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ArribaAbajoOrden de los Hemípteros

Los hemípteros se aproximan a los coleópteros por sus alas superiores, las cuales en la mayor parte de aquellos son de consistencia coriácea en la mitad de su extensión (de ahí nace el nombre de la orden); pero la disposición particular de las partes de la boca los ha hecho colocar entre los insectos chupadores. Distíngueseles por una especie de pico tubular, cilíndrico y articulado, de que su boca se halla provista. Este pico se compone de una vaina casi cilíndrica, formada por tres o cuatro artículos puestos en fila, que encierran cuatro hilitos muy delgados, recios y dentellados en su ápice, y propios para taladrar la piel de los animales o los vasos de las plantas. Esta vaina representa el labio inferior, y en su base se ve una pieza cónica y prolongada, que es análoga al labro. Los hilitos del par anterior ocupan el lugar de mandíbulas, y los del segundo par pueden mirarse como maxilas muy prolongadas. Los hemípteros que viven a expensas de los animales tienen un pico robusto y ganchoso; al paso que los que se alimentan del jugo de las plantas lo tienen muy delgado y arrimado entre las patas y al tórax. Sus metamorfosis son incompletas. Al paso que el insecto va creciendo, no por ello cambia de hábitos ni de formas, solamente adquiere alas, de que antes estuvo privado.

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Partes del pico de una chinche.17

Los hemípteros se han dividido en dos secciones: Heterópteros, cuyas alas son coriáceas hacia su raíz y membranosas en su remate, y cuyo pico nace de la frente; y Hemópteros, cuyas primeras alas, o élitros, tienen igual consistencia en toda su extensión, y cuyo pico nace de la parte inferior de la cabeza. La sección de los Heterópteros comprende dos familias: los Geocorisos y los Hidrocorisos; estos son chinches acuáticas, y aquellos terrestres.


ArribaAbajoFamilia de los Geocorisos

Tienen las antenas descubiertas, más largas que la cabeza e insertas entre los ojos, junto a su borde interno. Los tarsos constan de tres artículos, de los cuales el primero a veces es muy corto. Van comprendidos en el gran género Cimex de Linneo; el cual se ha dividido y subdividido en una infinidad de subgéneros; aunque para distinguir la familia basta con conocer los caracteres más interesantes o sobresalientes.

Las Scutelleras tienen la vaina de su chupador compuesta de cuatro artículos distintos y descubiertos; el labro prolongado más allá de la cabeza en forma de lesna, y superiormente estriado; los tarsos se componen de tres artículos, de los cuales el primero es igual al segundo, o más largo que este; las antenas son filiformes y constan de cinco artículos; el escudete cubre todo el abdomen. Viven en las plantas, cuyas hojas chupan, y también atacan a los insectos, y en especial a las orugas.

La SCUTELLERA DE SIAM (Cimex lineatus, LIN.). Es una especie de las más hermosas y extrañas de la familia. Tiene 4 líneas de largo y 3 líneas de ancho, su cabeza, coselete y escudete se ven listados longitudinalmente por rayas alternas, negras y coloradas; el coselete es ancho y algo convexo o giboso; los élitros colorados con su porción membranosa parda; la cara inferior del insecto es colorada, con puntitos negros, y los bordes del vientre adornados de manchitas negras y coloradas alternativamente; las antenas son negras, como las patas, aunque en estas se ve algo de colorado, especialmente en las piernas.

Los Pentatomos no difieren de las scuterellas sino por el escudete, el cual solo cubre una parte del abdomen, y los élitros están enteramente descubiertos.

El PENTATOMO DE LAS CRUCÍFERAS (Cimex ornatus, LIN.). Es esta una linda especie de 4 líneas y media de longitud, de forma ovoidea, redondeada, colorada, con un gran número de manchas; y la cabeza y alas negras. Vive en la col y demás crucíferas.

El PENTATOMO GRIS (Cimex griseas, LIN.). Es gris-amarillento oscuro, con puntos negruzcos; el extremo del escudete es de color más claro, con una mancha oscura en cada lado. La membrana de los élitros es blanca con puntos negruzcos; la superficie inferior del cuerpo amarillenta; el abdomen tiene una punta hacia delante, y los costados se ven entreverados de negro y de amarillento. Esta especie es una de las más abundantes y fétidas del género. Suministró a de Geer una observación muy curiosa. Este naturalista observó varias hembras acompañadas de sus hijuelos en número de unos cuarenta. Seguían estos todos los movimientos de las madres, las cuales no los abandonaban, y parecía que los protegían. De Geer vio una de dichas hembras que batía las alas en el instante en que él se le aproximaba como para defender a su familia. El macho es el enemigo que más teme la madre, pues trata de destruir a los hijos desde el instante de su nacimiento. Cuando estos han adquirido suficientes fuerzas para defenderse por sí mismos, la madre los abandona.

El PENTATOMO DE LOS SETOS (Conex baccarum, FABR.). Está cubierto de vello, y es superiormente rojizo; el extremo del escudete es amarillento; los bordes del abdomen están adornados de manchas negruzcas la cara inferior del cuerpo es de un amarillo claro; las antenas son anilladas de negro y de blanco. Esta especie, lo mismo que la precedente mancha las fresas, frambuesas, y frutos del espino, comunicándoles un olor infecto.

Los Coreos, no se diferencian de los Pentatomos sino por sus antenas, compuestas de cuatro artículos, el último de los cuales es ovoideo, o ahusado; y el cuerpo oval.

El COREO BORDADO (Coreus marginatus, LIN.). Tiene 6 pulgadas de largo, de color de canela: los costados posteriores del coselete son abultados y redondeados; el abdomen es ancho, con la parte media de la cara inferior colorada. Esta especie habita en las plantas, y difunde un olor de manzanas. -Las chinches propiamente dichas no tienen más que tres artículos distintos en el chupador; su cuerpo es blando y muy complanado; sus antenas terminan de repente en forma de cerdas.

La CHINCHE DE LAS CAMAS (Cimex lectularius, LIN.). Es de color pardo-oscuro y sin alas, carácter enteramente excepcional; estos órganos en efecto le hubieran sido inútiles, puesto que se alimenta de sangre humana. Supónese que en Inglaterra no existía antes del incendio de Londres en 1666, y que fue allí importada en unos leños de América; pero fue conocida en Europa muchos siglos antes, supuesto que trata de ella Dioscórides. No hablaremos de los medios que se han propuesto para destruir tan asqueroso insecto: el mejor de todos es la limpieza. Varias veces hemos visto emplear con buen éxito el siguiente: colócase en un rincón de la cama un arenque seco: su olor desagradable, lo es mucho más para las chinches, las cuales desaparecen.

Los Reduvios tienen el cuerpo prolongado; la cabeza sostenida por una especie de cuello; el pico corto y encorvado, y los élitros tan largos lo menos como el abdomen.

El REDUVIO ENMASCARADO (Cimex personatus, LIN.). Llámala Geoffroy chinche-mosca. Tiene 8 líneas de longitud; es de color pardo-negruzco y sin manchas. Vive en el interior de las casas, donde se alimenta de moscas y otros insectos, a los que se aproxima cautelosamente, y luego se precipita sobre los mismos: sus picaduras los matan al instante.

Los Ployeros tienen el cuerpo linear; los pies largos y delgados; los dos anteriores tienen las caderas prolongadas y aptas para coger una presa, como en las mantas.

La PLOYERA VAGABUNDA (Gerris vagabundus, FABR.). Tiene de 2 a 3 líneas de largo; el color pardo y entrecortado de blanco: encuéntrase en los árboles y en las casas; vacila y se columpia de continuo como una típula.

Los Hidrómetros tienen los cuatro pies traseros muy largos delgados y separados entre sí desde su nacimiento; los garfios de los tarsos muy pequeños, y situados en una cisura del extremo lateral del tarso; los pies le sirven para andar y para remar en el agua; su cuerpo es delgado y linear; sus ojos gruesos, y prominentes o globulosos y están situados a los lados del hocico.

El HIDRÓMETRO DE LOS LAGOS (Hydrometra lacustris, FABR.). Es de color negro-parduzco-verdoso superiormente; las patas pardas, y el mamelón del abdomen saliente. Este insecto es muy común en Europa, y muchas veces lo vemos en la superficie de las aguas tranquilas. Van a bandadas, y se sirven de las patas traseras como de reinos, de modo que adelantan su camino a sacudidas. Si queremos examinar más de espacio alguno de estos insectos, no tenemos que hacer más sino echarle una mosca terrestre, y al punto acudirán los hidrómetros a devorarla.




ArribaAbajoFamilia de los Hidrocorisos

Los hidrocorisos tienen las antenas insertas y ocultas debajo de los ojos, más cortas que la cabeza, o a lo más de la longitud de esta. Estos hemípteros son acuáticos, y se sustentan de insectos, que cogen con sus patas anteriores como con otras pinzas. Sus picaduras son muy fuertes, y los tarsos constan solo de dos artículos. Componen los dos grandes géneros Nepa y Notonecta, de Linneo.

Las Nepas, o Escorpiones acuáticos, tienen las patas del primer par en forma de tenazas, compuestas de un muslo muy grueso, o muy largo, teniendo debajo un canal que recibe el borde inferior de la pierna, y un tarso muy corto, que junto con la pierna forma un grande garfio.

La NEPA CENICIENTA (Nepa cinerea, LIN.). Tiene el cuerpo casi elíptico; su abdomen termina en dos crines, que le sirven para la respiración en los lugares acuáticos y fangosos, en cuyo fondo se mantiene. Los huevos son semejantes a una semilla, de figura ovoidea y tienen en un extremo un pincelito de pelos. La longitud de este insecto es de 8 líneas; su color gris, con la cara superior y el abdomen colorado, y la cola algo más corta que el cuerpo.

La NEPA LINEAR (Nepa linearis, LIN.). Es el tipo del subgénero Ranatro, que contiene las especies tropicales de mayor tamaño; tiene el cuerpo linear y el pico dirigido hacia delante. Su longitud es de 1 pulgada, el color ceniciento claro y algo amarillento, con la cola de igual longitud a la del cuerpo: los pelos que coronan los huevos compónense únicamente de dos cerdas.

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La Nepa linear.

Las Notonectas tienen únicamente las dos patas anteriores encorvadas hacia abajo, y las del tercer par con pelos en forma de remos. Nadan con suma velocidad y la mayor parte vueltas de espaldas al agua. (De ahí les vino el nombre de Notonectas). En todos sus estados son acuáticas y carnívoras. Devoran las larvas de las Efímeras; y a veces atacan a otros insectos de mucho mayor cuerpo, y aun a su misma especie.

La NOTONECTA VERDE (Notonecta glauca, LIN.). Tiene la cara inferior de un verde-negruzco; la parte anterior de la cabeza de un verde-claro; la parte superior de esta misma y porción delantera del coselete blanquizcas; la mitad trasera de este, oscura, y el escudete negro; los élitros amarillo-grisáceos y algo parduzcos, con los costados algo parduzcos. Habita este insecto en las aguas tranquilas, donde lo vemos nadar con sus patas traseras. Es sumamente ágil, y cuando se le quiere coger se hunde en el agua, y vuelve a poco a reaparecer en la superficie. Es menester ir con precaución al cogerlo entre los dedos, pues su picadura es muy fuerte, y la causa clavando la punta de la trompa.

La sección de los Hemípteros se compone de insectos que se alimentan de los jugos vegetales; tienen las alas superiores ya coriáceas, ya membranosas, y semejantes a las inferiores; por último las hembras en general están provistas de un taladro, con el cual practican incisiones en los vegetales a fin de alojar en ellas los huevos. Esta sección consta de tres familias: las Cicadarias, las Afidias y las Gallinsectas.




ArribaAbajoFamilia de las Cicadarias

Los hemípteros de esta familia tienen los tarsos compuestos de tres artículos; las antenas muy pequeñas y cónicas, o en figura de lesna. Compónese de los tres géneros siguientes: Cigarra, Fulgura y Cicadella. Las Cigarras tienen las antenas compuestas de seis artículos, y tres ojos lisos; sus élitros son transparentes y ramificados muchos llevan a cada lado de la base del abdomen un órgano particular, por cuyo medio producen un canto monótono y ruidoso, que continuamente oye el viajero en los campos meridionales de Europa. Débese a Reaumur la descripción del ruidoso instrumento de que se vale este rústico bardo para llamar a su compañera. Desde luego se descubren debajo del vientre dos placas o láminas escamosas, que son una expansión del tercer segmento del coselete; cada lámina cubre como un postigo una cavidad, la cual contiene las diferentes piezas del instrumento. Ambas cavidades están separadas por un tabique escamoso y triangular, perteneciente al primer segmento abdominal. Detrás de dicho tabique y formando el fondo de la cavidad hay una lámina tendida, delgada y transparente, que llaman espejo. Delante de la misma cavidad se ve otra membrana blanca y arrugada; y hacia fuera, es decir, en frente del tabique escamoso, existe otra membrana arrugala que completa la cavidad. Esta última membrana, llamada tímbalo, es seca, elástica y convexa hacia fuera y se mueve por la acción de un músculo muy robusto, cuyas fibras nacen del tabique escamoso. Cuando estas se contraen, obran sobre el tímbalo haciéndole experimentar cierta depresión; y cuando se relajan, la membrana retiembla y recobra su convexidad en fuerza de su propiedad elástica y de los surcos córneos que la refuerzan. Estas contracciones y relajaciones alterna y rápidamente repetidas por un movimiento de trepidación del gran músculo, es lo que produce las vibraciones sonoras que se han llamado canto de las cigarras. Estos animales se mantienen en los árboles chupando su savia. La hembra está provista de un taladro que se compone de tres piezas escamosas, y con él taladra las ramitas de leño muertas, hasta la médula, para deponer allí los huevos. Las tiernas larvas pronto abandonan este abrigo y se hunden en la tierra, donde toman la forma de ninfas.

La CIGARRA PLEBEYA (Cicada plebeja, LIN.). Es la más común y más gruesa de las especies de Francia. Es negra con manchas amarillas y rojizas. La X del escudete es de este último color. La cara superior del abdomen es casi sin manchas; los élitros en su mitad inferior presentan nervosidades testáceas, y en la otra mitad negruzcas; tiene dos rasgos oblicuos, negruzcos junto a los costados y hacia su extremidad.

La CIGARRA SANGRIENTA (Cicada haematodes, OLIV.). Es negra, con la parte anterior del coselete y las patas sin manchas; las nervosidades de los élitros coloradas, así como los bordes de los anillos abdominales. Esta especie habita al mediodía de Francia.

La CIGARRA FLAUTISTA (Cicada tibicen, LIN.). Encuéntrase en Suriname en los plantíos de café; sus élitros tienen estrías herrumbrosas, y el ápice del escudete escotado.

La CIGARRA DEL FRESNO (Cicada Orni, LIN.). Tiene cosa de 1 pulgada de longitud; el color amarillento claro superiormente, con mezcla de este color y de negro en la cara superior, y los bordes de los artículos abdominales rojizos: en los élitros se ven dos hileras de puntos negruzcos, de los cuales los más pequeños están más inmediatos a su borde interno. Habita al mediodía de Francia y de Italia y en España igualmente. Vive en el fresno, y punzando en este árbol, hace destilar un jugo melifluo y purgante, a que se da el nombre de maná.

Las Fulgoras son cicadarias mudas, que solo tienen tres artículos distintos en las antenas; dos ojuelos lisos, y las antenas insertas inmediatamente debajo de los ojos. Estos insectos en la mayor parte son de gran tamaño, y están adornados de vistosos colores. La cabeza es notable por los apéndices que la sobrecargan, los cuales ya imitan la figura de sierra, ya la de una trompa de elefante, ya la geta de ciertos mamíferos herbívoros. Esta protuberancia difunde en algunas especies una luz muy viva. Las Fulgoras vuelan muy bien, y habitualmente se mantienen en la cima de los grandes árboles.

La FULGORA EUROPEA (Fulgora europea, LIN.). Es verde; la frente prominente en forma cónica, con tres líneas en relieve así en la parte superior, como en la inferior; los élitros y las alas son diáfanas, con nervosidades verdes; y en el coselete se ven tres líneas prominentes. Esta especie habita al mediodía de Francia, en Sicilia e Italia.

La FULGORA CANDELARIA (Fulgora candelaria, LIN.). Tiene la frente prolongada en términos que se asemeja a un largo hocico vuelto hacia arriba, y cilíndrico; los élitros son verdes, con manchas amarillas; las alas son también amarillas con los extremos negros. Esta especie es común en la China.

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Fulgora candelaria.

La FULGORA LINTERNARIA (Fulgora lanternaria, LIN.). Pertenece a la América. Tiene el hocico recto, abultado y redondeado en su extremo; los élitros abigarrados, con un grande ojo en las alas interiores. Esta especie, seguir refiere la Señora de Merian, tiene la propiedad de difundir durante la noche una luz muy intensa, con que pueden leerse los caracteres más diminutos.

Las Cicadellas, lo mismo que las fulgoras, son mudas, y también solo constan sus antenas de tres artículos distintos, y dos ojuelos lisos, pero las antenas se hallan insertas entre los ojos. Entre los subgéneros que carecen de escudete propiamente dicho, cuéntanse los Tragopes, los Darnis, y los Bocidios, etc. Entre las que tienen un escudete más o menos descubierto hay los Centrotos tales como el DIABLILLO (Cicada cornuta, LIN.). Tiene este 4 líneas de largo, y un cuerno a cada lado del coselete, prolongándose este último posteriormente en punta de la misma longitud que el abdomen. Encuéntrase en los bosques, en los helechos, retamas, etc.




ArribaAbajoFamilia de los Afidios

Distínguese esta familia de la antecedente por sus tarsos, los cuales solo tienen dos artículos, y las antenas filiformes o setáceas más largas que la cabeza, y compuestas de seis a once artículos. Los individuos alados tienen todos dos élitros y dos alas. Son unos insectos muy pequeños cuyo cuerpo regularmente es blando, y pululan prodigiosamente. El género Pulgón, que constituye casi él solo esta familia está caracterizado por antenas de seis a ocho artículos, por estuches y alas ovales o triangulares, formando un plano inclinado, y un pico muy distinto. Los pulgones de que hemos hablado ya al tratar de las hormigas y de los hemerobios, tienen las antenas más largas que el coselete el cuerpo oval, y a menudo cubierto de una sustancia farinácea; las patas largas y delgadas, y el abdomen provisto en su extremo de dos cuernecitos o mamelones dirigidos oblicuamente de abajo arriba, de los cuales destila un líquido transparente y meloso. Viven regularmente reunidos en número infinito en diferentes plantas, las cuales chupan con sus trompas, y las picaduras que hacen en las hojas determinan a veces grandes deformaciones y varias excrecencias: muchos de estos insectos permanecen faltos de alas. En la primavera cada reunión se compone únicamente de hembras ápteras, o con simples rudimentos de alas; producen hijos, que nacen vivos y también son hembras; y de esta suerte se suceden varias generaciones femeninas hasta el otoño, en cuya época tan solamente nacen los machos: desde entonces el pulgón deja de ser vivíparo y pasa a ser ovíparo y a efectuar su puesta. A los primeros fríos perecen todos, pero los huevos que dejaron pegados a las ramas se abren en la primavera y producen hembras vivíparas que pululan con suma rapidez. Cada hembra produce cien pulgones, y cada uno de estos produce otros ciento, y así de los demás: calcúlese pues lo que debe resultar de once generaciones sucesivas y se verá que la posteridad de un solo pulgón se compone de más de mil insectos. Entre las numerosas especies del género citaremos los siguientes.

El PULGÓN DEL ROSAL (Aphis rosae, LIN.). Es verde con un vello blanco algodonoso.

El PULGÓN DE LA ENCINA (Aphis quercus, LIN.). Es pequeño, pardo-rojizo, sin cuernos y con la trompa tres veces más larga que el cuerpo.




ArribaAbajoFamilia de los Gallinsectos

Los Gallinsectos tienen mucha semejanza a los pulgones; pero se reconocen por sus tarsos compuestos de un solo artículo distinto, el cual termina en un solo ganchito. La hembra está provista de un pico apto para chupar. Comprenden el género Cochinilla de Linneo.

Las Cochinillas en estado de larva son primeramente muy ágiles, y corren por las plantas en que están domiciliadas; pero son tan diminutas que solo con una lente puede distinguírselas. El macho cuando se dispone a subir sus metamorfosis se adhiere a las ramas, y en el interior de su piel endurecida llega la ninfa al estado de insecto perfecto; saliendo de ella caminando hacia atrás después que la ha rasgado. Sírvese poquísimo de sus alas y goza breves días de vida. Una vez la hembra ha adquirido su mayor desarrollo constrúyese un nido de plumón, engánchase en el vegetal con el pico haciéndolo penetrar en el tejido de las hojas; no tarda en abultársele el abdomen, y salen del mismo huevos, los cuales la madre los hace pasar entre su vientre y el vello o plumón del nido; muriendo después y dejando su cadáver por domicilio de sus hijos. Estos insectos perjudican a los árboles produciendo en ellos con las picaduras una transpiración sobrado abundante, por lo mismo los cultivadores de albérchigos, naranjos, higueras y olivos los destruyen porfiadamente. Sin embargo hay algunas especies preciosísimas para el hombre, tal es la siguiente.

La COCHINILLA DEL NOPAL (Coccus cacti, LIN.). Vive en los cactus y suministra un tinte bellísimo de escarlata. El macho es pequeñísimo y tiene el cuerpo oblongo, y terminado en dos cerdas; es de color rojo subido; las patas son largas; y las alas grandes y blancas. La hembra es de tamaño mucho mayor pues llega a veces a igualar a un pequeño guisante; tiene las patas muy cortas, y todo el cuerpo de color pardo-oscuro, cubierto de un polvillo blanco. Este precioso insecto, cuya materia colorante produce el más hermoso carmín, es útil a la pintura tanto como al arte de teñir los tejidos. Es originario de América.






ArribaAbajoOrden de los Chupadores

Este orden se compone del solo género Pulgas. Son estos insectos ápteros y están provistos de un chupador formado de tres piezas, contenidas entre dos láminas articuladas, y dispuestas en forma de pico cilíndrico y cónico. Tienen el cuerpo oval, deprimido y cubierto de unos tegumentos bastante recios. Su cabeza es pequeña, y a cada lado se ve un ojo redondo; los anillos del coselete solo se diferencian de los del abdomen por su mayor pequeñez, y por estar en ellos insertas las patas; los pies son aptos para el salto.

La PULGA COMÚN (Pulex irritans, LIN.). Es de color castaño; su pico es más corto que el cuerpo. La hembra pone unos doce huevos, gruesos, blancos y viscosos, que se abren a los cinco días; las larvas que de ellos salen son blancas y muy vivas; arróllanse en espiral, y al cabo de doce días se construyen un capullo de una seda finísima, y en él se convierten en ninfas. Al cabo de otros doce días, salen en estado perfecto, y señalan por medio de saltos los primeros instantes de su nueva vida. Este insecto se alimenta con sangre del hombre, del perro y del gato. La larva vive en la inmundicia; como debajo de las uñas de las personas sucias; en los nidos de aves, y en especial de pichones, cuyo cuello desnudo de plumas chupan con sumo afán.

La PULGA PENETRANTE (Pulex penetrans, LIN.). Conócenla en América bajo los nombres de Chique, Bicho, etc. Su pico es de la longitud del cuerpo. Introdúcese este insecto debajo de las uñas del dedo gordo del pie y debajo del epidermis del talón, donde pronto adquiere el tamaño de un guisante pequeño, a causa del rápido crecimiento de los huevos que lleva en su abdomen. Las numerosas larvas que salen de estos, viviendo debajo de la piel producen úlceras de curación sumamente difícil, y algunas veces son mortales. Para precaver tan fatales efectos, basta con extraer la pulga madre antes que haya efectuado su puesta: cuya operación practican las negras con la mayor destreza por medio de una larga aguja.




ArribaAbajoOrden de los Ripípteros

Las especies poco numerosas que componen este orden, son notables tanto por su particular organización, como por sus hábitos. Tienen dos alas membranosas, grandes, plegadas longitudinalmente, al modo de un abanico (y esto literalmente significa la voz rhipíptero). Nacen estas del tercer anillo torácico; y en el segundo de estos anillos se implantan dos élitros, que cubren la raíz de las grandes alas; y además, el primer anillo presenta dos pequeños apéndices largos y estrechos. La boca está armada de laminitas puntiagudas, semejantes al chupador de los dípteros; los ojos son granujientos y algo pediculados. Las larvas de estos insectos son ovaladas, y están desprovistas de patas. Este orden solo contiene dos géneros: los Stylopes y los Xenos. Los Estílopes tienen la rama superior de la última pieza de las antenas compuesta de tres artículos; el abdomen es carnoso y retráctil. Solo hay una especie de Stylope y es la siguiente:

El ESTÍLOPE DE LAS ANDRENAS. Es su longitud 1 línea y media; el color muy negro, con las alas que sobrepasan del cuerpo, y las patas pardas. Los Xenos tienen dos ramas de las antenas sin articulaciones; el abdomen córneo y retráctil, solo comprenden dos especies que son el Xenos de Pock, que vive en la avispa gálica, y el Xenos de Rossi, que se encuentra en la Vespa fucata, avispa de la América septentrional. Con estos terminamos el orden de los ripípteros.




ArribaAbajoOrden de los Dípteros

Los Dípteros, conforme ya su nombre indica, tienen dos alas membranosas, semejantes a las de los himenópteros; son simplemente ramificadas, y lo más comúnmente horizontales; debajo de las mismas se hallan por lo regular dos apéndices muy móviles en forma de varillas, y se llaman balancines; en la base de cada uno de estos se encuentran dos piezas membranosas semejantes a las conchas; y se llaman alitas o cucharillas, sus usos son desconocidos. La organización de la boca es propia para chupar. El chupador se compone de piezas escamosas en forma de filamentos, desde dos a seis; unas veces se halla metido en la ranura superior de una vaina en figura de trompa y terminada por dos labios; y otras está cubierto por una o dos láminas inarticuladas que le sirven como de estuche. La vaina representa el labio inferior; y los filamentos, las mandíbulas, las maxilas y la lengüeta. El número de ojos lisos, cuando los tienen, es siempre de tres; en general los pies son largos y delgados, terminando en un tarso compuesto de cinco artículos, el último de los cuales de ordinario está provisto de pelotillas. El abdomen es pediculado, y en la hembra, por lo regular, termina en punta, que a menudo es susceptible de prolongación al modo de un tubo de anteojo de larga vista, y constituye una especie de taladro. Las larvas carecen de patas; y unas se hilan un capullo para metamorfosearse en ninfas; otras no mudan, sino que dentro de su misma piel, endurecida y casi córnea, se transforman en ninfas como en un sólido capullo. Entre los Dípteros hay algunos que nos causan no poco daño ya infectando nuestros alimentos, ya atormentando a nuestros animales domésticos y hasta a nosotros mismos; pero otros hay que nos traen utilidad alimentándose de sustancias en estado de putrefacción y que inficionan el aire que respiramos.

El orden de los Dípteros es casi tan considerable como el de los coleópteros; pero no entra en nuestro plan el extendernos en su clasificación circunstanciada; así que, nos contentaremos con dar a conocer los géneros principales de las seis familias de que consta el orden.


ArribaAbajoFamilia de los Nemoceros

Los insectos de esta familia tienen las antenas compuestas de un sin número de artículos filiformes, más largos que la cabeza; pueden reducirse a los géneros Mosquito y Tipula.

Los Mosquitos tienen el cuerpo y los pies largos, y las antenas provistas de largos pelos; su trompa es también larga, filiforme, cornuda y encierra un chupador punzante, compuesto de cinco filamentos. Estos insectos huyen de la luz del sol y les gustan los sitios acuáticos y sombríos: al anochecer volitan reunidos en numerosas bandadas, y despiden un zumbido agudísimo. Las hembras son las que taladran nuestra piel para chuparnos la sangre, que codician en gran manera; sus cerdas finas y dentadas introducen en la picadura un líquido ponzoñoso, que produce una irritación vivísima y una hinchazón considerable. En los países cálidos se designan con los nombres de maringuinos, mosquitos de trompetilla, etc. Para librarse de estos insectos al estar en cama rodéase esta con un crespón o gasa en forma de cielo o pabellón, a lo que llaman mosquiteros. Por lo demás, estos insectos chupan también el jugo de las flores. La hembra deposita sus huevos en el agua, y los junta unos a otros de manera que forman una especie de balsa flotante en la superficie del líquido. Hormiguean en las aguas tranquilas las larvas que de ellos nacen; su abdomen es oblongo y termina en cerdas y apéndices dispuestos a modo de radios; el penúltimo anillo lleva en su porción dorsal un tubo, por cuyo medio el animalito, que se mantiene con la cabeza hacia abajo en la superficie del gua, puede sacar de la atmósfera el aire que necesita. Cuando la ninfa, que igualmente es acuática, llega al estado perfecto, rasga su piel, levanta la cabeza y el coselete por encima de la abertura que acaba de hacer, y se dispone a arrojar de sí enteramente su envoltorio. Pero, es este instante crítico para nuestro insecto, la piel que le sirvió de capullo, le sirve luego de esquife, siendo el mástil su propio cuerpo. Si el agua está en calma poco a poco se va desembarazando; pero a la menor agitación del líquido, al menor soplo del aire, la endeble embarcación es sumergida y el insecto se ahoga. Para librarse de este peligro, saca el mosquito la parte posterior de su cuerpo hacia la abertura anterior de su despojo, se endereza echando la cabeza hacia atrás, a fin de que su cuerpo forme ángulo recto con el esquife que le sostiene; de esta suerte, así la parte de delante como la de detrás quedan vacías, y el agua no puede penetrar por la parte posterior del capullo porque está cerrada, y la anterior, que se halla abierta, sobrepuja al nivel del agua. Cuando el mosquito ha podido desprender sus patas, ya no teme el agua como antes; pues se ha hecho para él un terreno sólido que puede sostener su cuerpo. Desde este instante está ya salvo; sus alas se extienden y se secan, y no tarda en emprender el vuelo.

El MOSQUITO ZUMBADOR (Culex pipiens, LIN.). Es la especie más común así en Francia como en España: su color es ceniciento, con el abdomen anillado de pardo; las alas sin manchas transparentes, sombreadas por un matiz oscuro, y las antenas del macho plumosas.

Las Típulas tienen la trompa a veces muy corta y terminada en dos grandes labios, ya en forma de pico, en cuyo caso es perpendicular o encorvada sobre el pecho. Hay algunas especies de típulas que se columpian sobre sus patas largas y delgadas; otras volitan en numerosas bandadas, de modo que parece están bailando en los aires.

La TÍPULA DE LOS PRADOS (Tipula oleracea, LIN.). Tiene las antenas simples, el cuerpo pardo-ceniciento y sin manchas; las alas de un pardo-claro, y más oscuro en el borde externo. Este insecto abunda en las yerbas de los prados y su larva se sustenta con mantillo craso.




ArribaAbajoFamilia de los Tanistomos

Los Tanistomos, así llamados a causa de la longitud del pico; tienen las antenas muy cortas, y el último artículo de estas no se halla anillado transversalmente; el chupador consta de cuatro piezas.

Los Asilos tienen junto al extremo de las antenas un estilete que termina en filamento; la trompa es saliente, dirigida hacia delante, y de consistencia casi córnea; el cuerpo es oblongo, y las alas abatidas. Vuelan zumbando, y son muy carnívoros; de modo que según son sus fuerzas se apoderan de los zánganos, típulas, moscas, o coleópteros, a fin de chuparles los humores.

El ASILO AVISPÓN (Asilus crabroniformis, LIN.). Tiene cosa de 1 pulgada de longitud; el color amarillo, con los tres primeros segmentos abdominales negros, y las alas rojizas: a fines del verano abunda este insecto en los sitios arenosos.

Los Bómbilos tienen hábitos más suaves, vuelan con rapidez, cerniéndose por encima de las flores, cuyo néctar chupan, pero sin posarse en ellas, y despiden un zumbido agudo. Tienen las alas horizontales, y los balancines desnudos; su trompa se dirige hacia delante; sus antenas se componen de tres artículos; el último de los cuales es largo, casi cilíndrico y termina en punta.

El BÓMBILO PERRILLO (Bombylus major, LIN.). Abunda en los alrededores de París. Tiene 4 ó 5 líneas de longitud, y se halla enteramente cubierto de pelos pardo-amarillentos; su trompa es larga y negra; la mitad exterior de las alas es negruzca y el resto diáfano; los pies son leonados.

La MOSCA DE LAS VENTANAS (Musca fenestralis, LIN.). Pertenece a los tanistomos que carecen de filamento en el último artículo de las antenas. La cabeza y el tórax son de color bronceado oscuro, el abdomen negro y transversalmente estriado, rayado de blanco en el macho; los pies son leonados, con los tarsos oscuros. Esta especie es muy abundante en los vidrios de nuestras ventanas.




ArribaAbajoFamilia de los Tábanos

Esta familia tiene por caracteres una trompa saliente, regularmente terminada en dos labios, con los palpos hacia delante: el último artículo de las antenas es anillado, y el chupador consta de seis piezas. Fórmala el género Tábano, de Linneo.

Los Tábanos son semejantes a los moscones, y causan crueles sufrimientos a las caballerías y a los bueyes, cuya piel taladran para chuparles la sangre. Tienen la cabeza ancha y semiesférica, casi del todo cubierta por dos ojos de color verde-dorado con manchitas purpúreas; tienen las alas extendidas horizontalmente; el abdomen complanado y triangular, y los tarsos con tres pelotillas.

El TÁBANO DE LOS BUEYES (Tabanus bovinus, LIN.). Tiene 1 pulgada de longitud; el cuerpo superiormente es pardo, y en su cara inferior ceniciento; las piernas amarillas; el abdomen con líneas transversas y manchas triangulares de un amarillo claro; y las alas diáfanas, con nervosidades pardo-rojizas. Este insecto empieza a parecer a últimos de la primavera, en los pastos persigue sin tregua a las reses a quienes a veces llena de sangre: también ataca al hombre.




ArribaAbajoFamilia de los Notacantos

Esta denominación que significa dorso espinoso, se ha dado a los dípteros que se asemejan a los tábanos en cuanto a la conformación de las antenas, pero cuyo chupador consta solo de cuatro piezas, y la trompa es corta y casi del todo recogida en la cavidad de la boca. El principal género de esta familia es el Estratioma, o mosca armada caracterizado por una cerda en las antenas, y cuyo tercer artículo es terminal y está dividido en cinco o seis anillos.

La MOSCA ARMADA GRANDE (Stratiomys Chamoeleon, FABR.). Es una linda especie de 6 líneas de largo, negra con el extremo del escudete amarillo y dos espinas en él, que han valido al insecto el nombre de mosca armada. Vense tres manchas de color amarillo de limón a cada lado de la cara inferior del abdomen.




ArribaAbajoFamilia de los Ateríceros

Esta familia, cuyo nombre significa antenas sedosas comprende los dípteros cuya trompa, por lo regular membranosa, larga y angulosa, con dos palpos algo encima del ángulo, hállase regularmente encerrada dentro de la boca, y cuando sale de esta cavidad se ve que el chupador solo consta de dos piezas. El último artículo de las antenas va siempre acompañado de un estilete o de una crin; la trompa nunca tiene más de cuatro piezas. Las larvas tienen el cuerpo blando, más o menos largo y ahusado, no mudan, y su piel, al solidificarse constituye para la ninfa una especie, de capullo, del cual el insecto se va desprendiendo poco a poco para tomar la forma de una bola oblonga, que muy pronto pasa al estado de ninfa. Llegado al estado perfecto, sale el animal haciendo saltar con un golpe de cabeza la parte anterior del capullo, la cual forma una especie de casco. Los géneros principales son los Sirfos, los Estros y las Moscas.

Los Sirfos tienen el chupador compuesto de cuatro piezas; la trompa larga y angulosa cerca de su base; la cabeza semiesférica y en gran parte ocupada por los ojos. Tienen mucha semejanza con las avispas, los zánganos y las abejas.

El SIRFO ABEJA (Musca tenax, LIN.). Es del tamaño de un zángano, y se le asemeja en el colorido. Su cuerpo es pardo, y cubierto de pelos finos gris amarillentos, con una raya negra en la frente, y de dos a cuatro manchas de un amarillo leonado a cada lado del abdomen. Su larva vive en las letrinas y albañales; es la que vemos hormiguear en las inmundicias, y que llaman gusano con cola de ratón. Termina su cuerpo una larga cola, cuya extremidad se halla perforada. Cuando el animal nada en las cloacas y aguazales corrompidos eleva la punta de la cola por sobre el nivel del líquido, a fin de respirar por medio de la abertura en que termina y con la cual comunican las tráqueas.

Los Estros están caracterizados por la particular conformación de la boca, la cual solo ofrece tres tubérculos, o simplemente unos débiles vestigios de trompa; las antenas terminan en una paletilla redondeada provista de una cerda. Estos insectos tienen la apariencia de un gran moscón velludo, y sus alas se ven muy separadas. Frecuentan los bosques y pastos, siendo una plaga para los cuadrúpedos herbívoros, pues introducen los huevos en la piel y en las cavidades naturales de dichos animales.

El ESTRO DEL BUEY (Oestrus bovis, DE GEER). Tiene 7 líneas de longitud, y es muy velludo; el coselete es de color amarillo con una faja negra; las alas son algo oscuras. Esta especie depone los huevos entre el cuero de los bueyes jóvenes y robustos. A consecuencia se forman tumores, que llegan al estado de supuración, y el pus sirve para alimentar a la larva.

El ESTRO DEL CARNERO (Oestrus ovis, LIN.). Tiene 5 líneas de largo, y es poco velludo; su cabeza es gris; el coselete ceniciento, con puntos negros prominentes; el abdomen es amarillento, con manchitas pardas, o negras; las patas son de color pardo-claro, y las alas transparentes. Esta especie coloca los huevos al borde de las narices de los carneros; quienes tratan de impedírselo agitándose y ocultando el hocico en el suelo. Al nacer las larvas se suben hasta los senos frontales, donde se adhieren mediante los garfios de que su boca está provista: su presencia ocasiona vértigos al animal de que se han hecho parásitos.

El ESTRO DEL CABALLO (Oestrus equi, LATREILL). Es poco velludo, de color pardo-leonado, más claro en la cara inferior del abdomen. Señalan las alas dos puntos, y una faja negros. La hembra depone los huevos en las piernas y hombros de los caballos. La larva que de ellos nace sube hasta la boca del cuadrúpedo, y baja luego al estómago.

El ESTRO HEMORROIDAL (Oestrus hemorroidalis, LIN.). Es muy velludo; tiene el coselete negro, con el escudete de un amarillo-claro; el abdomen es blanco en su base, negro en el centro y leonado en el extremo, y las alas no presentan manchas. La hembra coloca sus huevos en los labios de los caballos, y la larva vive en el estómago.

El ESTRO VETERINARIO (Oestrus veterinus, CLARCK.). Se halla cubierto enteramente de pelos rojos; y los que guarnecen los costados del coselete y del abdomen son blancos: las alas carecen de manchas. La larva vive en los intestinos del caballo.

Los Cónopes tienen la trompa saliente, y forma un sifón cilíndrico, cónico o setáceo.

El CÓNOPE PUNZANTE (Conops calcitrans, LIN.). A menudo se le confunde con la mosca común, y molesta a los caballos, bueyes, y hasta al hombre, cuyas piernas suele picar también, especialmente cuando el tiempo amenaza lluvia: tiene el cuerpo ceniciento manchado de negro; la trompa más corta que el cuerpo, y solo angulosa junto a su base, dirigiéndose luego hacia delante.

Las moscas forman un género numerosísimo, cuyas especies todas tienen una trompa muy aparente, membranosa y bilabiada, la cual lleva oblicuamente dos palpos, y puede recogerse entera en la cavidad de la boca; el chupador se compone de dos piezas; y las larvas se alimentan con carne corrompida o viven en los estercoleros: tienen la figura de gusanos, blandos, blanquecinos y sin patas; su extremidad posterior es gruesa y truncada, y la anterior termina en punta, y lleva uno o dos garfios, con los cuales la larva trincha las materias alimenticias. Estos insectos efectúan sus metamorfosis en muy pocos días. Solo citaremos las especies más comunes.

La MOSCA AZUL (Musca vomitoria, LIN.). Es una de las especies mayores de Europa; su frente es de color leonado; el coselete negro, el abdomen azul brillante, con rayas negras. Este insecto tiene un olfato exquisito. Acude pronto a la carne zumbando, y pone en ella sus huevos, apresurando la putrefacción.

La MOSCA DORADA (Musca caesar, LIN.). Tiene el cuerpo verde-dorado y las patas negras; hace su puesta en la carne maleada; y su larva sirve a los pescadores para cebar el anzuelo, y a los granjeros para alimentar los pavos y faisanes.

La MOSCA COMÚN (Musca domestica, LIN.). Tiene el coselete pardo- ceniciento, con cuatro rayas negras; el abdomen pardo-negruzco, con manchitas, negras, y la cara inferior pardo-amarillenta.

La MOSCA VIVÍPARA. (Musca carnaria, LIN.). Llámase así porque sus huevos nacen antes de la puesta. Tiene los ojos sumamente apartados entre sí; es algo mayor y más larga que la mosca azul; y tiene el cuerpo ceniciento; los ojos colorados, el tórax con rayas negras, y el abdomen con manchas de este mismo color. La hembra depone sus larvas en la carne de los cadáveres, y a veces en el hombre vivo, en las úlceras descuidadas y expuestas al aire. Cuéntanse terribles ejemplos, entre los cuales se halla el siguiente, que refiere Mr. Roulin: «En el Lincolnshire, habiéndose dormido cierto mendigo al pie de un árbol, en tiempo de grandes calores, colocó su comida, compuesta de carne y pan, en contacto con su propia piel. Quedó a poco la carne cubierta de larvas, las que pronto pasaron a las carnes vivas; en términos, que hallaron a aquel hombre devorado a tal punto que daba poquísimas esperanzas de vida. Trasladáronle al hospital más inmediato: su aspecto era horrible, veíanse gruesas larvas entre las carnes que habían devorado a gran profundidad; en vista de lo cual el cirujano declaró que no sobreviviría el enfermo a la primera curación; y en el acto murió a las pocas horas.»




ArribaAbajoFamilia de los Pupíparos

Los insectos de esta familia presentan unos caracteres tan marcados, que algunos naturalistas han querido hacer de los mismos un orden particular. La boca no presenta la conformación que hallamos en las familias que acabamos de estudiar. El chupador carece de trompa que sirva de vaina, y hacen oficio de tal dos láminas coriáceas y velludas, y el chupador solo consta de dos cerdas. La cabeza parece dividida en dos partes, hallándose los ojos situados en la posterior; y en la anterior la boca y las antenas, las cuales unas veces presentan la forma de un tubérculo provisto de tres cerdas, y otras la de una lámina velluda; su cuerpo es ancho y complanado; los tarsos están armados de uñas robustas y dentadas; las alas están separadas y algunas veces faltan. Pero la particularidad más notable que ofrecen estos insectos es el modo como nacen; pues no solo los huevos se abren en el vientre de la hembra, sino que hasta las larvas adquieren allí mismo la forma de ninfas, y al salir sufren estas su última metamorfosis. Su capullo, que al principio es blando, luego se endurece, y en su extremo se ve una especie de tapadera, la cual se desprende cuando el insecto perfecto quiero salir de su envoltorio. De ahí les viene el nombre de Papíparos, o Ninfíparos. Estos insectos, denominados también Moscas-arañas, son parásitos, y viven exclusivamente en los cuadrúpedos, o en las aves: corren con rapidez, y constituyen los dos grandes géneros Hippobosco y Nycteribio.

Los Hippoboscos tienen la cabeza bien distinta, y articulada con el extremo anterior del tórax.

El HIPPOBOSCO DEL CABALLO (Hippobosca equina, LIN.). Tiene las alas grandes, el cuerpo pardo, con mezcla de amarillento. Mantiénese por lo regular en los caballos o en los bueyes, y regularmente se les pega debajo de la cola.

Los Nycteribios tienen la cabeza confundida con el tórax, carecen de alas y de balancines, aseméjanse a las arañas, y viven en los murciélagos, conforme su nombre ya lo indica.

El NYCTERIBIO PEDICULAR (Nyteribia pedicularia, LATREILL). Tiene el cuerpo pardo; el abdomen erizado de pelos, y las palas corvas, lo mismo que los tarsos.






ArribaAbajoOrden de los Parásitos

Los insectos que componen este orden son todos ellos ápteros, solo tienen ojos lisos y no sufren metamorfosis alguna: chupan la sangre a los demás animales; para cuyo régimen especial tienen dispuesta la con formación de sus órganos de la boca. Estos insectos tienen el cuerpo complanado, compuesto de once o doce anillos; las patas cortas y ganchosas; pegan sus huevos a los pelos o plumas del animal en cuyo cuerpo están domiciliados y cada especie se presenta en una especie particular de animales. Componen el presente orden los géneros Piojo y Ricino, o Sifunculados y Mandibulados.

Los Piojos tienen la boca tubulosa o sifunculada, y presenta una especie de hocico o mamelón prominente, armado de un chupador retráctil, sus tarsos se componen de no solo artículo muy grueso, que se repliega sobre la pierna haciendo el oficio de pinza. Los huevos, conocidos bajo el nombre de liendres, nacen a los cinco o seis días, y en diez días llegan al estado de adultos, gozando de una fecundidad tan prodigiosa, que se ha calculado que dos individuos bastan para producir en el espacio de dos meses diez y ocho mil. Estos asquerosos insectos, de los cuales varias especies se alimentan a expensas del hombre, pululan a veces de una manera espantosa en la enfermedad llamada pedicular, de que murió Sila.

Los Ricinos tienen la boca compuesta de dos labios membranosos que cubren un par de garfios; sus tarsos son articulados, y terminan en dos garfios guales: todos ellos viven en el cuerpo de las aves; excepto uno solo, que es parásito de mamíferos, y es el siguiente:

El RICINO DEL PERRO (Ricinus canis, DE GEER). Tiene la cabeza angulosa y amarillenta, con manchitas pardas; el abdomen blanquecino, oval, y dentado en los bordes, y el coselete muy corto. Este ricino, que no debe confundirse con la garrapatas, se halla a menudo pegado a las orejas de los perros y en especial en los de caza, que los adquieren en mayor número en los bosques. Después que hace algún tiempo que se halla pegado al cuerpo del perro, hínchase el abdomen del insecto hasta tal punto, que a veces adquiere seis o siete líneas de longitud.




ArribaAbajoOrden de los Tisanuros

Este orden, con el cual termina la clase, comprende insectos sin alas y sin metamorfosis, provistos de pies, a más de los apéndices particulares que guarnecen la extremidad del abdomen (la voz Tisanuro significa cola franjeada).Divídese en dos familias correspondientes a los dos grandes géneros de Linneo, Lepismos y Poduros.

Los Lepismos tienen las antenas en forma de cerda, divididas desde su raíz en muchos artículos; en la boca se insertan palpos muy salientes; el abdomen, en su cara inferior, está provisto de dos series laterales de apéndices móviles que figuran falsas patas, y termina en cerdas articuladas, tres de las cuales son más notables que las demás. El cuerpo es prolongado, y cubierto de escamitas relucientes; por cuya circunstancia se han llamado Lepismos.

El LEPISMO DEL AZÚCAR (Lepisina saccharina, LIN.). Llámanle vulgarmente pez-plateado a causa de las escamas que cubren su cuerpo. Tiene 4 líneas de longitud; el color plateado y algo plomizo, sin manchas. Encuéntrase en los jardines, debajo de las cajas, en las rendijas de los marcos de las ventanas, y en los armarios húmedos. Aliméntase de azúcar, de madera carcomida y de insectillos. Ataca también los tejidos de lana. Créese originario de América.

Los Poduros, cuyo nombre significa cola en forma de pata, tienen las antenas compuestas de cuatro piezas; la boca sin palpos distintos, y el abdomen terminado en una cola ahorquillada, que en estado de quietud del insecto se aplica debajo del vientre, enderezándose de improviso, sirve al animal para dar saltos. Son estos insectos muy diminutos, blandos, prolongados y con la cabeza de figura ovalada. Unos viven escondidos debajo de las piedras; otros en la superficie de las aguas tranquilas, y aun a veces se encuentran en gran número en la nieve y en la arena.

El PODURO ACUÁTICO (Podura aquatica, LIN.). Tiene media línea de largo, el color negro opaco y las antenas más largas que el cuerpo; el abdomen cilíndrico, largo y terminado en punta. Este insecto abunda en las aguas tranquilas, y cubre las hoja de las plantas acuáticas.






ArribaAbajoClase de los Miriápodos

Los animales articulados que van a ocuparnos fueron en otro tiempo colocados en la clase de insectos, a los cuales se asemejan enteramente con respecto a su interior organización; pero los naturalistas modernos, reservando el nombre de insecto exclusivamente a los articulados provistos de seis patas, eliminaron los miriápodos, que en consecuencia han debido formar una clase separada. En efecto, su cuerpo es larguísimo y dividido en un sinnúmero de anillos, cada uno de los cuales sostiene un par de patas; el número de dichos anillos es de veinte y cuatro o más. Entre el abdomen y el coselete no existe la menor línea de demarcación, y en este último nunca se ven alas; de manera, que el miriápodo puede compararse a un gusano o a una pequeña serpiente. Vénse en la cabeza dos antenitas, y dos ojos formados regularmente por la reunión de ojos lisos: la boca está conformada para machacar o desmenuzar; presenta dos mandíbulas compuestas de dos artículos, con un labio de cuatro divisiones, y dos pares de apéndices semejantes a piececitos. Las patas terminan en un solo garfio. La respiración se efectúa por medio de tráqueas, que tienen comunicación con estigmas laterales lo mismo que en los insectos. Las únicas metamorfosis que sufren los miriápodos consisten en la formación de nuevos anillos, y correspondiente aumento en el número de patas. Compónese esta clase de dos familias naturales, que son los Iulos y las Escolopendras.

Los Iulos generalmente tienen el cuerpo cilíndrico, y cubierto de una piel muy dura; las antenas del mismo grosor en la raíz que en su extremidad, y compuestas de siete artículos; las patas muy cortas, y faltan en los dos o tres últimos anillos. Estos animalitos se nutren con materias vegetales y animales en descomposición; sus mandíbulas están provistas de dientes imbricados, y además su boca está compuesta de una especie de labio inferior y de dos pares de patas semejantes a las que les siguen, aunque más aproximadas en su punto de inserción; ambos costados del cuerpo están provistos de poros que dan paso a un líquido agrio y fétido. Sus movimientos son pausados, y puede decirse que resbalan en vez de andar, y se arrollan en espiral o en forma de bola. Ponen los huevos en tierra; los hijos que de ellos nacen, al principio son ápodos, pero mudan la piel a menudo, aumentando el número de patas en cada muda.

El IULO TERRESTRE. (Iulus terrestres, LIN.). Tiene líneas de longitud: el cuerpo cilíndrico, compuesto de cuarenta y dos a cuarenta y ocho segmentos cada uno de los cuales sostiene dos pares de patas, lo que suma unas doscientas patas.

Las Escolopendras tienen el cuerpo complanado y membranoso; las antenas se adelgazan hacia su extremidad, y constan lo menos de catorce artículos. Cada anillo se halla cubierto por una placa coriácea; y solo lleva un par de patas, que el último se halla echado hacia atrás y prolongado en forma de cola; la boca está armada de dos mandíbulas, provistas de palpos, de un labio que tiene cuatro divisiones, de dos piececitos unguiculados, reunidos por su raíz, y de un par de pies-mandíbulas, fijo en el primer segmento del tronco, delante de un par de patas regulares; de manera que representa una especie de labio inferior: dichos pies-mandíbulas, terminan en un fuerte garfio, y son interiormente huecos formando una glándula y dando paso a un líquido ponzoñoso que esta segrega. Las escolopendras huyen de la luz, y se esconden debajo de las piedras o de la corteza de los árboles. Son muy ágiles y carnívoras.

LA ESCOLOPENDRA ELÉCTRICA (Scolopendra electrica, LIN.). Tiene el cuerpo filiforme, de color leonado y provisto de setenta pares de patas. De noche es luminosa. Comúnmente se halla en Francia.

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La Escolopendra eléctrica.

LA ESCOLOPENDRA MORDICANTE. Tiene 6 pulgadas de largo: el cuerpo pardo, y diez veces más largo que ancho; las patas son en número de cuarenta. Esta especie es común a toda la América meridional, donde es conocida con el nombre de malhechora; su picadura pierde su gravedad cuando se cura por medio del álcali volátil.




ArribaAbajoClase de los Arácnidos

Los animales articulados que constituyen la clase de los Arácnidos, defieren de los insectos tanto por la conformación externa del cuerpo, como por su estructura interna. En ellos la cabeza se confunde con el tórax, y no presenta antenas. Tienen cuatro pares de patas, y ninguno de ellos tiene alas; por último, la mayor parte respiran por medio de pulmones y tienen un completo aparato de circulación.

La piel de los arácnidos es blanda, y su cuerpo está compuesto de dos partes principales distintas: la una llamada céfalo-tórax, por estar formada por la cabeza y el coselete; y la otra, que lleva el nombre de abdomen. Las ocho patas se insertan en el céfalo-tórax, son largas y quebradizas, pero se reproducen poco a poco. Ninguno tiene alas. Los ojos y la boca están situados en la parte anterior del céfalo-tórax, aquellos son simples y por lo regular en número de ocho, cada uno con su córnea transparente, su cristalino, su cuerpo vítreo, su retina y su coroidea. El aparato del oído de estos animales nos es enteramente desconocido sin embargo de que incontestablemente existe; pues hasta se cree haber observado que algunos se muestran sensibles a la música. El tacto reside en las extremidades de las patas. Su sistema nervioso es semejante al de los insectos.

Los Arácnidos son carnívoros, aunque en su mayor parte se contentan con chupar la sangre y los humores de su presa; otros son parásitos, y tienen la boca compuesta de una pequeña trompa, de la cual sale una especie de lanceta formada por las maxilas. Otros hay que tienen la boca provista de un par de mandíbulas armadas de garfios móviles, o conformadas a manera de unas pinzas; de dos maxilas lamelosas, con un palpo en cada una semejante a un pie y a un labio inferior. El garfio móvil de las mandíbulas presenta cerca de su extremidad una pequeña abertura u orificio de un canal que comunica con una glándula ponzoñosa. El líquido que derrama en el fondo de la picadura aletarga al instante a los insectos a que dan caza los arácnidos, pero en general es harto débil para dañar al hombre.

Algunos de estos animales fabrican telillas de suma delicadeza, con una materia sedeña que segregan unas glándulas situadas al extremo del abdomen. La respiración de los arácnidos, en algunos se efectúa mediante tráqueas; sin embargo, en la mayor parte se reconcentra en unas bolsas alojadas en el interior del abdomen, y que se componen de una multitud de laminitas dispuestas como las hojas de un libro. Se ha dado a estos órganos el nombre de pulmones, aunque mejor se asemejan a branquias internas: cada uno recibe el aire por una abertura situada en la cara inferior del abdomen.

La sangre es blanca; el corazón situado en el dorso, tiene la figura de un buque prolongado, y da nacimiento a diversas arterias; la sangre, después de haber atravesado los órganos, vuelve a los pulmones y de allí llega al corazón. En los arácnidos que están provistos de tráqueas solo existe un simple vaso dorsal. Estos animales ponen huevos lo mismo que los insectos; muchos de ellos los envuelven en un capullo de seda. Todos sufren varias mudas antes de llegar a la edad adulta; pero no sufren verdadera metamorfosis.


ArribaAbajoFamilia de los Araneidos

Los Araneidos presentan el céfalo-tórax cubierto de una especie de escudo córneo, del cual pende el abdomen por un pedículo corto, que consiste en una masa hinchada y blanda; sus ojos son en número de ocho, y a veces de seis; las patas se componen de siete artículos, el último de los cuales está armado de dos garfios; el abdomen contiene dos o cuatro cavidades pulmonares situadas junto a la base, y cuya posición exterior se ve indicada por una mancha blanquizca o amarillenta, que se ve cerca de dicha base, y junto a aquella; en la superficie inferior del abdomen, hay los estigmas.

El aparato que suministra la seda consiste en varios paquetes de vasos retorcidos sobre sí mismos, que van a salir a unos poros u orificios que se ven en la punta de cuatro o seis mamelones cónicos o cilíndricos, llamados hilera. La materia viscosa que sale por dichos poros sécase al contacto del aire, formando unos hilos sutilísimos. El animal reúne con las patas una multitud de estos hilos en uno solo; y cada vez que columpiándose toca con sus hileras alguna superficie, deja pegado en ella un cabo de hilo, hallándose el otro todavía dentro de sus órganos secretorios, pudiendo así aumentar todavía su longitud. Los hilos con los cuales fabrican sus telas las arañas varían en lo respectivo a su finura; y los de nuestras arañas ordinarias son tan sutiles, que diez mil de ellos reunidos no igualan al diámetro de un cabello; y al contrario, los de ciertas arañas de los trópicos forman tejidos tan sólidos, que los pajaritos quedan en ellos cogidos como en una red.

Esta familia consta de dos géneros: Migalas y Arañas propiamente tales.

Las Migalas tienen cuatro pulmones; las mandíbulas y las patas muy recias; la mayor parte no presentan más que cuatro hileras. Hay en América algunas especies que son enormes, y ocupan un espacio circular de 9 pulgadas de diámetro. Existen especies cuya mordedura es peligrosa: cobíjanse en las hendiduras o rendijas de los árboles, o de las peñas, o en las hojas de diferentes plantas.

La ARAÑA-CANGREJO (Mygala cancerides, LATREILL). No fabrica telaraña sino que se hunde y embosca en las hendeduras de las peñas o paredes; aléjase mucho del sitio en que reside cuando va en busca de presa, y se oculta debajo de las hojas para mejor sorprenderla. Esta consiste en hormigas de Anolis y algunos pajarillos.

La MIGALA AVICULAR (Aranea avicularis, LIN.). Encuéntrase en Cayena y en Suriname, y es una de las especies de mayor tamaño que se conocen: puesto que tiene más de 1 pulgada y media de longitud. Su cuerpo es velludo y negruzco; el extremo de los palpos, de las patas, y los pelos inferiores de la boca,son de color rojizo; su celdilla tiene la figura de un tubo, que se va angostando hasta terminar en punta por su extremo posterior; y presenta una longitud de 36 pulgadas, con una galería central, contenida en otro tubo al cual está adherida; y este último por su parte se adhiere a los árboles. El tejido de esta galería es muy denso, fino y semitransparente como la muselina. En la profundidad de este asilo permanece la migala en acecho de insectos y de pajarillos.

Tenemos en Europa migalas mucho más pequeñas, y no menos interesantes.

La MIGALA ALBAÑIL (Mygale coementaria, LATREILL). Tiene 8 líneas de largo; el color rojizo tirante a pardo, o menos oscuro, con los bordes del coselete más claros; los garfios de las mandíbulas son negruzcos, y tienen encima cinco puntas inmediatas a su articulación; el abdomen es gris de ratón, con mosqueaduras de más subido matiz; el primer artículo del tarso está guarnecido de espinillas y los garfios del último tienen en su base un espolón y una fila de agudos dientes. Encuéntrase esta migala en los países meridionales de Europa; se abre agujeros en los terrenos arenosos; los cuales forman un tubo vertical, que luego pasa a ser horizontal; y exteriormente se ven guarnecidos de una argamasa sólida que el mismo animal elabora; las paredes interiores de estos conductos o pozos son lisas, tapizadas primero con hilos gruesos y algo distantes, por encima de los cuales extiende luego la araña otros muy finos y apretados. El orificio o entrada del nido sale siempre en un terreno inclinado, y se cierra con una trampa con charnela, que cae por su propio peso, y también a causa de cierta elasticidad. Compónese esta trampa de capas alternas de tierra y de telarañas, mutuamente ajustadas; es más pesada hacia su base que hacia la punta, lo cual la impele de continuo hacia el orificio; por último, se halla cortada al bisel, de manera que cierra el conducto perfectamente sin introducirse en él. En este asilo pasa la migala el día; saliendo de noche a recorrer las redes que tendió a flor de tierra no lejos de su habitación. Cuando se la inquieta mientras se halla dentro de su madriguera, y se trata de abrir la trampa, entonces se precipita a la entrada desde el fondo de la misma; y allí, con el cuerpo vuelto, cogiéndose con las patas a las paredes del conducto, y con las puntas de las mandíbulas a unos agujeros que ha practicado semicircularmente en torno de la superficie interna de la tapadera, tira de esta hacia sí con todas sus fuerzas. Nótese que dichos agujeros se hallan en la porción libre de la circunferencia de la trampa; pues si se hallasen inmediatos a los goznes o charnela, pronto el animal agotaría sus fuerzas, y no pudiera tener mucho tiempo cerrada su puertecita. Cuando hemos vencido la resistencia de la araña obligándola a salir de su escondrijo, entonces todo su valor la abandona, camina vacilante, y parece que la luz del día la deje como herida de impotencia.

Las Arañas propiamente dichas no tienen más que dos pulmones y dos estigmas; al paso que las hileras son en todas en número de seis. Se han subdividido en dos tribus; a saber en Sedentarias, las cuales fabrican telarañas, o extienden hilos para sorprender la presa; y en Vagabundas, que no construyen tela, sino que persiguen a su presa a la carrera y echándosele encima.

Las Arañas sedentarias tienen de seis a ocho ojos lisos, situados en la anchura de la frente, cuatro o dos en el centro, y tres o dos a cada lado.

La ARAÑA DOMÉSTICA (Aranea domestica, LIN.). Pertenece a las sedentarias que fabrican tubos o celdillas para servirles de asilo: tiene ocho ojos, cuatro de ellos anteriores, dispuestos en línea curva; su abdomen es oval y negruzco, con dos series de manchas que se extienden longitudinalmente por el dorso; estas son pardas y las anteriores son mayores que las restantes. Esta especie abunda en nuestras casas y extiende en los rincones y cornisas una gran tela casi horizontal, en cuya parte superior hay un tubo donde se mantiene retirado el animalito, sin hacer el menor movimiento. Coloca sus huevos en una doble cubierta sedosa que adhiere a lo demás de la tela. Las arañas domésticas, lo mismo que la generalidad de los Araneidos, son muy carnívoras, llevando su crueldad al extremo de devorarse recíprocamente. Cuando riñen, solo con la muerte de uno de los combatientes termina la pelea, y la que resulta vencedora chupa la sangre a la que quedó vencida. Si echamos una araña en la tela de otra, al punto esta la ataca, se apodera de ella, la mata y devora cuando tiene mayores fuerzas; y cuando es más débil, entonces emprende la fuga. Estas arañas inspiran a todos mucha repugnancia, y más aún a las mujeres: lo cual no impedía al célebre astrónomo Lalande el comérselas con no poca afición, suponiendo que el líquido blanco que llena el abdomen de estos animales tiene el gusto fino y delicado de la nuez; lo cual han experimentado también por sí mismos otros curiosos.

La ARAÑA DE LOS SUBTERRÁNEOS, o SEGESTRIA PÉRFIDA (Aranea cellaria, LATREILLE). Tiene solo seis ojos, de los cuales los cuatro anteriores forman una línea transversal, y los otros dos están situados uno a cada lado, detrás de los dos laterales de la línea precedente. Esta araña es gruesa, de un color negro algo ceniciento, y con las mandíbulas verdes o azuladas: tiene juntamente tráqueas y pulmones: mantiénese en las rendijas y huecos de las paredes viejas o ruinosas, donde se fabrica largos tubos sedeños, cuya abertura exterior se ve orillada de hilos divergentes que constituyen una telilla muy a propósito para detener y enredar a los insectos.

La ARGIRONECTA ACUÁTICA (Aranea aquatica, LIN.). Tiene ocho ojos, cuatro que forman cuadro, y a su lado los cuatro restantes, aproximados de dos en dos y situados en una eminencia especial. Es pardo-negruzca, con el abdomen más oscuro, sedoso y que tiene en el dorso cuatro puntos huecos. Esta especie vive en las aguas tranquilas; y aunque habita, busca su presa, y hace la puesta en las mismas, no obstante su respiración es aérea. Alguna vez sale de este elemento para cazar insectos; pero al punto vuelve a él; donde nada con suma agilidad, ya subiendo, ya bajando, casi siempre vuelta de espaldas y descubriendo el abdomen, que parece dado de un barniz plateado. Este brillo depende de que el agua no se adhiera al vientre del animal, el cual es grueso y velludo, y retiene entre él y el líquido una capa de aire. Este aire no solo debe servir para la respiración de la araña, sino también para la construcción de su domicilio, y esto de la manera siguiente. Primeramente va el animalito a pegar hebras de seda a las yerbas situadas en la misma agua, resultando una tela horizontal, debajo de la que se desembaraza de las vejiguitas de aire que cubren su cuerpo frotándolo con sus patas: este aire, por su gravedad específica tiende a subir, pero se lo impide la telaraña extendida encima del mismo. Luego sale la araña y vuelve a subir a la superficie del agua; saca fuera el abdomen, y lo sumerge otra vez con prontitud arrastrando otra capa de aire; en seguida se vuelve debajo de la tela, y se quita el aire que la rodea, el cual sube a reunirse con el primero debajo de la tela, y la hincha un poco más. De esta suerte va la araña repitiendo la misma maniobra hasta que ha reunido debajo de su tela bastante aire para obligarla a tomar la convexidad de una campana del grandor de una nuez. Entonces se ve a la araña entrar y salir de esta su habitación, y llevar a ella los insectos de que ha hecho presa, así en tierra como en el agua. Terminada la campana, el animal la cierra al instante, fabricando un suelo perforado en un solo punto de su circunferencia. A veces viven varios individuos de una misma especie en campanas muy inmediatas, y alguno de ellos trata de sorprender a su vecino una vía de comunicación, cuyo conducto lo construye siguiendo igual procedimiento que al construir la campana. Entonces, si puede sorprender al vecino, lo devora; pero si este se apercibió de estableciendo sus maniobras, le aguarda, y apenas se presenta que se le arroja encima y hace del mismo su presa.

Acaso se preguntará de qué manera se renueva el aire contenido bajo de la campana cuando está viciado por la respiración del animal; pero repetiremos la ingeniosa explicación de Dutrochet; a saber, que el ácido carbónico formado se disuelve en el agua, que al mismo tiempo cede el aire que tiene en disolución.

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La argironecta acuática.

La ARAÑA FALANGISTA (Aranea falangioides, FOURCR.). Llámanla también Araña doméstica de largas patas. Tiene ocho ojos, situados en un tubérculo, y divididos en tres grupos; uno de cada lado, formado por tres ojos dispuestos en forma triangular, y el tercero en el centro y algo anterior, compuesto de otros dos ojos y en línea transversal; el cuerpo es largo, angosto, amarillento claro, y cubierto de vello; el abdomen es casi cilíndrico, muy blando, señalado en su parte superior con manchas negruzcas; las patas larguísimas, sumamente delgadas y que se desprenden con facilidad: vese un anillo blanquecino entre los muslos y las piernas. Esta especie abunda en las casas, y en los recodos de las paredes; fabrica telarañas compuestas de hebras flojas y poco adherentes entre sí. Cuando tocamos ligeramente a esta araña, se columpia por más o menos rato, a semejanza de lo que vemos en algunas típulas. La hembra conglutina los huevos, formando con ellos un cuerpo redondo y descubierto que lleva entre sus mandíbulas.

La EPEIRA DIADEMA (Aranea diadema, LIN.). Pertenece a las arañas sedentarias, cuya tela consiste en una red regular, formada de círculos concéntricos cruzados por radios rectos que van del centro a la circunferencia. Tiene esta especie cuatro ojos que forman un cuadrado, y dos de cada lado aproximados a pares y casi contiguos. Es gruesa, rojiza, y aterciopelada; tiene el abdomen muy voluminoso, pardo-oscuro, o rojo-amarillento, con un tubérculo grueso y redondeado a cada lado del dorso, junto a su base, y una triple cruz formada de manchitas o puntos blancos. Los palpos y los pies presentan también manchitas negras. Esta linda especie abunda en el otoño, en los jardines y sus huevos nacen en la siguiente primavera. Coloca su tela opuesta al viento reinante, para que este eche en ella los insectos. Si ponemos una de estas epeiras al extremo de un palo sumergido en un barreño de agua, al instante la vemos producir un hilo mientras desciende, por el cual vuelve a subir dejándolo después flotante a merced del viento. Dicho hilo se pega pronto a un cuerpo inmediato, y la araña se sirve de él como de un puente colgante. Después lo pone tirante y pasa por él con rapidez añadiéndole otra hebra para reforzarlo. Este hilo horizontal así dispuesto, es el fundamento de todos los trabajos de la araña; de él salen otros hilos que se adhieren a varios puntos de la bifurcación, y forman líneas oblicuas, cuyo conjunto servirá de marco o de esqueleto a la tela. Hecho esto, la araña se coloca en el centro del hilo superior horizontal, luego desciende verticalmente hacia la bifurcación; volviendo a subir y a bajar repetidas veces, para doblar, triplicar, o cuadriplicar el grosor del hilo que le ha de servir de eje. En seguida, situándose en el centro de este hilo, le pega otro, el cual va desdevanando al tiempo que vuelve a subir por el primero, y manteniéndolo separado por medio de sus patas traseras. Una vez ha llegado a un hilo de los que forman el cuadro, fija en él la hebra que lleva consigo, completando así un triángulo con el hilo central y el del borde. Tras esto, baja otra vez por el hilo recién adherido, y lo dobla pasando hasta el centro de la primera cuerda; desde cuyo punto vuelve a subir a lo largo del último hilo, y desdevana o hace salir de su hilera un tercero, el cual pega al borde, lo mismo que hizo con el segundo; continuando de esta misma manera hasta que ha establecido radios equidistantes, y todos que salen divergentes de un centro común. Terminada esta primera trama, traza el hilo espiral que debe cruzar todos los radios, de modo que resulten entre ellos espacios en figura de trapecios. El punto de partida es en el centro; y siendo los primeros circuitos de poca extensión se hacen fácilmente, atendida la proximidad de los radios entre sí; pero a medida que la obra se aleja del centro, la dificultad aumenta al par de la distancia que media entre los mismos radios: en tal caso recorriendo el animal los tres lados del trapecio que quiere completar, tira hacia sí un hilo que mantiene apartado con las patas a fin de impedir que se pegue a los tres hilos que va recorriendo; luego pone dicho hilo tirante hasta que adquiere una posición transversal y forma la base del trapecio que deseaba cerrar la araña, la cual va prosiguiendo de la misma manera la espiral hasta haber abrazado los radios en toda su extensión.

La diadema no permanece en el centro de la tela, como hacen otras especies, sino que se construye una celdilla hacia la parte superior y entre algunas hojas aproximadas, y allí se mantiene resguardándose de los pájaros insectívoros y de algunos insectos que la codician y persiguen. Desde el centro de la tela sale un hilo compuesto de varios dobles, el cual va a parar a la celdilla y en él mantiene arrimado el extremo de una pata; dicho hilo le transmite los más leves movimientos impresos en la tela por algún insecto, y también le sirve como de cuerda para bajar con rapidez y precipitarse a su presa. Cuando esta es sobrado voluminosa, si es por ejemplo una mosca, la araña la agarrota y enreda con algunas vueltas de hilo que saca de sus hileras, se la cuelga de la extremidad del abdomen, y llévasela a su celdita para chuparla a todo su sabor. Si la mosca es pequeña, se la lleva sin agarrotarla; si por último el insecto caído en la tela es más fuerte que la misma araña, esta le ayuda a desenredarse rompiendo algunos hilos, que en seguida recompone.

Las Arañas vagabundas son cazadoras, y no fabrican tela: sus ojos son siempre en número de ocho, y se extienden más a lo largo del coselete que en la dirección de su anchura. Llámanse unas arañas lobos, y tienen los pies propios para la carrera; la mayor parte de las hembras se mantienen en el capullo que encierra los huevos, y hasta lo llevan siempre consigo, no abandonándolo sino en el último apuro; y aun cuando pasa el peligro se las ve volver por ellos: también cuidan algún tiempo de la conservación de los hijuelos. Tal es la siguiente:

La TARÉNTULA (Aranea Tarentula, LIN.). Tiene cosa de 1 pulgada de largo; el color enteramente negro, con la cara superior del abdomen roja y cruzada en su parte media por una faja negra. Esta araña, célebre por las fábulas de que se la ha hecho objeto, se halla generalmente esparcida por el mediodía de Europa, particularmente por los alrededores de Tarento, por cuya circunstancia se le ha dado el nombre de taréntula. Hace en los terrenos arenosos un agujero perpendicular, cilíndrico, de 4 líneas de diámetro sobre algunas pulgadas de profundidad; y las partes interiores de esta habitación se hallan reforzadas mediante hilos de seda. La araña se mantiene en acecho a la entrada del nido; y cuando se le presenta un insecto al alcance, se arroja a él con una prontitud admirable, lo coge con sus tenacillas, y se lo lleva al agujero, donde lo devora. A menudo recorre el campo en busca de presa; pero siempre regresa a su domicilio. Envuelve los huevos en un capullo de seda blanca y tupida, lo pega a su abdomen, y lo lleva consigo a todas partes. Cuando llega el tiempo de nacer los huevos, rasga dicho envoltorio, y los hijos suben a la espalda de la madre, y en ella se mantienen agarrados hasta la primera muda, época en que pueden agenciarse el sustento por sí solos. Algunos médicos célebres, y entre ellos Baglivi, han escrito sobre la ponzoña de la Taréntula y sobre el tratamiento que conviene a los que por ella fueren mordidos. Según dichos autores, la enfermedad producida por la taréntula, a la cual llaman ellos Tarentismo, produce tales síntomas, que a veces son mortales; y si estos calman, el enfermo cae en una melancolía que únicamente halla remedio en la música. Algunos médicos hasta han señalado las tocatas que creen convenir a los tarentolati: así llaman a los que adolecen de esta enfermedad. Samuel Hafenreffer, profesor de Ulm, las ha puesto en solfa en su tratado de las enfermedades de la piel. Cuando el enfermo oye dicha música, se pone a bailar a pesar suyo, sin cesar un instante, hasta que postrado de fatiga y agotadas las fuerzas, cae en un profundo sueño, sobreviénele un sudor copioso, y se halla curado. Los modernos tratan de fábulas estas tradiciones que corren tan válidas hoy por Italia como en los tiempos de Baglivi. No obstante, es indudable que la picadura de la taréntula es sumamente ponzoñosa para los animalillos de que se sustenta; y también lo es un poco para el hombre, cuya curación ciertamente se activa en gran manera mediante un tratamiento sudorífico. Por consiguiente, cuando un baile forzoso sobreexcita las funciones de la piel promoviendo abundantes sudores, debe de ser el mejor remedio para la afección de que se trata, ahora en cuanto al carácter de la música, es creíble que a la organización impresionable de los italianos se adaptarán mejor que a la de otras ciertas tocatas bailables.

Los Sálticos son arañas vagabundas, cuyos pies tienen una conformación apta para el salto, lo mismo que para la carrera; así es que su andar es pronto y entrecortado, y cuando se hallan cerca de una presa se las ve saltarle encima como hacen los gatos. Los muslos delanteros generalmente son notables por su magnitud.

La ARAÑA CABRIADA (Aranea scenica, LIN.).Es negra, con tres cabrias blancas transversales en el abdomen. Es muy común en verano en las paredes y en los vidrios expuestos al sol; anda a sacudimientos; se para de repente después de haber dado algunos pasos, y se levanta sobre sus pies delanteros para examinar los alrededores. Cuando divisa una mosca o mosquito, se le acerca poco a poco hasta una distancia que pueda salvar de un salto, y entonces se arroja de improviso al animal a que seguía la pista. No teme saltar perpendicularmente a la pared, puesto que siempre queda adherida a ella por un hilo que va sacando de la hilera a medida que va adelantando; el cual le sirve también para subir otra vez al punto en que se hallaba; y a dejarse llevar a otro punto por un impulso del viento.




ArribaAbajoFamilia de los Pedipalpos

Los Arácnidas pulmonares que componen esta familia no tienen hileras como los Araneidos; pero se conocen con facilidad por sus grandes palpos terminados en una pinza, tenaza o garra. Cubre su cuerpo una piel recia; el tórax consta de una sola pieza, y el abdomen de varios segmentos bien distintos. La familia de que tratamos hállase comprendida casi entera en el género Escorpión de Linneo. Los Escorpiones tienen el cuerpo muy largo; el abdomen unido al tórax por toda su anchura, pero de repente se estrecha, de modo que da margen a una especie de cola delgada y compuesta de seis anillos, de los cuales el último remata en un garfio o en dardo. En la cara inferior de la base del abdomen se ven dos láminas móviles en figura de peine; tiene cuatro pares de estigmas, que se presentan al descubierto cerca de dicha base abdominal, y cada uno comunica con una bolsa pulmonar de color blanco; los palpos son muy gruesos y terminan en pinzas de dos puntas. A cada lado de la frente existen tres ojos dispuestos en línea curva y hacia la parte media del dorso se ven otros dos muy aproximados: viven, estos animales en los países cálidos de ambos hemisferios; pero aunque también los hallamos en los países meridionales de Europa, solo en las regiones de los trópicos adquieren su mayor magnitud. Viven en tierra en los lugares oscuros y húmedos; corren mucho y con la cola levantada por encima del dorso, sirviéndose del aguijón en que esta termina para ofender o defenderse. Su dardo presenta debajo de la punta varias aberturas, que comunican con una glándula secretoria de ponzoña; así es que la picadura del escorpión es con frecuencia mortal aun para los animales de gran corpulencia relativa, tal como los perros. Los grandes escorpiones o alacranes de la zona tórrida son también muy temibles para el hombre; al paso que los del mediodía de Europa lo son mucho menos. Los síntomas que resultan de dicha picadura son: inflamación local, acompañada de calentura; estupor, y a veces vómitos, temblores y dolores generales; el remedio más eficaz en tales casos es el álcali volátil administrado exterior e interiormente. Dícese que colocado el escorpión en medio de un cerco de ascuas encendidas, se pica a sí mismo y se mata; pero Maupertuis ha demostrado ser esto falso por una multitud de experimentos.

Los Escorpiones se alimentan con cucarachas, cárabos, gorgojos, ortópteros, arañas, etc., que cogen con sus tenazas, y pican con su aguijón si hallan resistencia, y también se devoran unos a otros. Los huevos se abren en el abdomen de la hembra, la cual lleva sus hijos a la espalda durante algún tiempo.

El ESCORPIÓN o ALACRÁN EUROPEO (Scorpio europeus, LIN.). Es de color pardo, y tiene seis ojos, sus brazos son angulosos, y la cola más corta que el cuerpo. Este animal tiene 1 pulgada de longitud; empieza a encontrarse a los 44 grados de latitud, y es muy común en Italia y España.

El ESCORPIÓN ROJIZO (Scorpio occitanus, LATREILL). Es mayor que el que antecede, y la cola es más larga que el cuerpo, y tiene algunas líneas en relieve ligeramente dentadas. Esta especie vive al mediodía de Europa y al norte del África; su picadura produce accidentes mucho más graves que la del alacrán de Europa, sobre todo si el animal es ya viejo. El Doctor Macary se aseguró de ello por medio de experimentos voluntarios que hizo animosamente en sí mismo.

El ESCORPIÓN AFRICANO (Scorpio afer, LIN.) Tiene 6 pulgadas de largo, es de color negruzco, con grandes garras en forma de corazón, escamosas y algo velludas; el coselete muy escotado. Esta especie se encuentra en África y en las Indias orientales.

Los Arácnidos traqueanos forman el segundo orden de la clase; respiran por medio de tráqueas en las que el aire penetra por dos estigmas muy pequeños, situados en la parte inferior del abdomen. Fáltales el aparato circulatorio; y los ojos, que en algunos también faltan, nunca pasan cuando existen de dos o cuatro. Hanse dividido los traqueanos en tres familias, que son: Falsos escorpiones, Falangianos y Acáridos.




ArribaAbajoFamilia de los Falsos escorpiones

Los Arácnidos de esta familia tienen el abdomen muy distinto del tórax y compuesto de varios anillos; los palpos muy grandes y en forma de pies o de garras, lo misino que los escorpiones; las mandíbulas aparentes terminadas en dos piezas, y el cuerpo oblongo u oval. Todos son terrestres y muy ágiles. Componen esta familia los dos géneros: Galeodes y Pinzas.

Los Galeodes tienen las mandíbulas sumamente grandes; los palpos en forma de pie; el coselete dividido en dos segmentos, y el abdomen oval y blando; viven en los países arenosos, y los habitantes de la Rusia meridional y del Levante temen extraordinariamente su picadura, tal es el siguiente:

GALEODE FATAL (Solpuga fatalis, FABR.). Tienen las pinzas horizontales, el abdomen complanado y muy velludo. Encuéntrase en Bengala.

Los Cancroides se asemejan a unos pequeños escorpiones faltos de cola, tienen el cuerpo complanado, con el tórax casi cuadrado, teniendo a cada lado uno o dos ojos; tienen los palpos. largos y en forma de brazos, terminados por unas pinzas. Todos los pies son iguales y terminan en dos garfios. El ESCORPIO DE LOS LIBROS (Chelifer cancroides, LATREILL). Geoffroy la llama Escorpión-araña, Tiene 1 línea de longitud, el cuerpo pardo-rojizo, los brazos el doble más largos que este y compuestos de largos artículos: es la especie más común en las casas, y se halla en los herbarios, en los libros viejos, donde se alimenta de los insectos que los roen, y en especial de un pequeño neuróptero llamado Psoco pulsador, o Piojo de la madera. La encontramos también en los jarrones de flores, y bajo la corteza de los árboles medio desprendida del tronco.




ArribaAbajoFamilia de los Falangios

Los Arácnidos de esta familia tienen el coselete y el abdomen unido en una sola masa. El abdomen se divide en anillos; el cuerpo es oval; los pies muy largos; las mandíbulas muy salientes y terminadas en pinza, y las maxilas llevan dos palpos filiformes. La mayor parte viven en tierra, en las plantas, al pie de los árboles, y son muy ágiles; otros se ocultan debajo de las piedras y en el musgo. El género principal de esta familia es el de los Segadores, los cuales tienen las pinzas o mandíbulas muy salientes y más cortas que el cuerpo, y los ojos sostenidos por un tubérculo común.

El SEGADOR DE LAS PAREDES (Phalangium cornutum y Phalangium opilio, LIN.). El macho tiene la cara superior del cuerpo pardo-rojiza y algo más oscura en el centro; y la hembra tiene la cara superior del cuerpo pardo-grisácea, con rasgos oscuros, y algunos puntos blanquizcos; la inferior es blanco-grisácea, con algunas tintas oscuras hacia las partes laterales del abdomen; las mandíbulas y los palpos son de color ceniciento, con manchitas pardas. Esta especie se encuentra en las paredes, en los campos y en los troncos de los árboles; aliméntase de insectillos, a los cuales atraviesa con los garfios de las mandíbulas, para chuparles luego los humores. Las largas patas de que la naturaleza ha provisto a este segador, le sirven no solo para andar con facilidad, sino para librarse de sus enemigos y advertirle de su aproximación. Situado en una pared, o en el tronco de un árbol, extiende circularmente las patas al rededor de su cuerpo; y como estas ocupan grande espacio, cuando un animal toca a alguna de ellas, al punto el segador se levanta; y si el insecto le es indiferente lo deja pasar impunemente; si le conviene para presa, no hace más que estrechar la pata y lo tiene cogido; pero si es un enemigo temible, entonces salta al suelo y escapa. Si lo cogemos, se libra dejando entre nuestros dedos una o más piernas, las cuales conservan su movimiento durante algunas horas de haber sido mutiladas. Como Geoffroy encontró un segador que tenía una de las patas posteriores más corta que las demás, presume que los miembros de los Traqueanos se reproducen lo mismo que los de los Arácnidos.




ArribaAbajoFamilia de los Acárides

Los Acárides, que forman el gran género Arador de Linneo, tienen el abdomen sin anillos y confundido con el tórax; los órganos de la masticación no son en ellos libres, sino que están envueltos en una especie de vaina en figura de cuchara, formada por el labio inferior; y unas veces consisten en mandíbulas pinzas, ya de dos piezas, ya de más y a modo de garras; ya en un chupador o trompa formada por dos láminas como lancetas y reunidas; ya en fin consiste la boca en una sola cavidad sin piezas visibles. La mayor parte de los Aradores son sumamente diminutos, o casi microscópicos; ponen huevos y pululan de una manera prodigiosa. Al principio no tienen más que seis patas; pero después de la primera muda les nace el cuarto par. Sus hábitos son muy varios: unos andan errantes, y viven debajo de las piedras, hojas, cortezas, en tierra y en las aguas; otros se mantienen en los abastecimientos de comestibles, tales como la harina, la carne seca, queso y en las materias animales en estado de descomposición; otros viven como parásitos en la piel o en la carne de diversos animales: al Acarus scabiei, se le atribuye el contagio de la sarna, enfermedad de las más asquerosas que afligen a nuestra especie. De innumerables experimentos practicados resulta que este mito, que vive parásito en los granitos de la sarna, puesto sobre la piel sana, le inocula el virus de dicha afección.

El TROMBIDIO DE RASO (Trombidium holosericum, FADR.). Este es un pequeño mito corredor, armado de mandíbulas-pinzas y de palpos salientes: Tiene dos ojos sostenidos por un pediculito fijo; y el cuerpo dividido en dos partes, la primera, muy pequeña, sostiene a más de los ojos y de la boca, los dos primeros pares de patas. Esta especie abunda mucho en nuestros jardines a la primavera, es colorada y de un matiz muy vivo; el abdomen es casi cuadrado, más estrecho posteriormente, y escotado; el dorso está lleno de papilas, velludas en su base y globulosas en su cúspide.

El TROMBIDION COLORANTE (Trombidion tinctorium, FABR.). Es una especie perteneciente a la India, de tamaño tres o cuatro veces mayor que la antecedente, y de un hermoso color rojo, con los pies de color más claro.

El ARADOR DE LOS INSECTOS (Acarus coleoptratorum, FABR.). Tiene una cuarta parte de línea de longitud; el cuerpo liso, escamoso y duro, de color leonado excepto la parte posterior, la cual es blanquizca; las patas son bastante largas, sobre todo las traseras. Esta especie corre muy ligera, y vive parásita en los coleópteros y los zánganos.

El ARADOR DE LOS GIMNÓPTEROS (Acarus gimnopterorum, LIN.). Es de un hermoso color rojo de fuego: vive en las avispas, abejas, libélulas y otros insectos de alas membranosas.

El ARADOR DE LAS MOSCAS (Acarus muscarum, LIN.). Es excesivamente diminuto, y tan solo se presenta como un punto pardo; no obstante, a beneficio de una buena lente se le ve menear sus largas patas traseras: vive parásito debajo del vientre de las moscas.

El ARADOR DEL QUESO (Acarus farinae, FABR.). Tiene el vientre grueso, oval y blanquecino; la cabeza y las patas algo parduzcas. Este arador vive en el queso añejo, en la harina y también en las obleas.

Hay aradores llamados comúnmente Garrapatas; que también son corredores como los trombidios, pero carecen de mandíbulas, sustituyéndolas dos láminas lanceoladas, que en unión con la lengüeta forman un chupador. Tales son los Ixodes, los cuales frecuentan la espesura de las selvas, se cogen de los vegetales de poca altura con las patas delanteras, y tienen las demás extendidas. Igualmente se pegan a la piel de los cuadrúpedos, siendo imposible arrancarlas sin llevarse la porción del cutis a que se agarraron. Ponen una prodigiosa cantidad de huevos, y pululan con tal abundancia en el buey y en el caballo, que los aniquilan en términos a veces que causan su muerte.

El IXODE RICINO (Acarus ricinus, LIN.). Vulgarmente lo llaman Garrapata, y es uno de los parásitos del perro; es de color sanguíneo-oscuro; y los bordes del cuerpo son algo velludos; sus palpos abrazan el chupador.

El IXODE RETICULADO (Ixodes reticulatus, LIN.). Es ceniciento, con manchitas y pequeñas rayas anulares pardo-rojizas; los bordes del abdomen son estriados; los palpos son casi ovales: se pega a los bueyes y adquiere media pulgada de largo cuando está bien hinchado.

El LEPTO AUTUMNAL (Acarus autumnalis, SHAW.). Tiene el cuerpo blando y ovoideo, diminuto y rojizo. Abunda en el otoño en las gramíneas y otras plantas: trepa y penetra en la piel causando insoportable prurito.