,
Sancho, tu gran valor, y que pudiera
llegar a merecer cualquier señora.
PELAYO
   Con cuatro o seis cochinos que toviera,190
que estos parieran otros, en seis años
pudiera yo labrar una cochera.
NUÑO
   Tú sirves a don Tello en sus rebaños.
Es señor de esta tierra, y poderoso
en Galicia y en reinos más estraños.195
   Decirle tu intención será forzoso,
así porque eres, Sancho, su criado,
como por ser tan rico y dadivoso.
   Darate alguna parte del ganado,
porque es tan poco el dote de mi Elvira,200
que has menester estar enamorado.
   Esa casilla mal labrada mira
en medio de esos campos, cuyos techos
el humo tiñe porque no respira.
   Están lejos de aquí cuatro barbechos,205
diez o doce castaños... Todo es nada,
[...]
si el señor de esta tierra no te ayuda
[...]
con un vestido o con alguna espada.
SANCHO
   Pésame que mi amor pongas en duda.
PELAYO

  [Aparte.] 

(¡Voto al sol, que se casa con Elvira!210
Aquí la dejo yo, mi amor se muda.)
SANCHO
   ¿Qué mayor interés que al que suspira
por su belleza darle su belleza,
milagro celestial que al mundo admira?
   No es tanta de mi ingenio la rudeza,215
que más que la virtud me mueva el dote.
NUÑO
Hablar con tus señores no es bajeza,
   ni el pedirles que te honren te alborote,
que él y su hermana pueden fácilmente,
sin que esto, Sancho, a más que amor se note. 220
SANCHO
   Yo voy de mala gana. Finalmente
iré, pues tú lo mandas.
NUÑO
[Dios con esto],
Sancho, tu vida y sucesión aumente.
   Ven, Pelayo, conmigo.
PELAYO
Pues, ¿tan presto
le diste a Elvira estando yo delante?225
NUÑO
¿No es Sancho mozo noble y bien [dispuesto]?
PELAYO
   No le tiene el aldea semejante,
si va a decir verdad. Pero, en efeto,
fuera en tu casa yo más importante
porque te diera cada mes un nieto.230
 

(Vanse NUÑO y PELAYO.)

 
SANCHO
   Sal, hermosa prenda mía,
sal, Elvira de mis ojos.
 

(Sale ELVIRA.)

 
ELVIRA
¡Ay, Dios, con cuántos enojos
teme amor y desconfía!,
   que la esperanza prendada, 235
presa de un cabello está.
SANCHO
Tu padre dice que ya
tiene la palabra dada
   a un criado de don Tello.
¡Mira qué estrañas mudanzas!240
ELVIRA
No en balde mis esperanzas
colgaba amor de un cabello.
   ¿Qué mi padre me ha casado,
Sancho, con hombre escudero?
Hoy pierdo la vida, hoy muero.245
Vivid, mi dulce cuidado,
   que yo me daré la muerte.
SANCHO
Paso, que me burlo, Elvira.
El alma en los ojos mira,
de ellos la verdad advierte;250
   que, sin admitir espacio,
dijo mil veces que sí.
ELVIRA
Sancho, no lloro por ti,
sino por ir a palacio,
   que el criarme en la llaneza255
de esta humilde casería,
era cosa que podía
causarme mayor tristeza.
   Y que es causa justa advierte.
SANCHO
¡Qué necio amor me ha engañado!260
Vivid, mi necio cuidado,
que yo me daré la muerte.
   Engaños fueron de Elvira,
en cuya nieve me abraso.
ELVIRA
Sancho, que me burlo, paso.265
El alma en los ojos mira,
   que amor y sus esperanzas
me han dado aquesta lición:
su propia difinición
es que amor todo es venganzas.270
SANCHO
   Luego, ¿ya soy tu marido?
ELVIRA
¿No dices que está tratado?
SANCHO
Tu padre, Elvira, me ha dado
consejo, aunque no le pido,
   que a don Tello, mi señor,275
y señor de aquesta tierra,
poderoso en paz y en guerra,
quiere que pida favor;
   y aunque yo contigo, Elvira,
tengo toda la riqueza280
del mundo que en tu belleza
el sol las dos Indias mira,
   dice Nuño que es razón
por ser mi dueño. En efeto,
es viejo y hombre discreto,285
y que merece opinión
   por ser tu padre también.
Mis ojos, a hablarle voy.
ELVIRA
Y yo esperándote estoy.
SANCHO
¡Plega al cielo que me den290
   él y su hermana mil cosas!
ELVIRA
Basta darle cuenta de esto.
SANCHO
La vida y el alma he puesto
en esas manos hermosas.
   Dame siquiera la una.295
ELVIRA
Tuya ha de ser, vesla aquí.
SANCHO
¿Qué puede hacer contra mí,
si la tengo, la fortuna?
   Tú verás mi sentimiento,
después de tanto favor,300
que me ha enseñado el amor
a tener entendimiento.
 

(Vanse y sale DON TELLO, de caza, y CELIO y JULIO, criados.)

 
TELLO
   Tomad el venablo allá.
CELIO
¡Qué bien te has entretenido!
JULIO
Famosa la caza ha sido.305
TELLO
Tan alegre el campo está
   que sólo ver sus colores
es fiesta.
CELIO
¡Con qué desvelos
procuran los arroyuelos
besar los pies a las flores!310
TELLO
   Da de comer a esos perros,
Celio, así te ayude Dios.
CELIO
Bien escalaron los dos
las puntas de aquellos cerros.
JULIO
   Son famosos.
CELIO
Florisel
315
es de este campo la flor.
TELLO
No lo hace mal [Canamor].
JULIO
Es un famoso lebrel.
CELIO
   Ya mi señora y tu hermana
te ha sentido.
 

(Sale FELICIANA.)

 
TELLO
¡Qué cuidados
320
de amor, y qué bien pagados
de [mí son, oh] Feliciana,
   tantos desvelos por vos...!
FELICIANA
Yo lo estoy de tal manera,
mi señor, cuando estáis fuera,325
por vos, como sabe Dios.
   No hay cosa que no me enoje.
El sueño, el descanso dejo.
No hay liebre, no hay vil conejo
que fiera no se me antoje.330
TELLO
   En los montes de Galicia,
hermana, no suele haber
fieras, puesto que el tener
poca edad fieras codicia.
   Salir suele un jabalí335
de entre esos montes espesos,
cuyos dichosos sucesos
tal vez celebra[dos] vi.
   Fieras son que junto al anca
del caballo más valiente,340
al sabueso con el diente
suelen abrir la carlanca,
   y tan mal la furia aplacan
que, para decirlo en suma,
truecan la caliente espuma345
en la sangre que le sacan.
   También [hay] oso que en pie
acomete al cazador
con tan estraño furor,
que muchas veces se ve350
   dar con el hombre en el suelo.
Pero la caza ordinaria
es humilde cuánto varia,
para no tentar al cielo.
   Es digna de caballeros355
y príncipes, porque encierra
los preceptos de la guerra,
y ejercita los aceros
   y la persona habilita.
FELICIANA
Como yo os viera casado,360
no me diera ese cuidado
que tantos sueños me quita.
TELLO
   El ser aquí poderoso
no me da tan cerca igual.
FELICIANA
No os estaba aquí tan mal365
de algún señor generoso
   la hija.
TELLO
Pienso que quieres
reprender no haber pensado
en casarte, que es cuidado
que nace con las mujeres.370
FELICIANA
   Engáñaste, por tu vida,
que solo tu bien deseo.
 

(Salen SANCHO y PELAYO.)

 
PELAYO
Entra, que solos los veo.
No hay persona que lo empida.
SANCHO
   Bien dices, de casa son375
los que con ellos están.
PELAYO
Tú verás lo que te dan.
SANCHO
Yo cumplo mi obligación.
   Noble, ilustrísimo Tello,
y tú, hermosa Feliciana,380
señores de aquesta tierra,
que os ama por tantas causas,
dad vuestros pies generosos
a Sancho, Sancho el que guarda
vuestros ganados y huerta,385
oficio humilde en tal casa.
Pero en Galicia, señores,
es la gente tan hidalga,
que solo en servir al rico
el que es pobre no le iguala.390
Pobre soy, y en este oficio
que os he dicho cosa es clara
que no me conoceréis,
porque los criados pasan
de ciento y treinta personas395
que vuestra ración aguardan
y vuestro salario esperan.
Pero tal vez en la caza
presumo que me habréis visto.
TELLO
Sí he visto, y siempre me agrada400
vuestra persona, y os quiero
bien.
SANCHO
Aquí por merced tanta
os beso los pies mil veces.
TELLO
¿Qué quieres?
SANCHO
Gran señor, pasan
los años con tanta furia405
que parece que con cartas
van por la posta a la muerte,
y que una breve posada
tiene la vida a la noche
y la muerte a la mañana.410
Vivo solo. Fue mi padre
hombre de bien, que pasaba
sin servir. Acaba en mí
la sucesión de mi casa.
He tratado de casarme415
con una doncella honrada,
hija de Nuño de Aibar,
hombre que sus campos labra,
pero que aun tiene paveses
en las ya borradas armas420
de su portal, y con ellas
de aquel tiempo algunas lanzas.
Esto y la virtud de Elvira
-que así la novia se llama-
me han obligado. Ella quiere,425
su padre también se agrada,
mas no sin licencia vuestra;
que me dijo esta mañana
que el señor ha de saber
cuánto se hace y cuánto pasa430
desde el vasallo más vil
a la persona más alta
que de su salario vive;
y que los reyes se engañan
si no reparan en esto,435
que pocas veces reparan.
Yo, señor, tomé el consejo,
y vengo, como él lo manda,
a deciros que me caso.
TELLO
Nuño es discreto, y no basta 440
razón a tan buen consejo.
Celio.
CELIO
Señor.
TELLO
Veinte vacas
y cien ovejas darás
a Sancho, a quien yo y mi hermana
habemos de honrar la boda.445
SANCHO
¡Tanta merced!
PELAYO
¡Merced tanta!
SANCHO
¡Tan grande bien!
PELAYO
¡Bien tan grande!
SANCHO
¡Rara virtud!
PELAYO
¡Virtud rara!
SANCHO
¡Alto valor!
PELAYO
¡Valor alto!
SANCHO
¡Santa piedad!
PELAYO
¡Piedad santa!
450
TELLO
¿Quién es este labrador
que os responde y acompaña?
PELAYO
Soy el que dice al revés
todas las cosas que habra.
SANCHO
Señor, de Nuño es criado.455
PELAYO
Señor, en una palabra,
el pródigo soy de Nuño.
TELLO
¿Quién?
PELAYO
El que sus puercos guarda.
Vengo también a pediros
mercedes.
TELLO
¿Con quién te casas?
460
PELAYO
Señor, no me caso ahora,
mas, por si el diabro me engaña,
os vengo a pedir carneros,
para si después me faltan,
que un astrólogo me dijo465
una vez en Masalanca
que tenía peligro en toros
y en agua tanta desgracia
que desde entonces no quiero
casarme ni beber agua470
por escusar el peligro.
FELICIANA
Buen labrador.
TELLO
Humor gasta.
FELICIANA
Id, Sancho, en buen hora. Y tú
haz que a su cortijo vayan
las vacas y las ovejas.475
SANCHO
Mi corta lengua no alaba
tu grandeza.
TELLO
¿Cuándo quieres
desposarte?
SANCHO
Amor me manda
que sea esta misma noche.
TELLO
Pues ya los rayos desmaya480
el sol, y entre nubes de oro
veloz al poniente baja,
vete a prevenir la boda,
que allá iremos yo y mi hermana.
¡Hola! Pongan la carroza.485
SANCHO
Obligada llevo el alma
y la lengua, gran señor,
para tu eterna alabanza.
 

(Vase.)

 
FELICIANA
En fin, vos ¿no os casaréis?
PELAYO
Yo, señora, me casaba490
con la novia de este mozo,
que es una lumpia zagala,
si la hay en toda Galicia.
Supo que puercos guardaba,
y desechóme por puerco.495
FELICIANA
Id con Dios, que no se engaña.
PELAYO
Todos guardamos, señora,
lo que...
FELICIANA
¿Qué?
PELAYO
...lo que nos mandan
nuestros padres que guardemos.
 

(Vase.)

 
FELICIANA
El mentecato me agrada.500
CELIO
Ya que es ido el labrador,
que no es necio en lo que habla,
prometo a vueseñoría
que es la moza más gallarda
que hay en toda Galicia,505
y que por su talle y cara,
discreción y honestidad
y otras infinitas gracias,
pudiera honrar el hidalgo
más noble de toda España.510
FELICIANA
¿Qué es tan hermosa?
CELIO
Es un ángel.
TELLO
Bien se ve, Celio, que hablas
con pasión.
CELIO
Alguna tuve,
mas cierto que no me engaña.
TELLO
Hay algunas labradoras515
que, sin afeites ni galas,
suelen llevarse los ojos,
y a vuelta de ellos el alma,
pero son tan desdeñosas
que sus melindres me cansan.520
FELICIANA
Antes las que se defienden
suelen ser más estimadas.
 

(Vanse y sale NUÑO y SANCHO.)

 
NUÑO
   ¿Eso don Tello responde?
SANCHO
Esto responde, señor.
NUÑO
Por cierto que a su valor525
dignamente corresponde.
SANCHO
   Mandome dar el ganado
que os digo.
NUÑO
Mil años viva.
SANCHO
Y aunque es dádiva excesiva,
más estimo haberme honrado530
   con venir a ser padrino.
NUÑO
Y ¿vendrá también su hermana?
SANCHO
También.
NUÑO
Condición tan llana
del cielo a los hombres vino.
SANCHO
   Son señores generosos.535
NUÑO
¡Oh, si aquesta casa fuera,
pues los huéspedes espera
más ricos y poderosos
   de este reino, un gran palacio!
SANCHO
Esa no es dificultad;540
cabrán en la voluntad,
que tiene infinito espacio.
   Ellos vienen en efeto.
NUÑO
¡Qué buen consejo te di!
SANCHO
Cierto que en don Tello vi545
un señor todo perfeto,
   porque, en quitándole el dar,
con que a Dios es parecido,
no es señor, que haberlo sido
se muestra en dar y en honrar;550
   y pues Dios su gran valor
quiere que dando se entienda,
sin dar ni honrar no pretenda
ningún señor ser señor.
NUÑO
   ¡Cien ovejas! ¡Veinte vacas!555
Será una hacienda gentil
si por los prados del Sil
la primavera los sacas.
   Páguele Dios a don Tello
tanto bien, tanto favor.560
SANCHO
¿Dónde está Elvira, señor?
NUÑO
Ocuparala el cabello,
   o algún tocado de boda.
SANCHO
Como ella traiga su cara,
rizos y gala escusara,565
que es de rayos del sol toda.
NUÑO
   No tienes amor villano.
SANCHO
Con ella tendré, señor,
firmezas de labrador
y amores de cortesano.570
NUÑO
   No puede amar altamente
quien no tiene entendimiento,
porque está su sentimiento
en que sienta lo que siente.
   Huélgome de verte así.575
Llama esos mozos, que quiero
que entienda este caballero
que soy algo o que lo fui.
SANCHO
   Pienso que mis dos señores
vienen, y vendrán con ellos.580
Deje Elvira los cabellos,
y reciba sus favores.
 

(Salen DON TELLO y criados [CELIO], JUANA, LEONOR y villanos [PELAYO].)

 
TELLO
   ¿Dónde fue mi hermana?
JUANA
Entró
por la novia.
SANCHO
¡Señor mío!
TELLO
¡Sancho!
SANCHO
Fuera desvarío
585
querer daros gracias yo,
   con mi rudo entendimiento,
de esta merced.
TELLO
¿Dónde está
vuestro suegro?
NUÑO
Donde ya
tendrán sus años aumento590
   con este inmenso favor.
TELLO
Dadme los brazos.
NUÑO
Quisiera
que esta casa un mundo fuera,
y vos del mundo señor.
TELLO
   ¿Cómo os llamáis vos, serrana?595
PELAYO
Pelayo, señor.
TELLO
No digo
a vos.
PELAYO
¿No habraba conmigo?
JUANA
A vuestro servicio, Juana.
TELLO
   ¡Buena gracia!
PELAYO
Aun no lo sabe
Bien, que con un cucharón,600
si la pecilga un garzón,
le suele pegar un cabe
   que le aturde los sentidos;
que una vez, porque llegué
a la olla, los saqué605
por dos meses atordidos.
TELLO
   ¿Y vos?
PELAYO
Pelayo, señor.
TELLO
No hablo con vos.
PELAYO
Yo pensaba,
señor, que conmigo habraba.
TELLO
¿Cómo os llamáis?
LEONOR
Yo, Leonor.
610
PELAYO

 [Aparte.] 

   (¡Cómo pescuda por ellas,
y por los zagales no!)
TELLO
¿Sois algo de alguna de ellas?
PELAYO
   Sí, señor, el porquerizo.
TELLO
Marido, digo, o hermano.615
NUÑO
¡Qué necio estás!
SANCHO
¡Qué villano!
PELAYO
Así mi madre me hizo.
SANCHO
   La novia y madrina vienen.
 

(Salen FELICIANA y ELVIRA.)

 
FELICIANA
Hermano, hacedles favores.
¡Y dichosos los señores620
que tales vasallos tienen!
TELLO
   Por Dios, que tenéis razón.
¡Hermosa moza!
FELICIANA
Y gallarda.
ELVIRA
La vergüenza me acobarda,
como primera ocasión.625
   Nunca vi vuestra grandeza.
NUÑO
Siéntense sus señorías:
las sillas son como mías.
TELLO

 [Aparte.] 

(No he visto mayor belleza.
   ¡Qué divina perfeción!630
Corta ha sido su alabanza.
¡Dichosa aquella esperanza
que espera tal posesión!)
FELICIANA
   Dad licencia que se siente
Sancho.
TELLO
Sentaos.
SANCHO
No, señor.
635
TELLO
Sentaos.
SANCHO
¡Yo tanto favor,
y mi señora presente!
FELICIANA
   Junto a la novia os sentad,
no hay quien el puesto os empida.
TELLO

 [Aparte.] 

(No esperé ver en mi vida 640
tan peregrina beldad.)
PELAYO
   Y yo, ¿adónde he de sentarme?
NUÑO
Allá en la caballeriza
tú la fiesta solemniza.
TELLO

 [Aparte.] 

(¡Por Dios, que siento abrasarme!) 645
   ¿Cómo la novia se llama?
PELAYO
Pelayo, señor.
NUÑO
¿No quieres
callar? Habla a las mujeres
y cuéntaste tu por dama.
   Elvira es, señor, su nombre.650
TELLO
Por Dios, que es hermosa Elvira
y digna, aunque serlo admira,
de novio tan gentilhombre.
NUÑO
   Zagalas, regocijad
la boda.
TELLO

 [Aparte.] 

(¡Rara hermosura!)
655
NUÑO
En tanto que viene el cura,
a vuestra usanza bailad.
JUANA
   El cura ha venido ya.
TELLO
Pues decid que no entre el cura

 [Aparte.] 

(Que tan divina hermosura 660
robándome el alma está.)
SANCHO
   ¿Por qué, señor?
TELLO
Porque quiero,
después que os he conocido,
honraros más.
SANCHO
Yo no pido
más honras, ni las espero,665
   que casarme con mi Elvira.
TELLO
Mañana será mejor.
SANCHO
No me dilates, señor,
tanto bien, mis ansias mira,
   y que desde aquí a mañana670
puede un pequeño accidente
quitarme el bien que presente
la posesión tiene llana.
   Si sabios dicen verdades,
bien dijo aquel que decía675
que era el sol el que traía
al mundo las novedades.
   ¿Qué se yo lo que traerá
del otro mundo mañana?
TELLO

 [Aparte.] 

(¡Qué condición tan villana! 680
[¡Qué puesto en su gusto está!]
   Quiérole honrar y hacer fiesta,
y el muy necio, hermana mía,
en tu presencia porfía
con voluntad poco honesta.)685
   Llévala, Nuño, y descansa
esta noche.
NUÑO
Haré tu gusto.
 

(Vanse TELLO, FELICIANA y CELIO [y criados].)

 
ELVIRA
Esto no parece justo.
¿De qué don Tello se cansa?
   Yo no quiero responder690
por no mostrar liviandad.
NUÑO
No entiendo su voluntad
ni lo que pretende hacer.
   Es señor, ya me ha pesado
de que haya venido aquí.695
 

(Vase.)

 
SANCHO
Harto más me pesa a mí,
aunque lo he disimulado.
PELAYO
   ¿No hay boda esta noche?
JUANA
No.
PELAYO
¿Por qué?
JUANA
No quiere don Tello.
PELAYO
Pues don Tello, ¿puede hacello?700
JUANA
Claro está, pues lo mandó.
 

(Vase.)

 
PELAYO
   Pues antes que entrase el cura
mos ha puesto impedimiento.
 

(Vase [con villanos].)

 
SANCHO
Oye, Elvira.
ELVIRA
¡Ay, Sancho!, siento
que tengo poca ventura.705
SANCHO
   ¿Qué quiere el señor hacer
que a mañana lo difiere?
ELVIRA
Yo no entiendo lo que quiere,
pero debe de querer.
SANCHO
   ¿Es posible que me quita710
esta noche? ¡Ay, bellos ojos,
tuviesen paz los enojos
que airado me solicita!
ELVIRA
   Ya eres, Sancho, mi marido.
Ven esta noche a mi puerta.715
SANCHO
¿Tendrasla, mi bien, abierta?
ELVIRA
¡Pues no!
SANCHO
Mi remedio ha sido,
   que si no, yo me matara.
ELVIRA
También me matara yo.
SANCHO
El cura llegó y no entró.720
ELVIRA
No quiso que el cura entrara.
SANCHO
   Pero si te persuades
a abrirme, será mejor,
que no es mal cura el amor
para sanar voluntades.725
 

(Vanse y salen DON TELLO, y criados con mascarillas [y CELIO].)

 
TELLO
   Muy bien me habéis entendido.
CELIO
Para entenderte no creo
que es menester, gran señor,
muy sutil entendimiento.
TELLO
Entrad, pues, que estarán solos730
la hermosa Elvira y el viejo.
CELIO
Toda la gente se fue
con notable descontento
de ver dilatar la boda.
TELLO
Yo tomé, Celio, el consejo735
primero que amor me dio;
que era infamia de mis celos
dejar gozar a un villano
la hermosura que deseo.
Después que de ella me canse,740
podrá ese rústico necio
casarse, que yo daré
ganado, hacienda y dinero
con que viva, que es arbitrio
de muchos, como lo vemos745
en el mundo. Finalmente,
yo soy poderoso y quiero,
pues este hombre no es casado,
valerme de lo que puedo.
Las máscaras os poned.750
CELIO
¿Llamaremos?
TELLO
Sí.
 

(Llaman y sale ELVIRA al paño.)

 
CRIADO
Ya abrieron.
ELVIRA
Entra, Sancho de mi vida.
CELIO
¿Elvira?
ELVIRA
Sí.
CRIADO
¡Buen encuentro!
 

(Llévanla.)

 
ELVIRA
¿No eres tú, Sancho? ¡Ay de mí!
¡Padre! ¡Señor! ¡Nuño! ¡Cielos!755
¡Que me roban! ¡Que me llevan!
TELLO
Caminad ya.
 

(Dentro.)

 
NUÑO
¿Qué es aquesto?
ELVIRA
¡Padre!
TELLO
Tápala esa boca.
NUÑO
Hija, ya te oigo y te veo,
pero mis caducos años760
y mi desmayado esfuerzo,
¿qué podrán contra la fuerza
de un poderoso mancebo?
Que ya presumo quién es.
 

(Salen SANCHO y PELAYO de noche.)

 
SANCHO
Voces parece que siento765
en el valle, hacia la casa
del señor.
PELAYO
Habremos [quedo],
no mos sientan los criados.
SANCHO
Advierte que estando dentro
no te has de dormir.
PELAYO
No haré,
770
que ya me conoce el sueño.
SANCHO
Yo saldré cuando del alba
pida albricias el lucero;
mas no me las pida a mí,
si me ha de quitar mi cielo.775
PELAYO
¿Sabes qué pareceré
mientras estás allá dentro?
Mula de doctor, que está
tascando a la puerta el freno.
SANCHO
Llamemos.
PELAYO
Apostaré
780
que está por el agujero
de la llave Elvira atenta.
SANCHO
Llego y llamo.
 

(Sale NUÑO.)

 
NUÑO
Pierdo el seso.
SANCHO
¿Quién va?
NUÑO
Un hombre.
SANCHO
¿Es Nuño?
NUÑO
¿Es Sancho?
785
SANCHO
¡Pues, tú en la calle! ¿Qué es esto?
NUÑO
¿Qué es esto dices?
SANCHO
Pues bien,
¿qué ha sucedido?, que temo
algún mal.
NUÑO
Y aun el mayor,
que alguno ya fuera menos.790
SANCHO
¿Cómo?
NUÑO
Un escuadrón de armados
aquestas puertas rompieron,
y se han llevado...
SANCHO
No más,
que aquí dio fin mi deseo.
NUÑO
Reconocer con la luna795
los quise, mas no me dieron
lugar a que los mirase,
porque luego se cubrieron
con mascarillas las caras
y no puede conocerlos.800
SANCHO
¿Para qué, Nuño? ¿Qué importa?
Criados son de don Tello,
a quien me mandaste hablar.
¡Mal haya, amén, el consejo!
En este valle hay diez casas,805
y todas diez de pecheros,
que se juntan a esta ermita:
no ha de ser ninguno de ellos.
Claro está que es el señor
que la ha llevado a su pueblo;810
que él no me deja casar
es el indicio más cierto.
Pues, ¿es verdad que hallaré
justicia fuera del cielo,
siendo un hombre poderoso815
y el más rico de este reino?
¡Vive Dios, que estoy por ir
a morir!, que no sospecho
que a otra cosa...
NUÑO
Espera, Sancho.
PELAYO
¡Voto al soto!, que si encuentro820
sus cochinos en el prado,
que aunque haya guarda con ellos,
que los he de apedrear.
NUÑO
Hijo, de tu entendimiento
procura valerte ahora.825
SANCHO
Padre y señor, ¿cómo puedo?
Tú me aconsejaste el daño,
aconséjame el remedio.
NUÑO
Vamos a hablar al señor
Mañana, que yo sospecho830
que, como fue mocedad,
ya tendrá arrepentimiento.
Yo fío, Sancho, de Elvira,
que no haya fuerza ni ruegos
que la puedan conquistar.835
SANCHO
Yo lo conozco y lo creo
¡Ay, que me muero de amor!
¡Ay, que me abraso de celos!
¿A cuál hombre ha sucedido
tan lastimoso suceso?840
¡Que trujese yo a mi casa
el fiero león sangriento
que mi cándida cordera
me robara! ¿Estaba ciego?
Si estaba, que no entran bien845
poderosos caballeros
en las casas de los pobres,
que tienen ricos empleos.
Paréceme que su rostro
lleno de aljófares veo850
por las mejillas de grana,
su honestidad defendiendo.
Paréceme que la escucho,
¡lastimoso pensamiento!,
y que el tirano la dice855
mal escuchados requiebros.
Paréceme que a sus ojos
los descogidos cabellos
haciendo están celosías
para no ver sus deseos.860
Déjame, Nuño, matar,
que todo el sentido pierdo.
¡Ay, que me muero de amor!
¡Ay, que me abraso de celos!
NUÑO
Tú eres, Sancho, bien nacido,865
¿qué es de tu valor?
SANCHO
Recelo
cosas que, de imaginallas,
loco hasta el alma me vuelvo,
sin poderlas remediar.
Enséñame el aposento 870
de Elvira.
PELAYO
[Y a] mí, señor,
la cocina, que me muero
de hambre; que no he cenado,
como enojados se fueron.
NUÑO
Entra, y descansa hasta el día,875
que no es bárbaro don Tello.
SANCHO
¡Ay, que me muero de amor
y estoy rabiando de celos!

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