31
Ya en El banquete, Platón nos refiere que los daimones o genios son los responsables de las correspondencias armónicas, pues vinculan el gran Todo consigo mismo (Ibid., t. II, p. 17n.). Con orientación pitagórica esta idea llega al Renacimiento, y Campanella, por ejemplo, estaba convencido de los poderes daimónicos de las palabras. (Schumaker, pp. 114-115).
32
Caramuel, p. 18.
33
First Anniversary, vv. 251-276, como lo cita Nicoleon, pp. 147-148. |
34
Puech, pp. 304-306.
35
Cook, p. 379.
36
Costanzo, pp. 44-45.
37
Borrero, pp. 246-247.
38
Juana Inés, t. II, p. 78.
39
Ibid., t. II, p. 117-118.
40
Primero sueño, en id., t. I, p. 344.