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331

E. Raimondi, «Quattrocento bolognese: università e umanesimo», en su libro Politica e commedia, Bolonia, 1972, p. 26; y cf., por ejemplo, C. Vasoli, La cultura delle corti, Florencia, 1980, pp. 133-135.

 

332

Los valiosos trabajos de R. B. Tate, Joan Margarit i Pau, cardenal i bisbe de Girona, Barcelona, 1976, y «La geografía humanística y los historiadores españoles del siglo XV», en Actas del IV Congreso de la Asociación Internacional de Hispanistas, Salamanca, en prensa, me eximen de ilustrar esa afirmación con otra cosa que algún dato inédito.

 

333

Apud R. B. Tate, Joan Margarit i Pau, p. 240.

 

334

Pese a no identificar la procedencia (revelada por el escudo de Margarit, fol. 1), G. Beaujouan, Les manuscrits scientifiques..., p. 162, se había preguntado si la segunda tabula fue «redessinée, en Espagne même, en s’inspirant d’une carte nautique». Para las familias cartográficas a que pertenecen ambos mapas (vid. las láminas incluidas por Beaujouan entre las páginas 160 y 161), compárese simplemente L. Bagrow, History of cartography, ed. R. A. Skelton, Londres, 1964, pp. 77-86.

 

335

En el manuscrito legado al Rey debían pintarse las armas de Margarit «ab lo capell de cardinal» (cf. M. Mayer, «Manuscrits de biblioteques renaixentistes il·lustres a la Biblioteca Universitària de Barcelona», Miscel·lania Aramon i Serra, II, Barcelona, 1980, pp. 343-344), pero en el de Salamanca el escudo sólo trae las seis borlas de obispo: Margarit poseería, pues, dos Tolomeos.

 

336

E. Raimondi, «Quattrocento bolognese...», p. 28.

 

337

Aludo sólo al período de residencia de Zacuto en Portugal (1493-1496), sin tomar en cuenta la razonable hipótesis de que sus trabajos influyeran en las partes más antiguas (¿1482-1485?) del manual náutico llamado «de Munich» (véase G. Beaujouan, «L’astronomie...», pp. 16-17); como tampoco tomo en cuenta más abajo ninguna de las varias conjeturas que se han formulado sobre un encuentro de Zacuto y Colón.

 

338

Apud S. Sebastián y L. Cortés, Simbolismo de los programas humanísticos de la Universidad de Salamanca, Salamanca, 1973, p. 14.

 

339

Los grabados en cuestión se hallan -cuando menos- en cuatro impresiones venecianas: los Higinos de Erhardo Ratdolt, 1482 y 1485, y de Tomás de Blavis, 1485, y los astronomici de Antonio de Strata «Cremonensis», 1488; en general, las pinturas salmantinas coinciden con la disposición de los grabados en las dos últimas ediciones. En el Isagogicon cosmographiae que inmediatamente examinaremos, Nebrija cita a Higino al tratar «de circulis sphaerae» (II).

 

340

C. Dionisotti, Gli umanisti e il volgare fra Quattro e Cinquecento, Florencia, 1968, p. 44.