Jerónimo López Mozo, «La Lozana de Alberti: de la publicación al escenario», IX Encuentros con la poesía, Fundación Rafael Alberti, El Puerto de Santa María, 2003, pp. 99-127.

El hombre deshabitado fue escrita en 1930 y estrenada en febrero del año siguiente en el teatro de la Zarzuela, de Madrid; Fermín Galán fue escrita en 1931 y estrenada en junio de ese mismo año en el teatro Español, de Madrid.

Hubo de hacerlo de memoria, pues no disponía del texto redactado en Madrid.

Declaraciones hechas a Manuel Bayo en 1970, reproducidas en «Alberti por Alberti», Primer Acto, n.º 150, noviembre 1972, p. 19.

El periodista Ángel Laborda reprodujo la siguiente declaración de Alberti: «La escribí en Buenos Aires en 1956; a fines de ese mismo año pasé por Berlín oriental y Erich Arendt, mi traductor al alemán, la dio a conocer a Bertolt Brecht, a quien gustó mucho y prometió llevarla a escena. Pero unos seis meses después Brecht moría, y la obra, a pesar de haber sido incluida en la programación teatral, no pudo estrenarse en Alemania.» ( Entrevista de Ángel Laborda a Rafael Alberti, «Noche de guerra en el museo del Prado, de Alberti», ABC, 29 noviembre 1978). Un año antes, Alberti había relatado así su encuentro con Brecht a José Monleón: «Fui a ver a Brecht con Erich Arendt, judío alemán, escritor, que vivió exiliado en Colombia, buen conocedor del castellano, traductor de Neruda Brecht nos citó a las siete y media de la mañana para que tomáramos juntos el desayuno. Brecht nos esperaba en su habitación. Nos ofreció un desayuno con jamón y huevos al plato. Arendt le explicó la obra -que no había sido traducida- y luego le fue contando, página a página, lo que iba sucediendo. Al terminar, Brecht me dijo que le gustaba mucho y que no tendría ningún inconveniente en montarla, pero que debía añadir un prólogo aclarando lo que era el Museo del Prado. [...] Entonces yo hice eso. Escribí el prólogo y, cuando iba a enviárselo, me llegó la noticia de su muerte. Opté por mandárselo a su mujer y sé que ella estuvo trabajando con el texto tres o cuatro años, hasta el punto de que en un programa del Berliner Ensemble, que vi en Moscú, aparece Noche de guerra en el Museo del Prado entre sus futuros montajes» (José Monleón, Tiempo y teatro de Rafael Alberti, Primer Acto/Fundación Rafael Alberti, Madrid, 1990, pp. 475-476). A ese encuentro se refirió Alberti en la segunda estrofa de su poema Retornos de Bertold [sic] Brecht: «Me llegas desde aquel ángulo íntimo/ de tu casa de Berlín donde me dieras,/ tímido y bondadoso, una mañana,/ con tu escondido corazón la justa/ lumbre de tu preciosa inteligencia». (Rafael Alberti, Poesía completa, Losada, Buenos Aires, 1961, p. 864)

Alberti lo cuenta en La arboleda perdida, 2, Seix Barral, Barcelona, 1987, pp. 184-185.

Jerónimo López Mozo, art. cit., p. 115. Sobre los detalles de la prohibición ver María Antonia de Isabel Estrada, «Se equivocó la censura, se equivocaba», VIII Encuentros con la poesía, Fundación Rafael Alberti, El Puerto de Santa María, 2001, pp. 113-127. Así como: María Antonia de Isabel Estrada, De lo vivo y cercano (Censura y representación del teatro de Alberti durante el franquismo), Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, Madrid, 2002.

Las notas que Ángel Facio redactó sobre su propuesta están publicadas, bajo el título «Otro montaje para El adefesio» en la revista Pipirijaina, n.º 2, noviembre 1976, pp. 43-48.

Numancia fue estrenada en el teatro Sodre, de Montevideo, el 6 de agosto de 1943; El adefesio, en el teatro Avenida, de Buenos Aires, el 8 de junio de 1944.

Previamente se ocupó de la dramaturgia, por encargo de Ángela Redini y Franco Moroni, responsables del Gruppo de Teatro Incontro, para el espectáculo dirigido en 1973 por Lino Britto y José Luis Lifante. Meses después, se hizo cargo de la dirección, y el espectáculo fue estrenado en Gela (Sicilia) en 1973. Todavía dirigiría una nueva versión escrita por el propio Alberti, que vio la luz en 1974 en Roma.