Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
 

1421

El 16 de febrero de 1893 escribe a Oller: «ni tentaciones he tenido siquiera de volver al trabajo que suspendí en Dic.e» (BENSOUSSAN, pág. 251). El 17 de abril le anuncia: «me acometen las tentaciones de trabajar un poco en la interrumpida y casi olvidada novela; y entre intentarlo y trabajar, invierto las escasas energías intelectuales que me van quedando para el oficio» (pág. 253). En carta a Menéndez Pelayo fechada el 29 de marzo decía: «Desde que te marchaste [es de suponer que al fin de las vacaciones navideñas] no he vuelto a poner mano en la novela; de modo que continúa como tú la dejaste [...] Veremos lo que sale este verano, si Dios me da salud, y no pierdo los buenos ánimos que tengo de continuar la interrumpida labor» (epistolario citado en la nota 10, pág. 339). En carta a Yxart, que su editor fecha el 23 de noviembre de 1893, pero que indudablemente es de marzo de ese año (cfr. en el capítulo anterior, la nota 11), escribe Pereda: «Mi novela continúa donde la dejé en Diciembre; no sé trabajar aquí, hecho al silencio y tranquilidad de mis talleres de Polanco»; carta en TORRES: 1980, pág. 314. Al novelista ecuatoriano J. León Mera escribe en abril: «Si Dios me da salud y me conserva en los propósitos que tengo hoy, tan pronto como me traslade a mi residencia de verano intentaré concluir una novela que comencé y suspendí el otoño último» (carta publicada por COSSÍO: 1957, págs. 163-164). El 12 de ese mismo mes de abril escribe a Pérez Galdós: «De salud, tal cual y de cuartillas... peor»; en ORTEGA: 1964, pág. 158.

 

1422

OLLER: 1962, págs. 173-227; Vid. en especial la nota 17, en la pág. 218, en la que refiere cómo don Ángel de los Ríos -que será modelo de uno de los personajes del relato- asesoraba a Pereda en algunos pormenores geográficos y paisajísticos: «...de manera que volent En Pereda consultar-li aquella tarda certs dubtes sobre el paisatge, que no havia tornat a veure des de sa adolescència, inclòs en el territori o comarca del señor de Proaño, i que volia descriure en la novel·la Peñas arriba, que llavors tenia començada, hagué d'escriure una pila. Posava ell la pregunta,i l'altre s'anava esplaiant en la resposta de viva veu, que ell novel-lista escoltava amb el més viu interès, resumint-la a voltes en el paper només amb un nom o amb un adjectiu, evocador de tot el secret munt d'idees que sobre aquell punt servava ja ell formades en son cervell i que sortirent més tard ratificades o rectificades amb sabor tan extraordinari d'impressió recent i directa. Fou, per mi, aquella, una escena interessantíssima, que sempre he recordat amb especial plaer».

 

1423

Cfr. MONTESINOS, op. cit., pág. 240.

 

1424

En efecto, Duque elogia en su artículo la fidelidad geográfica de aquel episodio. Por eso en los Apuntes para la biografía de Pereda (1906, pág. 27) se escribía: «Obtuvo las primicias de Peñas arriba el muy discreto y notable escritor campurriano don Demetrio Duque y Merino, que, según él mismo contó, ninguna "rectificación" tuvo que oponer al paso de Marcelo [...] desde Reinosa a Tablanca».

 

1425

«Oller, que describe y pinta con mucha gracia y gran acierto su tierra, escuchó aquello encantado. -Yo no conozco esos sitios, pero eso huele a montaña, sabe a montaña, está impregnado de montaña, desde la primera palabra hasta la última, decía»; D. Duque y Merino, «Diario. Tarde ganada», en El Atlántico, 1-VII-1893.

 

1426

En su artículo Duque daba la noticia de que la redacción de la novela estaba interrumpida: «Don José empezó a trabajar en ella hace tiempo; pero, contra su voluntad y a despecho de sus deseos, ha tenido que interrumpir su trabajo más de una vez e interrumpido se halla también ahora. ¿Hasta cuándo?». La respuesta a esa pregunta se halla en la correspondencia de Pereda a Oller: en carta del 21 de julio informa: «Desde el mismo día de la marcha de VV., no sé lo que pasa en el mundo ni me trato con nadie si no es con la familia y los tercos personajes de mi novela, puesta al telar desde entonces»; en BENSOUSSAN, op. cit., págs. 258-259.

 

1427

Vid. referencia n.º 12.474 de Veinticuatro diarios, 1972, pág. 498.

 

1428

Referencia n.º 12.476 del libro cit. en la nota anterior, pág. 498. La noticia se publicó en La Época el 12-VIII-1893.

 

1429

Así, alude al viaje una carta de Pereda a Domingo Cuevas del 19-VIII-1893, parcialmente publicada en el artículo de HUIDOBRO: 1933, págs. 16 y ss.; también se refiere esa excursión en carta a Oller del 1 de septiembre, en BENSOUSSAN, págs. 260-263. MONTESINOS, op. cit., págs. 240-241, recoge y comenta esas noticias.

 

1430

En su reseña de la novela en La Unión Vascongada, de San Sebastián, el 18-II-1895, Ortiz de la Torre señala que le cupo el honor «de acompañar al maestro en su excursión artística, en aquel viaje rápido en que con zarpada de león se apoderó de cuantos elementos de arte palpitan y viven en el paisaje».