Actas de la Junta General desde el año 1704.
Archivo de la Junta General.
Ibidem.
Archivo de la Junta.
Ibidem. Sesión del 30 de Agosto de 1706.
Efectivamente el Principado representó en varias ocasiones contra los abusos y arbitrariedades que suponía en la administración dura y violenta de este Magistrado. Entre las exposiciones que sobre el particular se dirigieron a S. M. es muy notable la que a nombre de la Diputación suscribieron el año de 1718 el Brigadier Vizconde del Puerto, y D. José Valdés. Con aquel atrevimiento que solo puede ser hijo de la convicción, y con el tono resuelto y decisivo del que no teme ser desmentido y se apoya en la verdad y la justicia, acusaban al Sr. Cepeda, de haber infringido las leyes; de promover la discordia entre los naturales del país; de perseguir y calumniar su nobleza, de atacar la propiedad particular, de abrogarse la jurisdicción ordinaria, de proceder arbitrariamente en sus fallos, de abrir de nuevo juicios ya fenecidos, de no cobrar como debiera los derechos Reales en el Puerto de Vega, y en fin de otros atentados que habían ocasionado al país considerables males. Al exponerlos a S. M. los apoderados del Principado no sólo pretendían una justa reparación, sino que le suplicaban se sirviese nombrar otro Regente para la Audiencia de Asturias en vez de D. Antonio Cepeda, y dotarla con los fondos de la Real Hacienda. En el archivo de la casa del Sr. D. Pedro Salas Omaña, existe una copia de este memorial y de otros que se hicieron con el mismo objeto.
Vejados los Asturianos por los excesos que cometían los antiguos Corregidores de capa y espada, solicitaron de Felipe III en 1618 que el gobierno del Principado se concediese a un Ministro togado. Para cerciorarse el Monarca del fundamento de esta demanda ordenó que pasase al país D. Antonio Chumacero; y a consecuencia de los informes de este Magistrado, y de las consultas de la Junta general convino Felipe IV se crease una plaza supernumeraria en la Chancillería de Valladolid destinada privativamente para el gobierno político del Principado y dotada a sus expensas. Desde entonces fueron togados los gobernadores de Asturias y en el año de 1708 conservaban todavía su silla en aquel consejo de justicia, sin que otro la ocupase durante el tiempo de su. administración a diferencia de las que correspondían a los Corregidores de S. Sebastián y Bilbao. Felipe V creyó después oportuno poner un militar al frente de la Provincia y nombró efectivamente para este destino al Mariscal de Campo D. Gonzalo Cegri; pero oídas las razones de la Diputación que represento contra semejante novedad como contraria a sus fueros y ordenanzas desistió de su propósito, conservándose el antiguo gobierno hasta la erección de la Audiencia en 1717. -Así consta de la representación dirigida a S. M. en 26 de julio de 1708 por D. Clemente Vigil Hevia, como procurador del Principado cuyo documento existe en el archivo de la casa de Omaña.
Memorias en defensa de la Junta central: T. De apéndices, núm. 10.
Real orden para la convocatoria de la Junta General expedida el 23 de agosto de 1833.
Ordenanzas que dio al Principado su Gobernador D. Lorenzo Santos de S. Pedro, el año de 1659: Artículo 3.º