Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

1011

En SHOEMAKER: 1973, pág. 305.

 

1012

La Montálvez, cap. I, parte I; pág. 14 de la 1.ª ed. (1888). A propósito de esta y otras alusiones, comentaba Ruiz Contreras (op. cit., pág. 16): «De trecho en trecho apunta maliciosamente a los fisiólogos cuyo crimen inaudito consiste quizá en haber inventado tres o cuatro teorías que a juicio de sus contrarios eran ya cosas viejas. Pereda no dice esto [...] pero habla con tonillo zumbón del medio ambiente».

 

1013

Se refiere Cortón con estas palabras al llamado por algunos críticos y por el mismo Pereda, «idilio de Luz», parte de la novela a la que dedicaremos el apartado 10 de este capítulo.

 

1014

«Mi biblioteca. Pereda», La Vanguardia, Barcelona, 10-VIII-1900.

 

1015

Art. cit.; día 9 de abril.

 

1016

Art. cit., págs. 222-223. También se han referido a este peso determinante del ambiente como síntoma del naturalismo de esta novela algunos estudios recientes; así LÓPEZ JIMÉNEZ: 1977, pág. 28: «la protagonista es arrastrada "por las circunstancias y las inclinaciones" debido a su falta de carácter, clara influencia del determinismo naturalista, que el autor, en su postura ideológica anti-Zola, no da como absolutamente fatal». Vid. también en el estudio de BONET: 1974, el cap. XVIII de la parte IV, en el apartado titulado «La Montálvez: el fatalismo como apariencia naturalista» (págs. 1.045-1.068). MIRALLES, en el estudio preliminar de su edición de Sotileza (1977, pág. 37) escribe de La Montálvez que «es la más naturalista de las novelas peredianas [...] Al determinismo ambiental hay que añadir unas razones temperamentales, pues el mismo orgullo de Verónica contribuye a su depravación».

 

1017

Y añade este comentario: «¿Qué importa esto a los lectores del día, curados de espanto merced a lo que han estragado su gusto los Zola y los Galdós?»; art. cit. (19 de marzo).

 

1018

«El pesimismo considerado como cualidad distintiva del naturalismo frente al realismo ha constituido, por cierto, uno de los lugares comunes que más han abundado [...] en la propia crítica de la Restauración», escribe BONET: 1974 , pág. 210.

 

1019

Art. cit., pág. 1.761.

 

1020

Art. cit., pág. 353.