161
MP, t. I, p. 379.
162
Idem.
163
Idem.
164
Idem.
165
Carmen Travesedo, op. cit., p. 430.
166
Ibidem, p. 431.
167
Ibidem, p. 434.
168
Véase mi Inundación castálida, pp. 286-289.
169
Para información sobre la fama de Sor Juana en la corte y la representación de alguna de sus obras, véase mi «Los problemas de La segunda Celestina».
170
El apellido se escribe también Láncaster, Lancáster, Alencastre; en el Archivo de Palacio aparecen también los nombres de Alencastro y Alencarte. Al parecer, existe un manuscrito referente a la muerte y traslado de los restos de la duquesa al Monasterio de Guadalupe, que no pude consultar cuando estuve allí porque se encontraban en reorganización de toda la biblioteca; consulté el trabajo de Gervasio Velo Nieto, «María de Guadalupe Alencastre (Duquesa de Arcos, Aveiro y Maqueda)». Tampoco en la BNM pude consultar el Ms. 4040 sobre la duquesa el día que había dedicado a ello; conseguí el impreso de Miguel Hurtado gracias a María Isabel Barbeito.