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21

Cf., por ejemplo, las afirmaciones que, aunque desde otro punto de vista, hace Luis Alberto Sánchez en Balance y liquidación del novecientos (3ª edición corregida, Lima: Universidad Nacional Mayor de San Marcos, 1968; p. 35 y ss.).

 

22

Algunos ejemplos pueden verse en personajes como Ángel Heredia, en Casa Grande (1908) de Orrego Luco; Ramiro en La gloria de Don Ramiro (1908) de Larreta; Alberto Soria en Ídolos rotos (1901) de Manuel Díaz Rodríguez.

 

23

Ricardo Gullón: «Indigenismo y Modernismo», en VVAA: Literatura iberoamericana. Influjos locales (Memoria del X Congreso del Instituto Internacional de Literatura Iberoamericana). México: UNAM, 1965; cit. p. 99.

 

24

Conviene establecer que esta noción de «naturaleza» y de «lo natural» en el contexto cultural que aludimos no apunta tanto a la naturaleza física y al paisaje, sino más bien a la idea de «lo natural» como opuesto a «lo artificial». Puede verse al respecto Carl Woodring: «Nature and Art in Nineteenth Century». PMLA, XCII, 2 (marzo 1977): 193-202.

 

25

Breve Historia del Modernismo. México: Fondo de Cultura Económica, 1954; p. 31. A esta etapa es la que Arturo Torres Rioseco denomina -aplicando el término usado por Francisco Contreras- «Mundonovismo» (Torres Rioseco, 135 y ss).

 

26

Ver Ángel Rama: Rubén Darío y el Modernismo. Caracas: Universidad Central de Venezuela, 1970; esp. p. 111 y ss.

 

27

Véase al respecto Arnold Hauser: Teorías del arte [Philosophie der Kunstgeschichte]. Madrid: Guadarrama, 1975; esp. Cap. III. Sobre la relación del Modernismo con el Romanticismo, ver Max Henríquez Ureña, op. cit., Cap. I.; también Mario Rodríguez Fernández: El Modernismo en Chile y en Hispanoamérica. Santiago: Instituto de Literatura Chilena, 1967, que aplica las tesis de Mario Praz sobre el Romanticismo a la poética modernista.

 

28

Bien advierte Rafael Gutiérrez Girardot que esta tradicional perspectiva «ha acuñado un concepto de 'modernismo' estrecho que no puede captar la complejidad del fenómeno, y que, además, ha impedido que se investiguen diversos aspectos del contexto histórico-social y cultural al que pertenece no solamente el contradictorio 'modernismo' hispano, sino el igualmente contradictorio 'modernismo' europeo» («Problemas de una historia social del modernismo», Escritura, Caracas, VI, 11, enero-junio de 1981; p. 107). Una muestra de esta complejidad puede verse tratada en el trabajo de Noel Salomón «América Latina y el cosmopolitismo en algunos cuentos de Azul» (Mátyás Horányi, ed.: Actas del Simposio Internacional de Estudios Hispánicos. Budapest: Akadémiai Kiadó, 1978; p. 13-37).

 

29

En el cual ni la misma obra de Darío cabría plenamente, ya que si aplicáramos estrictamente los cánones tradicionales sólo una parte de su producción sería, en este sentido, propiamente «rubendariana».

 

30

Luis Monguió: La poesía postmodernista peruana. México: Fondo de Cultura Económica, 1954; p. 29.