Cédulas reales: de Aranjuez, 3 de diciembre de 1627; de Madrid, 6 de abril de 1629. [Cedulario de la antigua presidencia de Quito: es un volumen que contiene muchas cédulas del tiempo del presidente Morga]. Hállanse también disposiciones terminantes sobre los curatos de los regulares en el Tomo segundo del Cedulario de la Real Audiencia. [Archivo de la Corte Suprema de Justicia]. El Consejo de Indias mandó severamente guardar el más absoluto silencio respecto de lo pasado, a fin de no perturbar a los pueblos en lo relativo a la validez de los sacramentos administrados sin jurisdicción; pues, según el Consejo, la buena fe de los fieles subsanaba la nulidad de los sacramentos. Por lo demás, esta cuestión de los curatos de los regulares, actualmente pertenece más bien a la historia del Derecho Canónico en América que a la disciplina eclesiástica vigente. Sin embargo, no será inútil citar dos autores en quienes se puede estudiar este punto, advirtiendo que sus opiniones canónicas carecen de sólidos fundamentos en cuanto a la extensión que dan a los privilegios apostólicos concedidos a los regulares.

LOZADA, Compendio cronológico de los privilegios regulares de Indias.

PARRAS, Gobierno de los regulares de América. [Tomo segundo, Parte tercera]. Este escritor es muy recomendable por su sinceridad.

Esta religiosa era hija del licenciado don Pedro de Zorrilla y de doña Francisca Sanguino. Zorrilla, oidor cuando la revolución de las alcabalas, era natural del Burgo de Osma; su esposa, la señora Sanguino era nativa de Valladolid. Su hija profesó en el convento de la Concepción de Quito, el 7 de octubre de 1599. Libro de profesiones de las monjas. [Archivo del convento de la Concepción de Quito].

Constan los hechos referidos hasta aquí de documentos contemporáneos, que se guardan inéditos en el Archivo de Indias en Sevilla. Nos apoyamos además en los libros de actas del Cabildo, eclesiástico de Quito y en los de la Municipalidad correspondientes a este período de tiempo. El señor Oviedo murió el 18 de octubre de 1649; pasaba entonces de setenta años.

FRAY PEDRO DE SAN CECILIO, Anales del Orden de Descalzos de Nuestra Señora de la Merced. [Tomo primero. Parte primera, Libro segundo, Capítulo 1.º-6.º].

COLOMBO, Vida del Venerable Padre Fray Pedro Urraca. [Esta obra lleva también el título de El Job de la ley de Gracia, y se conocen de ella dos ediciones]. Los procesos ordinario y apostólico para la beatificación y canonización del venerable Urraca fueron declarados válidos por la Sagrada Congregación de Ritos, el 18 de agosto de 1731.

Sobre la puerta falsa del convento máximo de la Merced de Quito, hay una estatua de piedra, casi del tamaño natural, del padre Urraca, que lo representa vestido con el uniforme talar de los colegiales del antiguo seminario de San Luis, con lo que llamaban la opa y la beca.

MELÉNDEZ, Tesoros verdaderos de Indias. [Tomo primero. Libro quinto, Capítulo 12.º]. Hablan también de este Padre los cronistas Remesal y López del Castillo.

COMPTE, Varones ilustres de la Orden de San Francisco en el Ecuador. [Tomo primero. Parte primera]. También la Crónica del padre Córdoba y Salinas.

Varones ilustres de la Compañía de Jesús. [Tomo sexto]. Este Tomo fue compuesto por el padre Alonso de Andrade; y los datos relativos al padre Onofre Esteban se han tomado de la biografía que de dicho Padre escribió el padre Pedro Severino, la cual se ha perdido. También el padre Rodríguez en su obra intitulada El Marañón y Amazonas da varias noticias acerca del padre Onofre Esteban.

TORRES SALDAMANDO, Los antiguos jesuitas del Perú. [Sección segunda. Escritores del siglo XVII]. Los tres primeros jesuitas que vinieron a Quito, en 1584, fueron los padres Baltasar de Piñas, Diego González Holguín y Pedro de Hinojosa. El padre González Holguín murió en Mendoza, ciudad de la actual República argentina, el año de 1618.

Varias son las biografías que se han escrito de Mariana de Jesús; pero, entre todas, la que merece más autoridad es la del padre MORÁN DE BUTRÓN, impresa en Madrid a principios del siglo pasado; el padre Morán de Butrón escribió apoyado en los documentos del proceso de la causa de beatificación, los cuales también nosotros hemos logrado consultar, a lo menos en aquella parte, que todavía se conserva en el archivo de la Notaría eclesiástica de la Curia Metropolitana.

JIJÓN, Compendio histórico de la vida de la sierva de Dios Mariana de Jesús Flores y Paredes. Madrid, 1754.

CASTILLO, Vida de la Bienaventurada Mariana de Jesús. (Esta obra fue vertida al italiano y se reimprimió en Roma el año de 1853). Inútil parece citar la del padre Boero, escrita en latín, y la que hace poco dio a luz en castellano el señor Castro, eclesiástico venezolano, las cuales son bastante conocidas; la del padre Boero está traducida al francés.