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     Macías.- Más enamorado que Macías.

     Aplícase al hombre que está locamente apasionado por una mujer, con alusion á un poeta gallego de fines del siglo XIV, así llamado, célebre por sus amores con una doncella del famoso Marques de Villena.

     Madeja.- Parecer una madeja sin cuenda.

     Dícese de cualquier cosa que está muy enredada ó desordenada; y tambien de la persona que acumula especies sin coordinacion ni método o que no tiene concierto en sus operaciones.

     Madera.-Estar como madera.

     Suele aplicarse á las frutas que, por hallarse aun verdes, están muy duras. Dícese tambien alguna vez de los manjares que son duros de comer.

     Madre.-No lo conoce ni la madre que lo parió.

     Exp. con que se pondera lo desfigurada que ha quedado alguna persona ó cosa, hasta el extremo de no poder ser reconocidas fácilmente por sus autores mismos.

     Estar tan desnudo como cuando lo parió su madre.

     Hallarse en cueros, ora sea por gusto, ora por carecer de bienes.

     Estar tan vírgen como la madre que la parió.

     Aplícase irónicamente á la mujer que se jacta de virginidad habiéndola perdido.

     Tal madre, tal hijo pare.

     Ref. que acredita que por lo regular los hijos sacan al nacer las mismas cualidades de sus madres, así físicas cuanto morales.

     Madrid. -Enero y febrero comen más que Madrid y Toledo.

     Ref usado por los ganaderos y tratantes en carnes, para expresar lo que éstas se disminuyen con la falta de hierbas que en dichos meses se padece.

     Maestro.-Tener más hambre que un maestro de escuela.

     Hallarse sumamente hambriento ó indigente.

     Esta frase, de origen no muy moderno por cierto, revela en consecuencia lo antiguo que es el carecer de posicion holgada la generalidad de los cofrades de S. Casiano.

     Magdalena.- Parecer una Magdalena, ó Estar llorando como una Magdalena.

     Dícese de la persona que está llorando con gran desconsuelo, con referencia á aquella penitente que borró con lágrimas amargas los extravíos de su juventud, hasta el punto de merecer ser canonizada por la Iglesia.

     Magníficat.-Eso viene como Magníficat á maitines.

     Dícese de todo aquello que no sienta bien al objeto para que se le destina, ó de toda conversacion intempestiva al modo que sería un despropósito rezar el cántico Magníficat en los maitines, siendo así que éste es propio de vísperas.

     Mamar.- Como el que mama y gruñe, ó Mamar y gruñir.

     Dícese del que con nada se contenta y se queja de ser pocos los beneficios que se le hacen, como sucede con los niños cuando están mamando y rabiando al mismo tiempo.

     Mandamiento.- Los cinco mandamientos.

     Comparacion desatinada de que usa el vulgo en frases como éstas: Come con los cinco mandamientos; Le puso en la cara los cinco mandamientos, pues entre los dedos de la mano y los preceptos de la Iglesia no hay de comun más que el número.

     Mano.-A celada de bellacos, mejor es el hombre por los piés que por las manos.

     Ref que enseña ser ventajoso huir de pleitos y contiendas, máxime cuando reina mala fé en la parte contraria.

     Como con la mano, ó Como por la mano.

     Con gran facilidad ó ligereza, como anda aquél que es guiado por ótro de la mano.

     Que ni por mano de santo.

     Loc. con que se pondera la extremada virtud, de alguna cosa, como para manifestar que no haría más en el particular la intercesion, de algun santo. Así se dice: Este remedio cura de tal modo esa dolencia, que ni por mano de santo.

     Manteca.- Estar hecho una manteca.

     Úsase esta comparacion para manifestar la suavidad exquisita de algunos manjares, y asi se dice de los garbanzos, patatas, etc. que tienen buena cochura, son como manteca.

     Cuando los enamorados se producen ante el objeto de su cariño con rendimiento y ternura, se dice igualmente que están hechos una manteca, ó que están más derretidos que la manteca.

     Maña.-Más vale maña que fuerza.

     Ref. V. Acial.

     Mar.- Estar hecho un mar de lágrimas.

     Llorar con gran desconsuelo.

     Hablar de eso es como hablar de la mar.

     Fr. con que se da á entender ser imposible la ejecucion ó la inteligencia de aquello que se pretende; y tambien, que aún queda mucho por hablar del asunto de que se está tratando.

     Es la mar.

     Aplícase modernamente á la abundancia ó confusion de cualquier cosa, en el mismo sentido que se decía ántes: Es un mare magnum.

     Ir hecho un brazo de mar.

     Dícese de la persona que va lujosamente vestida y ricamente aderezada. Es comparacion que á la verdad no comprendo, pues no alcanzo cuál pueda existir entre la ostentacion de hijo y el canal ancho y largo del mar que entra tierra adentro.

     Eso es como pretender meter la mar en un pozo.

     Fr. con que se da á entender que algúno tienta un imposible.

     Es muy probable que haya dado lugar á vulgarizar esta comparacion, el hecho de estarse paseando un dia S. Agustin á orillas del mar, con su mente ocupada en pretender apurar algunos puntos incomprensibles del inefable misterio de la Trinidad, en ocasion de ver á un niño muy afanado aparentemente en meter el agua del mismo mar en un pozo que había abierto en la arena. Preguntóle el Santo qué se proponía hacer con aquella operacion; á lo que respondió el niño: Meter toda el agua del mar en este pozo. Pero hijo, replicó el Santo, ¿no ves que eso no puede ser?-Más fácil es esto, respondió el párvulo, que llegar tú á comprender en tu limitado entendimiento la grandeza del misterio en que te estás ocupando.

     Es como echar agua en la mar. V. Agua.

     Maravilla.- Es la octava Maravilla.

     Dieron los antiguos el nombre de Las siete Maravillas del mundo, á los siete monumentos más notables de su época, que fueron: Las Pirámides de Egipto; los Muros y Jardines colgantes de Babilonia; el Templo de Diana en Éfeso; el de Júpiter Olímpico en Élida; el Mausoleo; el Faro de Alejandria; y el Coloso de Ródas(14). Posteriormente se ha dado el nombre de Octava Maravilla al célebre monasterio de S. Lorenzo del Escorial con el cual no puede competir hoy ninguno de los edificios más suntuosos del orbe; aplicándose por extension este mismo calificativo á todo objeto que por lo raro y maravilloso atrae con sorpresa la atencion de la generalidad de las personas.

     Marca.-De más de la marca, ó De marca mayor.

     Mod. adv. con que se declara que alguna persona ó cosa es excesiva en aquello de que se trata; y así se dice: Fulano es ladron de más de la marca; Mengano ha dicho un desatino de marca mayor, etc.

     Marea.- Crecer como la marea.

     Crecer ó aumentarse poco á poco alguna cosa, como sucede con las aguas en la pleamar.

     Margarita.-Es lo mismo que, ó Vale tanto como echar margaritas á puercos.

     Úsase esta fr. proverb. cuando se destinan objetos de precio para, ó se practican acciones recomendables con personas que no saben estimar en su justo valor aquéllos ni éstas.

     Antiquísima es la existencia de esta frase, pues vemos en S. Mateo, cap. IV, v. 6, que ya la usó J. C. diciendo: No deis las cosas santas a los perros, ni echeis vuestras margaritas á los puercos.

     Mari-Gargajo.-Eso es un escrúpulo de Mari-Gargajo.

     Definiendo la Acad. esta locucion, dice que se aplica al escrúpulo ridículo, infundado, extravagante y ajeno de razon. Yo creo que además de dicha acepcion podía asignársele esta ótra, no ménos comun: El asco que injustamente se hace á alguna cosa, máxime cuando la persona que lo demuestra suele pecar de no muy aseada.

     En este sentido parece tener analogía más íntima con el nombre de la persona á quien alude, la cual si no era la misma mismísima aseada de Burguillos que para probar si la comida que tenía puesta al fuego estaba ó nó caliente echaba dentro de ella un gargajo, sería probablemente algun fiel trasunto suyo.

     Marimorena.-Haber una marimorena.

     Haber una gran riña ó pendencia.

     El origen de la voz marimorena se atribuye á las quimeras que en otro tiempo suscitó una tal María Morena, por contraccion Marimorena, tabernera de Madrid.

     Véase como se explica en este particular D. José María de Zuaznávar, en sus « Noticias para literatos acerca de los Archivos públicos de a hoy extinguida Sala de Señores Alcaldes de Casa y Corte, y del Repeso Mayor de Corte,» folle to en 4.º, de ocho hojas, impreso en San Sebastian año de 1834.

     «Por providencia de la hoy extinguida Sala de los Alcaldes de Casa y Corte, siendo gobernador de ella D. Andres Vácarcel Dato, consejero de Castilla, se formó inventario general de las causas criminales que se hallaban en el archivo de dicha Sala, posteriores al año de 1542.

     »Existe todavía bien conservado este inventario; pero en el dia no sirve tanto como pudo servir en otro tiempo, porque las causas criminales anteriores al 1700 se vendieron, y ya no se pueden examinar aunque las cita el inventario.

     »Había entre ellas algúnas curiosas, como la formada el año de 1579 contra Alonso de Zayas y Mari Morena, su mujer, tabernera de corte, por tener en su casa cueros de vino y no quererlos vender. Es muy verosímil que el nombre y apellido de esta mujer encausada, su clase y la calidad de su culpa, hubiesen dado orígen desde el año de 1579 á la expresion, hoy muy usual, de Marimorena, por pendencia».

     Mármol.

     Suele emplearse como tipo de la dureza unas veces, y ótras de la frialdad.

     Marmota.-Dormir como una marmota. Véase Liron.

     Marrajo.-Hacerse el marrajo.

     Dícese de toda persona cauta, reservada y maliciosa, y que encubre su dañada intencion para lograr mejor sus fines perversos, con alusion á la astucia de que se halla provisto el pez llamado marrajo ó tiburon cuando pretende cebarse sobre su presa.

     De aquí provino seguramente el adj. marrajo, aplicacion al toro ó buey malicioso é intencionado que lleva la cabeza baja con el objeto de arremeter á golpe seguro; por lo cual se dice tambien de la persona que se halla en las condiciones indicadas, que parece un toro marrajo.

     Marrano. -Ser un marrano.

     Dícese de toda persona desaseada, y tambien de aquélla cuyo proceder es bajo y ruin.

     Marta.- Se parece á Marta la piadosa.

     Fr. con que se apellida irónicamente á la persona, especialmente si es mujer, hipócrita y gazmoña, que aparentando interesarse por los duelos ajenos, busca realmente su conveniencia. Así dice un ref. antiguo: Marta la piadosa que mascaba la miel á los enfermos.

     Es muy probable que haya existido con este nombre alguna de tantas beatas hipócritas y farsantes como no han faltado, ni faltan por desgracia, haciendo su negocio so capa de religion; pues en manera alguna debe referirse el significado de esta frase á Alarta la hermana de María y Lázaro, la cual ejerciendo el hospedaje más desinteresado y caritativo con Jesus, y siendo el tipo de la vida activa en sentir de los SS. PP., así como su hermana de la contemplativa, mereció ser canonizada por la Iglesia.

     Mártos. -Firme como la Peña de Mártos.

     Fr. con que se encarece la firmeza y constancia de alguna persona ó cosa, con alusion á un despeñadero duro y elevado conocido con el nombre de Peña de Mártos, que hay cerca de esta villa en la provincia de Jaen, el cual se hizo célebre por haber servido de suplicio á los hermanos Carvajales arrojados desde su altura por pór orden del rey Fernando IV, á quien por haber citado aquellos caballeros ante el tribunal de Dios en el término de treinta dias, protestando de su inocencia, y habiendo muerto efectivamente el monarca el dia trigésimo, bien por casualidad, bien por providencia divina, reconoce la historia con el nombre de El Emplazado.

     Más. -Es hábil pillo, tonto, etc. como el que más.

     Fr. que se aplica á aquella persona que reune cualquiera cualidad en tan alto grado como pueda tenerla el individuo que más se distinga en ella.

     Matachin.- Dejar á alguno hecho un matachin.

     Dejarle avergonzado y corrido. Alude á la variedad de colores que llevaban antiguamente en su ropaje los matachines, y á que de aquél á quien se sonroja se suele decir que se pone de mil colores, ó que un color se le va y ótro se le viene.

     Matar. -Ni hermosa que mate, ni fea que espante. Ref. V. Monte.

     Matusalen. -Tener más años que Matusalen.

     Ser muy vieja una persona ó cosa, aludiendo á la longevidad de este patriarca de la ley antigua, de quien refiere el Génesis (cap. v) que vivió 969 años.

     Por lo que respecta á la duracion de los años en aquella época computada con la de los nuestros, véase en este lugar á S. Agustin, Calmet y otros expositores.

     Maza -La maza de Fraga.

     Loc. fam. con que se designa ó moteja á la persona que tiene grande autoridad en todo lo que dice. Se da la misma calificacion á ciertas palabras sentenciosas ó verdades desnudas, que hacen gran impresion en quien las oye.

     He aquí el orígen de estas comparaciones:

     Existe en Fraga, ciudad de la provincia de Huesca, de cuya capital dista 19 leguas, una famosa y antigua maza, cuya celebridad no sólo ha dado origen á la frase comparativa que encabeza este artículo, sino tambien al refran que dice: La maza de Fraga saca polvo debajo del agua, queriendo pintar bajo la imágen del peso enorme, de esta máquina, la idea de que múchos con su pesadez é importunidad logran hasta lo que parecía imposible. Este instrumento, pues, es formas idénticas á las de un mazo, es de figura cuadrada, si bien tiene más de ancho que de largo; está forrado de hierro, y se empleaba en la composicion del puente de madera por medio de un aparato formado de dos vigas de mucha elevacion, á donde subía la maza, desprendiéndose con violento ímpetu por entre las dos vigas, y dando sobre la estaca que se deseaba clavar. lo cual hacía que la composicion del puente fuese instantánea. En la actualidad ha dejado de destinarse á dicho objeto, toda vez que el puente ha sido sustituido por úno colgante de la mayor consistencia.

     Mazacote.- Estar hecho un mazacote.

     Aplícase al guiso, vianda ó cualquier manjar que por haberse quedado demasiado espeso ó seco, se asemeja á la mezcla así llamada de que usan los albañiles.

     Tambien suele decirse del hombre molesto, pesado é indigesto en su conversacion ó en sus escritos, que es un mazacote.

     Meaja.-Lo mismo que meaja en capilla de fraile.

     Loc. con que se da á entender lo poco que vale alguna cosa, tanto porque la meaja era una moneda insignificante, pues valía la sexta parte de un maravedí, cuanto porque recolectando los religiosos en otros tiempos crecidas limosnas, daban naturalmente poca importancia á una meaja más ó ménos que los echaran en la capilla.

     Mear. -Eso es mear fuera del tiesto.

     Fr. fam . con que se manifiesta á alguno, que se aparta de la cuestion de que se está tratando, como el que se pusiera á orinar fuera del servicio.

     Guardarse de hacer una cosa como de mearse en la cama.

     Fr. fam. con la cual se da á entender de un modo satisfactorio que ya se abstendrá la persona á quien se alude de hacer aquello que ótra se teme.

     Eso es más viejo que el mear. V. Sarna.

     Meco.-No le valdrá ni la bula de Meco.

     Fr. prov. que se aplica á una persona Para asegurar que cuantos medios ponga en ejecucion, por más favorables que parézcan, no serán bastantes á librarla del castigo ó de las desgracias que le amenazan.

     Es alusion á una bula muy lata por medio de la que concedió Su Santidad un gran número de privilegios y exenciones á los habitantes de Meco, pueblo situado á seis leguas de Madrid, obtenida por intercesion y a favor del Conde de Tendilla, señor de dicha villa, que había estado muchos años en Roma y prestado servicios especiales al Papa y á su corte.

     Medalla. V. Moneda.

     Médico.- Parece visita de médico.

     Dícese de las visitas de corta duracion, por tener esta cualidad las que hacen á los enfermos los facultativos.

     Medusa.- Tener cabellos de Medusa.

     Tener la cabellera ensortijada. Cuenta la Mitología que habiendo abusado Neptuno de Medusa, una de las tres Gorgonas, en el templo de Minerva, irritada esta diosa con semejante sacrilegio, transformó en serpientes los cabellos de Medusa, dando además á su cabeza la virtud de petrificar á los que la miraran.

     Megera.- Parecer una Megeria. V. Furia.

     Membrillo. -Cagajones y membrillos, todos somos amarillos.

     Ref. con que se da á entender que no es la forma ó los accidentes lo que decide del mérito é importancia de las personas y cosas, sino su esencia y naturaleza.

     Mendrugo.-Ser una cosa más oportuna, ó Venir con más oportunidad que mendrugo en boca de pobre ayuno.

     Dícese por todo aquello que sobreviene con oportunidad y á deseo.

     Ménos.-Tanto es lo de más como lo de ménos.,

     Ref. con que se acredita que todo extremo es vicioso.

     Mentiroso.-Menos malo es el ladron que el mentiroso.

     Comparada la criminalidad del ladron con la del mentiroso, resulta ser ésta más grave, por cuanto el ladron roba la hacienda, y el mentiroso la fama, imposible de ser restituida; en tanto que la hacienda puede serlo, áun cuando no lo sea muy fácil ni frecuentemente. Esta sentencia se registra en el libro del Eclesiástico, cap. XX, v. 27.

     Mercado. -Poder vender en un buen mercado.

     Dícese del que es sagaz y astuto, como cualidades que ostentan los buenos feriantes.

     Merecer. -Quien más hace, ménos merece.,

     Ref. con el cual se da á entender que por lo regular no se hallan las recompensas en relacion directa con el mérito, pues casi siempre son logradas por aquéllos que menos acreedores se hicieran á obtenerlas.

     Merienda. -Convertirse en, ó Parecer una merienda de negros.

     Dícese del lugar en que, reinando gran confusion y desórden, tódos quieren mandar y ningúno obedecer, por semejanza á la bulla y algazara que arman los negros en sus festines.

     Merlin. -Sabe más que Merlín.

     Aplícase á la persona ladina, con relacion al famoso encantador Merlin, personaje tal vez imaginario, del cual hablan mucho los romances y libros de caballería que tratan del rey Arturo y Caballeros de la Tabla redonda.

     Mesa. -Parecer una mesa revuelta.

     Aplícase á aquel paraje ú objeto donde reina la mayor confusion entre las partes que lo componen, á semejanza de una mesa de escritorio que se halla cubierta de papeles, libros y demas efectos en el mayor desórden y desbarajuste.

     Parecer mesa de gallegos.

     Aplícase á aquélla en que se ha olvidado poner pan.

     Parecer mesa de milanos.

     Dícese de aquéllas en que la comida anda escasa.

     Mesalina.-Es una Mesalina.

     Aplícase á la mujer por extremo disoluta, con alusion á Valeria Mesalina, esposa del emperador Claudio, cuya impudicicia fué tal, que no había jóven en Roma que no se jactara con verdad de haber alcanzado sus favores. Noticioso el emperador de los inauditos desórdenes con que manchaba el tálamo nupcial su mujer, le hizo dar muerte, en union de uno de sus amantes con quien acababa de desposarse públicamente, el año 48 de J. C. De ella dijo un poeta satírico que: Lassata viris, necdum satiata recessit.

     Mesar. -A dos manos, como quien se mesa.

     Aplícase al que hace uso de ambas manos para ejecutar alguna cosa, como sucede al que airado se arranca los cabellos ó las barbas.

     Mesías. -Esperar á algúno como si fuera el Mesías.

     Esperarle con deseo vehemente. Alude á la solicitud y anhelo con que aguardaban los Patriarcas la Encarnacion del Hijo de Dios.

     Metal. -En cuanto á metales, iguales, pero diferentes en calidades.

     Ref. con que se da á entender que entre dos ó más sujetos ú objetos, que al parecer son iguales por tener el mismo nombre, forma, destino, etc., existe sin embargo una gran diferencia entre ellos, atendido el valor de apreciacion que se les da, ó cualquier otra circunstancia que los distingue. Así, v. g., es tela el terciopelo, y tambien el percal; flor la rosa, y flor el jaramago; árbol el pino, é igualmente la caoba, á la manera que metal es el oro., y metal tambien el cobre.

     Mico. -Tener cara de mico.

     Ser muy raido, ó Hacer visajes como aquel animal.

     Miel. -Eso es como miel sobre hojuelas.

     Dícese cuando una cosa sienta ó cae muy bien sobre ótra añadiéndole nuevo realce, y en general de toda prosperidad que sigue inmediatamente á otro suceso favorable, con alusion á que siendo las hojuelas de suyo gustosas, se hacen mucho más agradables al paladar cuando están bañadas de miel.

     Más moscas se cazan con miel que nó con hiel.

     Ref. que enseña que la dulzura y la indulgencia son los mejores medios de atraerse las voluntades.

     Más dulce que la miel, ó Ser cosa de mieles. V. Caramelo.

     Eso es como vender miel al colmenero. V. Es como llevar leña al monte.

     Miércoles.- Estar, ó Ponerse en medio como el miércoles.

     Dícese de las personas ó cosas que ocupan un lugar medio entro ótras de su misma especie, como sucede al miércoles respecto de los demas dias de la semana. Alguna vez se suele aplicar á los niños que, interceptando el paso de las personas mayores, no dejan á éstas facilidad para andar á obrar.

     Mierda.-Eso es como la mierda, que cuanto más se menea, más hiede.

     Ref. popular con que se da á entender que cuanto más sé agita ó mueve un negocio sucio, tanto más se desacredita á los que han tenido parte en él.

     Más vale media mierda que mierda entera.

     Ref. con que se significa en lenguaje poco culto, que de dos males es preferible el menor.

     Mina.- Ser una mina. V. Ser una viña.

     Mingo Rebulgo.- Dárselo á úno de alguna cosa lo mismo que de las coplas de Mingo Rebulgo. V. Calaínos.

     Miniatura.-Es una miniatura, ó Parece una miniatura. V. Filigrana

     Ministro. -Tener más visitas, ó negocios que un ministro.

     Recibir muchas visitas, ó Despachar muchos asuntos.

     Misa. - Estar, ó Quedarse más callado que en misa.

     No hablar ó responder palabra.

     Hacer la misma falta que los perros en misa

     Estar demas o de sobra en alguna parte.

     No hay como las misas de cuerpo presente.

     En ciertos asuntos, la presencia del interesado vale más que todas las recomendaciones ó tercerías que pueda poner en juego á la manera que cuanto más prónto se apliquen las misas por un difunto, más oportunamente le aprovecharán á su alma; y este cuanto más pronto, claro es como la luz del mediodía que no puede ser ántes de hallarse de cuerpo presente.

     Misal. -Tener más registros que un misal.

     Además de su acepcion recta tratándose de un libro, se aplica en ocasiones á la persona que abunda en recursos y expedientes para desembarazarse fácilmente de cualesquier compromisos.

     Como el que no sabe leer más que en un misal.

     Aplícase á la persona tan limitada de alcances, que, en sacándola de su marcha habitual, no sabe dar un paso en aquella materia de que se trata, aludiendo á algunos clérigos de misa y olla tan rutineros, que si se les cambia el misal por que acostumbran celebrar diariamente, se encuentran luégo embarazados y confundidos sin saber hallar la misa que corresponde al rezo del dia.

     Misterio. -Que tiembla el misterio. V. Que canta el Credo.

     Mocosueno. -Eso equivale á mocosueno mocosuenas.

     Cuando se da una interpretacion torcida á una proposicion ó palabra, guiado tan sólo por el sonsonete, y nó por su sentido ideológico, se dice que la tal interpretacion equivale al latin macarrónico mocosueno mocosuenas, en cuya jocosa formacion no tuvo seguramente el inventor más trabajo que invertir las letras componentes de las palabras como sueno, como suenas.

     Mojama. V. Cecina.

     Molde.- Venir una cosa como de molde.

     Sentar bien, venir adecuada, presentarse con oportunidad, etc., segun las circunstancias.

     Molinillo.-Parecer molinillo de chocolatera.

     Aplícase á la persona que se halla en continuo movimiento, con semejanza á las vueltas que se da entre las manos al molinillo cuando se bate el chocolate dentro de la chocolatera.

     Mona. -Quedarse corrido como una mona, ó como un mono.

     Quedarse burlado o avergonzado.

     Moneda.-Eso es moneda corriente.

     Dícese de todo aquello que circula fácil y libremente sin hallar obstáculo ni impedimento alguno á su paso, como noticias, doctrinas, etc, al modo que la moneda legal y usual no es rechazada de nadie.

     Tener como la moneda su anverso y su reverso.

     Aplícase á toda cuestion que puede considerarse bajo dos aspectos diferentes.

     Monedilla.-No somos monedillas de oro, que á todo el mundo gustan.

     Fr. fam. con que se excusa alguna persona de no haber complacido, ó de no ser grata, á ótra, fundándose en que siendo los genios tan diversos en todas las ocasiones de la vida, sólo están conformes en gustarles el dinero.

     Monja. -Tener carrillos de monja boba.

     Ser mofletudo.

     Tener escrúpulos, ó Ser alguna cosa escrúpulos de monja.

     Dícese de todo escrúpulo infundado.

     Cuéntase de una monja que hallándose preparada para comulgar, se levantó repentinamente de la sagrada mesa para preguntarle á su confesor sí podría recibir sin reparo la comunion, atento á que al pasar por la celda de una compañera había tragado sin querer... ¡oh dolor!,¡¡¡¡¡ un poco de humo del aceite que estaban friendo!!!!! A este tenor suelen tener algunas almas piadosas infinidad de escrúpulos á cual más impertinentes.

     Los escrúpulos exagerados, si me es permitido citarme á mi mismo(15), son la tísis del alma, que la van aniquilando insensiblemente despues de haberla extraviado.

     Mono. -Ser un mono, ó Ser un mono de imitacion.

     Dícese de las personas que en sus actos se conducen por el ejemplo de ótras, como sucede con el mono que copia, en cuanto le es posible, los ademanes de los racionales.

     Parecer un mono.

     Hacer muchos gestos y contoneos cuando se habla ó anda, imitando las contorsiones y los ademanes exagerados propios de aquel animal.

     Tener cara de mono. V. Mico.

     Montañes.-Es más hidalgo que un montañes.

     Aplícase á la persona que se jacta de descender de alta alcurnia, especialmente sino está bien acreditada en sus pretensiones, aludiendo á la generalidad de los montañeses ó naturales de las montañas de Santander, que blasonan de poseer títulos de nobleza.

     Esta circunstancia característica en la mayor parte de los hijos de aquel país, ha sido felizmente expresada por nuestro chistoso y epigramático Sálas en los siguientes versos:

                                  Es del Montañes la gloria
guardar por antigua prenda
en una pequeña hacienda
una grande ejecutoria.
Del noble país la historia
toda alojería embebe;
y creo, pues se le debe
al Montañes esta maña,
que es la nobleza de España
más cercana de la nieve.

     Montar.- Tanto monta, ó Tanto monta cortar como desatar.

     Loc. con que se significa que una cosa es equivalente á ótra. V. Nudo gordiano.

     Monte. -Ni tan monte, ni tan ponte.

     Ref. con que se da á entender que el trato de las personas en sociedad debe ser tal, que ocupe un término medio, sin erguirse como un monte elevado, ni bajarse como el puente más llano; y, por punto general, que los extremos de cualquier genero á que pertenezcan, son vituperables en todo lugar y ocasion.

     Mora. -Más negro que la mora.

     Aplícase á aquel objeto de color sumamente oscuro.

     Morcon. -Parecer un morcon, ó una tripa de morcon.

     Aplícase á la persona gruesa, pequeña floja, especialmente si es desaseada, aludiendo á la hechura de aquella especie de morcillas y á la pringue que chorrean.

     Morillo.- Más tiznado que morillo.

     Aplícase á la persona ó cosa que se halla sumamente negra ó tiznada, con alusion á las figuritas en que suelen rematar los caballetes de hierro que se colocan en el hogar para sostener la leña.

     Dicen únos que estas figuritas representaban á los moros, puestas allí por los cristianos como en el fuego del infierno, en odio á sus creencias religiosas, y que de aquí tomaron el nombre de morillos en tanto que ótros se inclinan á creer que tiene dicha palabra un origen más antiguo, remontándolo á los dioses lares que eran reverenciados en aquel lugar, de donde provino el término lares ó llares para expresar la cadena y garfio de que pende el caldero colocado sobre la lumbre, por otro nombre lemurillos, con alusion á los lémures ó duendes, que decían aparecerse en la cocina al rededor de la lumbre, de donde quedó por corruptela murillos, y últimamente morillos.

     Morir. -Más vale decir aquí huyó, que aquí murió.

     Ref. que significa que la vida es el mayor de todos los bienes.

     Morlaco. -Hacerse el morlaco.

     Dícese fam. de aquél que afecta tontería ó ignorancia, con alusion á los naturales de Morlaquia, pequeña provincia de la Dalmacia- Austriaca, que son muy rústicos y salvajes.

     Morles. -Eso es lo mismo que morles de Morles.

     Dícese de toda explicacion cansada y enojosa, que por no pasar de ser una repeticion ó redundancia, en nada sustancial aclara el sentido de lo anteriormente dicho. Semejante comparacion no puede ser, á la verdad, más exacta, por cuanto siendo el morles una especie de tela que toma su nombre del lugar donde se fabrica, (Morlaix, ciudad de Francia), el decir morles de Morles vale tanto como si se dijera coruña de Coruña, bretaña de Bretaña, cambrai de Cambrai, ruan de Ruan, etc.

     Moro. -A más moros, más ganancia.

     Léese en el Romancero del Cid como, despues que se hubo apoderado éste de Valencia, fué el caudillo moro Miramamolin al frente de un poderoso ejército á quitársela; y que al ver Ruy Diaz consternadas á su esposa doña Jimena y á sus hijas por el pujante asedio en que se encontraban, les dijo para animarlas:

   «No temais, doña Jimena
                               Y fijas, que tanto amo.
   Miéntras que yo fuere vivo,
De nada tengáis cuidado;
Que estos moros que aqui vedes
Vencidos habrán quedado.
   Y con el su gran haber,
Fijas, os habré casado;
Que cuantos más son los moros
Más ganancia habrán dejado».

     Por esto, usamos de dicha frase cuando pretendemos dar á entender que cuanto mayores sean los obstáculos que tengamos que remover, ó numerosos los enemigos que combatir, tanto más considerable será la honra y el provecho que alcancemos en caso de salir victoriosos.

     Estar como moros sin señor.

     Dícese de todo paraje donde reina gran confusion y desórden, por faltar una cabeza á quien obedezcan los demás.

     No es lo mismo decir: MOROS VIENEN, que verlos venir.

     Ref. que denota la gran diferencia que va de ser testigo de oidas de cualquier lance azaroso, á serlo presencial.

     Mosca. -Ser más goloso que las moscas.

     Ser muy aficionado á andar gulusmeando.

     Hacer más daño que las moscas de san Narciso.

     Fr. proverb. que se suele aplicar al individuo ú objeto que causa grandes estragos. Su origen es como sigue:

     Refiérese en la vida de este Santo obispo y mártir, natural y patrono de Gerona, que cuando Felipe, rey de Francia, declaró la guerra al monarca de Aragon D. Pedro, y tomó aquella ciudad, en ocasion de estar robando los soldados enemigos el sepulcro del Santo, salió de este lugar un número tan considerable de moscas y tábanos de color azul y verde con listas rojas, que, embistiendo con los jinetes y caballos del rey frances, los envenenó de tal suerte, que murieron á los pocos instantes cuantos habían sido picados. Semejante estrago puso en precipitada fuga á los enemigos que quedaran ilesos, los cuales apenas compondrían un tercio del ejército derrotado, segun consta en el libro intitulado Crónica, de los Reyes de Aragon, que se conserva en el archivo de Barcelona. Este suceso se consigna allí que tuvo lugar en el mes de setiembre de 1286.

     Parecer una mosca en leche.

     Dícese por lo regular de la mujer morena vestida de blanco.

     Parecer una mosca muerta.

     Aplícase al que aparenta ser de espíritu apocado, pero que no pierde la ocasion de hacer su negocio, ó de decir mafiosamente lo que siente. Como quien anda cogiendo moscas. V. Como el que anda á grillos.

     Como quien está papando moscas.

     Dícese de aquél que nada hace, y que está embelesado ó con la boca abierta.

     Puñado de moscas.

     Conjunto de cosas que pronto y fácilmente se dispersan ó desaparecen. Citando se pretende dar á entender el poco aprecio que se hace de alguna cosa, se suele decir: ¡Buen puñado son tres moscas!

     Moscon.-Parecer un moscon.

     Aplícase al sujeto que importuna á ótro, ya repitiendo continuamente la misma tema, ya murmurando sin cesar entre dientes aquello que es causa de su disgusto ó incomodidad.

     Motilon. V. Trasquilado.

     Moza. -Como la molza del abad, que no cuece y tiene pan.

     Ref. que reprende á los que quieren mantenerse sin trabajar, como sucede á los criados de los abades ó curas en algunos paises, que se mantienen de las ofrendas que presentan los feligreses, sin necesidad de tomarse el trabajo de amasar y cocer el pan.

     Mozo.-Como el mozo del gallego, que andaba todo el año descalzo, y en un dia quería matar al zapatero.

     Ref. que se aplica á los que habiendo tenido tiempo para encargar que les hagan alguna cosa, por desidia lo van dejando hasta que llega la forzosa, en cuya ocasion agobian con la prisa que meten, sin dar tiempo á los que han de trabajar.

     Mudo. -Hacer hablar á los mudos.

     Fr. con que se pondera la eficacia ó viveza de alguna especie, que precisa á responder á ella.

     Muela. -Gustarle alguna accion a úno tanto como si le sacaran las muelas.

     Ser algun hecho desagradable á aquél sobre quien recae.

     Tener muelas de gallo.

     Apodo con que se moteja al que, no tiene muelas ó dientes, ó los tiene malos ó separados.

     Muerte.-Es una muerte.

     Exp. con que se explica lo penoso ó insufrible de alguna persona ó cosa.

     Mas feo que la muerte.

     Fr. con que se pondera la suma fealdad de algun sujeto ú objeto.

     Más vale dejar en la muerte al enemigo, que pedir en la vida al amigo.

     Ref. que demuestra cuánto contribuye una economía bien entendida para libertarse del rubor y penas que ocasionan las deudas.

     El amor es fuerte como la muerte.

     Proverbio tomado de la Sagrada Escritura. FORTIS EST UT MORS DILECTIO, (Cantar de los Cantares, VIII, 6), con el cual se acredita que así como ningun sér viviente puede sustraerse al imperio de la muerte, tampoco es dado á ningun corazon resistir á los impulsos del amor.

     Muerto. -Es capaz de resucitar á un muerto.

     Aplícase ordinariamente á todo manjar que tiene mucha sustancia, y más usualmente al caldo que es muy suculento.

     Parece que está alumbrando á un muerto.

     Dícese de toda luz que, por haber criado demasiada pavesa en el pabilo ó torcida, no arroja la debida claridad, aludiendo á que así suele suceder con las hachas que alumbran á los cadáveres que están de cuerpo presente, á consecuencia de descuidarlas los que se hayan hecho cargo de ellas.

     Hacer de alguna persona el mismo caso que de un muerto. -Acordarse de algúno como de los muertos. -Olvidado como muerto.

     Tres frases con las que se da á entender el olvido á que se ha relegado á alguna persona ó cosa, porque, como dicen dos refranes: El muerto al hoyo, y el vivo al bollo; y, A muertos y á idos no hay más amigos.

     Muestra. -La muestra del paño.

     Exp. con que se da á entender que alguna cosa es indicio por el cual se discurre, cómo son las demas de su especie, y se dice de las personas y sus operaciones.

     Mujer. -Para ser puta y no ganar nada, más vale ser mujer honrada.

     Ref. con el cual se denota que se huye de acometer alguna empresa, especialmente si no es ésta de las más justificadas, so pretexto de ofrecer poca ó ninguna utilidad.

     Caprichoso como una mujer embarazada.

     Aplícase á toda persona que es muy antojadiza, aludiendo á los caprichos y exigencias extravagantes que, segun dicen, suelen acometer á algunas mujeres cuando se hallan en cinta.

     Hispe el huevo bien batido, como la mujer con el buen marido.

     Ref., cuya comparacion establecida en él me parece sería más acertada si se invirtieran los términos en esta fórma: Como el huevo bien batido, hispe la mujer con el buen marido, porque lo más natural es que se compare lo menos comun con lo que es más trivial. De cualquier modo, su objeto es dar á entender que así como se esponjan los huevos cuando son batidos, de igual manera llenan ó hacen engruesar las satisfacciones á la mujer que es agasajada por su marido, y atendida en todos los deberes propios del estado matrimonial.

     Tales son migas de añadido, como mujer de otro marido. Ótros dicen (y esta forma la encuentro más propia por la razon susodicha):

     Tal es la mujer de otro marido, como olla de caldo añadido.

     Refs. con que se da á entender que así como cuando se toman algunas migas de una cazuela para despues echar en sustitucion de ellas otros pedazos de pan, ó bien se saca caldo de la olla añadiéndole al que queda puesto á la lumbre cierta cantidad de agua que reemplace á la porcion que se ha extraido, quedan ambos manjares desustanciados por haberse llevado la flor las cantidades que se sacaron, de igual manera ha perdido su mérito material la mujer á quien se toma en segundas nupcias, por haber disfrutado las primicias de ella su anterior marido.

     Vestirse por la cabeza, como las mujeres.

     Fr. que se suele aplicar á los clérigos y demas individuos destinados al servicio eclesiástico, por razon de ponerse la sotana y algunas vestiduras sagradas por la cabeza,

     Mula. -Hacer úno la mula.

     Hacerse el remolon, una de las cualidades distintivas de aquel animal.

     Tener más resabios que una mula falsa.

     Adolecer una persona de vicios y malos hábitos inveterados.

     Más falso que una mula de alquiler.

     Dícese de las personas y cosas no verídicas.

     Mulo. -Comer como un mulo.

     Dícese fam. de la persona que es voraz en la comida.

     Tambien se dice del que no se cansa en su marcha que Anda mas que un mulo;

del que tiene mucha resistencia ó aguante, física ó moralmente hablando, que

     Carga, ó Sufre más que un mulo, etc.

     Como come el mulo, caga el culo.

     Ref bajo y popular con que se echa en cara á alguna persona lo abundante en su deposicion fecal, de resultas de su exceso en la comida.

     Ser mulo de reata.

     Aplícase al sujeto que sigue ciegamente á ótro ú ótros en su voluntad ó dictámen, con alusion a las caballerias que, yendo reatadas, tienen que seguir forzosamente los pasos de la primera que sirve de guía.

     Muñoz. -Preguntádselo á Muñoz, que miente más que yo.

     Fr. prov. que se dirige á aquéllos que, no siendo creidos bajo su palabra, apelan al testimonio de otro individuo, de cuya veracidad tenemos tanto ó más motivo para dudar.

     Musaraña. -Como quien está mirando á ó pensando en las musarañas. V. Mosca.

     Música. -Todo eso es lo mismo que dar música á un sordo.

     Dícese de aquél que trabaja en vano por persuadir á algúno que no está por el gusto de mudar de opinion, á la manera que siendo el oido el conductor de los sonidos, mal pueden ser percibidos éstos por quien carece de aquel órgano, y dado que, por otra parte, no hay peor sordo que el que no quiere oir.

     Todo eso es música celestial.

     Fr. fam. con que se caracterizan las palabras elegantes y promesas vanas sin sustancia ni utilidad.

     En mi concepto, debe ser atribuido el origen de esta locucion á la ridícula escuela de los preceptistas antiguos, empeñados en deducir los intervalos de la gama ó escala musical, de la distancia que existe entre los cuerpos celestes que componen el sistema planetario.

     Así como los delirios de las novelas de caballería los de los malos predicadores fueron satirizados respectivamente por Cervántes y el P. Isla, de igual manera éstos y otros dislates musicales merecieron ser chistosa y plausiblemente zaheridos por el abate Eximeno, jesuita, en su preciosa obra intitulada Don Lazarillo Vizcardi, M. S. que habiendo permanecido inédito y desconocido por espacio de cerca de un siglo, acaba de ser dado á la estampa merced á la exquisita diligencia y laudables desvelos de la Sociedad de Bibliófilos Españoles en general, y en particular á la laboriosidad de uno de sus más distinguidos colaboradores, mi apreciable amigo el. D. Francisco Asenjo Barbieri.

     Músico. -No quedarle á algúno, como á los músicos viejos, más que la aficion y el compas.

     Fr. prov. con que se manifiesta que alguna persona ha abandonado por completo tal ejercicio, profesion, devaneo, etc., sin perder por eso de todo punto su aficion á, y su inteligencia en, aquello que constituía anteriormente el objeto de su ocupacion ó deleite, á la manera que suele suceder con los músicos entrados en años, quienes no pudiendo ya ejecutar la música en fuerza de su edad, le siguen conservando cariño al propio tiempo que no pierden en inteligencia.

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