131
Ivi, p. 224.
132
Si veda ad es. A.
Amorós, op. cit.,
p. 79: «La vida breve (1950) es, a mi modo de
ver, su obra maestra no superada».
133
E. Rodríguez Monegal, Literatura uruguaya del medio siglo, op. cit., p. 253.
134
E. Rodríguez Monegal, «Prólogo» cit. a J. C. Onetti, Obras completas, cit., p. 30.
135
Buenos Aires, Compañía General Fabril Editora, 1961. Per le citazioni e i riferimenti ricorro all'edizione 1969 della stessa casa editrice.
136
Montevideo, Alfa, 1964. Il romanzo è tradotto in italiano da E. Cicogna, col titolo Raccattacadaveri, Milano, Feltrinelli, 1969.
137
L. Harss, op. cit., p. 246.
138
Riferisce L.
Harss, Ivi, le parole di Onetti: «Lo que pasa es que yo me
puse a escribir Juntacadáveres. Y un
día, iba por un corredor, así, y tuve una
visión del fin de Larsen. Eso está en
El astillero.
Entonces dejé de escribir
Juntacadáveres, repentinamente. Puede ser que al retomarlo
después ya no haya tenido aquel amor
inicial»
.
139
Cfr. F. Umbral, Juan Carlos Onetti, «Boletín de la AEPE», III, 5, 1971, p. 114: «Si El astillero es como un solo de violín en los muelles mojados, Juntacadáveres es ya la gran orquestación. [...] Tema, escenario, desarrollo, personajes y prosa son perfectos hasta el asombro. Juntacadáveres es la obra maestra, la novela redonda. El máximo logro de Onetti [...]»
140
E. Rodríguez Monegal, «Prólogo» cit. a J. C. Onetti, Obras completas, cit., p. 35. In effetti, nella successione delle opere riunite nel citato volume, l'ordinatore fa precedere El astillero da Para una tumba sin nombre e questo romanzo da Juntacadáveres.