21
Hugo Neira. «Scorza aquí y allá...». Art. cit., 103.
22
Héctor Tizón. «Conversación con Manuel Scorza». Nueva Estafeta, núm. 19 (junio de 1980), 64.
23
Manuel Scorza. «Fe de erratas». El País (4 de diciembre de 1983).
24
Hugo Neira. «Manuel Scorza: biografía ordenada de un mago». Socialismo y Participación, núm. 31, septiembre de 1985, 58 (Publicado originariamente en Le Monde Diplomatique, enero de 1984).
25
Robert Marett. Perú. Buenos Aires: Francisco de Aguirre, 1977, 209. Edición original: Londres: Ernest Benn Ltd., 1969.
El narrador
Guillermo Thorndike también da noticia de estos hechos en la
ficción de su novela El caso Banchero: «El tres de octubre de 1948 una
revolución aprista con apoyo de la Armada fracasó en
el Callao. Veinticuatro días después, el cuartelazo
del general Manuel A. Odría envió al destierro al
Presidente Bustamante. Otra vez se desató la cacería
de apristas. En la Universidad de Trujillo cesaron
[a] Antenor Orrego
[que era el rector] y todos los maestros y empleados afiliados al
APRA»
(El caso Banchero. Buenos Aires / Barcelona: Ediciones
Corregidor / Barral, 1973, 70).
26
Crisis, núm. 12 (abril de 1974), 48.
27
Mabel
Moraña habla, debe tratase de un
lapsus, de Acta de la remota lejanía
(«Función ideológica de la fantasía en
las novelas de Manuel Scorza». Revista de Crítica
Literaria Latinoamericana, 9, núm. 17, agosto de 1983, 171).
También Juan Octavio Prenz da noticia de Acta de la
remota agonía («Nota a Scorza».
Hispamérica, Revista de Literatura, XVII, 1977,
107).
28
In those days [in his
late teens], he finished his first collection of poems
entitled Acta de la remota agonía,
which he apparently made no attempt to
publish.
Anna-Marie Aldaz. The Past of the Future. The
Novelistic Cycle of Manuel Scorza. New York / Bern /
Frankfurt am Main / Paris: Peter Lang, 1990, 17.
29
Albert Bensoussan. «El camino del escritor...». Art. cit., 49.
Cecilia Hare
-segunda esposa de Manuel Scorza-, en carta personal dirigida a
Anna-Marie Aldaz (fechada el 5 de febrero de 1987), dice que no
tiene noticia de que visitara Brasil por entonces y que nunca le
oyó hablar del oficio de vendedor de perfumes (Cecilia Hare comments that, as far as
she knows, Scorza did not visit Brazil at this time; also though he
had many odd jobs, she never heard him mention that of a perfume
vendor
. Anna-Marie Aldaz. Op.
cit., 32, n. 11).
30
From 1952 to 1956,
Scorza settled in México, where he continued his literary
estudies at the UNAM
(Ibidem,
18).