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Aquí se interrumpe la animada relación de Estete, al final del folio 12 v., último de los que existen. Es muy sensible que tan precioso documento se halle trunco, pues las noticias que contiene son en alto grado interesantes. También la relación de Pedro Sancho termina en Jauja.

Pondremos aquí algunas noticias que nos da Garcilaso acerca de las cacerías:

«A estas cacerías llamavan Chacu, que quiere decir atajar, porque atajaban la caça».

«En todos sus reinos era vedado el caçar sino aves menores para la comida de los Governadores Incas, y para los Curacas y esto mandado de la justicia, porque los indios con el deleite de la caça no se hiciesen holgazanes».

«A cierto tiempo del Año, pasada la cría, salía el Inca a la provincia que le parescía, conforme a su gusto, y según que las cosas de la Paz, o de la Guerra davan lugar. Mandava que saliesen veinte o treinta mil Indios, o más, o menos que los que eran menester, para el espacio de tierra que avían de atajar».

«Estas Cacerías se hacían en cada distrito de quatro en quatro años, dejando pasar tres años de la una a la otra».

(Comentarios Reales, Primera Parte, páginas 178 y 179).