Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
Indice


 

291

Eminente tertuliano de la Fonda de San Sebastián, Nicolás Fernández de Moratín fue aficionado a los toros tal como observamos en su repertorio poético («Fiesta de toros en Madrid. Quintillas», «A Pedro Romero, torero insigne»...) o en su ensayo Carta histórica sobre el origen y progresos de las fiestas de toros en España (1776).

 

292

Del episodio ocurrido queda abundante información en las reseñas de la prensa, en los pliegos de cordel, y en las imágenes populares grabadas con tal luctuoso episodio el 11 de mayo de 1801. (Ver R. Cabrera Bonet y María Teresa Artigas, Los toros en la prensa madrileña del siglo XVIII, Madrid, Comunidad, 1991).

 

293

Los datos básicos sobre esta curiosa mujer se hallan en el libro de Paula de Demerson, María Francisca de Sales Portocarrero, Condesa de Montijo, ya citado en páginas anteriores.

 

294

Pedro Estala, Damón, compuso para la Montijo-Anarda una canción titulada «Damón despidiéndose quejoso de Anarda», Memorial Literario, 1789, p. 76.

 

295

P. de Demerson, María Francisca de Sales Portocarrero, Condesa de Montijo, p. 115.

 

296

Véase sobre el mismo María Teresa Fernández Talaya, El Real Sitio de La Florida y La Moncloa: evolución histórica y artística de un lugar madrileño, Madrid, Fundación Caja Madrid, 1999.

 

297

Recuerdo los trabajos de Francisco Bonmatí de Codecido, La Duquesa Cayetana de Alba, musa y maja de don Francisco de Goya, Valladolid, Ed. Cumbre, 1940 (en particular «Fiestas en el palacete de la Moncloa, teatros, toros», pp. 134-143); Fernando Castán Palomar, «Saraos aristocráticos y cenáculos literarios en el Madrid de Goya», Letras, 1946, pp. 13-15; M. D. Arroyo, Cayetana de Alba. Maja y aristócrata, Madrid, 1999.

 

298

Cit. en José del Corral, La vida cotidiana en el Madrid del siglo XVIII, Madrid, Ed. La Librería, 2000, p. 147.

 

299

P. Fernández-Quintanilla, La mujer ilustrada en la España del siglo XVIII, p. 41.

 

300

Tomás de Iriarte, La señorita malcriada (ed. de R. P. Sebold), Madrid, Castalia, 1978, p. 330. También se puede reconocer al mayordomo, al hortelano como personajes de la gran huerta próxima al palacio.

Indice