Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.

[150] [151]

ArribaAbajo

La �orientalización� de las minorías nacionales de China

Mario Esteban Rodríguez (155)

Centro de Estudios de Asia Oriental

Universidad Autónoma de Madrid



Resumen

     Partiendo de la teoría del �Orientalismo�, desarrollada por Edward Saïd, este artículo examina cómo el Partido Comunista Chino crea la identidad nacional colectiva de las minorías étnicas de la República Popular China con vistas a mantenerse en el poder. Este discurso es básicamente un instrumento de poder en manos del Partido Comunista Chino para desarticular el potencial separatista de la identidad nacional tradicional de las minorías: y para reforzar la identidad nacional oficial y el respaldo de la población hacia el partido. Por lo tanto, este ensayo identifica el ámbito político como el principal generador de identidad nacional en la República Popular China, con extremadamente más impacto que el nicho cultural o el étnico.

Abstract

     Invoking the theory of the �Orientalism�, developed by Edward Saïd, this article examunes how the Chinese Communist Party produces a collective national identity to the ethnic minorities of People's Republic of China in order to keep the power. This discourse is basically an instrument of power in the hand of the Chinese Communist Party to cancel the splitting potential of the traditional national identity of the minorities, and to strenoth the official national identity and the support of the population for the party. Thus, this papor identifies the political field as the main generator of national identities in the People's Republic of China, with extremely more impact than the cultural or the ethnic niche. [152]

     Lo primero que debemos constatar es que hay tal variedad de culturas y tan distintas en la República Popular China (RPCH) que no se mantiene �la congruencia entre la unidad nacional y la política� (156), por lo que no podemos definir a China como estado-nación. A pesar de ello, uno de los dos principales pilares sobre los que se legítima el Partido Comunista Chino (PCCH) en el poder es el mantenimiento de la unidad nacional (157). Por tanto, comprendemos la gran preocupación de las autoridades de Beijing por la cuestión de las minorías nacionales. El tema de las nacionalidades es prioritario para el PCCH pues una revuelta social en alguna de las áreas habitadas por las minorías étnicas, especialmente probable en las zonas de Tíbet y Xinjiang, sería una grave amenaza para su continuidad al frente de la RPCH al poner en peligro tanto la integridad del estado como los niveles actuales de crecimiento económico.

     De ahí que los sucesivos gobiernos comunistas hayan ejercido un férreo control sobre las actividades de las minorías nacionales, mediante un sistema educativo y unos medios de comunicación desde los que fomentan la consolidación de un estado unificado e intentaron sustituir la conciencia étnica por la de clase (158). Para reducir los riesgos de que se produzcan revueltas las autoridades aplican, por un lado, una política de fuerza, que a largo plazo siempre es insuficiente, y, por otro, una serie de medidas que conceden importantes privilegios a las minorías con lo que el gobierno central quiere ganarse la adhesión, el apoyo, de estos pueblos.

     Lo que se pretende con este artículo es analizar el proceso de creación de las identidades nacionales en China, tanto de las minorías, como de la oficial del estado, para subrayar su eficacia como medio de control de la población y como estrategia del PCCH para perpetuarse en el poder. Las conclusiones a las que llegaremos deben interpretarse dentro del debate sobre la génesis de las identidades nacionales, pues consideramos que suponen una nueva evidencia en contra de las teorías esencialistas al quedar patente el peso prioritario que tienen los factores políticos en la creación de identidades colectivas. Nosotros vamos a subrayar algunos de los mecanismos que emplea el PCCH para configurar las identidades nacionales de la población, con vistas a respaldar sus políticas, no sólo ante las propias minorías, sino también ante la mayoría han, que sufre un claro agravio comparativo con los privilegios que se conceden a las otras nacionalidades. A los miembros de este grupo mayoritario se les exigen grandes sacrificios como no poder ir a la universidad para que lo haga un miembro de una minoría étnica con una nota de entrada mucho menor que la suya, o restringir su número de hijos mientras que las minorías gozan de una [153] política de control de natalidad mucho más laxa. Aquí nos detendremos en la función esencial que desempeña la representación oficial de las minorías étnicas para que los han se sientan partícipes de una �labor mesiánica� por la que las minorías atrasadas son llevadas de la mano a la civilización, a la modernidad que ellos ya disfrutan. Estamos ante lo que Edward Saïd denominaría una �orientalización� de las minorías étnicas chinas. Para Saïd:

              El orientalismo es el término genérico que empleo para describir la aproximación occidental hacia Oriente, es una disciplina a través de la cual Oriente fue (y es) abordado sistemáticamente como tema de estudio, de descubrimiento y de práctica. Pero además utilizo la palabra para designar esa colección de sueños, imágenes y vocabularios que están a disposición de cualquiera que intente hablar de lo que queda al este de la línea divisoria. Estos dos aspectos del orientalismo no son incompatibles, ya que utilizándolos Europa pudo avanzar hacia Oriente con seguridad y no de una manera metafórica (159).           

     Por tanto, nos encontramos con un discurso de poder para justificar una política paternalista y centralista que ofrece a las minorías étnicas chinas la modernización ligada a la adopción de la cultura han. De esta manera, la pauta de actuación del PCCH es muy similar a la seguida por los grandes imperios coloniales de los siglos XIX y XX. Estos imperios creaban una identidad para los pueblos que dominaban mediante un discurso científico cargado de intencionalidad política, pues estas identidades que generaban y difundían entre estas comunidades, hasta que las asimilaban como propias, tenían como objetivo facilitar el control político sobre dichos grupos. Además, este énfasis en las diferencias respecto al otro, que es presentado como atrasado, ayuda a fomentar el sentimiento de unidad en el grupo dominante, potenciando un sentimiento nacionalista que, en este caso, el PCCH articula con frecuencia para movilizar a la población. Además, también mejora la percepción que el grupo dominante tiene de sí mismo y, por consiguiente, la valoración de sus gobernantes.

     Para desarrollar los objetivos que hemos planteado, primero dedicaremos un epígrafe a describir el proceso de catalogación oficial de las 55 minorías étnicas que se reconocen en la RPCH como tales. En el siguiente apartado se pasa a diseccionar el discurso de las autoridades chinas hacia las minorías, basándonos en el modelo de la �orientalización� de Edward Saïd, para poner de manifiesto cómo se subordina la realidad de estas minorías al concepto, creado artificialmente por el PCCH con fines eminentemente políticos. Ya en la tercera sección analizamos cómo esta labor de definición del otro no sólo sirve [154] para reducir su capacidad de autodeternimación, sino también para proporcionar a la mayoría han, que está muy lejos de ser un grupo étnicamente homogéneo, un grupo de referencia para aglutinarse por oposición. Asimismo, se fragua una división jerárquica entre la mayoría han y las minorías �retrasadas�, con lo que se subraya implícitamente el éxito del modelo de desarrollo aplicado por el PCCH y de la cultura han, pretendiéndose incorporar a las minorías a ambos.



CONFIGURACIÓN DE LAS NACIONALIDADES DE LA REPÚBLICA POPULAR CHINA

     Según la Constitución de la República Popular China hay 56 nacionalidades (minzu (160)), de las cuales 55 son consideradas minorías. Estos grupos minoritarios comprendían a 110 millones de personas en el censo de 1995 y tienen el mismo estatus oficial que la mayoría han, identificada por defecto con lo chino. Esta situación es el fruto de un largo proceso iniciado en los primeros años de la década de los cincuenta, cuando se lanzó una política que debía establecer a qué grupos étnicos se les concedía la condición de nacionalidad.

     El gobierno central envió equipos de científicos a todas las regiones de China para identificar las afiliaciones culturales y lingüísticas de cada comunidad. Una vez se recogieron estos datos, la versión oficial sostiene que se siguió el patrón stalinista para decidir finalmente qué grupos eran nacionalidades y cuáles no. Según dicho modelo, se define a una nación como una comunidad estable con un lenguaje, territorio, economía y cultura comunes, pero son pocas las minorías étnicas chinas constituidas como nacionalidades que cumplen los cuatro requisitos. Aquí resulta imprescindible contextualizar los orígenes del modelo de nación stalinista, que surge por oposición al austromarxista. Mientras que el paradigma austromarxista diferencia un ámbito para la organización política, culturalmente neutral y con base territorial, y otro para la organización cultural, a la que cada individuo se adscribe libremente, el stalinista subordina el marco cultural al político y adscribe obligatoriamente a cada sujeto a una determinada nacionalidad en función de los intereses del partido.

     Prueba de la insuficiencia del modelo stalinista es que sólo se reconocían cuarenta y una minorías nacionales en el censo de 1953, mientras que en la actualidad se reconocen cincuenta y cinco, sin contar a los han. Además, aún aparecen en el censo de 1990 749.341 personas no adscritas a ninguna minoría nacional, que se clasifican bajo el epígrafe de no identificado.

     El mantenimiento de la unidad estatal es un tema clave para el gobierno [155] del PCCH, pues siendo el mayor logro histórico que le atribuyen la población al partido es una fuente vital de legitimidad para el gobierno. Esta apreciación nos pone en la pista de las líneas directrices quc sigue la actual política del PCCH hacia las minorías. La práctica común ha sido, y está siendo, otorgar a un grupo étnico la categoría de nacionalidad sobre una serie de pautas ad hoc, supuestamente objetivas y universales, que no hacen más que maquillar los condicionantes políticos que determinan que se reconozca a una serie de comunidades como nacionalidades y que se niegue esta posibilidad a otras.

     Algunos ejemplos ilustrativos de lo mencionado en el párrafo anterior son: los hili, los tadyikos y el de los deng. Los hui, definidos en un primer momento como musulmanes que hablan mandarín y que comparten una cultura muy parecida a la de los han, sólo se han identificado como nacionalidad después de que las autoridades les impusiese esta etiqueta. Eso sí, ahora, gracias a una intensa labor institucional de revitalización cultural, se consideran a sí mismos una auténtica etnia a la que pertenecen grupos no islámicos (161). A primera vista, en un caso como el de los hui nos puede parecer contraproducente la política del gobierno chino de articular una minoría, de nada menos que 81612.001 personas según el censo de 1990, con el consiguiente riesgo de fragmentación interna. Por el contrario, lo que se ha logrado con esta medida ha sido evitar que se forme un frente islámico unificado en la región de Xinjiang. Para lograrlo, se les han concedido a los hui los mismos privilegios que a cualquier minoría étnica, de forma que estos sientan que tienen más que ganar con Xinjiang, siendo parte de China, que con un estado independiente controlado por los uygures. Además, al reforzarse una identificación étnica se dificulta la posible aparición de un movimiento panislámico intergrupal.

     Otro caso sugerente es el de los denominados tadyikos, que son un grupo iranio de unos 33.000 miembros que vive en la región del Pamir. La mayor parte de esta población pertenece a dos grupos cultural y lingüísticamente diferenciados, los vakh y los sariqoli, pero las autoridades chinas les han unido a todos bajo esta misma nomenclatura. La situación es especialmente llamativa si tenemos en cuenta que el tadylko no se habla en la RPCH, sino en el vecino Tadyikistán, es decir, que no hay tadyikos en China, de ahí que se escoja una denominación carente de capacidad de adhesión para los involucrados.

     Para poner fin a esta serie de ejemplos, los deng son una muestra de los grupos étnicos a los que aún no se ha reconocido el grado de nacionalidad. Este colectivo vive al sur de Tíbet y el gobierno del PCCH aún no les ha otorgado la categoría de nacionalidad porque, aunque los deng se consideran una nacionalidad diferente de los tibetanos e incluso han amenazado con la secesión de la RPCH si se persiste en la negación de su diferencialidad, las autoridades [156] tibetanas se oponen radicalmente a este movimiento alegando que sus reivindicaciones amenazan la integridad de la nacionalidad tibetana. Resulta paradójico que los tibetanos empleen contra los deng los mismos argumentos que emplea Beijing contra ellos y lo hagan con tal fuerza que, para no aumentar la tensión entre el gobierno central y Tíbet, lo que tendría una importante repercusión nacional e internacional, el gobierno chino se ve obligado a no reconocer a este grupo étnico como nacionalidad.

     En resumen, vemos como es el propio estado central quien imagina a las comunidades minoritarias, enviando expertos de Instituto para la Investigación de las Nacionalidades de la Academias de Ciencias Sociales de Pekín, que disfrazan de ciencia el discurso que, con un objetivo político claro, representará a dichas comunidades.



LA �ORIENTALIZACIÓN� DE LAS MINORÍAS NACIONALES: PODER DISCURSIVO Y PODER POLÍTICO

     Lo primero que tenemos que hacer en este apartado es profundizar en la idea de orientalismo. Al acercamos a este concepto, lo primero que llama la atención es la diversidad de cuestiones que abarca. El orientalismo combina una dimensión epistemológica, lo que Saïd llama orientalismo latente, que elabora una imagen verosímil de Oriente a los ojos occidentales, una imagen jerárquica entre dos mundos, una imagen fija que �es� Oriente; con una dimensión política, orientalismo manifiesto, si los occidentales son superiores y los únicos que conocen a los orientales deberán ser ellos quienes les gobiernen por el bien de los propios orientales, un bien que sólo nosotros conocemos. Este patrón es perfectamente aplicable a las relaciones que mantiene el PCCH con las nacionalidades minoritarias de China.

     La clave que pretendemos subrayar es que la dimensión política se convierte en motor de la discursiva, �el orientalismo es en sí mismo el producto de ciertas fuerzas y actividades de carácter político� (162), pues el orientalismo manifiesto da sentido práctico al orientalismo latente y lo impulsa con la concesión de fondos estatales para el desarrollo de este campo de estudios. En el caso de la RPCH vemos cómo las medidas que ha tomado el partido para definir y representar a las distintas minorías étnicas tienen una clara motivación política: aglutinar a la mayoría han, símbolo de lo avanzado, por oposición a las minorías, justificar una serie de políticas que favorecen a las nacionalidades minoritarias en un intento de integrarlas definitivamente dentro de la vida social, económica y política del país, y presentar un modelo de modernidad a las minorías étnicas hacia el que deben tender. En definitiva, el objetivo global [157] de la �orientalización� que hace el gobierno chino de sus minorías es respaldar lo que Michael Hetcher llamó �colonialismo interno�, como medio para perpetuarse en el poder. Por consiguiente, el auge del orientalismo en la RPCE es inseparable de la relación hegemónica que se establece entre la mayoría han, más industrializada y urbanizada, y el grueso de las minorías étnicas. De esta manera, si tenemos en cuenta que con la orientalización de las minorías no se nos dice cómo son éstas sino como quieren verlas las autoridades para poder implantar su proyecto modernizador y homogenizador, vemos como el discurso orientalista aporta información sobre el representador y no sobre el representado. Pero pasemos sin más dilación a ver cómo se materializa dicho discurso (163):

              Me sentaré en casa delante del televisor a ver el programa especial de Año Nuevo. Salen multitud de acróbatas, cantantes, cómicos, y bailes regionales. Esa gente de las minorías sí que sabe cantar y bailar... realmente me encanta ver a esas chicas de las minorías, ellas son mucho más liberales que nuestras mujeres han. Ellas se bañan desnudas en los ríos y llevan mucha menos ropa. Nuestras mujeres no pueden actuar así... algunos de mis amigos han bajado a Yunnan... �o fue a Guizhou? Para ver si se encontraban con alguna chica de las minorías, ellas son tan sensuales. Las mujeres han no son libres como ellas. Es tan frustrante...         

     La jerarquización que se establece desde una perspectiva evolucionista entre la mayoría han y las distintas minorías tiene su reflejo en la representación que se hace de éstas, relacionándolas con lo femenino, mientras que lo han se asocia a lo masculino. Esta asociación de cada grupo a unos determinados roles sexuales tiene un significado bastante claro, especialmente si tenemos en cuenta que la cultura tradicional china siempre ha establecido una marcada jerarquía entre ambos géneros. Las minorías suelen aparecer representadas mediante jovencitas sonrientes que llevan vestidos de vivos colores. Esto se relaciona con la política de planificación familiar menos estricta de la que disfrutan las minorías étnicas. Se les permite casarse a una edad más temprana y tener un mayor número de hijos. El hecho de que las mujeres de las minorías puedan tener más hijos que las mujeres han refuerza la imagen de las minorías como lo incontrolado, lo sensual, lo fértil, mientras que lo han representa lo ordenado, lo civilizado, lo desarrollado. Esto puede llevar a situaciones tan contradictorias como la imagen de liberación sexual que se da de las minorías étnicas cuando los grupos musulmanes son los más conservadores de [158]toda China. De esta manera, presentando a las minorías como lo exótico, se consigue que lo han aparezca como lo no marcado. De hecho, en el subconsciente colectivo suele considerarse equivalente lo han a lo chino. Es más, esto llega a manifestarse institucionalmente en algunos casos, como demuestra el hecho de que no haya un departamento de estudios han en el Instituto para Investigación de las Nacionalidades de la Academia de Ciencias sociales de Beijing. Además, los han siempre aparecen representados occidentalizados, nunca con sus trajes típicos, esas ropas que anclan a las minorías al pasado. De esta manera se promociona a los han como a la vanguardia de la sociedad china, se les representa de forma autocomplaciente, como el estadio de máxima evolución, lo que echa por tierra el tópico de que la cultura china, y las orientales en general, valora tanto lo moderno como la tradición buscando el equilibrio entre ambos.

     Como señala Safran (1998, p. 6), se puede establecer un paralelismo entre la mission civilisatrice de los revolucionarios jacobinos y la extensión de la cultura han y el mandarín, más avanzados, a las �retrasadas� minorías étnicas. En el artículo cuarto de la Constitución de la RPCH puede leerse: �Conforme a las peculiaridades y necesidades de cada minoría nacional, el Estado ayuda a las zonas de minorías nacionales a acelerar su desarrollo económico y cultural� (164).

     Nos encontramos, por tanto, con un discurso impregnado de evolucionismo social, donde se establece una jerarquía entre las distintas sociedades en función de su grado de desarrollo. De esta manera, encontramos la influencia del pensamiento evolucionista de Lewis Henry Morgan que llega al marxismo a través de la obra de Engels El Origen de la Familia, la Propiedad Privada y del Estado. Desde esta perspectiva las minorías serían ejemplos del comunismo primitivo, que tras un largo proceso de evolución culmina en la sociedad comunista han. Esto no quita para que se valoren oficialmente algunas prácticas tradicionales de estos pueblos, pero no como modelos válidos para un desarrollo futuro, sino como ilustres reliquias del pasado que las autoridades centrales pueden utilizar para legitimarse ante las minorías. Vamos a centramos en el caso de los mongoles y la reivindicación de la figura de Gengis Khan.

     La imagen de Gengis Khan tiene un profundo significado dentro de las relaciones entre mongoles y han pues, dado el importante papel histórico que jugó este líder mongol sobre el control de China. El PCCH a la hora de buscar el apoyo de los mongoles inventa, nada más llegar al poder, una tradición de veneración entre el partido y Gengis Khan equivalente a la que se establece en China con otras figuras históricas clave. Así, el gobierno central hace suyos a los antepasados de los mongoles, su historia, que se hace aparecer vinculada [159] sin solución de continuidad a la del resto de la RPCH. De esta manera, el gobierno comunista también se legitima como guardián del legado cultural de las minorías, lo que explica porqué el gobierno de Mao aportó Una gran cantidad de fondos en 1949 para reconstruir el mausoleo de Gengis Khan en Ordos, que hoy se ha convertido en un centro de peregrinaje flanqueado de tiendas donde podemos comprar toda clase de objetos relacionados con el gran Khan. Como Anderson señala, este último detalle, el de la difusión masiva de imágenes reproducidas en serie, tiene un fuerte valor simbólico que sirve como elemento de cohesión en la socialización del individuo (165).

     Por otra parte, este esfuerzo han por convertirse en los creadores y difusores de las identidades de las diferentes minorías étnicas les coloca en una clara situación de poder, que se plasma, por ejemplo, en que no se publican ni gramáticas ni historias de estos pueblos escritas por ellos mismos. Hasta tal punto llega el afán homogeneizador de las autoridades centrales que toda la RPCH se rige por el mismo uso horario. De esta manera, se intenta crear la ficción de que todos viven en el mismo tiempo, reforzando la sensación de simultaneidad, clave para desarrollar una identidad colectiva homogénea. Esto lleva a que en las zonas con un sentimiento independentista más arraigado, Tibet y Xinjiang, exista un sistema horario informal de dos horas de adelanto respecto a Beijing. Mientras los han se rigen por el horario pequinés, las minorías tienden a emplear el horario local. También desde Beijing, se ha manipulado el tiempo histórico de estos grupos para defender los intereses políticos del gobierno chino:

              Los hablantes del uygur moderno son considerados descendientes directos de los hablantes turcos sedentarios que poblaban en el siglo XI los oasis de �Xinjiang�, aunque existen numerosas evidencias históricas de que los pobladores medievales de los oasis del Turkestán oriental hablaban indoeuropeo y mongol, así como varios dialectos turcos (166).           

     La extensión de los preceptos evolucionistas del darwinismo social a las minorías ha hecho que éstas también asuman como propia una concepción jerarquizada del mundo, donde todos los pueblos establecen relaciones de superioridad-inferioridad respecto a otros. De ahí que los naxi urbanos se [160] refieran a otros pueblos vecinos y menos desarrollados que ellos mediante estereotipos despectivos (167): los bai son vistos como pobres, sucios, deshonestos, los yi como pobres, sucios y comedores de patata y maíz, mientras que los tibetanos son tachados de salvajes. Se crea una escala entre las distintas cimas, midiéndose su desarrollo respecto al ideal que supone la civilización han. De esta manera, se definen como más avanzados los grupos que cada vez se parecen más a los han, dejando de lado sus particularidades, o reduciendo sus características diferenciales a un folclore y una gastronomía atractivos para los turistas. Esto es lo que permite a los naxi urbanos ver a los que viven en la montaña y conservan en mayor medida sus tradiciones como más atrasados que ellos. Por consiguiente, nos encontramos con la paradoja de que una etnia que orgullosamente se define como naxi, respecto a las minorías que la rodean, mira con superioridad a los miembros de su cultura que más conservan sus propias tradiciones y una lengua con menos influencias del mandarín.



LA �ORIENTALIZACIÓN� DE LAS MINORÍAS: LA CONSOLIDACIÓN DEL YO A TRAVÉS DE LA IMAGEN DEL OTRO

     Al igual que hace Saïd en su obra Orientalismo, nosotros no pretendemos explicar nada sobre lo representado, sino sobre el representador. El estudio de la imagen que proyectan los han de las minorías étnicas no nos dice nada sobre estos grupos, sino que nos habla de los propios han:

              La empresa de acentuar el carácter exótico de las minorías y multiplicar sus representaciones cobra una importancia creciente con la emergencia de la nación-estado china y es esencial para su proyecto de nacionalización y modernización: se homogeneiza a la mayoría a expensas de �exotizar� a una minoría (168).           

     Esta labor de homogeneización es tan importante en China porque el concepto de han es muy reciente y difícilmente sostenible sobre criterios objetivos (169), a la vez que imprescindible para mantener la configuración actual de la RPCH. La noción de han como nacionalidad alcanzó su popularidad actual [161] con el pensamiento de Sun Yatsen (1866-1925), para quien había cinco etnias en China: los han, los man (manchús), los meng (mongoles), los zang (tibetanos) y los hui (donde se incluía a todos los musulmanes de China). Bajo la denominación de han agrupó a más del 90 por ciento de la población china, con el propósito de hacer triunfar su proyecto republicano y derrocar a la dinastía Qing de origen manchú. En este caso se pretende, desde un proyecto republicano, producir un cambio en el sistema de gobierno del país. Para ello, resulta imprescindible la caída de la dinastía Qing, no porque sea manchú, sino por ser una monarquía que no estaba resolviendo los múltiples problemas que tenía que enfrentar China en la época, especialmente por su delicada situación con las potencias coloniales extranjeras. Para lograr este objetivo político, se busca la estrategia que permita unir al máximo posible de población en oposición a la dinastía Qing y se opta por polarizar el cleavage étnico, por su capacidad de inclusión, entre otras tácticas movilizadoras posibles. Esto no quita para que sea más fácil unificar a grupos con un núcleo étnico y con una identidad protonacional común, pero sin olvidar que lo que se consideran límites fijos, disparidades que implican pertenencia a nacionalidades diferentes, y límites flexibles, divergencias que no impiden la unión de sujetos culturalmente distintos bajo una misma identidad nacional, está condicionado históricamente (170).

     Vemos como en este caso estamos ante un �nacionalismo de integración� exitoso, donde la identidad nacional sirve de categoría inclusiva en la que tienen cabida personas con importantes diferencias raciales, lingüísticas, culturales, o religiosas. Y para poder imaginar a este grupo tan heterogéneo como una única nacionalidad es necesario el refuerzo de sus diferencias respecto al resto, pues al acentuarse lo que les distingue de los demás parece que ellos están más unidos entre sí. Para ilustrar la gran diversidad que existe dentro de este concepto homogeneizador de lo han vamos a centramos en las diferencias lingüísticas, que se suponen las menores de todas. Oficialmente se sostiene que todos los han hablan mandarín, mientras que no todas las minorías lo hacen. Eso sí, se reconocen múltiples variantes del mandarín, etiquetadas por las autoridades como dialectos. Pero si entendemos que para encontramos ante dialectos de una misma lengua, y no ante lenguas distintas, estos no deben ser ininteligibles entre sí, en este caso nos encontraríamos con lenguas distintas más que con dialectos pues �probablemente existen tantas diferencias entre el dialecto de Beijing y el de Chaozhou como entre el italiano y el francés� (171).

     Lo expuesto en los párrafos anteriores nos lleva a matizar las ideas de [162] Smith y Duara sobre la existencia de límites objetivos a la imaginación de nacionalidades. Lo que se desprende del caso anterior es la arbitrariedad de los límites de la nación, no la configuración de identidades nacionales determinada por criterios sustantivos relacionados con el núcleo étnico. Con esto no queremos negar la existencia de dicho núcleo étnico, ni su carácter diferencial entre unos grupos y otros, sino que estas diferencias no explican porqué sí se aglutinen bajo una misma categoría nacional algunos grupos con diferentes núcleos étnico y otros no. En última instancia, para lo único que se utilizan las disparidades entre los distintos núcleos étnicos es para legitimar divisiones que se han hecho siguiendo otros criterios. Al hilo de este ejemplo se entienden las palabras de Kedourie (1988) para quien es más correcto decir que: �la identidad nacional es el producto de la doctrina nacionalista que la doctrina nacionalista es la emancipación o expresión de la identidad nacional�.

     Otro mecanismo que se empleó para dar consistencia a la nación han fue la construcción de un mito de origen común. Numerosas excavaciones se desarrollaron en el norte de China para reforzar la idea de que los han eran descendientes de una poderosa civilización que vivía desde el Paleolítico en el valle del río Amarillo (172). Esta historia, que tuvo su origen y cima en el maoísmo, fue repetida hasta la saciedad por todo el aparato científico-educativo de la RPCH. Pero este mito de origen creado por los norteños en torno al río Amarillo, acabó siendo rebatido por múltiples hallazgos arqueológicos en el sur de China. Se encontraron yacimientos más antiguos en el sur y, aunque tuvo que cambiarse la historia no se cambió el punto sobre el que se ponía el énfasis. Un claro ejemplo es este texto, firmado por el antiguo agregado cultural de la embajada de la RPCH en España:

              El pasado más antiguo de los chinos, ya comprobado por hallazgos arqueológicos, es el hombre de Yuanmou (el homo erectus yuanmouensis) que vivió en Yunnan, Suroeste de China, hace 1,7 millones de años, pero nuestro antepasado más conocido en el mundo es sin duda el hombre de Beijing (el Sinantropus pekinensis), que vivió en la planicie del Norte de China (la cursiva es mía) hace medio millón de años (173).           

     Aunque finalmente todos estos esfuerzos por fraguar una identidad han parecen haber tenido éxito, esto no quiere decir que no se hayan tenido que sortear múltiples dificultades para establecer una identidad nacional sólida en la RPC. Destaca, junto a los ya mencionados, el problema de la multiplicidad [163] de lealtades, que no es, y especialmente no ha sido, patrimonio exclusivo de las minorías étnicas, sino que, como vemos en Townsend, también era característico entre los han pues, no nos cansaremos de recordarlo, la idea de lo han como grupo étnico que abarca a más del 90 por ciento de la población china y con una identidad nacional común y focalizada hacia un gobierno central no se fraguó hasta principios de siglo:

En el interior de las regiones y entre ellas existían divisiones comunitarias pronunciadas. En las zonas periféricas se debía en parte a la presencia de súbditos que no eran han, pero el problema fundamental radicaba en las divisiones internas de los han y la tendencia persistente entre el pueblo (y gran parte de la elite) de conceder sus lealtades primordiales a estas comunidades y organizaciones locales (174).



CONCLUSIONES

     Lo primero que queremos hacer es aclarar algún aspecto que, a nuestro juicio, puede parecer contradictorio: si las autoridades pretenden asimilar a las minorías para evitar un posible movimiento separatista, que pusiese en peligro la soberanía de la RPCH y la estabilidad de su economía, porque fomentan costumbres propias de estos pueblos, como sus fiestas o sus bailes. Nuestra explicación parte del fracaso de la política meramente asimilacionista que se aplicó durante algunos períodos del gobierno de Mao (175)

. Con posterioridad las autoridades han optado más que por reprimir la cultura de estos pueblos, por intentar reducir su identidad a aspectos folclóricos, que difícilmente pueden polarizarse y servir de respaldo cultural a una revuelta. El PCCH está consiguiendo que las minorías reinterpreten su relación con su cultura materna. Las minorías que tienen más contacto con las zonas urbanas van abandonando progresivamente su forma de vida tradicional, que deja de ser vista como válida para su proyecto vital, y se reduce a un venerable legado cultural milenario, materializado en una Gastronomía y una forma de vestir características. Una vez que la cultura de las minorías se ancla al pasado y se presenta la cultura han, respaldada por el partido, como la llave hacia la modernidad, no sólo se reducen las posibilidades de insurrección en las zonas de las minorías, sino que se refuerza la identidad han y el modelo de desarrollo alcanzado por el PCCH.

     Los hechos expuestos en el artículo contradicen la visión nacionalista que [164] otorga a las naciones una existencia inmemorial luchando o no por construir su propio estado. Lo que nosotros encontramos es una nación que necesita al estado para existir, y que sólo puede hacerlo en la forma en que éste la define. Por su parte, en las sociedades modernas, el estado necesita a la nación para mantenerse en el poder pues para legitimar su existencia debe mostrar que representa a algo distinto de sí mismo, de ahí que debamos �permanecer a una distancia crítica de la propia presunción del estado de que la nación representa una entidad autónoma presente en la forma en que el estado ha elegido para representarla, pero independientemente del estado� (176). [165]

Cifras de población y distribución de las nacionalidades minoritarias de China. Año 1990
 
Nacionalidad

Población

     

Distribución

Zhuang

15.489.630

Gaungxi, Yunnan, Guizhou, Guangdong, Hunan
Manchú

9.821.180

Liaoning, Hebei, Heilongjan, Jilin
Hui

8.602.978

Ningxia, Gansu, Hernan, Qinghai
Miao

7.398.035

Guizhou, Hunan, Yunnan
Uygur

7.214.431

Xinjiang
Yi

6.572.173

Sichuan, Yunnan, Guizhou
Tujia

5.704.223

Hunan, Hubei
Mongol

4.806.849

Mongolia interior, Jilin, Liaoning, Heilongjiang
Tibetana

4.593.330

Tíber, Sichuan, Qinghai
Bouyei

2.545.059

Guizhou
Dong

2.514.014

Guizhou, Hunan, Guangxi
Yao

2.134.013

Guangxi, Hunan, Yunnan, Guangdong
Coreana

1.920.597

Jilin, Heilongjiang, Liaoning
Bai

1.594.827

Yunnan, Sichuan, Guizhou
Hani

1.253.952

Yunnan
Kazaka

1.111.718

Xinjiang
Li

1.110.900

Hainan
Dai

1.025.128

Yunnan
She

630.378

Zhejiang, Jiangxi, Guangdong
Lisu

574.856

Yunnan, Sichuan
Gelo

437.997

Guizhou
Lahu

411.476

Yunnan
Dongxiang

373.872

Gansu, Xinjiang
Va

351.974

Yunnan
Shui

345.993

Guizhou, Guangxi
Naxi

278.009

Yunnan
Qiang

198.624

Sichuam
Tu

191.624

Guizhou, Gansu
Xibe

172.847

Liaoning, Xinjiang, Heilongjiang
Mulam

159.328

Guangxi
Kyrgyz

141.549

Xinjiang [166]
Daur

121.357

Mongolia interior, Heilongjiang
Jingpo

119.209

Yunnan
Salar

87.697

Qinghai, Gansu
Blang

82.280

Yunnan
Maonan

71.968

Guangxi
Tajika

33.538

Xinjiang
Pumi

29.657

Yunnan
Achang

27.708

Yunnan
Un

27.123

Yunnan
Ewenki

26.315

Mongolia interior, Heilongjiang
Jing

18.915

Guangxi
Jino

18.021

Yunnan
Deang

15.462

Yunnan
Uzbeka

14.502

Xinjiang
Rusa

13.504

Xinjiang, Mongolia interior
Uygur

12.297

Gansu
Bonan

12.212

Gansu
Moinba

7.475

Tíbet
Orogen

6.965

Heilongjiang, Mongolia interior
Drung

5.816

Yunnan
Tártara

4.873

Xinjiang
Hezhe

3.245

Heilongjiang
Gaoshan

2.909

(aborígenes taiwaneses que viven en el continente)
Lhoba

2.312

Tíbet
No identificados

749.341

 
Total de población no Han

91.200.341 (8,2% de la población total)

Extraído de Fisac (2000, p. 207-208). Fuentes: Zhongguo renkou tongli nianjian, 1990, Zhongguo tongji chubanshe, Beijing, 1991, y Ma Yin (ed.), China's Minority Nationalities, Foreign Languages Press, Beijing. 1989. Las últimas estadísticas de población de las nacionalidades minoritarias de las que se disponen son del censo de 1990. En los sucesivos anuarios estadísticos que se han publicado existen discrepancias variadas. [167]



BIBLIOGRAFÍA

     ANDERSON, Benedict: Comunidades Imaginadas, Fondo de Cultura Económica, Méjico, 1993.

          �Taiwan nationalism 'not a problem'�, en The Taipei Times, 27 de abril de 2000.

     CUI, Weiben: �Una cultura milenaria y plural�, en China: Turismo, Tradición y Modernidad, Madrid, 1997.

     DIKÖTTER, F.: The Discourse of Race in Modern China, C. Hurst, Londres. 1992.

          �Identidad�, en China en Transición. Sociedad, Cultura, Política y Economía, Fisac y Tsang (eds.), Editions Bellaterra, Barcelona, 2000, pp 165-187.

     DITTMER, LOWELL y KIM, Samuel (eds.): China's Quest For National Identity, Cornell University Press, 1993.

     DUARA, Prasenjit: Rescuing History From The Nation, University of Chicago Press, Chicago, 1995.

     DWYER, Arienne M.: �The texture of tongues: languages and power in China�, en SAFRAN, William (ed.): �Nationalism and Ethnoregional Identities in China�, Nationalism & Ethnic Politics, vol. 4, n� 1-2, primavera/verano. 1998, pp. 68-87.

     FISAC, Taciana, y TSANG, Steve (eds.): China en Transición. Sociedad, Cultura, Política y Economía, Editions Bellaterra, Barcelona, 2000, pp. 135-164.

     FITZGERALD, John: �El Estado sin Nación�, en Nacionalisnio chino, Unger (ed.), Edicions Bellaterra, Barcelona, 1999, pp. 95-132.

     FRIEDMAN, Edward: �Reconstructing China's National Identity: A Southern Alternative to Mao-era Anti-imperialism nationalism�, en The Journal of Asian Studies, vol 53, n� 1, 1994, pp. 67-88.

     GELLNER, Ernest: Naciones y nacionalismo, Alianza Editorial, Madrid, 1988.

     GLADNEY, Dru C.: Muslim Chinese, Harvard University Press, Cambridge (Massachusetts), 1991.

          �Representing nacionality in china: Refiguring Majority/Minority Identities�, en The Journal of Asian Studies, vol 53, no 1, 1994, pp. 92-123.

     HOBSBAWN, Elie.: The Invention of Tradition, Cambridge University Press, Cambridge, 1983.

     KEDOURIE, Elie: Nacionalismo, Centro de Estudios Constitucionales, Madrid, 1988. [168]

     KORMONDY, Edward.: �Observations on Minority Education, Cultural Preservation and Economic Devlopment in China�, en Compare, vol. 25, n� 2 (1995), pp. 161-178.

     MACKERRAS, Colin: China's Minorities: Integration and Modernization in the Twentieth Century, Oxford University Press, Hong Kong, 1994.

     NEWBY, Laura: �Las minorías étnicas�, en China en Transición. Sociedad, Cultura, Política y Economía, Fisac y Tsang (eds.), Editions Bellaterra, Barcelona, 2000, pp. 189-213.

     PYE, Lucian W.: �Cómo fue 'shanghaizado' el nacionalismo chino en Nacionalismo chino, Unger (ed.), Editions Bellaterra, Barcelona, 1999, pp. 133-168.

     SAFRAN, William (ed.): �Nationalism and Ethnoregional Identities in China� en Nationalism & Ethnic Politics, vol. 4, n� 1-2, primavera/verano, 1998.

     SAÏD, Edward: Orientalismo, Al-Quibbla. Madrid, 1990.

     SAUTMAN, Barry: �Preferencial Policies for Ethnic Minorities in China: The Case of Xingjhiang�, en SAFRAN, William (ed.): �Nationalism and Ethnoregional Identities in China�, en Nationalism & Ethnic Politics, vol. 4, no 1-2, primavera/verano, 1998, pp. 86-118.

     SMITH, Anthony D.: La identidad nacional, Editorial Trotta, Madrid, 1997.

     TU, Weiming: The Living Trees: The Changing Meaning of Being Chinese Today, Standford University Press, Standford, 1994.

     TOWNSEND, James: �El nacionalismo chino�, en Nacionalismo chino, Unger (ed.), Editions Bellaterra, Barcelona, 1999, pp. 23-62.

     UNGER, Jonathan (ed.): Nacionalismo chino, Editions Bellaterra, Barcelona, 1999.

     V.V.A.A.: Constitución de la República Popular China, Ediciones en Lenguas Extranjeras, Beijing, 1983.

          -El marxismo y la cuestión nacional, Avance, Barcelona, 1976.

     WALDRON, Arthur: �Scholarship and Patriotic Education: The Great Wall Conference�, en The China Quarterly, num. 143, 1995, pp. 844-850.

     WHITE, Sydney D.: �State Discourses, Minority Policies, and the Politics of Identity in the Lijang Naxi People's Autonomous County�, en SAFRAN, William (ed.): �Nationalism and Ethnoregional Identities in China�, en Nationalism & Ethnic Polities, vol. 4, n� 1-2, primavera/verano, 1998, pp. 9-27.

     YOUNG, Crawford.: �The Temple of Ethnicity�, en World Politics, vol. 25, n� 4, 1983, p. 660.

     ZHENG, Yongnian: Discovering Chinese Nationalism in China: Modernization, Identity and International Relations, Cambridge University Press, Nueva York, 1999. [169]



ArribaAbajo

Artículos breves y notas

[170] [171]

ArribaAbajo

Pronunciación de lenguas del Pacífico (9): niueano, rapanui (pascuense), rarotongano, y maring

C. A. Caranci

AEEP



     Ésta es la novena entrega de la serie cuyo título se indica arriba. Como se dijo en trabajos anteriores, con estas notas lingüísticas se pretende indicar al lector hispanohablante no lingüista cómo pronunciar de forma aproximada los sonidos de lenguas oceanianas y del Pacífico (177).



NIUEANO

     Es la lengua de los habitantes de la isla de Niue, en Polinesia; son algo más de 2.000, pero unos 14.000 niueanos viven en Nueva Zelanda, la potencia administradora, que ha concedido a la isla un estatuto de autonomía del tipo �libre asociación�. Aunque todos los niueanos hablan inglés, que se estudia desde el primer año de escolarización, la primera lengua es la autóctona. Pero el inglés se utiliza en exclusiva en la radio y la televisión, y los carteles y documentos oficiales están redactados sólo en esta lengua.

     Los niueanos poblaron la isla desde Tonga y Samoa hace unos 1500 años, por lo que hay numerosas semejanzas entre las tres lenguas, sobre todo con el tonganés. Es una lengua de la gran familia austronésica, perteneciente a la familia polinésica, a su rama occidental y, dentro de ésta, al tóngico, que incluye el tongano (y, posiblemente, al uveano oriental). [172]

[173]

[174]

RAPANUI (o PASCUENSE)

     Es la lengua autóctona (rapanui) de la isla de Pascua, o Rapa Nui en pascuense. Es una lengua austronésica a cuya rama oriental pertenecen las lenguas polinésicas, en la que se engloba el pascuense, y forma una unidad con elementos únicos. La hablan algo más de mil individuos (hay cerca de 4.000 más en Chile y otras partes del mundo). Ha de convivir en situación de desigualdad con el español impuesto por la potencia dominante, Chile, que se anexionó la isla en 1888. El español ha influido profundamente en el rapanui, y parcialmente lo ha hecho el tahitiano. Hoy no todos los más jóvenes lo hablan bien, aunque se enseñe en la escuela. La transcripción de esta lengua, basada en el alfabeto latino, se debe a los misioneros en el siglo XIX (hacia 1850-60). Y hoy hay carteles, artículos, algunos libros, etc. escritos en rapanui.

[175]

[176]

RAROTONGANO

     El rarotongano es una lengua polinésica, perteneciente al grupo oriental de las lenguas polinésicas y al subgrupo central, junto al tahitiano, al hawaiano, al tuamotuano y al maorí.

     Es la lengua más hablada de las Islas Cook, llamada también maorí de Rarotonga o maorí de las Cook. Es uno de los once dialectos, el de Rarotonga, de las Cook -sobre unos 20.000 habitantes y 293 Km2-, y hoy una especie de lingua franca del archipiélago. Este dialecto fue oficializado por ser esta isla el centro del gobierno colonial y de las actividades misioneras. Fueron los misioneros quienes en los años 1830 comenzaron a escribirlo y a fijar su ortografía, con el fin de utilizarlo para sus actividades religiosas -en los años 1880 se tradujo la Biblia al rarotongano- y para la instrucción.

[Como en las demás lenguas polinésicas, en el rarotongano las vocales también pueden ser largas: â=a:; ê=e:; î=i:; ô=o:; û=u:. Ejemplo: û=valle]. [177]

[178]

MARING

     Lengua de Papúa Nueva Gul nea hablada por unos 10.000 (?) individuos que habitan en el centro de la Cordillera de Bismarck, entre los ríos Simbai y Jimi, en el distrito de Madang. Su territorio está dividido en dos partes, una de las cuales, de escasa superficie, se encuentra al sur del río Tsau. El primer contacto con europeos o australianos se remonta sólo a 1954. Su lengua pertenece a la subfamilla jimi de la familia central del tronco de las Highlands de Nueva Guinea Oriental, que engloba a la mayoría de las lenguas de la (micro) familia de las Highlands Orientales.

[179]

[180]

[181]



ArribaAbajo

El �umete� de piedra del marae Taputapuatea, de Punaauia (Tahití)

Francisco Mellén Blanco



     Una de las piezas etnológicas más importante del arte polinésico que existe en el mundo es el umete de piedra negra conservado en el Museo Nacional de Antropología de Madrid. Fue un regalo del ari'i Tu al rey español Carlos III, gracias a la solicitud del soldado intérprete Máximo Rodríguez, durante su estancia en Tahití en 1775.

     Por los documentos de la época sabemos que la segunda expedición española a Tahití (1774-75) dejó una pequeña colonia, compuesta de dos Padres misioneros franciscanos, un soldado intérprete y un marinero. La persona que tuvo más trato con el pueblo tahitiano fue, sin duda alguna el soldado intérprete Máximo Rodríguez, quien gracias a sus conocimientos de la lengua tahitiana, pudo conocer con más precisión que otros extranjeros la sociedad tahitiana de aquella época. El 14 de junio de 1775, Rodríguez tuvo conocimiento de la existencia de una �batea de piedra negra�, que estaba en poder del ari'i Tu y que fue construida en la isla de Maurua para el jefe de Raiatea. La isla de Maurua, conocida actualmente como Maupiti, fue bautizada por los españoles como San Antonio.

     En dicha isla hay una cantera de dolerita negra que antiguamente era utilizada por los maupitianos para fabricar herramientas líticas (azadas, morteros, etc.). De esta cantera se obtuvo el bloque para hacer la �batea de piedra negra�, denominada en tahitiano por su forma como un umete de piedra.

     El ari'i que tenía dominio sobre Maupiti en tiempo de Rodríguez era Puni, quien desde Bora-bora gobernaba la isla, así como la de Tabaa y otras islas menores. El umete fue enviado a Tu por el jefe de Raiatea y por cortesía del ari'i Puni, como un hermoso regalo debido a su singular artesanía.

     El 10 de julio de 1775, Rodríguez en el viaje de reconocimiento a la isla, solicitó a Tu que le regalara el umete de piedra para su rey Carlos III, cosa que el poderoso ari'i concedió. El citado umete estaba en el Partido de Atehuru, en el recinto del marae Taputapuatea, en Punaauia, actualmente en ruinas. El [182] marae estaba dedicado al dios Oro y en él se celebraba el juramento al ari'i (178). Por ser una pieza de gran valor para los tahitianos Rodríguez fue acompañado de Hinoi, hermano de Tu, para que se la entregaran. El día 12 de julio le dieron el umete de piedra y debido a su peso tuvo que ser transportado por cuatro hombres hasta su canoa.

     Rodríguez cuenta en su Diario que, al día siguiente, un tío de Vehiatua le robó el umete, enterrándolo en la arena con intención de llevárselo más tarde. Rodríguez, gracias a la ayuda de otros tahitianos logró conocer el lugar donde estaba enterrado y pudo recuperarlo. Durante su viaje, por mar y tierra, de varios días alrededor de la isla de Tahití, estuvo siempre vigilándolo hasta llegar a la casa-misión de Tautira.

     El 10 de noviembre, fue transportado a la fragata Aguila, al mando de Cayetano de Lángara, quien lo hizo llegar al puerto del Callao (Perú), el 18 de febrero de 1776.

     Por ser un regalo del ari'i Tu al Rey de España, Carlos III, el umetede piedra fue llevado a presencia del virrey Amat, quien debía encargarse de enviarlo a la residencia real española. Amat, que en aquellas fechas estaba preparando su salida del Perú, por conocer que iba a ser relevado de su cargo, se olvidó de dicho regalo. El umete debió quedar apartado en algún lugar del palacio virreinal, y después de la salida de Amat, el mayordomo del virrey, Jaime Palmer, se apropió de él, llevándolo a su casa y utilizándolo en su cocina como pila de fregar platos.

     Afortunadamente, Máximo Rodríguez tuvo noticia en 1784 de que el capitán Cook le citaba en el libro de sus viajes con el nombre de Mateema (179), atribuyéndole cosas que él no hizo. Rodríguez denunció esto al virrey Teodoro de Croix, informándole a su vez, dónde estaba el umete. Recuperó el Diario (180) que dirigió al virrey Amat, añadió un �prologuito� defendiéndose de lo escrito por Cook y adjuntó un Memorial de su carrera militar presentándolo todo al virrey De Croix.

     Conocemos por la carta n� 92, conservada en el Archivo General de Indias de Sevilla, que el umete fue enviado junto al Diario de Máximo Rodríguez a España.

     El virrey De Croix dirigió la carta a Antonio Valdés, secretario de Estado [183] para las Indias, y esta fechada el 31 de marzo de 1788, en su parte lateral izquierda se lee:

              Remite un diario de la Expedición que por el año pasado de 774, se hizo desde este Puerto del Callao a la Ysla de Otaheti, y expresa como en el navío Dragón y vaxo partida de registro dirixe una Batea de Piedra que por cosa particular traxo de aquella Ysla Don Máximo Rodríguez, cuyo distinguido Mérito en aquella feliz Empresa le hacen acreedor a disfrutar de las gracias de S.M.           

     He encontrado también dos cartas que hacen referencia al traslado del umete dentro de España: una fechada en San Ildefonso, del 30 de septiembre de 1788, dirigida al Presidente de la Contratación de Cádiz, que dice:

              En contextazión a su carta del 23 del que acaba, se le encarga pase a este Ministerio la piedra hechura de batea de la Isla de Otaheti, que ha remitido el Virrey del Perú.           

     La otra carta aparece en unos papeles del Archivo del Museo Arqueológico Nacional de Madrid, en una lista de objetos procedentes de las colecciones del Pacífico destinadas a este Museo, dice así:

              Paso a V.M. de orden del Rei una Piedra figura de Batea, que se ha remitido a S.M. por el Virrey del Perú y tenían consagrada a su templo los naturales de la Ysla de Otaheti, para que V.m. la coloque en el Gavinete de la Historia natural de su cargo. Dios guarde a V.m. muchos años.           
   Madrid, 27 de Diciembre de 1786.- Valdés. Sr. Director del Gabinete de Historia Natural.

     Una vez trasladado el umete de Cádiz a Madrid estuvo en primer lugar en el Gabinete de Historia Natural del Museo de Ciencias Naturales, y por ser una pieza etnográfica pasó al Salón de Historia Natural del Museo Arqueológico Nacional. En este Museo estuvo catalogada dentro de la sección cuarta o Etnográfica y expuesta en la Sala III, correspondiente a Oceanía.

     Corney. en 1912, localizó el umete, anotando sus medidas y fotografiándolo para su libro (181). Asimismo envió una foto del umete al ari'i de Papara, Tati Salmon, publicada más tarde en el Journal de Máximo Rodríguez, traducido del inglés al francés con bastantes errores por Charles Pugeault, y editado en Papeete, en 1930.

     Hacia 1940 el umete fue trasladado del Museo Arqueológico al entonces Museo Etnológico (Madrid), y hoy Museo Nacional de Antropología, donde se encuentra actualmente. [184]

     El material de que está hecho, como hemos escrito anteriormente es de un bloque de dolerita negra, procedente de una cantera de la isla de Maupiti. Su forma es ovalada y en el extremo más puntiagudo hay una pequeña abertura por donde se vierte el contenido del recipiente. En el extremo opuesto y sobre su borde realzado tiene labrados tres surcos entre cuatro pequeños picos salientes. De su parte central surgen cuatro patas troncocónicas que le sirven de apoyo en el suelo. El interior del umete está vaciado y toda la superficie de la piedra está finamente pulida. Se aprecian actualmente dos pequeñas fisuras en las zonas laterales, que pudieron producirse en los traslados que ha sufrido esta pieza. Sus dimensiones son las siguientes:

                Largo 1.168 mm                
Ancho máximo 565 mm
Altura total 279 mm
Profundidad máxima 101 mm
Espesor máximo 76 mm
Altura de los soportes 114 mm
Peso aproximado 150 kgs

Umete de dolerita negra del marae Taputapuatea, en Punaauia (Tahití).
Actualmente en el Museo Nacional de Antropología de Madrid.

     Sin las cuatro patas o soportes su diseño es similar al de las calabazas utilizadas en otras islas polinésicas y países tropicales, que seccionadas longitudinalmente sirven como cuencos receptores de comidas o de líquidos. Esta pieza de dolerita negra es única en el mundo.

     Banks (182) y Solander, en julio de 1769, vieron un umete de piedra negra más pequeño que el de Máximo Rodríguez cerca del marae de Opoa, en Raiatea.

     Corney (183) cita que unos nativos de Talarapu habían visto trozos de un umete de piedra en Teahupo y también los amotinados de la Bounty encontraron a [185] �large stone bowl� en la isla de Pitcairn, entre los restos de un antiguo poblado indígena.

     Debido a la dureza de la dolerita y al excelente trabajo artesanal, existen diversas hipótesis de cómo fue esculpido el umete. Hay autores que dicen fue hecho con herramientas líticas del mismo material de dolerita o de tipo basáltico. Sin embargo, otros señalan que por su dureza fue labrada con instrumentos metálicos, transportados posiblemente por europeos. De esta opinión es el australiano Langdon (184) quien indica que tripulantes de la carabela San Lesmes, de la expedición de Loaísa, perdida en el Pacífico Sur en 1526, tuvieron contactos con los polinésicos viviendo con ellos y teniendo descendencia en varias islas. En la tripulación de la San Lesmes predominaban los marineros gallegos que, por supuesto, conocían el trabajo de la piedra por ser su región cuna de los mejores canteros de España. Apoyándonos en la hipótesis de Langdon, no sería extraño que alguno de ellos o sus descendientes labraran el umete de Maupiti.

     Corney (185) recoge una narración de época más reciente que dio un isleño polinésico a los marinos del Endeavour en 1769. En tiempos del abuelo del citado polinesio un barco con hombres blancos naufragó en Ralatea, algunos tripulantes pudieron salvarse, pero una vez en tierra fueron asesinados por los nativos, quienes posiblemente pudieron obtener objetos metálicos de los restos de la embarcación. No debemos olvidar también que desde tiempos antiguos el intercambio de diferentes mercancías entre islas pudiera incluir alguna pieza metálica proveniente de expediciones españolas del siglo XVI, y que fue utilizada por los nativos de Ralatea para hacer esta pieza.

     En la antigüedad los umete eran utilizados como recipientes domésticos o sagrados. En nuestro caso, al estar situado en un recinto próximo a un marae hace pensar que debía ser un objeto de rito, dedicado a su dios (Atua). Rodríguez no especifica su uso. Comey anota que nativos de Tahití, Raiatea y Bora-bora identificaron este artístico ejemplar como un umete raáu moá o �cuenco sagrado medicinal�, en el cual se hacían pociones triturando las hierbas, hojas y raíces con un majador de piedra llamado penu. Otra versión recoge que era utilizado para hacer infusiones calientes al introducir piedras incandescentes en la poción.

     Una de las teorías que tiene más fundamento es que sirvió como cuenco ceremonial de la bebida ava (186) o kava en las grandes fiestas folclórico-religiosas, celebradas en el marae Taputapuatea de Punaauia.

     Banks y Solander señalaban que en el umete de piedra hacían popoi, una [186] mezcla de uru, taro o fei, todo ello cocinado y triturado con los penu. En octubre de 1977 salió por primera vez de España para exhibirlo en la exposición de Los dos mundos de Omai (187) en la Art Gallery de Auckland (Nueva Zelanda). Según me notificó Langdon, en dicha isla se hicieron tres reproducciones, dos para museos locales: The Auckland War Memorial Museum, y Canterbury Museum, Christchurch, y la otra destinada al Museo de Tahiti y de las Islas. [187]



BIBLIOGRAFÍA

     BANKS, Joseph (1986): Journal of the Rigth Hon. Sir Joseph Banks, Bart., K.B., P,R.S., during Captain Cook's first voyage in H.N.S. Endeavour in 1768-71 to... Otaheite... etc. London.

     COOK, James (1777): A voyage toward the South Pole and round the Performed in His Majesty's Ships the Resolution and Adventure, 1772-1775. 2 vol. London.

     CORNEY, Bolton Glanvill (1913, 1915 y 1919): The Quest and Occupation of Tahiti by Emissaries of Spain during the years 1772-1776. Translated into English and compiled, with notes and an introduction, by Bolton Glanvill Corney. Printed for The Hakluyt Society, London.

     GARANGER, José (1979): Pierres et rites sacrés. En Société des Oceanistes, n.� 2. París.

     LANGDON, Robert (1975): The lost caravel. Pacific Public., Sydney.

          -(1988): The lost caravel re-explored. Canberra.

     LAVONDES, Anne (1979): Art ancien de Tahiti. En Société des Océanistes, n.� 1. Paris.

     MELLÉN, Francisco (1990): Expediciones al Pacifico Sur en el virreinato de Amat: 1770-1776. En Historia 16, año XVI n.� 171, julio, pp. 23-31. Madrid.

          -(1992): Introducción y notas en Españoles en Tahití, por Máximo Rodríguez, en Crónicas de América, n.� 69, Madrid, Historia 16.

          -(1997): Tahití. El Diario de Máximo Rodríguez y sus copias. En �España y el Pacífico�. Actas del Congreso Internacional Presencia Española en el Pacífico. Córdoba, 8 a 10 de noviembre de 1995.

     O'REILLY, P., & RETMAN, E. (1967): Bibliographie de Tahiti et de la Polynésie Française. Public. de la Société des Oceanistes, n.� 14. París.

     RODRÍGUEZ, Máximo (1774-5): Relación Diaria que hizo el intérprete Máximo Rodríguez de la Ysla de Amat, alias Otagiti, el año 1774. (Mss. de la Biblioteca Nacional de París, y de la Royal Geographical Society de Londres).

          -(1930): Journal de Máximo Rodríguez. Premier Europée ayant habité Tahiti (Tautira) 1774-1775. Traducción de M. Charles Pugeault. Papeete.

          -(1992): en Españoles en Tahití, su �Relación Diaria que hizo el intérprete Máximo Rodríguez de la Ysla de Amat, alias Otagiti, el año de 1774�. Crónicas de América, n.� 69. Madrid, Historia 16. [188]

     RODRÍGUEZ, Máximo (1996): Les Espagnols á Tahití. Public. de la Société des Océanistes, n.� 45. Paris.

     Varios autores (1988): El Pacífico español de Magallanes a Malaspina. (Spanish Pacific from Magellan to Malaspina). Ministerio de Asuntos Exteriores Sec. Española de la Exposición Mundial de Brisbane, Australia. Madrid. [189]



ArribaAbajo

La empresa española ante el cambio de siglo en China

Javier Morillas

Profesor de Estructura Económica

Universidad San Pablo-C.E.U.

Profesor de la Escuela Diplomática



1. RAMAS PRODUCTIVAS DE INTERÉS

     En la transformación estructural en marcha en la actual economía china hay ciertos ámbitos de interés para las empresas españolas, en la que se puede profundizar, aprovechando siempre la experiencia de otras empresas ya instaladas, su infraestructura y redes de comercialización. Conservas, fertilizantes, semillas y plantones, maquinaria-herramienta, insecticidas, materiales de construcción, plantas térmicas, productos farmacéuticos y plásticos para la agricultura (cuya fabricación allí negocia Repsol), elementos de navegación fluvial, motocicletas, automóviles y medios de transporte en general y de comunicación telefónica (15 millones de líneas telefónicas al año hasta el 2001, tiene calculadas Alcatel-España en China, cuando en nuestro país en toda su historia se situaba en tomo a los 10 millones hasta mediados de los noventa). Nuestros empresarios no exportadores deben saber que los volúmenes de pedidos son tan extraordinarios que, cuando se encuentra el nicho de mercado de un producto concreto, de la exportación desde España, se pasa a la producción in situ, aprovechando el bajo coste del terreno y la mano de obra, pese a la burocracia y a la consabida comisión de los variados funcionarios de turno, cuyo concurso hay que considerar parte de los gastos de inversión o de la estructura de costes de la empresa. En este sentido las oportunidades son mayores para el pequeño empresario dinámico, pegado al terreno, capaz de descubrir los muy segmentados mercados de las muchas �chinas� que hay.

     Del IX Plan quinquenal, así como de la Oficina de Inversiones Extranjeras de su MOFTEC, en que están expresadas las prioridades de las autoridades chinas cabría deducir sintéticamente:

     -El inversor español tiene que acostumbrarse a convivir, con una alta inflación, como en toda economía en expansión de estas características. [190]

     -La acción de empresas españolas de tecnología punta genera economías externas en las restantes. Igualmente la participación en las grandes obras de infraestructuras.

     -Aprovechar siempre las redes y experiencia de empresas españolas ya instaladas, y las de los organismos oficiales señalados y los españoles.

     -Los créditos FAD y la ayuda al desarrollo (con retornos) siguen siendo una buena base para introducirse en nuevos sectores y cerrar negocios.

     -Las empresas comercializadoras con capital extranjero, sector que progresivamente será liberalizado, permitiría comercializar productos sin pasar por las Corporaciones de Comercio Exterior (CCE).

     -Insistir en la emisión de series de televisión, programas, documentales, películas españolas y todo cuanto contribuya a la difusión y presencia de la cultura de nuestro país en aquella parte del mundo.

     -Los concursos de obras de infraestructuras y la financiación internacional de proyectos del Banco Mundial o el B.A.D deberían aprovecharse más.

     -Los problemas de idioma y captación de cuadros y técnicos adiestrados, haría recomendable la atención a las Escuelas de Negocios y Gestión, en que las órdenes religiosas de nuestro país tienen experiencia y prestigio como para favorecer su expansión in situ.

     -Al irse descentralizando la propia toma de decisiones en el país destino, la conveniencia de crear empresas conjuntas o �joint ventures� con un socio chino en forma de empresa estatal, provincial o local, se hace muy conveniente, sobre todo al principio. Pueden ser especialmente interesantes en el sector alimentario, medicamentos y en equipamientos sanitarios.

     Como se intentará mostrar a continuación los dirigentes chinos desde su propia reflexión teórica seguirán teniendo coartadas suficientes para continuar con su proceso de apertura (reducción de recargos de aduana, convertibilidad del Yuan, integración en la OMC, APEC... sin que ello suponga riesgos, a medio plazo, para las inversiones extranjeras, en forma de nacionalizaciones o vuelta a la autarquía.



2. LOS TRES AGENTES DEL CRECIMIENTO. LA NUEVA TECNOESTRUCTURA CHINA

     Para las inversiones y empresas extranjeras �hay riesgos en la estructura del sistema? Algunos. El crecimiento planificado de la economía china se sigue basando en la acción de tres agentes: 1) La acción del Estado, a través de la Comisión Estatal de Planificación. 2) La acción del Partido. 3) La acción de las llamadas �organizaciones de masas�. Esta acción tripartita se combina [191] con tres mecanismos de crecimiento: 1) Opción por la inversión. 2) Relaciones singulares entre el sector agrario e industrial. 3) Nuevo papel del consumo. De la difícil combinación de la acción de esos tres agentes en equilibrio con los tres mecanismos referidos, dependen otros tantos riesgos en la evolución futura de su economía.



2.1. COMISIÓN DE PLANIFICACIÓN

     La Comisión del Plan, puede seguir adaptándose técnicamente a las nuevas demandas de flexibilidad en cuanto a la toma y autorización de decisiones (sin constreñir el crecimiento, ni soliviantar a las ricas municipalidades que reclaman mayor autonomía), como si se estuviera en una economía indicativa de mercado. Al final, es una economía dirigida, donde el Gobierno, en inteligencia con los Nuevos empresarios y el capital exterior, puede seguir modulando la entrada y destino éste, orientando la evolución del país, (Zonas Económicas Especiales; Ciudades abiertas; Zonas de Desarrollo Económico y Tecnológico, ZDET; Zonas Económicas costeras abiertas...).

     La forma de luchar contra los desequilibrios territoriales y de flujos de población que se generan es seguir ampliando las zonas abiertas. Convertir todo el arco del Mar de China en un inmenso Shenzhen, un Hong Kong castizo. Y hacer lo mismo (como se intenta, aunque con el lento �tempo� del país) con todas las provincias del curso del río Yan Tze Kiang, (llamado, por su forma de dragón, el �cuerpo de la fiera�) desde su cabeza en Pudang -destinada a mover aquel enorme, lento y pesado organismo- hasta la China profunda; donde apenas llegaban los �Dazibaos� (carteles escritos a mano) del Partido. Así, que, tampoco en este sentido hay riesgos no controlables en esos dos desequilibrios señalados. Aunque, como contrapartida cabe esperar que se seguirá incrementando la burocracia regional y local, paralelamente a la asunción de competencias en materia de creación de empresas conjuntas, autorizaciones, registros, y pagos correspondientes a los funcionarios que corresponda.



2.2. PAPEL DEL PARTIDO COMUNISTA CHINO

     Desequilibrios en el Partido. Dependerá de la nueva cantera de extracción y de una más correcta selección de la clase dirigente que lo integra. Si se combinan los mecanismos de incorporación, selección y estímulos tradicionales (�héroes del trabajo�, �héroes del estudio� etc.) combinados con estancias en USA, UE, y en las zonas más extremas, pobres y pujantes, costeras y periféricas del propio país, saldrá una clase dirigente más motivada en valores, equilibrada [192] y ponderada en sus juicios. El vector resultante será alto en calidad, pero rodeado de un abismo de país; dual, definitivamente sensibilizado en torno al dinero como nuevo elemento de motivación y con desigualdades crecientes. Habrá que pagarle en proporción de lo que vale en términos de mercado, que ellos conocen bien, o no podrán contar con su concurso en términos de Estado, y la corrupción se extenderá de manera exponencial a como ahora lo hace, sin masa crítica suficiente, ni dirección de altura que legitime el estatus de lo que podemos denominar �nueva tecnoestructura china�.

     Esta tecnoestructura será cada vez más una simbiosis Ejército-Partido-Nuevos empresarios, para el mantenimiento de la estabilidad y unidad de la China que hoy conocemos. El ejemplo de la descomposición del poder soviético y la desintegración de la ex-URSS, va a ilustrar por mucho tiempo a la élite china sobre lo que se puede, se debe, y no se puede o no se debe hacer.

     Las múltiples contradicciones que va generando el �un país, dos sistemas�, así como las múltiples tensiones secesionistas y centrífugas (Tibet, Manchuria, Mongolia interior, y otras) pone difícil la articulación de una oposición con un mínimo de coherencia interna.

     En este sentido China, se convierte para los países inversores del exterior, (España sobre el 15�), en un país que denominaríamos de �inequilibrio estable�. Que por lo mismo ofrece garantías en cuanto al cumplimiento de sus acuerdos económicos o a las inversiones realizadas.



2.3. ORGANIZACIONES DE TRANSMISIÓN

     Las organizaciones llamadas �de masas�, como sindicatos, organizaciones de jóvenes, mujeres y otros. Requerirán de nuevas formas y estímulos. Y dependerán de la calidad y capacidad de ejemplarizar que tenga el agente anterior. Como �correas de transmisión� de éste, seguirán siendo necesarias para el mantenimiento del sistema, sobre todo en las zonas interiores del país, y para compensar la progresiva deshomogeneización en curso. Capidisminuidas por los medios de comunicación estatales, seguirán intentando la extensión de consignas y contrarrestando el desaliento. Seguirán, aún con dificultades crecientes, constituyendo la reserva de mano de obra barata siempre movilizable en momentos especiales, que tradicionalmente han tenido en este tipo de regímenes, (recolecciones, catástrofes naturales, obras públicas) complemento de las plusvalías obtenidas por la población reclusa en otras tareas.

     La menor existencia de memoria democrática en el país y sus tradicionales estructuras autoritarias, permiten su continuidad en el tiempo más de lo que fue posible en las economías eslavas. También juega a su favor el menor impacto del �efecto demostración� en la opinión pública, que se producía en [193] la larga y porosa frontera de la Europa Oriental -entre otras formas a través de la televisión- con sus convecinos de la próspera Europa libre.

     En este sentido, la liberalización política no cabe esperar que vaya paralela a la económica. Es otra fuente de inestabilidad y conlleva para la nueva tecnoestructura un riesgo a largo plazo, que afectaría, no sólo al extremo oriente (Japón o península indochina), sino a sus vecinos fronterizos de India, Rusia, Mongolia, y Asia central (Kazajstán, Kirguistán y Tadzhikistán). En este sentido la salida militar a largo, con un Jaruzelski polaco a la china, más o menos edulcorada, no es descartable.



3. MECANISMOS DEL CRECIMIENTO EN CHINA

     Respecto a los mecanismos del crecimiento futuro cabe pensar que:



3.1 IMPULSAR LA INVERSIÓN

     Se mantendrá la opción por la inversión, como opción de Estado, en coherencia ideológica, pero sin las ilusiones del voluntarismo industrializador de otros tiempos. Como éste ha fracasado, la argumentación política interior podrá tener coherencia, siempre que el crecimiento económico -vía demanda externa, como el resto de los pequeños dragones asiáticos- vaya generando dividendos, perceptibles en términos de incremento de renta para la población y la referida tecnoestructura. De momento las exportaciones chinas suponen el 3% del comercio mundial internacional y su espejo -siempre matizado de costumbrismo maoísta- de economía exportadora está en Corea del Sur (más de 10.000 $ de PIB per cápita).



3.2. SUPEDITACIÓN AGRARIA

     En las relaciones entre sectores, se ha venido primando al sector industrial, quedando en una situación paupérrima el medio agrario y rural (casi 900 millones de personas frente a 300 que viven en ciudades). En un régimen como el actual es controlable relativamente, avanzando en su modernización. Lo mismo que el control de la natalidad, a pesar de los riesgos que genera (desequilibrios emocionales, de varones sobre mujeres y bolsas de marginación) sólo mantenible por el incremento en el PIB por habitante, con un numerador al alza a piñón libre y una natalidad dirigida gubernamentalmente a la baja, como sólo es posible hacerlo en un marco autoritario de planificación.

     El país tendría, púes, un claro tendón de Aquiles en la ineficiencia del sector agrario, [194] pese a los incrementos de productividad últimos en el arroz y maíz. Estos deberán ser mayores, pues, con una demanda agroalimentaria al alza los desabastecimientos serían detonantes de un conflicto generalizado, como ya ocurrió en otros países de economía planificada, con problemas equivalentes de ineficiencia en el sector primario.



3.3. EL CONSUMO COMO RECOMPENSA

     La limitación del consumo como mecanismo de crecimiento, se ha conseguido cambiar suavemente. Era coherente con el crecimiento planificado autárquico y cerrado. Suponía una movilización del ahorro de la población que el Estado (a través del Plan) orientaba hacia la inversión productiva. La �tercera generación� (aquella que Stalin había dicho que viviría mejor aunque hubiera que sacrificar a la primera y a la segunda) china quiere vivir mejor. El consumo se plantea como recompensa. Con su liberalización el crecimiento de la inversión productiva está en función de la evolución y generación de rentas de la propia apertura, y es lo que todavía, lejos de suponer un riesgo, ofrece nuevas oportunidades a la inversión española y extranjera, ya que el consumo viene creciendo a un ritmo anual del 8,8 por ciento desde 1990.

     El efecto Duesemberry actúa en ayuda del inversor exterior. El consumidor chino se entera de la existencia de bienes superiores a los que normalmente utiliza (muy sensible a publicidad, medios de comunicación, etc.). Su imaginación queda estimulada y su propensión al consumo se eleva, (las exportaciones e importaciones crecieron a un ritmo del 19% y del 21% de media respectivamente durante 1995). Con ello las tasas de ahorro interno se ven menguadas y sus posibilidades de inversión reducidas. Queda así en dependencia del inversor extranjero (en el interior no hay ahorro suficiente), y con una adicción al consumo (electrodomésticos informática, material eléctrico) y al gasto consuntivo (cosmética, moda de diseño, vinos, o joyería de oro, cuya compra en este caso defiende de la inflación) de la población, de la que no hay retroceso posible, al menos sin conflicto interno.

     Para el establishment, lo que queda no es sino ir intentando �racionalizar� (sic) el proceso, interviniendo en el mismo detrayendo rentas mediante el cobro (recargos, gastos de tramitación, e impuestos varios) de parte de las plusvalías generadas. Es la forma en que el gigantesco aparato burocrático que garantiza la viabilidad de la China que hoy conocemos necesita ser mantenido... de acuerdo con los tiempos. [195]



ArribaAbajo

Noticias

[196] [197]

ArribaAbajo

Crisis en el Pacífico sur

Juan Carlos Rey

Embajador. Delegado de la E.C.

en Papúa Nueva Guinea y las Islas Salomón



PAPÚA NUEVA GUINEA

     En abril 1997 Papúa Nueva Guinea, conoció las más grave crisis política en la corta historia de este país, independiente desde septiembre de 1975. Esta crisis terminó con la caída del Gobierno del primer Ministro Sir Julius Chan. El motivo que desencadenó la crisis fue la reacción del ejército y una enérgica respuesta de la población a la contratación de mercenarios, de la firma Sandline International, por el Gobierno papúa para aplacar la sublevación de la isla secesionista de Bougainville (oficialmente conocida como la provincia de �North Solomon�).

     La isla de Bougainville ha conocido una guerra civil que se inició en 1989, provocada por el descontento de las tribus propietarias de las tierras, donde se encuentra la mina de Panguna, sobre el reparto de beneficios y otros aspectos relacionados con la explotación de la mina por la multinacional Río Tinto, actualmente de capital británico-australiano. Panguna es la segunda mayor mina de cobre del mundo a cielo abierto.

     La crisis papúa terminó con la instauración de un nuevo gobierno, siguiendo los procesos democráticos previstos en la Constitución del país, al tiempo que los mercenarios fueron desarmados y expulsados del Papúa hacia sus lugares de origen: Sudáfrica y el Reino Unido.

     Desde 1997 hasta la actualidad, dos nuevos gobiernos se han sucedido y la normalidad ha caracterizado la vida política de estos tres últimos años, no sin avatares debido a los altos niveles de corrupción a distintos niveles de la clase política y administrativa de este país.



FIDYI

     La reciente crisis política de Fidyi, iniciada el 19 de mayo del 2000 y culminada [198] con la retención del Primer Ministro Mahendra Chaudhry en el edificio de Parlamento por el uso de la fuerza, es el resultado de la tensión étnica enquistado entre la población melanesia autóctono y la población india. Ésta es descendiente de los trabajadores indios traídos durante el periodo colonia, británico, a principios del siglo pasado, para el cultivo de la caña de azúcar en las fértiles tierras fidyianas.

     La elección del primer ministro Mahendra Chaudhry, el primero de origen indio en la historia de Fidyi, junto con la aprobación de la nueva Constitución de 1997, abrían la puerta para terminar constitucionalmente con la supremacía del hasta ahora dominante tradicional sistema fidyiano, incluyendo el acceso a la propiedad de las tierras por la población india.

     Las tierras siguen mayoritariamente en las manos de sus pobladores indígenas, mientras que la mano de obra empleada en la industria azucarera y otros sectores vitales de la economía es principalmente de origen indio.

     La propiedad de la tierra, incluido el control de sus recursos y las actividades que se realicen en ella, es un elemento esencial en la cultura y en la tradición melanesia y, al mismo tiempo, el origen de la mayoría de los conflictos entre tribus y clanes, que en caso de Papúa Nueva Guinea, se cobra varias centenas de víctimas en guerras étnicas cada año.

     En el caso de Fidyi, la tensión entre los indios (que constituyen el 48% de la población) y los fijianos (con el 51% de la población) es el resultado de una fuerte competición, durante al menos las dos últimas generaciones, por el control económico y político del país. Mientras que la población india, más laboriosa y con claro espíritu y vocación empresarial, ha sabido hacerse con el control económico de las principales fuentes de la ingresos del país (la producción azucarera, turismo y parte de la industria de transformación), la población fidyiana, fuertemente apegada a los valores de la cultura melanesia, no ha sabido dar una respuesta en el dominio económico y comercial, aunque mantiene la propiedad de las tierras.

     La industria del azúcar, que constituye el principal motor de la economía con el 40% de las recetas de este país, está basada en un acceso preferencial a los mercados europeos, bajo el protocolo del azúcar en la convención de Lomé (188), que asegura un precio muy superior al precio internacional del azúcar.

     Desde el inicio de la crisis, algo más de 4.000 empleos han sido perdidos, [199] lo que apunta a una fuerte recesión de la economía de Fidyi. �The Native Land Trust�, organización nativa para el control de los derechos sobre la tierra, reivindica la devolución de todos los derechos de soberanía y gobierno de Fidyi a sus jefes tradicionales, representados por el Gran Consejo de Jefes, que consideran como la más alta instancia de gobierno de la nación. En otras palabras se reivindica la Matanitû vakavanua que fue cedida a los británicos, bajo una escritura de cesión, en 1874. La crisis, en el fondo, no es otra que la reacción de la población fidyiana, aprobada explícitamente por la más alta institución tradicional de poder -el Gran Consejo de Jefes-, por mantener el control del país siguiendo los valores tradicionales de la cultura melanesia, en contra del imparable progreso económico y político de la población fidyiana de origen indio.



ISLAS SALOMÓN

     El tranquilo país de las Islas Salomón también conoce en estos momentos tumultuosas vicisitudes políticas que, al igual que en el caso de Fidyi, es fruto de tensiones étnicas, pero en este caso entre comunidades de dos de sus provincias, las de la isla de Malaita y las de Guadalcanal.

     A fin de entender el conflicto étnico y sus consecuencias políticas en este país, es apropiado hacer algunas consideraciones previas, que a continuación se exponen.

     Poco después de acabada la Segunda Guerra Mundial, y con el propósito de utilizar toda la infraestructura construida por los norteamericanos en Honiara (edificios, hospital, pantalanes y sobre todo su aeropuerto), se tomó la decisión de trasladar el centro administrativo del entonces territorio británico, desde Tulagi (en la provincia Central o Florida) a Honiara. En los años 70, se produjeron importantes inversiones agrícolas, sobre todo en la creación de plantaciones destinadas a la producción de copra y aceite de palma. Este desarrollo agrícola atrajo la migración a Guadalcanal de numerosos habitantes de la isla de Malaita, renombrados como buenos trabajadores en el ámbito agrícola.

     Los habitantes de Malaita, a pesar de su reputación agresiva y guerrera, se ganaron la calificación de excelentes trabajadores desde finales del siglo XIX, y la isla de Malaita fue uno de los lugares predilectos para el reclutamiento de mano de obra barata, destinada a las plantaciones de caña de azúcar de Queensland (Australia) y Samoa.

     La buena reputación se ha visto confirmada más tarde, en la época previa a la independencia y a partir de la independencia del país (el 7 de julio de 1978), por su implicación y dinamismo en el sector de servicios y otras actividades, además de las agrícolas. El floreciente éxito de la minoría originaria de Malaita afincada en Honiara no es un secreto, y constituyen un peso específico [200] mayor en la administración de Estado (funcionarios), comercio y servicios (empleados, mano de obra especializada, áreas de transporte marítimo y terrestre y un largo etc...)

     A título de ejemplo, mencionaré que el 70% de los miembros de la Royal Constabulary of Solomon Islands (fuerzas de policía) son originarios de Malaita. Sólo recordar que la policía es el único cuerpo armado del país dado que no hay ejército. Más tarde se verán las implicaciones de esta fuerte presencia malaita en la policía, durante el proceso de la crisis.

     Por otro lado, es absolutamente necesario recordar que, al igual que la propiedad de la tierra es un factor de vital importancia en la cultura melanesia, también los lazos de unión (a distintos niveles) entre los componentes de una mismo grupo social o etnia, juegan un papel predominante. Esto se conoce popularmente como �Wantok system�, y si bien su traducción del �pidgin english� es �sistema basado en una sola lengua� no es fácil hacer una descripción detallada en pocas líneas debido a sus profundas implicaciones sociales, aunque se podría resumir como la obligación de un individuo perteneciente a un determinado grupo social de ayudar a sus miembros y cooperar a los intereses de la etnia y a su vez, es protegido y ayudado por el resto de la etnia en caso de necesidad o requerimiento. En otras palabras, se podría describir como una forma de �seguridad social�, basada en los valores sociales melanesios, entre los que destaca el concepto de la �compensación� como primer paso en la resolución de conflictos de cualquier naturaleza.

     La tensión étnica no es un factor nuevo entre las poblaciones de Malaita y Guadalcanal. La población de Guadalcanal se ha visto desplazada por el progreso de los emigrantes de Malaita, que en pocos años han ocupado un lugar predominante en la economía de la isla de Guadalcanal y del país. Descontentos con esa situación a lo largo de los años, en 1998 la comunidad de Guadalcanal presentó al Gobierno de la nación una serie de exigencias para compensar el progreso de la población de Malaita afincada en Guadalcanal. Dado que las exigencias solicitadas fueron ignoradas, se inició una campaña de agresión contra la población de Malaita, en las zonas agrícolas al este de Honiara, donde se concentran las plantaciones destinadas a la producción de aceite de palma que, como se dijo previamente, son explotadas por trabajadores originarios de Malaita.

     Esta campaña de agresión, que se saldó con varios muertos entre la población malaita, fue reivindicada por el denominado �Guadalcanal Revolutionary Army�, que más tarde se autodenominó �Isatabu Freedom Mouvement�, lo que provocó una huida de la población rural malaitana hacia su isla de origen. Unos 20.000 malaitanos debieron emigrar, lo que supuso un problema de acogida en una isla ya superpoblada por unos 120.000 habitantes.

     La reacción de la comunidad malaitana, fue crear una estructura paramilitar capaz de contrarrestar la amenaza del también paramilitar �Isatabu [201] Freedoana Mouvement� o IFM. El resultado fue la aparición en la escena del �Malaita Eagle Forces� (más adelante citado como MEF).

     Los miembros del MEF, que han controlado la zona urbana de Homara, iniciaron acciones de intimidación y represalias (saldadas con varios muertos) contra la población urbana originaria de Guadalcanal, que a su vez se ha visto obligada a abandonar la ciudad de Honiara para buscar refugio en zonas seguras en la isla de Guadalcanal. La situación resultante es que Honiara (incluyendo el aeropuerto) se ha convertido en un enclave defendido por el MEF y asediado por las fuerzas paramilitares del IFM.

     Como se dijo previamente, y dado que la mayor parte de la policía del país está compuesta por agentes procedentes de Malaita, estos, bajo el �wantok system�, no sólo han evitado acciones en contra de los miembros del MEF, sino que los han apoyado en sus incursiones contra los habitantes de Guadalcanal. Con esta situación, el Gobierno ha perdido el control de la seguridad de la ciudad y de la libertad de movimientos, que quedan en manos del MEF por lo que se refiere a Honiara, y del IFM el resto de Guadalcanal.

     Recientemente un nuevo elemento se ha venido a sumar a la ya complicada situación, y es la exigencia de una fuerte compensación económica por parte de la población que tuvo que emigrar a Malaita, justificada por las perdidas sufridas por abandono de sus empleos, casas y otras propiedades.

     El día 5 de junio de 2000, después de que la Policía dejara que el MEF se apoderara con total impunidad su arsenal de armas y municiones, la ciudad fue tomada en una operación �conjunta� de la Policía y el MEF, deteniendo al Primer Ministro Bartholomew Ulufa'alu en su residencia. El portavoz del MEF, el abogado local Andrew Nori, se mostró a la cabeza de la acción, considerada como un golpe de estado. La ciudad y toda actividad quedaron paralizadas.

     El mismo día del golpe la Unión Europea, seguida por otras potencias, declara un contundente rechazo del golpe de estado y exige que los principios democráticos y la Constitución del país sean observados. Esta acción rebajó las aspiraciones de los golpistas, que accedieron a poner en libertad al Primer Ministro y a seguir los procedimientos constitucionales mediante la convocatoria del Parlamento y la presentación de un voto de censura. Sin embargo el Primer Ministro presentó voluntariamente su dimisión el día 14 de junio, justificándola como contribución a la resolución de la crisis.

     Sin embargo una solución del conflicto está lejos de ver la luz y deberá pasar por una reconciliación haciendo uso el sistema melanesio que incluye: maratonianas conversaciones; acuerdos sobre compensaciones y su pago; la reconciliación de las partes envueltas en el conflicto y, finalmente, el desarme de las fuerzas paramilitares. Teniendo en cuenta la experiencia del proceso de paz en Bougainville, se hace imperiosa la presencia de un intermediario neutral o una fuerza multinacional capaz de asegurar el dialogo necesario. [202] Posiblemente pasaran años antes de ver una paz firme y definitiva en este pequeño país.

     Las consecuencias económicas de este conflicto serán desastrosas para el futuro de este país, el más pobre del Pacífico. Las Islas Salomón tiene básicamente cuatro fuentes propias de ingresos (pesca, madera, minería y agrícola) que se están colapsando o ha terminado sus operaciones por el conflicto, y una quinta que esta basada en la contribución de países donantes (cooperación) como el Banco Mundial, la Unión Europea, Australia y otros, y que pudiera paralizarse si las garantías constitucionales no son observadas. La economía de las islas se estaba recuperando desde julio 1997, después de un periodo de nefasta y corrupta gestión efectuada por el anterior Gobierno del Primer Ministro Mamaloni.

     La crisis económica sólo ha hecho que empezar, afectando a empresas de servicios básicos (distribución de gas, electricidad, hospital, etc...) y los servicios del Estado que tendrá dificultades para pagar los salarios de sus funcionarios públicos y hacer frente al pago de las importaciones de productos de básica necesidad como combustibles, medicamentos, etc.



EVACUACIÓN DE HONIARA

     El día del golpe de Estado, el 5 de junio del 2000, me encontraba en Honiara, acompañando una misión de la Asamblea Conjunta EU-ACP (que incluye miembros del Parlamento Europeo), que realizaba una visita en las Islas Salomón, a fin de buscar elementos capaces de contribuir a una solución negociada del conflicto étnico. Como miembro acompañante de esta misión, y en mi condición de Embajador en esa isla, tuve la posibilidad de tener reuniones con las distintas partes en conflicto, visitando las zonas ocupadas por el IMF y el MEF.

     La posibilidad del golpe se sentía en el aire, pero nos sorprendió con la rapidez conque se produjo, si bien no es de extrañar por la implicación de las fuerzas de la Policía en favor del IFM. La operación comenzó a las 4 de la mañana con la toma del arsenal de armamento de la Policía, hacia las 5 se detuvo al Primer Ministro y a las 9 de la mañana la operación quedo concluida, una vez que el edificio de Telekom (compañía de teléfonos), radio y otros edificios principales de la ciudad estaban bajo custodia de los miembros del MEF y la Policía, en una operación irónicamente denominada �conjunta�.

     Ese mismo día 5 de junio numerosos controles de rebeldes del MEF con armas sustraídas a la Policía controlaban los pocos vehículos que circulaban por la ciudad. En las zonas �fronterizas� al este y oeste de Honiara se produjeron intercambio de disparos de fuerte intensidad entre el MEF y el IFM. [203]

     Nuestra misión desarrolló una intensa acción diplomática el mismo día del golpe, con reuniones que fueron desde el Primer Ministro, que acudió a nuestra cita en el Hotel Mendaña escoltado por dos rebeldes armados, hasta el líder de los golpistas, el abogado Norris, pasando por el líder de la oposición y otros agentes de la vida política. Entre tanto todas las comunicaciones con el exterior del país quedaron cortadas (desde las líneas telefónicas hasta el cierre del aeropuerto), excepto las comunicaciones por internet.

     Como la tensión aumentaba, decidimos estudiar una evacuación inmediata de la misión, aunque la falta de comunicaciones y la ausencia de medios de transporte impidieron una acción rápida. Distintas acciones se consideraron y barajaron al mismo tiempo, incluida el uso del atunero congelador de bandera de las Salomón �Alexandros�, de tripulación española que se encontraba fondeado en la bahía de Honiara. Para tal propósito se contacto a la compañía armadora, la empresa Calvo, que generosamente puso el atunero a nuestra disposición para una evacuación a partir de Honiara. Otra de las opciones, que por motivos de oportunidad fue la elegida, fue el alquiler de un avión bimotor de la compañía Salomón Airlines, que no conduciría hasta el aeródromo de Munda (Western province) y desde allí hasta el aeropuerto de Buka en la isla papúa de Bougainville.

     El día 7, apenas dos días después del golpe, y en tan sólo dos horas, el tiempo de la tregua acordado por las facciones en conflicto, fue posible establecer los contactos necesarios para obtener el avión y despegar del aeropuerto de Henderson rumbo a Munda. Sin embargo, una avería menor en unos de los motores del Twin Other, nos obligó a volver a la zona de estacionamiento, desde la que al cabo de unos 20 minutos más tarde, pudimos salir y despegar con absoluta normalidad. Tras tres horas de vuelo, con una parada para repostar en el aeródromo de Munda, que fue construido por los japoneses durante la segunda guerra mundial, llegamos al aeropuerto de provincial de Buka (Bougainville) donde, y con la ayuda de un laisser-paser, pudimos entrar en territorio de Papúa Nueva Guinea. [204] [205]



ArribaAbajo

El gobierno provincial de Nueva Bretaña (Papúa Nueva Guinea) legaliza el tradicional shell-money, como moneda de curso legal

Juan Carlos Rey



     El gobierno provincial de Nueva Bretaña del este, en Papúa Nueva Guinea, ha declarado el shell-money, (dinero tradicional confeccionado de conchas) como moneda de curso legal en esta provincia.

     La unidad monetaria oficial de Papúa Nueva Guinea se denomina kina, que se divide en 100 toea (pronunciado �toia�, en singular). La moneda papúa fue llamada igual que la tradicional kina, que consiste en una valva de la madreperla pulida y cortada en forma de media luna. La toea tradicional es una pequeña caracola de la familia cypraeidae, (Cyprea anutus) de unos 2 cm de longitud. Las toca se presentan en ristras, una vez ensartadas en una cinta hecha de bambú o caña brava.

     A partir de ahora, se podrán utilizar legalmente �toea� tradicionales para la compra de pequeños artículos como paquetes de cigarrillos, latas de conserva e incluso como parte del pago de las tasas escolares. Con su legalización, el Gobierno provincial de Nueva Bretaña solo hace que legalizar una tradición largamente extendida en las zonas rurales.

     El shell-money, en esta forma u otras, se sigue utilizando ampliamente en la zona insular de Papúa Nueva Guinea, sobre todo en Milne Bay, como pago de arreglos matrimoniales, compensaciones, ofrendas u otras en ceremonias tradicionales. Su empleo esta muy generalizado, para los mismos motivos, en las vecinas Islas Salomón y sobre todo en la Isla de Malaita (en el lagon de Langa-Langa). [206] [207]



ArribaAbajo

Una Nueva isla en el Pacífico sur

Juan Carlos Rey



     A finales de mayo del 2000 una nueva isla ha aflorado en el Pacífico sur, como consecuencia de la actividad volcánica en el anillo de fuego del Pacífico. A 36 kilómetros al norte de las Islas Salomón (Western Province), en el mar de Bismarck, los científicos del la Commonwealth Scientific and Insdustrial Rescarch Organisation (CSIRO) han seguido y filmado la formación de la isla de Kavachi. Los científicos ya conocían la existencia de esta manifestación volcánica submarina, ya que en junio de 1991 ya había aflorado una isla para sumergirse de nuevo. En los últimos 48 años el volcán Kavachi ha entrado en erupción en cinco ocasiones (1952, 1972, 1985, 1991 y la última en el 2000), manifestándose en diferentes lugares dentro de la misma área, no lejos de la isla de Tetepare o en las proximidades de la isla de Naggotokae.

     En esta ocasión, el volcán, que ha formado la nueva isla, lanzaba cenizas y magma hasta una altura de 75 metros y columnas de humo que alcanzaron los 500 metros de altura.

     Las aguas de las islas Salomón tienen dos principales zonas de actividad volcánica submarina, Kavachi al sudoeste de Naggotokae y Cook al sudoeste de Vonavona, ambas en archipiélago de Nueva Georgia (Western Province). [208] [209]



ArribaAbajo

Las economías asiáticas a debate en los Seminarios de Salzburgo

Florentino Rodao



     Los Seminarios de Saizburgo han dedicado una nueva sesión a Asia. En esta ocasión, como ya viene siendo habitual, enfocándose en la economía, precisamente a raíz de los problemas derivados de la crisis financiera de 1997 y de la necesidad de estudiar el nuevo enfoque de las relaciones entre Estados: este fue un tema especialmente tratado y, que, de hecho, aparecía en el subtítulo �Regional and Global Relationships�. Sus directores fueron Frank G. Wisner, ex-embajador de Estados Unidos en India y Filipinas, que actualmente sirve en la empresa privada, y Shahid Javed Burki, con un cuarto de siglo como Senior Advisor en el Banco Mundial, donde se ha ocupado de los programas de préstamos en China y Mongolia. El seminario duró una semana entera, en la que tras las conferencias introductorias de los dos directores, las mañanas estuvieron dedicadas a Conferencias sobre los principales países de Asia, junto con otras actividades destinadas a promover la discusión entre los participantes, ya fueran con las discusiones a propósito de las conferencias como por medio de los grupos de trabajo sobre �Corporate Governance�, �Arquitectura Económica�, �Asia y la Era de la Globalización� y �Buscando una solución para el vacío entre ricos y pobres�.

     El Embajador Wisner comenzó ofreciendo una conferencia sobre lo apropiado del Seminario y sus finalidades. Tras la crisis de 1997-98, es hora de evaluar cómo ha cambiado Asia y cual será el papel de otros países como Estados Unidos, o de la Unión Europea, y apuntó a las posibilidades que tienen las organizaciones como ASEAN, de la que �o sobre su potencial que aun está por ser llevado a cabo por completo. Shahid Javed Burki se centró en la situación económica y avisó de que el proceso de reforma está disminuyendo la velocidad una vez que las economías están saliendo de la crisis, centrándose también sobre el futuro en qué tipo de cooperación intra-asiática habrá: la posible unificación monetaria piensa que podrá ser bien por medio de una moneda actual (le ve más posibilidades al Rembinbi chino que al Yen japonés) [210] o creando una diferente, como en la Unión Europea, aunque a una de la preguntas respondió que Asia no tiene una tradición de integración en unidades. A ellos les siguió otro embajador norteamericano, que coordinó el abandono de las bases en Filipinas, Richard Solomon, que actualmente preside el Instituto de Paz de estados Unidos, una institución apoyada por las cámaras legislativas. Solomon dio un discurso en el que predominaron los interrogantes sobre el futuro y las dudas sobre si las fuerzas �positivas� predominaran sobre las �negativas�, calificando las de la economía global como las primeras y las nacionales como las segundas y en la misma dualidad se planteó si la reforma económica dominaría sobre la corrupción y si el regionalismo dañaría la tendencia hacia la globalización.

     Las visiones particulares de cada región estuvieron a cargo de conferenciantes de cada país. Sobre Japón habló una persona clave en el Banco de Japón, Takatoshi Kato, que actualmente enseña en universidades norteamericanas. Kato señaló la todavía difícil situación económica en Japón y el riesgo actual de deflación, mostrando la esperanza de que la Tecnología de la Información revitalizar la economía, así como los previstos acuerdos multilaterales de libre comercio, que se firman entre Japón, Corea y Singapur, pero con posibilidades para otros países. El profesor de la Universidad de Hong Kong y director del Centro de Investigaciones Económicas de la Universidad de Beijing, Justin Yifu Lin, ofreció un brillante cuadro de la economía china, señalando que entre los problemas futuros están las disparidades regionales, la corrupción institucionalizada, y la debilidad del sector privado. Sobre el próximo acceso a la Organización Mundial de Comercio (OMC), Lin señaló que China será el país en desarrollo con una economía más abierta y, que las consecuencias habrá que velas según cada sector, porque la agricultura tiene una ventaja comparativa en productos donde se necesita mano de obra intensiva y el sector automovilístico tampoco tiene mucho que temer, ya que todas las fábricas tienen algún tipo de Joint Venture. El profesor de económicas de la Korea University Sang-Kyun Kwak dio un sorprendente discurso economicista en el que glosó los logros del dictador coreano de las décadas de 1960 a 1980, Chung Hee Park, debido a �ignorar la popularidad política� y no se privó de achacar la crisis económica reciente a los gobiernos civiles que se han instalado desde 1993 de los que señaló eran carentes de �habilidad, estabilidad y eficiencia�. Destinó una buena parte de su discurso, además, a tratar de convencer al público sobre las ventajas del papel del estado en la consecución de una economía de un papel de bienestar, por el cual el camino propuesto por él significaba Comercio, Finanzas y coordinación eficientes, Buenas infraestructuras, Productividad alta y, en definitiva, la posibilidad de conseguir ese objetivo por la vía rápida, frente a los sinuosos que parece supondría ese camino sin el papel activo del gobierno. Carter Booth habló sobre el futuro de Indonesia y señaló el difícil futuro de este país, siendo discutido en la rueda [211] de preguntas por participantes japoneses que señalaron el predominio de las ayudas niponas a este país para salir de la crisis. El alto consejero económico del Ministerio Indio de Finanzas, Arvind Arman, se mostró un hombre optimista porque, tal como el dijo, para creer el desarrollo es necesario ser optimista. Comenzó hablando de las diferentes visiones de China y de India (una, neutral hacia positivo y la otra neutral hacia negativo, según el famoso libro de Harold Isaacs) que influyen en la percepción del futuro del país. Señaló la importancia del capital humano que tiene el país (un 40% de las iniciativas en Silicon Valley con al menos un indio), la creciente importancia que tiene la relación con Asia con una mejora definitiva en las relaciones con China, perspectivas de creciente liberalización (la industria de la energía, la más reciente) y apuntó a que después de los tigres y los dragones vendrán los elefantes. Una de las personas claves en la transición de Hong Kong a la soberanía china fue Shiu Sin Por, director del Instituto �Un país, dos sistemas�. Señaló que esta frase se creó para convencer a los taiwaneses, siendo utilizado después para Hong Kong, y que el futuro de este enclave se piensa como enclave para el comercio electrónico y como mercado de capitales y bienes a lo largo de las 24 horas del día, en competencia en la región con Sydney.

     Además de las sesiones plenarias, los asistentes, �Faculties� o profesores y �fellows� o alumnos, se reunieron en cuatro grupos de trabajo sobre �Corporate Governance�, �Buscando una solución al vacío entre ricos y pobres�, �Arquitectura Económica� y �Asia en la Era Globalizada�, al que asistimos. Fueron unos debates en los que los Fellows señalaron tanto los objetivos como las conclusiones, expuestas en la sesión final. Wisner y Burki señalaron en el discurso final que los problemas que se plantean son principalmente de reglas, puesto que el comportamiento económico debe seguir unas reglas en finanzas, en negocios y en el cumplimiento de leyes. �No hay reglas asiáticas únicas en el camino de la economía� indicaron, pero un �Asia basada en reglas� será en beneficio de todos, aunque queda por ver cómo podrán ponerse en marcha y cómo serán adaptadas por las poblaciones asiáticas.

     El curso fue altamente productivo. Los medios tan importantes con los que se cuenta permiten aprovechar una semana de intenso trabajo con la lectura de prensa del día, un número de revista que para sí quisieran muchas universidades españolas, una conexión a Internet envidiable y una biblioteca con bibliografía separada y preparada para el curso. Además, las discusiones dentro y fuera de las salas ayudaron a conocerse unos y otros y a comprobar diferencias interesantes entre unos y otros; mientras que los occidentales se preocupaban más por la situación política, los asiáticos evitaban estos temas en la medida de los posible, aunque con múltiples excepciones, principalmente viniendo de Filipinas y la India. Los norteamericanos sacaron las cuestiones estratégicas a colación en cuanto pudieron mientras que algunos asiáticos mostraron el diferente concepto que tienen de los logros democráticos, con afirmaciones como [212] �lo importante no es el salario mínimo, sino el derecho al trabajo�, �lo que permite a un gobernante tras ser elegido es que pueda tomar decisiones más duras�, �China, mas que democracia, lo que necesita es un sistema legal, al menos por un período corto de tiempo� y, en general, lo que se puede denominar como un �econoautoritarismo� que puede recordar a slogans pasados: �Todo por el PNB�. Con ello y con el problema que significa que los conferenciantes de cada país sean nacionales, lo que conlleva unas visiones en general optimistas sobre su futuro, es encomiable la labor realizada por los Seminarios de Salzburgo. Durante 50 años han reunido a gente del más diverso pelaje (ideológico) en un marco excepcional como es el Palacio Schloss de Salzburgo, construido junto a un lago donde viven cisnes, junto a una ciudad histórica de recuerdo musical y frente a unas montañas nevadas. Si bien discutir es algo humano que se da en cualquier momento, el ambiente creado por los seminarios de Salzburgo permite, al menos, disminuir la tensión e incita a aprender de los demás, antes que a imponer las ideas propias. [213]



ArribaAbajo

Las sociedades de Filipinas y el Sudeste de Asia: Más allá de la crisis

Manuel Vázquez



     Durante los pasados días 5, 6 y 7 de octubre, tuvo lugar en el Instituto Complutense de Estudios Internacionales (ICEI) el seminario internacional que llevaba por título �Las sociedades de Filipinas y el Sudeste de Asia. Más allá de la crisis.� Su finalidad era establecer un mayor acercamiento entre las sociedades asiática y occidental, no ya sólo en el ámbito económico sino también en esos aspectos que, afortunadamente, cada día adquieren una mayor influencia en la conciencia y sociedad internacional. Nos estamos refiriendo, a los aspectos sociales, políticos y, por último, aunque por ello no menos importante, a los aspectos culturales y humanos.

     El seminario se dividió en sesiones: la sociedad filipina; violencia y pobreza en el sudeste de Asia; Estado y minorías; Perspectivas de futuro y Filipinas, desde la independencia hasta la actualidad. La primera de ellas sirvió para la presentación del seminario ante las diversas autoridades o representantes de los distintos Estados sobre los que versaba el mismo y pronunciaron unas palabras el Ilmo. Sr. Dr. José Molero, Director del ICEI; el Ilmo. Sr. D. Rafael Conde de Saro, Director General de Asia del M� Asuntos Exteriores y el Dr. Florentino Rodao, miembro de la Junta Directiva de la Asociación Europea del Sudeste de Asia (EUROSEAS). La Ilma. Sra. D.� Inés Argüelles, Directora General de Cooperación y Comercio Cultural del M� Educación y Cultura tuvo que excusar su asistencia al acto por la coincidencia con la inauguración de la Exposición �Carolus� en la ciudad de Toledo. Al acto asistieron, asimismo, los Embajadores de Filipinas, José Zárate Oliván, de Malasia, de Australia, Tim George, de Nueva Zelanda, Christine Bogle y numeroso personal, incluyendo otros diplomáticos de la región.

     Durante la presentación se señaló la creciente importancia del Sudeste Asiático en las distintas agendas de temas exteriores dentro de la Sociedad internacional. A su creciente importancia política se une el hecho de que al avance económico en los regímenes políticos ha mejorado su estabilidad, ayudando [214] a conseguir una mayor igualdad y a disminuir las diferencias abismales que anteriormente existían entre los diversos estratos sociales. En este sentido, hemos podido observar cómo han ido apareciendo políticas públicas encaminadas hacia tal fin: erradicación de la pobreza, mejoras en los sistemas educativos y sanitarios, etc. Es, en este marco, el conocimiento de las dificultades y problemas existentes, donde el seminario quiso profundizar, con la aportación de especialistas de Estados Unidos, Europa y Filipinas, con sus aproximaciones desde diferentes perspectivas, tanto por medio de sus diferentes disciplinas académicas como de los distintos países de los que procedían.

     Otro punto de marcado interés fue la insistencia, por parte del Director del ICEI, Dr. D. José Molero, de la importancia que tiene la creación de una red de investigación en la región por parte española, donde difícilmente podemos encontrar especialistas. Llegado este punto, conviene hacer mención en el problema de base: es difícil conseguir especialistas, debido a que, precisamente donde se tienen que formar, en la Universidad, no existe una especialidad para dicha región, a diferencia de lo que ocurre con otras regiones, bien sea la Unión Europea o América Latina, donde la presencia española está ya más que asentada.

     Una vez realizada la presentación, tomó la palabra el profesor Raúl Pertierra, en la conferencia inaugural bajo el título �Religión, política y racionalidad en Filipinas�. Dicho discurso, breve pero intenso, versó sobre la influencia histórica que España ha tenido sobre Filipinas. Raúl Pertierra (Universidad de New South Wales, Australia) señaló que la erosión de la lengua española ha sido estimulada por el todopoderoso actor mundial, Estados Unidos, a pesar de la edad de oro de la literatura filipina en español en la década de 1920. Desde entonces, hemos asistido a un deterioro paulatino de la lengua española en Filipinas. Tal es así que, como ejemplo práctico, Pertierra destacó el hecho de que conviven actualmente en Filipinas tres lenguas y que cada una de ellas es empleada acorde al evento social en el que se desarrolle: tagalo, inglés y español. Aunque los documentos más importantes de su historia fueron redactados en dicha lengua, la Constitución filipina de 1986 eliminó la enseñanza obligatoria del español. Queda, pues, la nostalgia de algunos filipinos que al acercarse a España añoran no haber aprendido su lengua para tener más oportunidades laborales.

     Durante la segunda sesión, �Violencia y pobreza en el sudeste de Asia�, se trató la esclavitud, tanto en Filipinas como en la región del Sudeste asiático, así como la violencia política. Los conferenciantes fueron Peter Boomgaard (Royal Institute of Linguistics and Anthropology, KITLV, Leiden), Felice Noelle Rodríguez (Directora del Departamento de Historia de la Universidad del Ateneo de Manila) y Henk Schulte Nordholt (Anthropologisch-Soziologisch Centrum, Universidad de Amsterdam). Los tres conferenciantes [215] abordaron la cuestión de la violencia política desde tres enfoques diferentes, el prof. Boomgaard con sus investigación de los diferentes tipos de esclavitud y de comercio de esclavos, desde los primeros contactos con los europeos hasta la llegada del siglo XIX, en que este comercio empieza a declinar. Felice Noelle Rodríguez habló sobre el concepto de guerra y las diferentes motivaciones que utilizaron los españoles en su lenta penetración por el archipiélago filipino. La charla del profesor Schulte Nordholt, por su parte, se centro en su investigación sobre Indonesia y sobre los motivos del conflicto en áreas como las Molucas o Aceh. donde el proceso de transición política se mezcla con la desintegración del Estado. Aunque Boomgaard dio una clara definición de esclavo: �aquel que puede ser comprado y vendido�, el tema que centró más discusión entre los asistentes fue cómo definir la enorme variedad de situaciones, tanto en las diferentes áreas que componen el sudeste de Asia como dentro de una misma región. Los asistentes hablaron de las distintas motivaciones: los raids, el deseo de mostrar status, la piratería, el juego, o la baja población, así como de las diferentes clasificaciones: los esclavos de los templos budistas, de los siervos de gleba y de aquellos que se daban para trabajar devolviendo una deuda. Se habló también del escaso crecimiento que generaban estas actividades, porque en muchos casos era ostentación, en otros la malnutrición era motivo de comienzo de las epidemias, y además no se solían reproducir excesivamente: �no era una forma muy económica de utilizar los recursos humanos�. Señaló el prof. Boomgaard que la función política de la esclavitud era más importante que la económica, tal como se puede ver en el sistema Sakdina en Siam. Aunque no hubo conclusión, sí se pudo constatar la idea de que los esclavos que estaban en mejor situación gozaban de un status y unas condiciones de vida mejores que las de los libres que estaban en las escalas más desfavorecidas. En relación a la conferencia del prof. Schulte Nordholt, se debatió sobre la democracia y la cultura javanesa, hablándose sobre el �conspicuo silencio� después de las masacres de 1965 y de la �limpieza ritual� o �ritual cleansing� que dio lugar a tantas muertes.

     Durante la tercera sesión, sobre �Estado y Minorías�, hablaron Huub de Jonge (Institut for Cultural and Social Anthropology, de la Universidad Católica de Nijmegen), Christian Taillard (LASEM-CNRS y vicepresidente de la principal organización de estudios sobre el Sudeste de Asia en Francia, AFRASE) y Florentino Rodao (Depto de Relaciones Internacional de la Universidad Complutense y Presidente de la AFEP). Huub de Jonge habló sobre los árabes en Indonesia de etnia hadrami, actualmente menos de cien mil personas. A pesar de vivir en el país musulmán más populoso de la tierra, esta minoría calificada como �foreign orientals� está teniendo problemas, ya que se les rehusa ser clasificados como �indonesios� y han sufrido discriminaciones. Por otro lado, son objeto de políticas de asimilación y uno de los principales logros de esta política son los dos ministros del último gobierno de [216] Abdurraman Wahid, pertenecientes a esta minoría. El prof. Taillard, especialista en Laos y buen conocedor de la lengua hablada en este país, habló sobre los ejes de comunicación a lo largo del río Mekong y lo que han ayudado en la integración espacial de la llamada �Región del Gran Mekong�, río que pasa a lo largo de seis países: China, Birmania, Camboya, Laos, Thailandia y Vietnam. El prof. Taillard utilizó multitud de mapas, indicando las redes de trasporte utilizadas por las caravanas antiguas y por las actuales carreteras. Señaló cómo la región sigue teniendo en el río Mekong un elemento clave en la relación mutua. Entre las preguntas que se le hicieron fue la actitud de China en esa creciente integración del sudeste de Asia y las presas construidas para dotar de agua a la agricultura de sus regiones en el sur, que son un peligro potencial para los países en el curso bajo del río. Florentino Rodao señaló, precisamente, a la comisión del Río Mekong como uno de los ejemplos más claros de creciente interdependencia entre los países asiáticos, aunque apuntó que el proceso está aún demasiado en ciernes como para poder vislumbrar el futuro.

     La cuarta sesión fue sobre las perspectivas de futuro para el Sudeste de Asia, ante la crisis financiera vivida en 1997. Phillipe Regnier (del ginebrino Modern Asia Research Centre (MARC)), y Christer Gunnarson (Departamento de Historia Económica, de la Universidad de Lund, en Suecia). El boom económico de Asia y las recientes crisis económicas en la región han hecho centrar la atención hacia las conexiones entre los procesos globales y las transformaciones globales. Dentro de este contexto, el prof. Regnier habló de las decisiones que está tomando el gobierno del demócrata Chuan Leekpai para seguir las condiciones impuestas por el Banco Mundial al conceder el préstamo tras el estallido de la crisis de 1997. Ello tendrá unos beneficios importantes por lo que significa de saneamiento de los lastres de la economía tailandesa, pero también una pérdida importante de popularidad de su partido. Sin precedente alguno, la integración económica global, ensanchando las redes de comunicaciones, y las políticas establecidas por los distintos gobiernos apoyando la iniciativa privada, están cambiando y redefiniendo las numerosas oportunidades para una mejora de las políticas sociales, de bienestar social, status y movilidad social. La discusión se centró sobre la capacidad de proveer riqueza del �Development Oriented Statc�, con las múltiples variantes mencionadas en Asia, como el �Ersatz Capitalism� o el �Crony (compinche) Capitalism�.

     A tal respecto, podemos afirmar que este proceso no está aislado del resto de factores que intervienen en las decisiones políticas. Me estoy refiriendo a que viene acompañado del desarrollo, en la región del sudeste asiático, de empresas con servicios altamente sofisticados y cualificados, tales como bancos, compañías de seguros, contabilidad, consultorías, firmas de abogados, escuelas de negocios, etc..., las cuales se encargan de proporcionar el acceso a [217] las fuentes necesarias para un correcta conexión con el mundo exterior. Prevalece, pues, el ámbito económico sobre cualquier otro en la región; es decir, podríamos estar hablando de una condición sine qua non para la estabilidad en la región y para que la comunidad internacional tome una mayor conciencia de la existencia de esta región, que bien podría abordarse desde otra perspectiva completamente diferente a la económica. No obstante, podríamos entablar un amplio debate entre los diferentes campos de estudio. Así, los politólogos centrarían la discusión sobre la reformas de las sociedades asiáticas, mientras que los economistas trazarían cambios en la distribución del poder y el capital y los antropólogos dirigirían su mirada hacia los efectos locales del cambio tecnológico y empresarial sobre la sociedad. Para salir de la crisis y fomentar las perspectivas de futuro de la región, se hace condición indispensable un mejor conocimiento de los aspectos sociales y culturales de la misma, tan a veces olvidados de las agendas de los gobiernos nacionales, que sólo tienen ojos para el aspecto económico y financiero.

     El día acabó con un acto informativo a cargo de uno de los participantes, Michael Cullinane, que actuó en su cargo de Director de SEASSI (Southeast Asian Studies Summer Institute), de la Universidad de Wisconsin-Madison, Instituto que está encargado por el gobierno de Estados Unidos de coordinar los cursos de verano de lenguas del sudeste de Asia, en donde se imparten al menos una oficial y otra no oficial en cada país. Para el conocimiento del Sudeste de Asia es necesario penetrar en sus lenguas: birmano, indonesio, tagalo, javanés, lao, thai, visaya, etc. El prof. Cullinane repartió propaganda de su centro y al tiempo se esforzó por convencer a los estudiantes asistentes de la necesidad de ir más allá del conocimiento del inglés para poder llegar a un nivel internacional. Cabe decir que si bien el aprendizaje del chino, japonés o coreano son importantes en la región, también lo son estas otras lenguas si estamos hablando de la formación de verdaderos especialistas en la región donde, como se recordó al principio del seminario, adquiere especial relevancia el papel desempeñado por la Universidad, aunque asistimos a la práctica, donde la política llevada a cabo en este campo es totalmente la contraria.

     Durante la quinta sesión, �Filipinas, desde la independencia hasta la actualidad�, participaron Greg Bankoff (Rescarch Fellow en la Universidad de Auckland, de Nueva Zelanda y Rescarch Fellow en Disaster Studies en la Universidad Agrícola de Wageningen), Otto van den Muijzenberg (Miembro del Centre for Asian Studies de Amsterdam (CASA), de la Universidad de Amsterdam) y Michael Cullinane, en su calidad de Associate Director del Center for Southeast Asian Studies de la Universidad de Wisconsin-Madison. Se trataron temas a los que, curiosamente, asistimos diariamente y sin embargo no reparamos ni les damos la más mínima importancia. En esta dirección, merece destacar la ponencia sobre los fenómenos y desastres históricos y naturales que repercuten sobre la región. El prof. Bankoff habló de la gran cantidad [218] de desastres naturales que han ocurrido en la región de Filipinas a lo largo de la Historia, ya que suponen el 25% de toda la actividad sísmica de la región. Terremotos, ciclones, erupciones volcánicas y un sin número de desastres ayudan a entender la evolución histórica y ciertamente aparecen en los registros eclesiásticos con profusión, por lo que es posible conocerlos mejor. Resulta curioso, además, que estos fenómenos se repiten cíclicamente, pero sobre todo el prof. Bankoff se esforzó por señalar el concepto de �sustainable livelihood� o la habilidad de la gente para enfrentarse a los desastres. Otto van den Muijzenberg mostró el proceso de cambio de imagen de Filipinas cara al mundo exterior. Dicho cambio se ha desarrollado en numerosos campos y la conferencia lo estudió por medio de la filatelia, mostrando cómo los sellos también han mostrado a lo largo de los años el cambio en el sentimiento nacional en Filipinas. A nadie se le puede olvidar que los sellos son una fuente inagotable de expresar ideas o agrupar sentimientos, actividades, corrientes, historia, etc. Michael Cullinane, por su parte, habló de cómo las familias han sustituido en algunos casos al estado en las Filipinas. Sin llegar a la violencia, como ocurría en años anteriores, tal volatilidad nos ha remitido en más de una ocasión a dichas percepciones. A tal respecto, los dirigentes políticos, así como los candidatos de los diferentes partidos, adoptan como fórmula alternativa el transfuguismo. La inestabilidad de los dirigentes hace que los regímenes adoptados también adopten tal situación, donde se ha puesto en tela de juicio la independencia del sistema judicial, así como de las actuaciones policiales en numerosas ocasiones, haciendo acto de presencia la corrupción en las altas esferas políticas. Cullinane, además de ello, terció en la polémica actual sobre �Orientalismo� dentro de los estudios filipinos, teniendo en cuenta que es miembro de uno de los grupos considerados como tales, aportó su contribución en un interesante debate que vive en la actualidad la historiografía filipina. Tal debate proviene de la creciente frustración de algunos historiadores filipinos que pretenden dirigir la marcha de los estudios sobre su propio país. En algunos casos, han decidido publicar únicamente en lenguas del archipiélago, mientras que en otros rechazan las contribuciones de autores extranjeros calificándolos de �orientalistas�.

     La sexta sesión, �Searching for the future� fue una continuación de la realizada el día anterior, a cargo de aquellos profesores que no podían viajar a Madrid el día anterior. Participaron César de Prado (Instituto Universitario Europeo), Michael Parnwell (Centre for Southeast Asian Studies, de la Universidad de Hull) y Anne Booth (Departamento de Economía de la School of Oriental and African Studies y organizadora de la próxima conferencia de Euroscas). Se abordaron temas tan interesantes como las respuestas tecnológicas, los proyectos de cooperación y desarrollo y las causas de la crisis económica en la región del sudeste de Asia. Cesar de Prado se refirió a que la importancia prestada a los avances tecnológicos en dichos países no pasa desapercibida, [219] aunque de momento es escasa. No olvidemos que estamos hablando de una región cuya base económica se sustenta sobre el sector primario y que hay una gran cantidad de capital humano con formación para adaptarse a estas tecnologías, tal como demostró el hecho de que uno de los virus más poderosos de los últimos tiempos (�I love you�) había sido creado por un ciudadano filipino. Michael Parnwell habló de los programas de desarrollo y cooperación en Thailandia, de su sector terciario y, en concreto, del turismo. Ha demostrado ser promocionado bajo la intervención directa de las industrias establecidas en la región del Mekong, no a nivel internacional. Además, el turismo ha sido, en cierto modo, un reclamo de estas sociedades inversoras para llamar al capital extranjero y, de esta forma, adquirir un mayor conocimiento de las acciones llevadas a cabo en la región. Aunque las sociedades civiles de los antiguos Estados socialistas de la región del Mekong no tengan la misma libertad que el Banco de Desarrollo Asiático para influir en la política y contestar a la definición y prioridad del concepto de desarrollo, existen intentos para establecer las bases dirigidas a la inclusión en las agendas políticas de estos Estados de la importancia que revisten los asuntos medioambientales en la región. La profesora Booth, por su parte, desafió las actuales explicaciones sobre la crisis financiera de 1997 con una conferencia en la que hizo un recuento del debate actual, mostrándose escéptica sobre ello y argumentando que es necesario conocer mejor las estructuras de las sociedades del sudeste asiático y los mecanismos financieros internacionales para comprenderlo bien. El debate surgió pronto entre los asistentes, aunque hubo de acabarse pronto por la necesidad de acabar la Conferencia Internacional y dar paso a la reunión de la Junta Directiva de EUROSEAS, que contó con otros participantes de su Junta Directiva venidos expresamente a la reunión, como Elena Soboleva (Russian Academy of Sciences) y Michael Hitchcock (University of North London, Center for Tourism and Leisure Studies). Se aprovechó también la venida de los especialistas en Filipinas para organizar la reunión del Comité Organizador de la IV Conferencia Europea de Estudios Filipinos, que tendrá lugar en septiembre de 2001. La reunión, en definitiva, será continuada el año que viene con otra más amplia y centrada en Filipinas, aunque no se olvidará la región ya que tiene el lema �Filipinas en el Sudeste de Asia� [220] [221]



ArribaAbajo

Reseñas

[222] [223]

D'ALLEVA, Anne: Art of the Pacific. Calmann and King, Londres 1998. The Every Man Art Library. 176 pp.

     Son muchos los títulos sobre arte oceaniano. Pero quien quiera acceder a ellos deberá buscarlos fuera de España, como ya es habitual en lo que respecta al ámbito del océano Pacífico. Éste que comentamos brevemente es una muy buena síntesis debida a una especialista en el arte de esta parte del mundo, profesora de la Universidad de St. Thomas, St Paul, Minnesota. Se incluye en la magnífica serie indicada arriba, que reúne títulos generales y monográficos sobre arte mundial -entre otros, uno sobre el Pacífico: Japanese Art of the Edo, de Christine Guth.

     La autora se sitúa en una perspectiva multidisciplinar, lo que le permite valorar adecuadamente no sólo los aspectos artísticos, sino también los antropológicos -incluidos los que los anglosajones llaman �de género�, que proporcionan puntos de vista inéditos-, históricos, étnicos, económicos, y le permite desarrollar su punto de vista, cuyo núcleo es que el arte de Oceanía debe ser entendido no, o no sólo, en el contexto social, sino como contexto social.

     Su campo de estudio, sin embargo, no es toda Oceanía: se limita a la Oceanía cuyo común denominador formal es la insularidad, es decir, a Melanesia, Micronesia y Polinesia, con exclusión de Australia, desde las épocas más antiguas a los tiempos actuales, sin olvidar los grandes cambios ocurridos en los dos últimos siglos, sobre todo por la intromisión colonial europea, la política y la religiosa, que alteró o destruyó, muchas veces definitivamente, las sociedades y por tanto el arte de Oceanía. Especial interés tiene el capítulo dedicado al arte contemporáneo y a la producción de artistas que han quedado incluidos en el arte universal.

     Se estudian la escultura, la pintura, el tejido, la arquitectura, los adornos corporales, los objetos de uso cotidiano, etc., los debidos a la producción antigua y a la contemporánea, con una bastante amplia ilustración iconográfica, los distintos estilos e interinfluencias, y los diversos aspectos relacionados con la producción artística, como la ejecución, el intercambio, la donación, el comercio, la organización social, las etnoideologías, la influencia de la política, de las condiciones económico- sociales. Completan la obra una cronología, un glosario, y una [224] bibliografía. Un buen libro que espera ser traducido al español.

C.A. Caranci



ALBALÁ HERNÁNDEZ, Paloma: Americanismos en las indias del Poniente. Voces de origen indígena americano en las lenguas del Pacífico. Lingüística Iberoamericana,/Vervuert. Madrid/Frankfurt am Main 2000. 270 pp.

     Para los lectores interesados en el ámbito cultural de las Islas del Pacífico, y más concretamente en el de aquéllas que pertenecieron a España, es especialmente grato tener noticia de la publicación de un trabajo relacionado con dicho ámbito, dada la poca frecuencia con la que esto acontece, sobre todo en el panorama editorial de habla hispana. Nótese, por cierto, que la editorial es hispano-alemana.

     El libro es fruto de las investigaciones llevadas a cabo por su autora, cuyo origen se remonta a 1985 con la realización de trabajos de campo en los archipiélagos de Filipinas y Marianas. Su objetivo último -en palabras de Albalá- es el �de contribuir al estudio de los puntos de unión entre las dos grandes áreas de influencia española durante siglos: las Indias americanas y las Indias del Poniente�.

     El presente libro estudia las voces de origen indígena americano que perviven en lenguas del Pacífico, a las que llegaron, fundamentalmente a través del español. El análisis de la compleja interrelación lingüística que da lugar a tales préstamos, basa su metodología en la consideración, primero, de las lenguas emisoras (las indígenas americanas), de las lenguas transmisoras o lenguas puente (principalmente -pero no sólo- el español) y, finalmente de las lenguas receptoras (las de Filipinas, Marianas, Carolinas y Palaos). Se estudian en definitiva, los americanismos existentes hoy en dieciséis lenguas de estos archipiélagos.

     Antes de comenzar a exponer las características de estas tres categorías de lenguas que interesan al tema abordado, en el capítulo primero, se incluye, a modo de cuestión previa, una necesaria introducción histórica, que resulta de gran interés, dada su concisión y claridad expositiva, que sitúa al lector -sobre todo al no familiarizado con el tema- de forma precisa, sin agobiarle con exceso de información, tentación ésta que no pocos autores no logran evitar.

     Así mismo se aborda como cuestión previa la delimitación del concepto de americanismo, entendiendo como tal toda palabra que proceda, directamente o a través de una lengua puente, de una lengua indígena americana precolombina.

     El capítulo segundo está dedicado a las iglesias indígenas americanas, es decir, a las lenguas emisoras, con una perspectiva general del panorama lingüístico que encontraron los españoles a su llegada al Nuevo Mundo, haciendo un analítico y descriptivo recorrido por las principales: antillanas (arahuaco, taíno y caribe); mexicanas (náhuatl, maya y tarasco), sudamericanas (quechua, guaraní, mapuche y lenguas chibchas); y norteamericanas (lenguas algonquinas). Dentro de este mosaico lingüístico los españoles, especialmente los misioneros para sus fines evangelizadores, �aprendieron aquellas lenguas indígenas que se consideraron más importantes por extensión y desarrollo�, dándose el caso curioso de que estas lenguas indígenas -que alcanzaron la categoría de generales- tuvieron durante la época colonial un desarrollo superior al que habían conocido en los imperios prehispánicos�.

     El capítulo tercero está dedicado a las lenguas transmisoras de americanismos, principalmente el español, y también el [225] inglés, sin olvidar al alemán, francés, portugués, y a lenguas transmisoras secundarias. En cuanto al español como lengua transmisora se estudian en primer lugar sus americanismos, que comienzan a aparecer ya en el Diario del Descubrimiento, de Colón. Algunos de estos vocablos, designativos de realidades absolutamente nuevas para los europeos como: iguana, maíz, caníbal, cacique, barbacoa, etc, van a instalarse con tanta seguridad en el sistema fonológico español, que llegará incluso a olvidarse su procedencia.

     A continuación se hace un análisis de la evolución del español en Filipinas, Marianas y el resto de Micronesia, respectivamente, fundamentado en las causas históricas, sociológicas o demográficas de esa evolución. Es de destacar el punto de vista de la autora -en el que sigue a Rodríguez Ponga- sobre el chamorro (lengua de las Marianas) como lengua mixta: del español (con un 60% de su vocabulario de origen hispano) y de la lengua austronésica preexistente. Es también de destacar que en esta lengua aparezcan con nombre español realidades -necesariamente anteriores a la presencia española�, como patas; labios; sebas -cejas-; isla.

     Al estudiar el inglés como lengua transmisora, se sigue un esquema similar al utilizado para el español, distinguiendo, en el análisis de los americanismos, aquéllos que llegan al inglés a través del español, de los que lo hacen directamente a través de las lenguas de las colonias inglesas en Norteamérica, como mocassin o tótem.

     En los capítulos sucesivos, del 5 al 20, se hace ya el estudio pormenorizado y riguroso de los diferentes americanismos existentes en las dieciséis lenguas del Pacífico estudiadas: chamorro, carolino, kusaeño, marshalés, mokilés, palauano, ponapeño, trukés, uleayano, yapés, tagalo, bicolano, cebuano, ilocano, pampango y pangasinán. Todos ellos siguen la misma estructura: comienzan con la descripción de las fuentes utilizadas, y consideraciones de índole fonética y ortográfica, para pasar al análisis de cada uno de los vocablos, con especial atención a su trayectoria etimológica y significado.

     Tras un breve capítulo de �Consideraciones finales� se incluyen unos prácticos apéndices en los que los americanismos identificados -un total de 111- se clasifican según diferentes categorías etimológicas. Concluye la publicación, como no podía ser de otra manera, con una copiosa y cuidada bibliografía.

     El interés de Americanismos en las Indias del Poniente va más allá de su valor filológico, al poner de manifiesto la estrecha relación existente entre las distintas manifestaciones culturales hispánicas de tres continentes. Cabe destacar la claridad del sistemático proceso analítico seguido por la autora, claridad que se hace patente a lo largo de todo el discurso expositivo del trabajo.

     Con independencia del interés que el libro tiene para el lector especializado, para el profano no deja de resultar curioso y ameno, permitiéndole descubrir, no pocos hechos que llaman su atención; por ejemplo: �sabía usted que el cebuano era la lengua más hablada en Filipinas, por delante del tagalo, hasta no hace mucho?; o que cuando pide tempura en un restaurante japonés está usted utilizando un hispanismo que procede del español témpora; que cuando va a la taquilla del cine y pide dos butacas está utilizando un vocablo originario de una lengua del Caribe llamada cumanagoto; �sabía usted por cierto que �Pepe� es un hipocorístico?

JAVIER GALVÁN GUIJO

[226]

WATANABE, Koji: Engaging Russia in Asia Pacific, Japan Center for International Exchange, Tokio-Nueva York, 1999, 190 páginas.

     Desde cuando cayó el muro de Berlín y se desintegró el bloque comunista los analistas y los políticos se preguntan hacia donde va la sociedad internacional y qué tipo de relaciones se establecerán entre los actores de la escena global. Se ha pasado, en muy pocos años, del mundo bipolar al multipolar o unipolar (aún no hay claridad sobre el tema). Rusia, para la mayoría de los observadores de la vida internacional, se ha convertido en una gran incógnita. Los europeos la perciben como un poder en transformación obligado a retirarse de su esfera de influencia a causa, por un lado, del retorno de las sociedades de Europa Central al modelo occidental de la organización del estado y, por el otro, como consecuencia de la expansión de la OTAN. Se olvida, sin embargo, que la Federación Rusa es un estado cuyas 2/3 partes pertenecen al continente asiático, el cual está interesado en integrar a Rusia en sus estructuras de seguridad y cooperación. Este hecho da una dimensión nueva a cualquier análisis de los cambios que se van efectuando en este país que intenta sacudirse del golpe del fin de la guerra fría y de la desintegración de la URSS.

     El libro editado en Japón en el año 1999 Engaging Russia in Asia Pacific es el resultado del proyecto de investigación del Japan Center for International Exchenge (JCIE) desarrollado en los años 1997-1999. Su objetivo consistía en analizar el compromiso de Rusia en Asia Pacífico desde el punto de vista del desarrollo económico y del afianzamiento de la seguridad en la región a lo largo de los últimos diez años. Las investigaciones han sido realizadas por un grupo de siete especialistas procedentes de Japón, China, Filipinas, Malasia, Singapur y Corea del Sur y coordinados por Watanabe Koji, miembro de JCIE y antiguo embajador japonés en Rusia. Como señala este último en la Introducción, se trata de una compilación de las distintas visiones que tienen tres elementos en común: son aportaciones hechas por los investigadores procedentes de los países asiáticos, todos ellos reconocen que Rusia tiene un papel importante a desempeñar en Asia Pacífico y todos ellos admiten que un mayor compromiso de Rusia en la región es positivo para la paz y la prosperidad de Asia Pacífico. Llama la atención que ninguno plantea el tema de una posible amenaza que puede tener su origen en Rusia. Es el síntoma de un optimismo exagerado, sobre todo si nos fijamos en el entramado de los problemas territoriales pendientes con Japón, de los desacuerdos políticos con China y con Corea del Sur y de las implicaciones que suponen las relaciones con los EE.UU en el contexto del continente asiático.

     La obra presentada por Watanabe Koji parte del presupuesto que Rusia aunque es una potencia que geográficamente forma parte de dos continentes -el europeo y el asiático, hasta hace poco, tenía sus intereses políticos casi exclusivamente en Europa. Su centro de gravedad político y económico se encontraba, históricamente, al oeste de los Urales. No obstante, las transformaciones que han tenido lugar a partir del año 1989 (incluida la pérdida de los yacimientos de gas y petróleo en la parte europea y del acceso al mar Negro y al Báltico) han contribuido a que Rusia se replantee su orientación política y económica. Esta nueva actitud es bien visible desde el año 1994 cuando se produjo la sustitución del ministro de asuntos exteriores [227] A. Kozyrev, de tendencia occidentalista, por Y. Primakov, quien es partidario de mejorar las relaciones con Asia del Pacífico. La ampliación de la OTAN jugó un papel importante en este contexto. Amado M. Mendoza la compara a la derrota sufrida por Rusia en la guerra de Crimea. En aquella época Rusia pudo ser reintegrada en Europa para equilibrar a Alemania, mientras que ahora, en los tiempos de la Unión Europea, hay pocas posibilidades para que la situación se repita. A Rusia, como lo señalan los autores, no le queda más que volver su mirada hacia Asia.

     Los intereses que tiene el estado ruso en el continente asiático son de dos tipos.

     En primer lugar, se trata de los lazos económicos con los países del Asia del Pacífico que pueden contribuir al desarrollo y ayudar en la transformación de la economía rusa que sufre una crisis muy grave. A ello hay que añadir la importancia del Lejano Oriente ruso que es una región muy rica en los recursos energéticos. Su explotación interesa tanto a Rusia como a los estados vecinos de la Federación Rusa, deseosos de independizarse del petróleo de los países árabes. Se ha hablado de esta región como de la ventana rusa a Asia.

     En segundo lugar destaca el tema de seguridad, un concepto que en los últimos años se ha ampliado y va más allá de su significado tradicional de respuesta militar a una agresión directa. Todos perciben que Rusia sigue siendo potencia mundial, aunque sea solamente por el hecho de poseer armas nucleares y de ser uno de los productores y abastecedores de armas más importante en el mundo y en Asia Pacífico. La posición de Rusia es el tema clave para organizar la seguridad en una región dominada por cuatro grandes potencias: EE.UU, China, Japón y Corea del Sur. Rusia, en este contexto, desempeñaría la función de un poder que equilibrio a los demás.

     Al analizar la actitud de los países de Asia Pacífico hacia la Federación Rusa hay que tener en cuenta que se trata de un conjunto de estados bastante heterogéneos. Los autores del libro Engaging Russia in Asia Pacific han optado por la división de la región en dos zonas: Asia del Nordeste y Asia del Sudeste, cada una con distintos intereses y expectativas.

     De acuerdo con este esquema, los primeros cinco capítulos están dedicados al problema del compromiso de Rusia en Asia del Nordeste visto desde la perspectiva de Corca del Sur (capítulo 1 de Ha Yong-Chool), China (capítulos 2 y 3, de Yanh Minhjie y Li Jingje, respectivamente) y Japón (capítulos 4 y 5, de Watanabe Koji y Sugano Tetsuo).

     En el caso de Corea el autor destaca el papel que Rusia puede desempeñar participando, junto con EE.UU, China y Japón, en el desarrollo del proceso de transformaciones en las dos Coreas, vinculado a la posible unificación de los dos países.

     En el análisis realizado por los investigadores chinos cabe señalar su preocupación por la necesidad de afianzar el sistema multipolar de seguridad basado en la cooperación de las cinco potencias: los EE.UU, China, Japón, Corea del Sur y Rusia. Este sistema, como lo afirma Yang Mingjie sustituyó al triángulo: EE.UU, China, URSS que determinaba las relaciones de seguridad hasta 1989. Li Jingjie presenta, por su parte, la evolución de las relaciones ruso-chinas que han pasado desde la indiferencia-enemistad hacia la amistad en el año 1991, para convertirse en la cooperación estratégica a partir de 1996.

     Las aportaciones de los investigadores japoneses se centran en la cuestión de los territorios del norte, ocupados por la [228] URSS en el año 1945. Watanabe Koji subraya la necesidad de firmar el tratado de paz que acabe con las herencias de la guerra fría. Sugano Tetsuo analiza los intereses económicos mutuos -los préstamos, inversiones y tecnología japonesas para Rusia, el gas y petróleo del Lejano Oriente ruso para Japón y otros países.

     Los capítulos que siguen a continuación tratan el tema del compromiso de Rusia con el sudeste asiático. En el sexto, Bilveer Singh de Singapur, hace hincapié en la existencia de varios factores que contribuyen a frenar la participación rusa en el sistema de seguridad de Asia del Pacífico, como son la inestabilidad interna, la debilidad económica, fuerte tradición europeísta de la política exterior rusa en la época contemporánea. La misma problemática está planteada en el capítulo séptimo, K. S. Natlian, sobre el fondo de las relaciones ruso-malasias, destaca el papel de Rusia en el tema de la seguridad y señala la necesidad de seguir mejorando los intercambios comerciales. Este último aspecto está desarrollado por Amado M. Mendoza quien profundiza en la relación existente entre la Federación Rusa y ASEAN (cap. 8).

     La obra presentada termina con una reflexión (cap. 9) que invita a ver un posible compromiso de Rusia en Asia del Pacífico como un factor deseable, tanto para los rusos como para los países de la región. Lo único que preocupa es si los rusos lo perciben de la misma manera.

     El libro coordinado por Watanabe Koji Engaging Russia in Asia Pacific es una aportación interesante al debate sobre las transformaciones en las relaciones internacionales que ha surgido entre los investigadores occidentales en el momento de la desaparición de la URSS. La visión presentada por el equipo de los analistas patrocinados por JCIE es, quizás, demasiado optimista, lo cual ha sido subrayado por algunos participantes rusos de la conferencia en Cebú en mayo de 1998 en la cual se presentaron los resultados de las investigaciones (ver el apéndice 1 y 2). No obstante, es un trabajo que, aparte de proporcionar datos concretos, señala una posible vía del desarrollo de las relaciones internacionales en el estudio de las cuales es imprescindible abarcar varias dimensiones geográficas yendo más allá de la visión exclusivamente europea. Es algo que olvidan muchos investigadores occidentales.

BEATA WOJNA



GALVÁN, Javier: Islas del Pacífico: El Legado Español, Editorial Lunwerg. Madrid 1999. 126 pp.

     Como parte de los actos conmemorativos entre España y sus antiguas colonias de Micronesia -Marianas, Carolinas y Palaos- del Primer Centenario de su separación de España, la Dirección General de Cooperación y Comunicación Cultural, dirigida entonces por Rafael Rodríguez-Ponga, decidió poner en marcha un proyecto de catalogación e inventariado de todos y cada uno de los restos históricos de origen español que aún existen en aquellos territorios. El proyecto recayó en el arquitecto Javier Galván, destacado Investigador de la arquitectura española en Filipinas y sin lugar a dudas la mayor autoridad en cuanto arquitectura del periodo colonial en Micronesia se refiere junto con el arquitecto mexicano Jorge Loyzaga.

     A lo largo de varios meses de trabajo y recorriendo isla por isla, Javier Galván elaboró un completo inventario fotográfico de dichos restos, que abarcan un sorprendentemente [229] amplio abanico de edificaciones, desde Iglesias, fuertes o casas particulares, hasta puentes, embarcaderos, hornos, torres, tumbas aisladas y cementerios completos; especificando medidas, emplazamientos, estado de conservación, etc. con el fin de incluir los resultados en una exposición itinerante que habría de recorrer con singular éxito Guam, Saipán, Pohnpei, Palaos, Madrid, A Coruña, Panamá...

     El presente libro constituye el catálogo de dicha exposición, y es en sí mismo un hito de primera magnitud en cuanto al estudio de la presencia española en el Pacífico, ya que se trata de la primera publicación colectiva de historiadores y expertos, hombres y mujeres, que sobre este tema aparece en nuestro país. Así, el catálogo viene precedido por los excelentes trabajos de Amancio Landín Carrasco, Florentino Rodao, Belén Pozuelo, Omaira Brunal-Perry, Rafael Rodríguez-Ponga y el propio Javier Galván.

     El apartado del catálogo ocupa la segunda parte del libro e incluye una breve y completa descripción de cada uno de los restos, acompañada de una serie de descriptivas fotografías que permiten visualizar el estado actual de muchos de los restos y hacerse una somera idea de cuál podría haber sido su aspecto original.

     Dada la lejanía de los emplazamientos a reseñar, no sólo con respecto a España sino unos de otros -aún hoy la comunicación interinsular no siempre resulta sencilla- es de destacar que para la realización de las fotografías, de inmejorable calidad, el autor hubo de subirse a grúas, meterse en ríos y casas en ruinas, llegar por mar hasta aquellos restos que la vegetación ha cubierto totalmente, y un sin fin más de complicaciones que aumentan el valor de las mismas y cuyo afán rastreador ha permitido incluso la salvación de alguno de los restos, como es el caso del �Kombento� de Rota, a punto de caer bajo la piqueta demoledora y rescatado en el último momento gracias a la mediación del autor y los cuidados del Historic Preservation Office del Gobierno de las Marianas del Norte.

     A raíz de su labor cultural tanto en Filipinas como en las islas de Micronesia, este arquitecto recibió recientemente la insignia de Caballero de la Orden de Isabel la Católica.

     Los actos de conmemorativos entre los que se encontraba la exposición de la que este catálogo es complemento, y que fueron acompañados en el Pacífico y España por la prestigiosa Orquesta de Cambra de l'Empordá interpretando una serie de piezas de finales del siglo XIX relativas a los archipiélagos, han dejado como fruto el estrechamiento de relaciones de todo género entre nuestro país y aquella zona del mundo, de manera que podemos decir que se ha abierto una nueva página en las relaciones entre ambos territorios en las que todo vestigio colonialista ha quedado superado, partiéndose ahora de esa historia común que viene representada simbólicamente en los restos arquitectónicos que el presente volumen recoge y nos permite conocer más a fondo.

CARLOS MADRID ÁLVAREZ-PIÑER



RUSSELL, S.: Tiempon Alemán. Look Back at German Rule of the Northern Mariana Islands 1899-1974. CNMI. Saipán 1999, 55 pp.

     Este breve volumen recientemente publicado se ocupa en su integridad de los quince años que abarca el periodo colonial alemán en las Islas Marianas del Norte, siendo uno de los pocos trabajos [230] que se dedican exclusivamente a su estudio específico.

     Su autor, Scott Russell, es miembro de la Divission of Historic Preservation, con sede en Saipán, y es autor de varios estudios en profundidad sobre la historia y la cultura chamorra y carolina. Esta nueva aportación suya se inscribe dentro de los actos y la exposición celebrada en Saipán en 1999 con motivo del Centenario de la Adquisición de las Islas Marianas del Norte por Alemania, compradas a España tras la derrota militar de 1898.

     A pesar de su breve extensión, este libro presenta como ventaja el hecho de que supone un resumen claro y conciso de todo el periodo colonial. Acompañado de una muy buena selección de fotografías, el texto va desgranando las diferentes facetas del proceso de instalación de la nueva colonia, sus leyes, edificios, así como el impacto de los nuevos colonos sobre la vida local.

     Al final del mismo se recoge una breve pero interesante bibliografía que hace aún más completa y útil su lectura.

CARLOS MADRID ÁLVAREZ-PIÑER



COOMANS, Fr. Peter: History of the Mission in the Mariana Islands: 1667-1673. Division of Historie Preservation. 82 páginas. (Traducido del latín al inglés por Rodrigue Lévesque).

     Acaba de reeditarse en la Mancomunidad de las Islas Marianas del Norte este libro, cuya primera edición data de 1997. Lo constituye el testimonio de un fraile belga, Peter Coomans, nacido en Antwerp en 1638 y que llegó a Guam en el segundo grupo de Jesuitas que llegaron a las Marianas, en 1672. En 1685 se convertiría en el último mártir jesuita, al ser muerto por los chamorros de la isla de Saipán mientras realizaba una parada en la misma.

     Su relación incluye datos de un extraordinario valor, al haber sido escrita en una época en la que la sociedad chamorra no había recibido prácticamente ningún tipo de influencia externa por parte de los colonos españoles. Coomans describe, breve pero ilustrativamente, los hábitos culinarios, la forma de construcción de viviendas y canoas, las distintas clases sociales... no es una obra de historia, por supuesto, pero su testimonio tiene hoy un valor incalculable, de hecho son muchos los episodios de los primeros años de la colonización de las Marianas de los que hoy sólo podríamos tener vagas referencias de no ser por la supervivencia y posterior descubrimiento de la obra de Coomans. Los detalles de la muerte de Sanvitores, las guerras hispano-chamorras, la llegada del galeón de 1672, la actitud de los misioneros, etc.

     Descubierto en un archivo de Bruselas por el infatigable canadiense investigador de la Historia del Pacífico Rodrigue Lévesque, el texto fue traducido del latín directamente por él, gracias al soporte financiero de la Division of Historie Preservation de las Marianas del Norte. Lévesque es autor asimismo de una recopilación de documentos de interés para la historia del Pacífico, localizados y reproducidos a lo largo de varios años en diversos archivos de todo el mundo, que lleva por título genérico History of Micronesia, en varios volúmenes, y que incluye en la mayor parte de las ocasiones además del documento íntegro traducido al inglés, el texto adjunto del documento original para su verificación.

     La reedición de la obra de Coomans [231] viene acompañada igualmente de abundantes notas aclaratorias a pie de página, que contribuyen a hacer más comprensible el contenido aquellas personas a quienes va dirigida principalmente: los estudiantes.

CARLOS MADRID ÁLVAREZ-PIÑER



AA.VV.: Diccionario Etimológico Rapanui-Español. Comisión para la Estructuración de la Lengua Rapanui. Universidad de Playa Ancha Editorial, Valparaíso, Chile, 2000, 209 páginas.

     La Comisión para la estructuración de la lengua rapanui, cuyo Director es el español Jesús Conté Oliveros, ha presentado esta vez una obra que los lingüistas de la Polinesia necesitan para sus investigaciones. En colaboración con los pascuenses Alberto Hotus, Jorge Edmunds Rapa-hango, Juan y Rafael Haoa y Uka Tepano Kaituoe, Conté presenta este trabajo realizado después de una laboriosa investigación de las raíces de la lengua rapui, corrigiendo y superando ampliamente otras obras sobre el mismo tema, entre ellas las de los misioneros Hipólito Roussel y Sebastián Englert y la del filólogo catalán Jordi Fuentes de 1960.

     Este trabajo lexicográfico incorpora nuevos vocablos antiguos rapanui que no estaban incluidos en otros libros, además de varios términos adaptados de las lenguas clásicas y de neologismos provenientes de la época misionera y de otros tahitianos derivados de palabras inglesas o francesas.

     Los filólogos de las islas del Océano Pacífico saben que la lengua rapanui pertenece a la gran familia lingüística austronésica. La filogénesis de la lengua rapanui procede del protopolinésico oriental, separándose ya en sus comienzos del protopolinésico central del cual emanan el marquesano, el mangarevano, el hawaiano, el rarotogano, el paumotu, el maorí de Nueva Zelanda y el tahitiano. Conté también señala con buen criterio, que el rapanui comparte la oclusión glótica con el tongano y el rennellés, además de conservar varias formas que no existen en las restantes lenguas del polinésico oriental.

     En las primeras páginas de la obra la Comisión desarrolla varios ejemplos comparativos de la lengua rapanui con vocablos del protopolinésico nuclear, central y oriental, así como con las lenguas clásicas (griego y latín), y también con el español, francés, inglés, tahitiano y del mismo rapanui.

     Las palabras que derivan o cuya raíz proviene de los diferentes grupos del protopolinésico están señaladas mediante siglas, para dar más facilidad al lector a conocer su origen. En las páginas finales del Diccionario hay un breve anexo donde se incluyen los diferentes vocablos en lengua rapanui de los camotes, plátanos, taros yñames y una completa bibliografía.

     Es por tanto un libro que completa el vacío que existía del análisis de los vocablos rapanui y sus diferencias con otros polinésicos y que ayudará mucho a los investigadores, especialmente a los lingüistas, en el estudio de otras lenguas de las islas del Océano Pacífico. Después de este interesante trabajo sería muy conveniente que la Comisión para la estructuración de la lengua rapanui investigara a fondo la toponimia pascuence, que no aparece en el Diccionario uno de los grandes retos de los historiadores y filólogos y que todavía no se ha estudiado con la precisión que se merece. Esperemos [232] que Conté y sus colaboradores pascuenses presten la debida atención a este tema, pues tienen suficientes conocimientos para incluirlo en sus próximos trabajos.

FRANCISCO MELLÉN



FERNÁNDEZ-SHAW, Carlos: España y Australia. Cinco siglos de historia. Ministerio de Asuntos Exteriores, Dirección General de Relaciones Culturales y Científicas, Madrid 2000. 199 pp.

     Se trata de la versión reducida (189) de España y Australia. Conexiones durante cinco siglos. Su autor fue embajador de España en Australia durante más de cinco años y de ahí le viene el interés por este país-continente tan poco conocido en Europa y, sobre todo, en España. Aunque presenta una panorámica general de Australia, se centra sobre todo en las relaciones entre España y ese país, con una elaboración en cierto modo temática y, siempre, amena.

     Así, se hace la historia de los nombres que el continente australiano fue teniendo a lo largo de los siglos, desde Terra Australis a Australia, pasando por Austrialia. Un capítulo nos habla del Tratado de Tordesillas, que repartió el mundo entre Portugal y Castilla, y que permitió que fueran los españoles los que surcaron por primera vez las aguas próximas a Australia.

     �España y la fundación de Australia� aborda las maniobras inglesas y españolas alrededor de Australia, ya en el siglo XVIII, cuando Inglaterra comenzaba a establecerse en esta parte del mundo. Otro capítulo describe el viaje geográfico-político de Malaspina por el Pacífico, en el que informó sobre la colonia británica en la costa australiana.

     Un interesante capítulo se refiere a la participación británica en la Guerra de Independencia española: una parte de los soldados y de la oficialidad marcharon hacia Australia al terminar el conflicto. Es curiosa la historia del llamado �dólar español�: a comienzos del siglo XIX se empleaban en Nueva Gales del Sur monedas españolas con la efigie de Carlos III, que sufrieron diversas manipulaciones, hasta su sustitución por monedas inglesas. Otra presencia española en este país fue la misión de Nueva Nursia (1846) fundada por frailes españoles en la Australia occidental.

     Otro conflicto vuelve a poner en contacto a australianos y españoles: la Guerra civil española de 1936. En el país -como en España- se formaron dos bandos: liberales e izquierdas apoyaron al gobierno español (brigadistas australianos combatieron en su favor), mientras que la derecha y la Iglesia católica australiana ayudaron por todos los medios a los sublevados.

     Tras este último capítulo entramos en otra realidad completamente distinta: el autor nos introduce, en sendos capítulos, en la flora y fauna australianas, nos habla de la introducción del eucalipto -árbol australiano- en España, y de la de ovejas merinas españolas en Australia.

     Dos capítulos están dedicados a la relativamente numerosa colonia española y a la lengua española en aquel país, para terminar hablándonos de las influencias culturales mutuas, en la literatura, en la producción de obras históricas, en la música, etc.

C. A. Caranci

[233]

MORET, Xavier.: Boomerang. Viaje al corazón de Australia. Altair Viajes, Ediciones Península, Barcelona 2000, 237 pp.

     Esta obra pertenece al género de libros de viajes que tan de moda se ha puesto últimamente. De hecho, su autor, el periodista y escritor barcelonés Xavier Moret, ya había realizado otro anteriormente para la misma colección �Altair Viajes� titulado �América, América. Viaje por California y el Far West�.

     En este libro Moret nos narra sus experiencias en la Commonwealth de Australia. Comienza su itinerario en Sidney y sus alrededores (Blue mountains, Hunter Valley, Byron Bay, Mount Warnin, Nimbin); posteriormente se desplaza hacia el sur, visitando Melbourne y su entorno (Ballarat, Apollo Bay), y de allí hacia el norte hasta Broken Hill, cerca de la frontera entre Nueva Gales del Sur y Australia del Sur. Desde dicho lugar regresa de nuevo a Sidney, para inmediatamente visitar Canberra, la capital de la nación. Su siguiente paso es coger un avión y dirigirse a Alice Spring, casi en el centro de esta isla-continente, en pleno desierto australiano. Visita entonces el Uluru, roca sagrada para los aborígenes: con uno de ellos charla en el vecino Centro Aborigen Anangu. Luego visita las también cercanías Olgas, con junto de treinta y seis cúpulas rocosas. Regresa a Alice Springs y emprende entonces en coche un largo camino, en medio del desierto, hasta llegar a la ciudad de Darwin, en la costa norte del país, haciendo paradas en Mataranka, Katherine y el Parque Nacional de Kakadú. De Darwin vuela hasta Cairns, en la costa noreste. Aprovecha para visitar las cercanas localidades de Innisfail. Port Douglas y Cape Tribulation, así como la barrera de coral que se extiende desde el [234] Trópico de Capricornio hasta el Estrecho de Torres. Será ésta su última visita, pues vuelve entonces a Sidney para desde allí tomar el avión hacia España.

     Hay que destacar finalmente que el libro resulta muy interesante y ameno, contando el autor continuamente todo tipo de anécdotas, curiosidades e informaciones históricas, que contribuyen a conocer mejor la realidad del país. Además, la prosa es cuidada y elegante, lo que distingue de forma muy positiva a este libro, realizado por una persona que ha escrito ya varias novelas, frente a otros libros de viajes cuyos autores no son profesionales de la escritura, lo que hace que en bastantes ocasiones la lectura de este tipo de libros pueda resultar aburrida y difícil.

JUAN SANMARTÍN BASTIDA



REID, Anthony: Chaiting the shape of eary modern Southeast Asia. Institute of Southeast Asian Studies, Singapur 2000. x + 298 pp. 6 mapas. 6 cuadros. 10 ilustraciones.

     Un nuevo libro de uno de los principales especialistas en el mundo sobre el Sudeste de Asia, Anthony Reid, que tras haber enseñado durante muchos años en la Ausralian National University, ahora lo hace en la Universidad de California. No es tan novedoso, sin embargo, tal y como se nos advierte en el prefacio, porque muchos de los capítulos que lo conforman han aparecido previamente y de manera independiente en diversas publicaciones -periódicas o no- pertenecientes al ámbito de los estudios en tomo al Sudeste Asiático. Los temas abordados son muy diversos, desde los diferentes modos y procesos de islamización y su alcance, hasta el análisis de las diversas [234] modalidades de esclavitud, de la que estudia tanto su origen, su terminología a utilizar en cada caso o su relación con los usos europeos. Un total de doce artículos que son otros tantos capítulos que poseen un horizonte cronológico común (si bien amplio y bastante flexible) y a la vez se refieren a un área geográfica determinada. Acerca de lo primero, el lector avisado observará que en el orden de los capítulos se ha procurado mantener una disposición o un hilo temporal que va desde el comienzo del siglo XIV hasta principios del s. XX.

     Cuando el tema lo requiere, el libro llega hasta momentos más actuales. Así, en el capítulo noveno, el más extenso de todos, �Slavery and Bondage in Southeast Asian History�, el desarrollo de la exposición lleva hasta los movimientos abolicionistas del siglo XIX, los más tardíos, porque varios países la mantuvieron el siglo XX, tal como Siam, en varias etapas entre 1874 y 1905: los holandeses de Batak hasta 1910 y los ingleses mantuvieron sin liberar a los esclavos del este de Birmania hasta 1926. En el capítulo décimo: �The Origins of Southeast Asían Poverty� sin embargo, se aprecia la proyección el estudio hacia la actualidad, en el sentido causa-efecto y esto justifica grandemente su ubicación en orden de los capítulos, amén de estar conectado temáticamente con los capítulos del final. La mayor parte del capítulo se desarrolla en el siglo XVII, ya que según el autor es en 1600 cuando comienzan a percibirse los primeros signos de cambio: �On this basis it seems posible to surmise that around 1600 maritime Southeast Asians were roughly as tall and as long-lived as Europeans, and if anything rather more healthy�. (Reid 218). Un libro, en definitiva, que trata de una variedad de temas y abarca un período de tiempo muy largo, que sirve para profundizar en el conocimiento del Sudeste de Asia a través de temas concretos magistralmente tratados, como siempre, por la pluma de Reid.

SEAN RETANA



RODRÍGUEZ GONZÁLEZ, Agustín Ramón: La caída de Manila en 1898: Estudios en torno a un informe consular. Asociación Española de Estudios del Pacífico (Serie Monografías), Madrid. 1999. 120 págs.

     Aparece otro de los cuadernos monográficos de la Asociación Española de Estudios del Pacífico, en esta ocasión centrado en la derrota naval de Cavite frente a la flota norteamericana en 1898.

     Este episodio ha sido objeto de una serie de estudios y análisis que, con mayor o menor acierto, han contribuido a clarificar lo sucedido en aquel entonces y a poder elaborar una historia sobre bases más firmes, pero sobre todos estos autores destaca Agustín Ramón Rodríguez González, con notable distancia sobre los demás. Autor de varios libros sobre los acontecimientos militares del 98 y seguramente el mayor experto en cuestiones navales para la época de la restauración canovista, ha reproducido los hechos ocurridos en Cavite sobre la base del conocimiento profundo de unos detalles técnicos que resultan imprescindibles cuando el objeto de estudio lo constituye una operación militar.

     Para ello se basa, entre otras fuentes, en el informe inédito del Cónsul Portugués en Manila, que se reproduce aquí íntegramente, dando al conjunto del libro un doble valor al sacar a la luz un documento que había permanecido sepultado en el olvido en el Archivo del Ministerio de Asuntos Extranjeros de Lisboa. [235]

     El autor de dicho informe, el español Don Jesús Álvarez Pérez, era además Teniente de Alcalde y Presidente de la Cámara de Comercio de Manila, lo que como es lógico añade mayor interés a todas sus opiniones. A pesar de la tendenciosidad patriótica que en ocasiones destilan las palabras del cónsul, su informe deja ver el importante papel de los diferentes diplomáticos destacados en la ciudad, realizando gestiones a favor de uno u otro bando.

     El libro se cierra con un completo estudio sobre la escuadra del almirante Cámara, que se dirigía las Filipinas cuando fue bloqueada en el Canal de Suez, momento en que el gobierno español ordenó su regreso a la península.

CARLOS MADRID ÁLVAREZ-PIÑER



GRANT, Ted y WOODS, Alan: Indonesia. La revolución asiática ha comenzado. El Militante. Madrid 2000. 16 pp.

     La caída de Suharto y los relativamente profundos cambios ocurridos en Indonesia -que incluyen la independización de Timor Oriental- han repercutido mínimamente en España en el sentido de que se han escrito muy pocos artículos serios, y ningún libro, al contrario que en otros países de nuestro entorno.

     Lo sucedido en el país que era �el mejor aliado de Estados Unidos� (Suharto dixit) en Insulindia ha dado esperanzas a las distintas tendencias democráticas indonesias, obviamente, y a los de otros países del área. Y también a varias de las etnias indonesias, que podrían ver más cerca algún tipo de autonomía real o incluso la independencia. En Occidente, el fin de Suharto ha tenido repercusiones sólo en los Estados Unidos (pocas) que, por otra parte, habían �abandonado� hacía tiempo al dictador, y apenas, salvo muy indirectamente, en Europa, si exceptuamos a determinados sectores de las izquierdas, en particular a las de tipo marxista y revolucionario, hoy minoritarias pero activas, que tratan de estar atentas a los hechos considerados revolucionarios. Este es el caso de El Militante (que se define como �voz del socialismo marxista y la juventud�, de tendencia comunista trotskista), que viene publicando interesantes números monográficos sobre acontecimientos y fenómenos contemporáneos (Por ejemplo, Crash en la bolsa, Los primeros temblores, o La intimidación imperialista a Irak y la crisis un Oriente Medio).

     En esta línea se sitúa el breve monográfico que reseñarnos. En él se hace un análisis de los cambios en Indonesia en los últimos dos años. Éstos se atribuyen más a �contradicciones acumuladas durante décadas�, también en otras partes de Asia, que al �reciente crash económico asiático�: se analiza cómo la familia Suharto accedió al poder en 1965 con la ayuda estadounidense y, tras masacrar a más de un millón de sukarnistas (partidarios del régimen no alineado de Sukarno) y comunistas; como copó la economía y la política del país y acumuló ingentes capitales -parece ser que su fortuna ascendía (o asciende todavía) a 40.000 millones de dólares- Cómo su importancia política para Occidente fue decayendo a partir de fines de los 80, de forma paralela a un progresivo hundimiento económico del que los autores responsabilizan, no sin razón, al Fondo Monetario Internacional, pero no de forma exclusiva. Cómo el malestar social se unió al religioso -incidentes entre musulmanes y cristianos, en Ambon y, otros lugares-. Y los problemas demográficos -Java superpoblada, política de la a otras islas, sobre todo a [236] Papúa (ex Irian Java)- se juntaron con los étnicos y los separatistas (disturbios antiminoría china, separatismo de Sumatra (sobre todo en el antiguo estado de Aeeh), de las Molucas, de Timor oriental -que efectivamente se ha independizado-, etc.

     En el monográfico se estudia, con razón, que, de forma inmediata, el comienzo del fin del régimen suhartista lo marcan las protestas estudiantiles en casi todo el país, con la consiguiente represión policial. Pero, también, el papel de sectores de las clases dominantes y de las �clases medias�, y una parte del ejercito, que se desentendieron de Suharto y que, por otra parte, trataron de salvar lo salvable, pidiendo la destitución de Suharto y su sustitución por el �moderado� Habibie, mientras los capitales extranjeros se retraían, hasta nuevo aviso. Lo que vino luego es sabido, aunque el monográfico no lo recoge ya: la sustitución de Habibie por Abdurrahman Waind y, como concesión a los progresistas, el nombramiento de Megawati Sukarnoputri (la hija de Sukarno) para la vicepresidencia. Lo que no parece dar pie para pensar en cambios demasiado profundos en Indonesia ni mucho menos, creemos, para decir, con los autores, que �la revolución asiática ha comenzado�.

C.A. Caranci



AA.VV.: Impunidad y derecho a la memoria. De Pinochet a Timor. Sequitur, Madrid 2000. Coord.: Iva Delgado. 190 pp. Trad.: M� E. López Ortega y Servicio de Traducción de Ediciones Sequitur.

     Aunque este título se refiere sólo parcialmente al Pacífico -un texto, como luego veremos-, sí toca un asunto general al que, por desgracia, no es inmune ninguna sociedad del mundo: la perpetración de crímenes por parte del estado o de otros centros de poder (como es el caso muchas veces de las multinacionales, las iglesias, los partidos políticos, etc.). Los ejemplos son tan numerosos que ocuparían demasiados libros, y todos conocemos suficientes casos históricos y actuales para tener una idea más que aproximada de lo que se trata. Los crímenes de este tipo suelen quedar poco o nada conocidos, o �prohibidos� oficialmente, y por tanto casi siempre impunes, debido precisamente a la naturaleza de quien los perpetra, que posee medios legales -además de los ilegales- para ocultarlos y �hacerlos olvidar�.

     A esto se añade una ayuda inesperada para los perpetradores: la memoria histórica o, mejor dicho, el trato que ésta recibe, pues suele tener escaso futuro, por una tendencia de las sociedades humanas a tratar de olvidar lo pasado, incluso cuando no se lo prohíbe o no se lo ignora, y en especial lo que no gusta, por varias razones, tales como la mera defensa psicológica, la tendencia a vivir el día, y por la presión de los poderes interesados.

     Esto es lo que ha ocurrido con, entre otros, los �casos� del Chile de Pinochet y de la Argentina y el Brasil de los militares, en el de la policía política portuguesa de los tiempos de Salazar y Caetano, el de la UNITA angoleña, el del fascismo italiano, etc. Y es lo que ocurre con los hechos de Timor Oriental.

     Sobre éstos últimos escribe Antonio María Pereira en �Timor Oriental- �Cómo sancionar a los asesinos? (pp. 77-83). Los hechos del Septiembre Negro de 1999, en el que las milicias proindonesias y tropas indonesias trataron de impedir o por lo menos reencauzar la independización (ya aprobada de mala [237] gana por el gobierno indonesio pos-Suharto), por medio de matanzas, destrucciones, terrorismo, expulsión de poblaciones, engaños y manipulaciones informativas, etc. y la situación continuó, en parte, tras la intervención de tropas patrocinadas por la ONU, hasta hace pocos meses. El autor, indignado, aboga por el castigo de los criminales (no del pueblo indonesio, aunque la separación eje Timor no gustó a todos los indonesios) a través de un juicio por exigencia de justicia, como disuasión de otros crímenes semejantes, y para castigar a los responsables. Los largos y lentos procesos de enjuiciamiento en casos de este tipo hace esperar que, si se inicia, se prolongará durante mucho tiempo y es de temer que los responsables -que pertenecen a una fuente de poder, el estado indonesio- vayan a zafarse sin grandes problemas.

     Complemento del texto es una cronología de Luisa Teotónio Pereira, que va de 1974 (caída del régimen fascista portugués) a septiembre de 1999 (presencia, actuación de la fuerza internacional INTERFET en Timor).

C.A. Caranci



LEE Teng-hui: El camino hacia la democracia. Taiwán busca su identidad. PHP Institute. 2000, 232 pp.

     Este libro fue escrito por Lee Teng-hui a finales de su mandato presidencial como presidente de la República de China en Taiwán (ROC). que terminó a mediados del 2000 con la elección de un nuevo presidente en unos comicios a los renunció a presentarse. Él fue el hombre decisivo para que Taiwán se transformara en el País democrático y libre que es hoy día, liderando, tras convertirse en presidente en 1988 a la muerte de Chiang Chin-kuo (del que reconoce que puso las bases esenciales para la democratización del país) una larga serie de reformas que culminaron con las elecciones presidenciales democráticas de 1996, que él ganó. El autor expone sus ideas sobre los más variados temas relacionados con su país, en un muy interesante libro recomendable para todos aquellos interesados en Taiwán y su joven democracia. Sirve también para recordar que existe un Estado libre y democrático que no tiene relaciones diplomáticas oficiales con la gran mayoría de los países de la comunidad internacional, debido a la intimidación y a la presión que ejerce en ésta la última gran potencia dictatorial y autoritaria que existe hoy el, el siglo XXI, la República Popular de China.

     En el primer capítulo, �Mi itinerario intelectual y espiritual�, el autor expone algunos aspectos de su biografía inicial, hasta su entrada en la política, que comienza con una infancia en un Taiwán que por entonces era colonia japonesa: habla de sus estudios universitarios en Economía agrícola, que inicia en la Universidad Imperial de Kioto (donde conoce el marxismo leyendo El capital) y acaba, una vez terminada la Segunda Guerra Mundial, en la Universidad Nacional de Taiwán, cuando la isla ya ha regresado a la soberanía china. Encuentra un puesto de profesor en dicha Universidad, se casa, y viaja a Estados Unidos, donde lleva a cabo estudios de postgraduado. Es entonces cuando comienza su conversión al cristianismo, que se convierte en definitiva tras su regreso a la isla. Lee Teng-hui nos habla también de su creencia en los Tres Principios del Pueblo del Dr. Sun Yat-sen, de sus ideas para mejorar la agricultura de la isla, así como de su creencia de que el mejor modelo para la reforma en el continente [238] debe ser el de Taiwán y su éxito económico y democrático.

     El segundo capítulo se llama �Mi filosofía política�, y, como dice el propio título, Lee Teng-hui hace aquí un resumen de su pensamiento político, si bien a él no le gusta definirse como tal, a pesar de que a partir de 1972 comienza una fulgurante carrera que se inicia con su designación como ministro sin cartera y que termina con su nombramiento como presidente en 1988. Destaca su concepto de �taiwaneses nuevos� como el de todos aquellos que se criaron y educaron en la isla, desarrollado con el objetivo de borrar las fronteras entre aquellos que vivían en Taiwán antes de 1949 y los que llegaron del continente tras el triunfo comunista, junto con su correspondiente descendencia. Lee Teng-hui desea consolidar una identidad taiwanesa fuerte, una isla dirigida por hombres que amen a Taiwán y se dediquen a su pueblo, construyendo un �Gran Taiwán� que se convierta en un nuevo centro de la cultura china; ésta afirmación de la identidad taiwanesa es para él compatible también con la afirmación de la identidad china, defendiendo el ideal de la reunificación. La única forma posible de gobierno para este �Gran Taiwán� es la democracia, y ésta tiene que desarrollarse en paralelo con otro de los principios de Sun Yat-sen, el bienestar del pueblo. Es por ello que los años de gobierno de Leo Teng-hui no sólo han significado la reforma democrática en la isla sino también una larga serie de reformas sociales entre las que destaca la instauración de un sistema nacional de seguro médico en 1995.

     El siguiente capítulo se denomina �La dinámica de la paz y la prosperidad�. El autor hace un repaso a varios temas de política interna y a las acciones que esta llevando a cabo su gobierno en relación a ellos (como se ha dicho, el libro lo escribió en medio de su mandato). Así, comenta la situación, problemas y perspectivas de la economía de la isla, los pasos que dio para avanzar en la democratización de Taiwán, la política exterior (apostando decididamente por la llamada �diplomacia pragmática�), la educación (defendiendo un fuerte gasto público en este tema), el sistema judicial (al que se debe someter a una profunda reforma), y, por último, la necesidad de invertir en infraestructura y capital social para el desarrollo de la industria.

     En el cuarto capítulo, �Washington, Pekín y Taipei�. Lee Teng-hui comenta las relaciones de su país con los Estados Unidos y la República Popular de China (RPC). Comienza analizando los cambios habidos en las últimas décadas en el continente, señalando las contradicciones entre un sistema �políticamente comunista pero que sigue los principios de la economía de mercado�. Para el ex presidente de la ROC se necesitarán aún varias décadas para que se lleve a cabo un cambio profundo en las estructuras políticas y económicas de ese país. Se queja además de que frente a la actitud taiwanesa de cooperar y dialogar con la China continental la única respuesta que encuentra al otro lado del estrecho es la siempre beligerante y amenazadora respuesta del régimen comunista. Rechaza además la doctrina continental de �un país, dos sistemas� como vía para la reunificación. Para él la unificación de China debe seguir los �principios de democracia, libertad y prosperidad equitativa para todos�. Por lo tanto no es posible la unificación mientras la China continental siga siendo un régimen autocrático y dictatorial. Con respecto a las relaciones con EE.UU, mantiene que a pesar de los �tres no� que Bill Clinton dijo con respecto a Taiwán (no a las dos Chinas, no a la independencia [239] de Taiwán y no a su incorporación a las Naciones Unidas) la política de EE.UU frente a Taiwán continúa siendo la misma, destacando especialmente el fiel apoyo del Congreso norteamericano a la democracia taiwanesa.

     El tercer capítulo se llama �El papel y las responsabilidades de Japón�. Lee Teng-hui habla sobre un país con el que ha tenido una relación muy profunda desde que naciera en una isla dominada por éste. Lamenta que Japón adopte un segundo plano en la política mundial, quejándose especialmente de la �postura servil� y condescendiente que mantiene con la China continental, también de su comportamiento en el ámbito de la economía internacional, de la rigidez de sus políticas industrial y agrícola, etc. Frente a todo esto reclama unos líderes políticos con más iniciativa, un mayor esfuerzo por la cooperación económica en Asia, un incremento de su participación en la política y seguridad mundial, etc.

     El capítulo sexto se denomina �Un esfuerzo trilateral en Asia�. El autor hace un análisis de la situación económica en Asia-Pacífico, señalando la interconexión económica que existe en la región entre Taiwán, Japón y EE.UU, y recomendando que estas relaciones entre los tres se vean incrementadas, no sólo en el ámbito económico sino también en el político, pues contribuiría a incrementar la estabilidad en la región.

     Finalmente, en el último capítulo, �Taiwán en el siglo XXI�, el ex presidente de la ROC vuelve nuevamente a exponer su concepto de �nuevos taiwaneses�. Luego rinde un homenaje a los dos Chiang, padre e hijo, quienes �levantaron la base sobre la que ahora nos encontramos y desde la cual tenemos ahora que buscar nuestro futuro político�. Finalmente expone los retos que debe afrontar Taiwán y que deberán ser tratados por su sucesor, pues, como finalmente ocurrió, afirma que no se presentará a la reelección. Estos serán la potenciación de la educación y la agricultura, la reforma parlamentaria, la modernización de las fuerzas armadas, el desarrollo del sistema de seguridad social, y, por último, la promoción de las actividades culturales.

JUAN SANMARTÍN BASTIDA



MUÑOZ CIDAD, Cándido: Las cuentas de la Nación. Introducción a la Economía Aplicada. Editorial Civitas, Madrid 2000. 292 pp.

     Cuando a Richard Stone, creador de la Contabilidad Nacional, le concedieron en 1984 el Premio Nobel de Economía, la Academia sueca valoraba todo su trabajo desarrollado como economista entre 1940 y 1945, en el gabinete de guerra inglés durante la segunda gran conflagración, calificando sus primeras cuentas nacionales de entonces, como �una innovación de las que hacen época�.

     Aquellos �white papers� que el equipo de Stone pasaba al primer ministro inglés permitían seguir la evolución de la economía británica y al mismo tiempo servían de comparación, al ir evaluando los efectos que los bombardeos aliados iban teniendo sobre la estructura económica de la Alemania nazi. �Los trabajos de Stone en el citado gabinete ministerial -añadía el presidente de la Academia nórdica durante la concesión del galardón- permitieron a Gran Bretaña movilizar sus recursos de guerra de forma más eficiente... y fueron de una importancia fundamental para la elaboración de sistema de contabilidades nacionales, que permitieron mejorar radicalmente las bases del análisis económico�.

     Hoy podemos decir que, simplemente, [240] no es posible el gobierno racional de un país sin un buen sistema de Cuentas Nacionales. Todavía no se ha llamado la atención suficientemente, hasta que punto es importante para todos los países del mundo contar con tan valioso instrumento. Para un gobierno, la contabilidad nacional equivale a la vista para el organismo humano. Y de la misma forma que difícilmente los responsables de una empresa pueden tomar decisiones acertadas sin un conocimiento de los balances de situación, explotación y cuentas de la misma, tampoco eso es posible para los gobiernos que carecen de una buenas �cuentas de la nación�.

     Si esto lo representamos en unos ejes de abscisas y ordenadas observamos una alta correlación. A mayor desarrollo y fiabilidad del sistema de cuentas, más niveles de renta por habitante y al contrario. Su empleo es, desde hace años, en la mayoría de los países desarrollados, imprescindible en las discusiones parlamentarias, en el control de los gobiernos por el Parlamento, y hasta para la propia discusión política, si es que quiero hacerse con cierto rigor.

     El Catedrático de Estructura Económica de la Facultad de Periodismo de la Universidad Complutense de Madrid, Cándido Muñoz, ofrece en este manual un despliegue pedagógico de cuadros e ilustraciones, que lo hacen asequible al conjunto de los agentes económicos, incluso al público no especializado, permitiéndole conocer las principales magnitudes, partidas y operaciones que componen el actual modelo del Sistema Europeo de Cuentas Económicas Integradas de la Contabilidad Nacional de España, abreviadamente S.E.C.-95.

     El estudio de las Cuentas Nacionales, como de las Tablas InputOutput, forma parte obligada de los primeros capítulos de los cursos de Estructura Económica Mundial en España. El profesor Muñoz Cidad, piensa como muchos economistas -él cita al Premio Nobel Richard Hicks- que el estudio de las Cuentas Nacionales es el mejor Procedimiento de introducción al estudio de la Economía. Y ciertamente tiene ventajas importantes.

     Por un lado ayuda a precisar el lenguaje de los economistas, bastante impreciso en ocasiones, especialmente desde el enfoque de la Teoría Económica, donde por traducciones o tradiciones anglosajonas se conservan expresiones sin reflejo ni cuantificación concreta en el terreno de la realidad económica. Por otro lado permite comprender las estadísticas más sistemáticas que se realizan en la Unión Europea. Y en tercer lugar suministra al estudiante, la descripción de una economía en sus operaciones, reales y financieras, más relevantes.

     Con ello el estudiante o el simple ciudadano interesado que se acerca al conocimiento de la realidad económica nacional, puede disponer de una maqueta que le permite conocer el funcionamiento de una economía y comprender la metodología, las partidas y los conceptos de elaboración de las diferentes cuentas, pudiendo analizar las más importantes estadísticas económicas españolas e internacionales. Por otro lado, se explican una serie de conceptos económicos clave en el estudio de la Economía -y sobre todo de la realidad económica-, cuyo conocimiento temprano evita posteriormente lagunas importantes. Para Richard Hicks, ésta es una vía de introducción al estudio de la Economía, complementaria de la más tradicional, al ofrecer una visión global del sistema económico que retuerza los conceptos introductorios de la Microeconomía y Macroeconomía para principiantes.

     El texto presenta notables variaciones y mejoras no solo con respecto a aquel [241] lejano antecesor suyo de Introducción a la economía aplicada. Cuentas Nacionales, tablas input-output y balanza de pagos�, editado por Espasa Calpe en 1989, del mismo autor, sino respecto a su posterior �Las cuentas de la nación. Nueva introducción a la economía aplicada� editada por Civitas en 1994 y reimpreso en 1999.

     Esta nueva edición presenta el libro dividido en seis partes, con un total de veinte capítulos. Una primera �economía en miniatura: producción, renta y gasto�, con cinco capítulos referidos al proceso productivo, las operaciones de bienes y servicios, las operaciones de distribución, las macromagnitudes y la renta, gasto y equilibrio externo. Una segunda parte sobre �Las Cuentas de la nación�, conteniendo tres capítulos referidos a las cuentas simplificadas, los sectores institucionales y la economía financiera. La estructura de las cuentas de la nación SEC-95t y las macromagnitudes del SEC-95 están contenidas en la parte tercera. La parte cuarta queda dedicada al crecimiento, inflación y tipo de cambio, concretada en dos capítulos referidos a las comparaciones intertemporales de renta y las comparaciones en el espacio. La balanza de pagos ocupa la parte quinta. Y la última parte, queda para las tablas input-output, conteniendo los siete capítulos restantes referidos a la tabla input-output como esquema contable, las tablas input-output del SEC-95, el modelo de demanda y aplicaciones del mismo, el estudio del cambio estructural, el modelo de precios y las aplicaciones al análisis regional.

     La redacción y presentación del texto queda mejorada, así como los propios ejercicios de cada capítulo, importantes para fijar los conceptos, ofreciéndose las soluciones en las páginas finales del libro. Estas incluyen asimismo un conjunto, alfabéticamente ordenado, de definiciones y conceptos propios de las diferentes partidas y cuentas, así como una bibliografía básica brevemente comentada.

JAVIER MORILLAS



PAMPILLÓN OLMEDO, Rafael, Análisis económico de países. Teoría y casos de política económica, McGraw-Hill, Madrid 1999, 347 pp.

     Durante años las experiencias en economías con distinta organización, han generado abundantes comparaciones y discusiones sobre la eficiencia de las distintas fórmulas de ordenación de los mercados o de planificación. El libro del Profesor Pampillón, de la Universidad San Pablo-CEU, ofrece un especial atractivo por la actualidad de los temas tratados y por el interés de los propios casos y países que se abordan en el texto.

     Este aparece dividido en dieciséis capítulos y tres partes. Los cuatro primeros de la primera parte contienen unas nociones sobre el método de caso en la enseñanza de la economía, objetivos e instrumentos a utilizar. Una segunda parte, con seis capítulos, referida a �Casos de países en vías de desarrollo� una tercera parte con �Casos de países desarrollados�.

     El caso siempre hace referencia a una situación real, a una situación concreta de un país en un periodo determinado. Con ello, al conocer los problemas reales, estamos en disposición de valorar mejor las medidas económicas a adoptar.

     Como no podía ser de otra forma el libro recoge el caso de �Los nuevos países industrializados: la crisis asiática�. El autor se hace eco de quienes señalan la importancia de los valores culturales [242] asiáticos como motor de su desarrollo, unos valores que anteponen el interés de la comunidad y de la familia al interés individual, el orden a la libertad, el progreso económico frente a las libertades políticas, con un profundo sentido de la austeridad y del trabajo duro. Y entra a valorar el desarrollo humano de esos países, las características macroeconómicas de su modelo o las causas de la crisis. Desde el estancamiento económico de Japón, los procesos de ajuste, y los sistemas bancarios ineficientes mal controlados y regulados de la zona, hasta el desencadenamiento y extensión de la crisis. El caso de China en su proceso de apertura y estabilización o de Nueva Zelanda son brillantemente traídos a colación por el profesor Pampillón, que consigue realmente hacer muy entretenido un libro de economía.

JAVIER MORILLAS



BERNALDO DE QUIRÓS, Lorenzo, Mitos y leyendas de la globalización, Círculo de Empresarios, Colección Ensayos n.� 3, Madrid, 1999. 198 pp.

     El autor se propone en el texto revisar los falsos postulados que a su juicio, han calado en la sociedad acerca de la globalización. Así analiza desde los efectos de la liberalización de capitales, hasta la pobreza, desafiando con sus conclusiones algunos de los tópicos sobre la cuestión que se han convertido en verdades populares... sin un sólido fundamento en la teoría económica y en la evidencia empírica.

     Bernaldo de Quirós, asesor económico del Círculo de Empresarios, comienza definiendo qué es la globalización: Un fenómeno que quiere explicar la idea de la libre circulación de bienes, servicios y capitales de una forma mejor y más amplia que hace tres décadas: para, a continuación, ofrecer una panorámica de las principales acusaciones lanzadas contra la globalización y mostrar que tan solo son falacias.

     Para ello, establece una comparación entre el actual proceso de integración económica internacional y el que tuvo lugar entre la segunda mitad del siglo XIX y la primera década del XX. Los mitos cuestionados son: 1) la globalización ha reducido el poder del Estado, 2) el dumping social, 3) el dumping medioambiental, 4) la libertad de movimientos de capital desestabiliza a las economías y 5) la globalización ha acentuado la pobreza en el mundo.

     Con respecto al primer mito, afirma que �los Gobiernos han optado, de forma libre y consciente, por la apertura interna externa de los mercados para elevar el crecimiento económico y los niveles de vida de la población, de lo que se deduce que la globalización no ha reducido el poder los Estados, sino que estos han optado por la globalización.

     Respecto al dumping social, afirma que la competencia desleal entre los países en vías de desarrollo y los industrializados, en lo que se refiero a la mano de obra, no puede existir debido a que los primeros la poseen muy barata, y al considerar que la productividad es mayor en los países desarrollados, éstos pueden compensar los más altos costes de su mano de obra local.

     De forma parecida ocurre con el dumping medioambiental, que afirma que los bajos estándares medioambientales que existen en las economías emergentes destruyen su entorno natural y hacen competencia desleal a las empresas de los países industrializados. En la misma línea apunta la revisión del cuarto mito: la libertad de movimientos financieros y en las [243] cuentas de capital de los países desestabiliza las economías.

     Para terminar, y respecto al quinto mito, según el cual la globalización ha acentuado la pobreza en el mundo, señala que �la rápida salida de la crisis de las economías emergentes, que han puesto en marcha actuaciones macro y microeconómicas sensatas, ha sido una verdadera y desagradable sorpresa para quiénes pronosticaban el inevitable desplome del orden económico internacional. Los profetas del apocalipsis - continúa-, han citado de nuevo, pero eso ni les ha silenciado, ni les ha privado de eco público, como ha puesto de manifiesto la Asamblea anual de primavera del Banco Mundial, y del Fondo Internacional. El autor no conocía, desde luego, los últimos acontecimientos de la más reciente Asamblea de estas dos instituciones celebrada en octubre pasado en Praga, donde las cosas han ido a peor habiéndose visto obligados los responsables a adelantar un día la finalización de la reunión por el ambiente de hostilidad que se había generado con manifestantes �antiglobalización� venidos en romería de distintos puntos de Europa, entre ellos conocidos alborotadores proetarras.

     Para el autor, se han conjurado a escala global los adversarios tradicionales del liberalismo económico en una coalición marxista, en la que se integran comunistas, cristianos por el socialismo, ONG's que se financian con dinero público, ecologistas, conservadores, sindicatos, grupos de interés y almas caritativas, con tan buena fe como escasos conocimientos. Este extravagante cóctel -termina diciendo- �sólo es capaz de ofrecer llanto y compasión, porque si sus planteamientos se llevasen a término el Tercer Mundo volvería a las cavernas�

JAVIER MORILLAS



KRUGMAN, Paul: Desarrollo, geografía y teoría económica. Antoni Bosch Editor, Barcelona 1997, 128 pp.

     En este número de la Revista de Estudios del Pacífico no podía faltar un apartado referido a la economía, que tanto condiciona la existencia y la propia creación literaria de las naciones de aquel área. Valorando qué libro podría destacarse con unos perfiles apropiados a estos efectos traemos a colación este texto de literatura económica de Paul Krugman.

     El autor, en un estilo muy asequible para el gran público, describe la evolución de la geografía económica y la teoría del desarrollo económico con la intención de entender la naturaleza de la investigación económica, de la que tan necesitados están los países de Asia-Pacífico, de cara a entender los procesos de atraso o lento crecimiento económico en que están sumidos.

     Krugman describe cómo la teoría del desarrollo económico perdió su enorme influencia, y prácticamente desapareció de los medios especializados y del propio discurso político y de los medios de comunicación, al quedar patente que algunas de sus principales constataciones no podían modelizarse con claridad. La cuestión que se plantea es �por qué en economía ciertas ideas se consolidan mientras que otras son descartadas? Y sostiene que la reticencia de los economistas a pensar sobre los temas difíciles de formalizar les ha llevado a ignorar ideas que han resultado ser, con el transcurso del tiempo y vistas con perspectiva, muy buenas.

     Según Krugman esto es lo que ocurrió con las cuestiones referidas a la geografía económica, cuyo sino ha sido la desaparición, al evitar los economistas todos los temas relacionados con el espacio [244] porque no se adaptaban a los instrumentos de análisis disponibles.

     Habría desde España, no obstante, que puntualizar a Krugman. Las cuestiones de índole geográfico a que se refiere quedaron superadas por elevación, al ser incorporadas, junto a la Estadística Económica y la propia Teoría Económica, por los economistas españoles a la disciplina que denominamos de Estructura Económica. Una materia de síntesis, -�clave de bóveda� la denominó el profesor José Luis Sampedro, para el análisis de la realidad económica- orientada a la consecución del desarrollo. Una rama más o menos diferenciada de la ciencia económica -como indica el profesor Ramón Tamames- que tiene presente el �marco natural� o �base de partida� sobre la que se levanta el aparato productivo de todo país. A eso que hemos llamado �ingraestructura� desde el profesor Román Perpiñá Grau, Primer Premio Príncipe de Asturias de las Ciencias Sociales.

     Fue hacía el año 1935 cuando el profesor Perpiñá, empezó a utilizar esa expresión. Para él la �Infraestructura física� estaba constituida de un conjunto de elementos dados por la naturaleza, potenciales o activos, como la dimensión y ubicación del país, su clima, orografía, recursos hidrográficos, características del subsuelo, el suelo o la vegetación. Y ciertamente que como señala Krugman estos elementos no pueden modelizarse, pero sin analizarlos no entendemos los procesos de desenvolvimiento económico de muchos países. �Cómo desentenderse de las dificultades de los costes de comunicaciones o de creación de un mercado interno en las 7.107 islas de Filipinas?, �o de la incertidumbre y los costes de los movimientos sísmicos en Japón?, �o los costes de insularidad de Timor, o cualquiera de las otras islas del Pacífico?, �o los de la continentalidad de Mongolia, Nepal o Laos? Digamos que los economistas españoles no han evitado los temas relacionados con el espacio, aún cuando no se adaptasen a los instrumentos disponibles de análisis. Y el caso de España con sus problemas espaciales y de infraestructura adversa y hasta endiablada, en cuanto fuente de obstáculos para el desarrollo, es un caso paradigmático en Europa, junto a Suiza.

     Por ello el libro de Krugman tiene el atractivo y la virtualidad de traer a colación y hacer actuales reflexiones que no han formado parte de las preocupaciones de los economistas de los países más avanzados, con menores problemas de infraestructura. Sin que ello suponga una llamada al abandono de los modelos económicos, pero lamentando el mal sino que ha tenido la geografía económica. Aunque explicando por qué vale la pena insistir en la construcción de modelos económicos aunque esto fuerce ocasionalmente a los economistas a desechar buenas ideas. En paralelo con este análisis, Krugman ofrece una visión panorámica de los avances más recientes en el terreno espacial, que él sigue denominando de forma un tanto antigua a nuestro entender de �geografía económica� y teoría del desarrollo económico. En España lo llamaríamos simplemente de Estructura Económica. En Belgica Estructure Economique, entendiendo ya condensadas ambas materias.

     La realidad es que Paul Krugman vuelve en este libro sobre sus pasos. De hecho su Geografía y comercio (editado en español también por Antoni Bosch, Barcelona, 1992, 160 páginas) es un libro de geografía económica, especialidad que, a falta de otro nombre en Estados Unidos, considera indispensable para el comercio internacional y un laboratorio en el que mejorar nuestro [245] conocimiento de la economía en general. El mismo estilo claro y preciso al que Krugman nos tiene acostumbrados, y donde ya resalta los problemas de localización y de cómo ésta afecta las conclusiones de la teoría económica y las decisiones de política económica.

     De hecho Krugman, como economista, busca permanentemente la interdisciplinariedad para el análisis de la realidad económica. Recordemos que en otra de sus obras �La organización espontánea de la economía� (traducción de 1997, en 176 páginas, de Mónica Martín, The self-organzing economy) llama la atención cómo en los últimos años, el concepto de sistemas de organización espontáneas -es decir, sistemas complejos en un orden inesperado -ha acercado a investigadores de disciplinas diversas, desde la inteligencia artificial a la química, pasando por la geología o la biología. Muestra cómo principios comunes a sistemas que se organizan espontáneamente tienen aplicación a cosas y hechos tan diversos como los huracanes, los terremotos o las ciudades: los embriones, los barrios marginales o las recesiones. Combinando elementos pertenecientes a disciplinas tan alejadas como la teoría de la localización o la biología, nos ofrece una visión innovadora, a la vez que sorprende, de cómo la economía se estructura de forma espontánea en el espacio y en el tiempo, desde el caos al orden inesperado. No en vano sobre Krugman ha dicho The Economist que es �... el economista más creativo de su generación�. Y según el Boston Globe. �... es el mejor divulgador de temas económicos�. Algo muy necesario para el progreso del área del Asia-Pacífico.

JAVIER MORILLAS Arriba