11
Estos y otros detalles constan en Montoto.
12
Rafael de Balbín (Sobre la llegada de Gustavo Adolfo Bécquer a Madrid, pp. 301-308, t. V, 1954 de «Revista de Literatura», Madrid) puntualiza la fecha sirviéndose del libro de Nombela, Impresiones y recuerdos, y de la prensa madrileña.
13
Carpintero, cap. VII, da cumplida y veraz noticia de cada uno de ellos, al paso que recoge y rechaza equivocadas y contradictorias referencias de algunos biógrafos de Bécquer, su propia sobrina incluida.
14
Carpintero, p. 141.
15
Memorias, p. 81.
16
Es Carpintero el primer biógrafo de Bécquer que se ocupa con fundamento de «El segundo matrimonio de Casta» y de la «Segunda viudedad de Casta»: pp. 106-111.
17
Tal se infiere de testimonios debidos a personas de la intimidad de Gustavo Adolfo, como Eusebio Blasco, Nombela o Campillo. Esta imagen de mujer vulgar que no podía entender a quien la superaba en espíritu ha tenido fortuna y corrió abundantemente por libros y artículos. La reivindicación de Casta la inició en 1923 Fernando Iglesias Figueroa (prólogo al volumen III de las Páginas desconocidas de Gustavo Adolfo Bécquer), quien, después de haberse dedicado a una paciente búsqueda inquisitiva, concluye afirmando (p. 11) «Hoy,..., veo cuán injustos fueron todos con aquella infortunadísima mujer, dotada de una sorprendente inteligencia y digna por todos conceptos de ser la compañera de Bécquer».
Juan López Núñez, que en su Bécquer, biografía anecdótica (Madrid, 1915) daba por buenos los reproches formulados contra Casta (cap. XIX, «El casamiento de Bécquer»), rectifica en 1929 («La mujer de Bécquer»: pp. 193-196 de Románticos y bohemios) llamándola «señora de gran cultura y extraordinaria inteligencia, como lo demostró en ocasión oportuna escribiendo un libro,....».
José Félix Navarro Martín recoge en la nota Contradicción en torno a la esposa de Gustavo Adolfo Bécquer («Archivo Hispalense», Sevilla, XXIV, 1956, pp. 73-83) algunos testimonios sobre Casta Esteban, a veces discordantes entre sí.
18
Carpintero, pp. 126-127. Semejante revelación constituye a mi ver el mérito más sobresaliente de su libro.
19
Casta y Gustavo. Cartas inéditas (artículo en «La Nación», Buenos Aires, un n.º de junio de 1942).
20
Conjetura esto Rafael de Balbín Lucas, Documentos becquerianos (pp. 5-33, t. V, 1944, de «Revista de Bibliografía Nacional», Madrid), que en la p. 7 apoya así esa sospecha: «Dos referencias lo denotan: la primera, la relativa al periódico que debía aparecer en el próximo comienzo de año [el periódico no comenzará hasta primero de año] y prometía al poeta cierta holgura económica; esta publicación es La Ilustración de Madrid, aparecida el 1 de enero de 1870, con Gustavo Adolfo como Director. Un segundo dato refuerza la probabilidad de la fecha atribuida a la carta. Gustavo preparaba, ya próximo el invierno, un cambio de residencia, según él lo dice: Si puedo hacia el mes que viene arreglo las cosas para venirme a Madrid de hecho; este propósito se realizó en los últimos meses del año 1869». Balbín Lucas ofrece en p. 24, como documento III, el texto de dicha carta. (En adelante citaré Documentos).