41
Abelardo Cuadra es presentado como guardia nacional, estudiante de Derecho, rebelde sandinista, profesor y religioso.
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Desde los nueve años «El Zorro» sintió la necesidad de luchar contra la injusticia, y a los diecisiete se integró plenamente a la lucha política. Véase: Ramírez, Sergio: La marca del zorro, Madrid, Mondadori, 1989, p. 43.
43
Ramírez, Sergio (1977): Hombre del Caribe, 2.ª edición, San José, Costa Rica, EDUCA, 1979, p. 11. Considero que el contexto revolucionario en el que publicó esta obra y el afán del autor de apoyar la lucha sandinista, resaltando actores claves como Abelardo Cuadra, de alguna manera mediaron en esta afirmación, en la que prácticamente renuncia a cualquier participación en la escritura de la obra.
44
Véase: Vargas Vargas, José Ángel: Entrevista citada. Una comparación de las afirmaciones del autor demuestra que en realidad sí tuvo una participación importante y decisiva en la escritura de las obras, pero su figura como autor no puede entenderse en términos absolutos, pues de acuerdo con Carmen Ochando Aymerich «la escritura testimonial sitúa en la cuerda floja el concepto romántico de autor. El testimonio se quiere un texto anónimo que habla sobre personajes y situaciones que pasan inadvertidos tanto para el concepto de literatura convencional como para el análisis de la historia». Véase: Ochando Aymerich, Carmen: La memoria en el espejo. Aproximación a la escritura testimonial, Barcelona, Editorial Anthropos, 1998, p. 143.
45
Traducida al francés (1984).
46
Traducido al alemán (2000).
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El trabajo del biógrafo exige paciencia investigadora, amor a la verdad, penetración analítica, y al mismo tiempo imaginación y simpatía por el sujeto biografiado, para presentarlo de una manera amplia e integral. Véase: Vargas Vargas, José Ángel: Procedimientos de verosimilización en «El general en su laberinto» (Tesis de maestría), San José, Costa Rica, Universidad de Costa Rica, 1991, p. 41. En Mis días con el Rector, Mariano Fiallos y El pensamiento vivo de Sandino se aprecia un trabajo de investigación rigurosa y también una identificación de Sergio Ramírez con las figuras claves de la historia y de la cultura nicaragüense que en ellas trata.
48
Ramírez, Sergio (1971): Mariano Fiallos, 2.ª edición, León, Nicaragua, Editorial Universitaria, 1997, p. 20. Sergio Ramírez destaca el papel que Mariano Fiallos desempeñó como Rector de la Universidad de León, en una época de constante agitación política. No permitió que la Universidad se sometiera a las imposiciones de la dictadura y abrió el camino a la libre expresión de los jóvenes estudiantes en los más variados ámbitos del quehacer cultural, literario, científico y político.
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Traducida al inglés (1995).
50
Ramírez, Sergio: Las armas del futuro, Managua, Editorial Nueva Nicaragua, 1987, p. 39. Con esta frase Ramírez hace referencia a que la tragedia histórica de su país inició en el momento de la conquista, cuando Pedrarias Dávila impuso su poder avasallador sobre la población.