401
¡Ánimo abocado!
402
¡El buen hombre!
403
La palabra liberal, tomada metafísicamente, me sirvió casi tan bien. Las expresiones de ideas liberales, de modo de pensar liberal, que a lo menos no arruinan, y embelesan a todos los ideólogos, son, sin embargo, de mi invención. Inventado por mí este talismán, no servirá nunca más que a mi causa, y abogará siempre por mi reinado, aun en poder de los que me destronaron.
404
Idea mezquina.
405
Tontería.
406
No es éste aquel con el que yo contaría más.
407
Mis generales saben lo que les di antes, y para que yo llegara al punto de conferirles ducados y bastones de mariscal.
408
Lo fui yo en acciones y palabras: ¡a cuántos necios no se engaña con el falso oropel de las ideas liberales!
409
Vas a juzgarme.
410
¿Quién lo hizo mejor que yo?