Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

281

(J. T. Medina, La Imprenta en La Habana, Santiago de Chile, 1904.) (N. del E.)

 

282

(número 90 de J. T. Medina, La Imprenta en La Habana, Santiago de Chile, 1904.) (N. del E.)

 

283

A este respecto debemos notar el error en que incurre Bachiller, t. I, página 181, al decir «que honran al buril de Báez.»

Como conclusión a esta nota vamos a copiar un documento que hallamos en el Archivo de Indias y que se refiere a un curioso grabado «del sitio de La Habana», un plano Indudablemente, del cual acaso no exista al presente ejemplar alguno.

«Diego de Vergara Gaviria, receptor de Su Majestad en este Consejo Real de las Indias.- De los maravedís que hubiere en vuestro poder o a él vinieren procedidos de gastos de estrados, dad y pagad a Francisco Navarro cuatrocientos reales de vellón, que valen trece mill y seiscientos maravedís, que se le deben del resto de una discrición que ha grabado en lámina del sitio de la Habana; que con su carta de pago y este libramiento, de que han de tomar la razón los contadores de cuentas de Su Majestad que residen en este Consejo, mandamos se os reciban y pasen en cuenta, sin pediros otro recaudo alguno. Fecho en Madrid, a veinte y ocho de Agosto de mill y seiscientos y treinta y cuatro años.- Señalada del Consejo.»



(N. del A.)

 

284

El autor se refiere a la parte bibliográfica de La Imprenta en La Habana, Santiago de Chile, 1904.) (N. del E.)

 

285

Libro VII, 1721-1728, hoja 149 vlta. (N. del A.)

 

286

Consta también de la partida de defunción que la señora Reyes Flores otorgó poder para testar ante el notario don José Manuel Álvarez de Aragón. Creímos que en ese documento íbamos a encontrar, por lo menos, el paradero de la imprenta, pero no fue imposible hallar el protocolo correspondiente de aquel escribano. (N. del A.)

 

287

Boletín del Instituto bibliográfico mexicano, n. 3, p. 40. (N. del A.)

 

288

Biblioteca Hispano-americana septentrional, t. IV, sec. II, n. 43. (N. del A.)

 

289

De todos los impresos de origen insurgente, ninguno más pobre, por sus elementos de caja y prensa, que El Ilustrador Nacional, de Sultepec (1812). Es lo que puede llamarse con toda exactitud primitivo. (N. del A.)

 

290

Véase el «Plan» del Ilustrador Americano. (N. del A.)