Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
IndiceSiguiente


Abajo

También la afrenta es veneno

Luis Vélez de Guevara, Antonio Coello y Francisco de Rojas



portada



PERSONAS
 

 
EL REY DE PORTUGAL
EL MAESTRE DE AVÍS,   su hermano
EL PRIOR DE OCRATO
VASCO DE ALMEIDA
DON CLAUDIO
JUAN LORENZO DE ACUÑA
LA INFANTA
DOÑA LEONOR DE MENESES
GUIOMAR,   criada
BARRETO,   gracioso
UN PINTOR
Música





ArribaAbajoJornada primera

(De Luis Vélez de Guevara.)


 

Salen los MÚSICOS cantando.

 
MÚSICOS
A las fiestas que hace el valle
al despedirse el invierno
con la venida de Abril
tan deseada en el suelo,
los arroyos desatados5
de la prisión que tuvieron,
bajan a ser de las aves
músicos, del sol espejos.
Verdes gigantes los montes,
ya como riscos soberbios,10
con las galas del verano
enamoran los luceros.
A la risa de las fuentes
y al aplauso de los ecos,
alienten estrellas los prados,15
cortesanos lisonjeros.
 

(Salen el REY, de gala, el MAESTRE, DON CLAUDIO, VASCO y EL PRIOR.)

 
REY
No han abierto una ventana.
PRIOR
Habranla en el alma abierto,
que por más escandalosa,
señor, condenará el dueño20
la de los balcones.
REY
¡Ay,
Prior de Ocrato, que temo
que es en el alma lo mismo,
que tiene de bronce el pecho!
PRIOR
Nada puede resistirse25
a un Rey, y Rey en efecto
de Portugal; vuestra alteza
desconfía como cuerdo
y ama como portugués,
que de amor es sombra el miedo.30
REY
Don Claudio de Portugal,
yo amo a una roca de acero,
un escollo de diamante,
idolatro un áspid; luego
una montaña conquisto,35
un imposible deseo,
y un basilisco en el alma
es mi huésped de aposento;
por amante no la obligo,
por rey vencerla no puedo,40
por vasalla no me admite
con humos de casamiento
por desigual de quien soy;
aunque es tan noble, la dejo,
y ambos nos desconcertamos,45
yo por más y ella por menos.
¡Oh mal hayan pundonores
de vasallajes y reinos,
si amor igualó las almas
y es más soberano imperio!50
Vive Dios, que he de casarme
con ella, aunque ponga a riesgo
la amistad del rey don Jaime
de Aragón, tan grande deudo,
con cuya Infanta, Prior,55
por mis poderes se han hecho
ya las capitulaciones,
y esperan que por momentos
vaya el Maestre de Avís,
mi hermano, por ella.
PRIOR
En tiempo
60
está, Señor, vuestra alteza
como Rey, y como dueño
de su gusto, deponer
por ejecución deseos
tan enamorados, que65
no será el primer ejemplo
entre los reyes el tuyo,
pues tantos, como sabemos,
con vasallas se han casado,
y no está el ejemplo lejos70
de vuestro padre con doña
Inés de Castro, que hoy vemos
en el mármol coronada
de su insigne mausoleo
Por Reina de Portugal,75
y doña Leonor no es menos
por Téllez y por Meneses.
REY
Prior, que como discreto
vasallo, que como noble
alientas mis pensamientos,80
no sin causa eres de mí
el más válido, que es necio
quien de un rey se opone al gusto
con no escuchados consejos.
Doña Leonor de Meneses,85
en quien tan gran sangre veo
con tan divina hermosura,
ha de ser Reina, en efecto,
de Portugal, que mi amor
la ha dado merecimientos90
Para serlo de dos mundos;
perdone Aragón y el reino
si se ofenden, de que rompa
fe, amistad y parentesco
con don Jaime y con Leonor,95
su Infanta, que la que quiero
es la de Meneses sola,
dueño y alma de mi pecho;
ésta es la Leonor que adoro,
todas de esta que deseo100
son sombras, y es este nombre
tan repetido en los ecos
de mi amor, que no he tratado
en Castilla casamiento,
en Francia, ni en Aragón,105
después que por esta muero,
que no hayan sido Leonores
todas, que parece extremo
o prodigio de la estrella
que me inclina a este portento110
de hermosura.
PRIOR
¿Vuestra alteza
no podrá con otros medios
rendir su altivez?
REY
Prior,
¿quién os acompaña?
PRIOR
Vuestro
hermano don Juan, maestre115
de Avís, y con él el viejo
ayo de vuestras altezas,
Vasco de Almeida.
REY
Confieso
que respeto su valor
y que alabo sus alientos120
en esta edad.
VASCO
Llevará
bien guardadas por lo menos
vuestra alteza las espaldas.
REY
Muchos días ha que creo
eso de vos, Vasco.
MAESTRE
Y yo
125
a vuestra alteza le ofrezco
lo mismo que Almeida.
REY
Hermano
ya tengo en vos de eso mesmo
muchas experiencias, todas
al amor grande que os tengo130
debidas; ¡hola! volved
a cantar, que ver espero
antes que de aquí me vaya
el sol, o los soles bellos
de Leonor.
VASCO
¡Fuerza notable
135
de amor y obstinado empeño!
MÚSICOS
(Cantando.) Al parabién que dan todos,
fuentes, montes y arroyuelos,
prados, valles, ecos y aves,
las estrellas y luceros.140
 

(Salen JUAN LORENZO DE ACUÑA, de noche, con espada y broquel y BARRETO de la misma suerte.)

 
BARRETO
Digo que es aventurarte
mucho.
JUAN
Sí un mundo, Barreto,
e me opusiese delante,
y muchos, fuera lo mesmo
en esta ocasión.
BARRETO
Pues dales,
145
que me has metido en el cuerpo
toda la mesa redonda
y estoy espuinando acero.
MÚSICOS

 (Cantando.) 

Lisarda hermosa, milagro
tirano, encanto del Tejo,150
Si antes sirena de plata
del cristalino Mondejo.
JUAN
No canten más y despejen,
señores músicos, luego
la calle, si no procuran155
ver volar los instrumentos
desde sus sienes al aire,
haciendo a los que son dueños
de la música lo mismo.
MÚSICOS
¡Hombre notable y resuelto!160
JUAN
Si prosiguen lo verán.
BARRETO
Y aunque no prosigan.
MÚSICO 2º
Bueno;
locos deben de venir.
BARRETO
Lo borracho nos han hecho
de merced.
JUAN
¿Qué es lo que aguardan?
165
BARRETO
Deben de esperar el pliego
que baja de la consulta.
JUAN
Yo no podré, porque vengo
con menos flema.
MÚSICO 1.º
Hombre, sombra,
o demonio, que te has puesto170
a intentar cosa tan grande,
mira que viene por dueño
desta música un hidalgo,
a quien le guardan respeto
en Portugal, y podrás175
deste desalumbramiento
salir muy escarmentado.
JUAN
A ninguno se lo debo
del Rey abajo, ocupando
contra mi gusto este puesto,180
y vive Dios...
REY
Ved, Prior,
qué hombre es ese desatento
que a los músicos estorba
que canten
PRIOR
Ir pretendo
a despejarte.
VASCO
Y si quiere
185
el Prior dejar de hacerlo
y quedarse con su alteza,
aún se me acuerdan en estos
lances los pasados bríos,
pues no me ha llevado el tiempo190
todo el vigor de los brazos
ni todo el valor del pecho.
REY
Sois siempre Almeida.
DON CLAUDIO
El Maestre
de Avís, a todos recelo
que nos ganó por la mano.195
MAESTRE
Cantad, que este caballero
que estuvo desalumbrado,
habrá mudado de intento,
o rogaréselo yo
a cuchilladas.
JUAN
Sospecho
200
que habláis porque vienen tantos
con vos, y en todos no tengo
para comenzar, que soy
muy hidalgo y tengo celos.
 

(Saca la espada y broquel, BARRETO lo mismo, y todos batallan menos el REY.)

 
BARRETO
Ea, que todos son pocos,205
y no hay cosa contra el miedo
como estocada de puño.
REY
Afuera, apartad, que quiero
conocer quién ha tenido
tan nunca imitado esfuerzo,210
aunque arriesgue que me vea
en esta ocasión...
VASCO
Teneos
al Rey.
JUAN
A ese nombre sólo
rendirse puede este acero.
BARRETO
Y el mío, que no lo hiciera215
con César ni con Pompeyo.
REY
¿Quién sois?
JUAN
Un hidalgo honrado
en Portugal.
REY
¿Cómo es vuestro
nombre?
JUAN
Juan Lorenzo Vázquez
de Acuña, de cuyos hechos220
en África me acreditan
tantos gloriosos trofeos,
tantos triunfos y victorias,
como vuestros dos consejos
de Estado y Guerra están bien225
informados, y los reinos
de Portugal y el Algarbe.
REY
Ya os conozco, Juan Lorenzo;
pero ¿qué motivo ha sido
tan desatinado y ciego,230
el que os ha obligado aquí
a tan locos desaciertos?
JUAN
Señor, es ésta mi casa,
y cuando a estas horas vengo
de hablar vuestros secretarios235
que remisos y molestos
ni tratan de despacharme
ni de haceros un recuerdo
en mis servicios; y apenas
pisar mis umbrales puedo,240
hallando ocupado el paso
y escandalizado el pueblo
con músicas a deshoras,
el terreno traduciendo
de palacio a mis balcones.245
Y ya veis, como tan cuerdo,
en los que somos casados
el peligro que trae esto,
pues las apariencias suelen
despertar cada momento250
al descrédito, a la infamia,
honras que estaban durmiendo.
Ésta ha sido la ocasión
de mi loco arrojamiento,
ignorando que podía255
estar vuestra alteza haciendo
este escándalo en mi calle,
y agravio tan forastero
de quien es, a las paredes
esta casa, que, en efecto,260
es la casa de un casado
tan honrado caballero.
REY
¿Cómo casado y en esta
casa?
JUAN
Estoylo con su dueño,
doña Leonor de Meneses.265
REY
¡Qué es esto que escucho, cielos!
JUAN
Hija del gran Payo Alfonso
de Meneses, que sirviendo
a vuestra alteza murió,
habrá un año, en el Gobierno270
de Ceuta.
REY

 (Ap.) 

¡Celos, qué escucho!
¡Si no es sombra, si no es sueño,
cielos, perderé el sentido
a las manos de mis celos!
JUAN
Ha días que con las almas275
los dos nos correspondemos,
y para unirlas en una
fue bisagra el casamiento.
REY
¿Cómo sin licencia mía,
siendo en Portugal precepto280
tan inviolable en los nobles
pedirla a su Rey primero
para casarse, tuvistes
tan notable atrevimiento,
tan extraño desacato285
que sin ella lo habéis hecho?
JUAN
Por yerro de amor podrá,
pues son dorados sus yerros,
vuestra alteza perdonarlo;
que este lance, este suceso,290
a publicar que lo estaba
me obligó con tanto extremo
a vuestra alteza la culpa
licenciosa, no advirtiendo
de no habérosla pedido.295
REY
Delitos, que en el respeto
tocan de la majestad
Real con tan grande exceso,
demostración igual piden
en el castigo: tres Pedros300
hubo en Portugal, Castilla
y Aragón a un mismo tiempo,
todos tres primos hermanos,
y a todos tres nombres dieron
de Crueles; yo soy hijo305
del de Portugal, y tengo
de mostrar que soy retrato
de original tan perfecto
en esta ocasión.
VASCO
Señor,
merezcan algún descuento310
en esta culpa los muchos
servicios de Juan Lorenzo;
vuestra alteza...
REY
No me habléis
más, Vasco de Almeida, en eso,
que es cansaros y cansarme.315
MAESTRE
La piedad siempre en los pechos
Reales, como en Dios, luce
más que el rigor.
REY
Yo deseo,
Maestre, dar a entender
a mis vasallos, que heredo320
de nuestro padre el valor
que en Portugal será eterno,
que soy su propio traslado,
que soy Fernando el primero,
que soy virey de Dios mismo,325
que soy teniente del cielo.
 (Ap.  Que soy de Leonor amante
Y que de celos me muero;
¡posible es que (¡loco estoy!)
goza a Leonor Juan Lorenzo,330
y un Rey de Portugal no!)
JUAN

 (Ap.) 

Mas es este sentimiento
de amante, honor, que de Rey
nunca mienten los efectos;
y esta música le daba335
el Rey a Leonor. ¡Ah cielos!
¡Y ay celos de mujer propia
y de un Rey! ¡Perderé el seso!.
VASCO

 (Ap.) 

A Juan Lorenzo de Acuña
notable inclinación tengo,340
y me pesa deste lance,
y si con Fernando puedo
he de hacer por él prodigios,
que la amistad sabe hacerlos.
REY
 (Ap.  ¡Ay Leonor! ¡Ay Leonor mía!345
¡Ay tiranizado duelo!)
Vamos, Maestre y Prior,
vamos; sin alma en el pecho
voy y veneno espumando;
matarele, vive el cielo,350
y aún no estaré con su muerte
de mis celos satisfecho.
VASCO
Seguid, Juan Lorenzo, al Rey
de rodillas por el suelo,
que es deidad humana y quiere355
ser rogada.
JUAN
Ya lo intento:
Señor, Señor, vuestra alteza...
REY
Quedaos, quedaos, Juan Lorenzo,
que me habéis dado el pesar
mayor, el susto más nuevo360
que vasallo a rey dar pudo.
JUAN

 (Ap.) 

¿Qué más claro, qué más cierto
puede estar, cielos, mi agravio?
REY
Los que son vasallos buenos
han de ser, en casos tales,365
linces de los pensamientos
de los reyes, y los que obran
en todo el contrario de esto,
son atrevidos, son falsos,
son ingratos, son soberbios,370
son aleves, son tiranos,
son traidores y groseros,
y vos lo sois todo junto
pues habéis sido uno de ellos.
 

(Vase el REY y los suyos, y queda JUAN LORENZO y BARRETO.)

 
BARRETO

 (Ap.) 

Con duro espigón, adonde375
suelen decir los plebeyos,
a Juan Lorenzo ha dejado
el Rey, no puede ser menos,
sino que haya aquí un gran paso
de comedia de lo acedo,380
de lo apretado que llaman,
de lo de echar el sombrero,
de lo de arrojar la capa.
JUAN
¿Estoy soñando? ¿qué es esto?
BARRETO
Entre el amor y el honor385
bravo soliloquio espero.
JUAN
¿Qué esto que por mí pasa?
¿Para cuándo es mejor tiempo
de morir un desdichado
que cuando llega a saberlo?390
BARRETO
Jamás fue bueno morir,
porque no hay cosa en el suelo
más infame que un difunto,
mas desairada que un muerto;
lo que deja hacer de sí,395
lo que sufre, lo que siendo
antes treinta papagayos,
se acredita de secreto.
Luego le echan de su casa
huyendo de su aposento400
donde ha estado; todos tienen
de sólo nombrarle miedo,
que me espanto, vive Dios,
como en el libro del duelo,
entre las cinco palabras405
por la mayor no la han puesto,
que para cargar a un hombre
que hubiera muerto a mi abuelo,
mientes como difuntillo
fuera el oprobio postrero.410
JUAN
Ni lo que dices escucho,
ni estoy conmigo, ni entiendo
adónde pongo las plantas,
ni sé si vivo o si muero.
BARRETO
El zaguán hemos pasado415
de casa, y sale recelo
a recibirte Guiomar
con una luz.
JUAN
Otra veo
en los abismos que surco,
 

(Sale GUIOMAR con una luz, y detrás de ella DOÑA LEONOR DE MENESES, y pone GUIOMAR la vela sobre un bufete.)

 
que más me alumbra, Barreto;420
pluguiera a Dios que el engaño
entre los oscuros velos
de sus aparentes sombras
mi honor hubiera encubierto.
BARRETO
¿Mi señora?
JUAN
¿Leonor?
BARRETO
Sí,
425
de su amor haciendo alarde.
DOÑA LEONOR
. Pues, señor mío, tan tarde...
JUAN
Bien temprano es para mí.
DOÑA LEONOR
¿Cómo temprano?
JUAN
No soy
quien habla en mí, lo que digo.430
DOÑA LEONOR
Pues ¿cómo estando conmigo?
JUAN
Como conmigo no estoy.
DONA LEONOR
¿Con vos no estáis?
JUAN
Claro está,
si estoy en vos, Leonor mía.
DOÑA LEONOR
Siempre mi amor desconfía.435
JUAN
¿Y el mío, Leonor, qué hará?
DOÑA LEONOR
Fiar inmortalidades
del mío, que ha de vencer
al tiempo, y siempre ha de ser
alma de estas dos mitades,440
una sola que es la vida
inmóvil; un corazón
que amor vinculó esta unión
desde el venturoso día
que os di el alma, dueño mío,445
y el corazón con la mano,
despojo que intenta en vano
todo el humano albedrío,
todo el imperio, el poder
de la tierra, contrastar450
esta roca opuesta al mar
que se ha mentido mujer.
Este monte, coronado
de robles, que toca al cielo,
que algún tirano desvelo455
humano le ha imaginado,
nada mi pecho importuna;
que tan heroica mujer
no tiene un mundo poder,
el tiempo ni la fortuna;460
que soy, venciendo intereses
de reinos, con valor godo,
roca, monte, y sobre todo
doña Leonor de Meneses.
JUAN
Guárdete el cielo, Leonor,465
los siglos de mi deseo,
que de tan dichoso empleo
puede estar vano mi amor.
Yo satisfacción ninguna
del tuyo no he menester,470
que sé que eres mi mujer,
y en Portugal otra alguna
no te puede aventajar
en sangre ni obligaciones;
mas tráenme mis pretensiones475
tan cansado de cansar
ministros y consejeros,
que no sé cómo venía
cuando llegué, Leonor mía,
a adorar tus dos luceros;480
y como fuera de mí
no supe (perdone amor)
como me hablaste, Leonor,
ni como te respondí;
que de tu amor verdadero485
seguro está mi cuidado:
quien ama, es desconfiado,
quien es dichoso, es grosero.
Dame tus manos, pondré
en sus cristales la boca,490
monte de mi honor y roca
de mi amor y de mi fe.
BARRETO

 (Ap.) 

Gracias a Dios que parece
que se ha satisfecho ya.
GUIOMAR (Ap.)
En obstinado el Rey da,495
pero Leonor le aborrece.
BARRETO
Hasta ahora no sabía
que estaba con él casada,
y hubo una brava ensalada
en la calle, Guiomar mía.500
GUIOMAR
¿Mía? Esa es llaneza rara
muy para novios y primos;
¿En qué bodegón comimos?
BARRETO
En el de tu hermosa cara.
GUIOMAR
No van a ese bodegón505
Lacayos, que pico más
alto.
BARRETO
Guiomar, estarás
(claro está) en esta ocasión
del Rey cascabeleada
con bostezos palaciegos;510
¿Mas qué traes desasosiegos
de una llave pavonada?
¿Mas qué te sueñas, Señora,
de coche? ¿Mas qué te pintas
llena de rosas y cintas515
camarera de la Aurora?
Pues acuérdate, Guiomar
que eres humilde mujer,
Y en Guiomar te has de volver
y en fregona has de parar,520
y que has de ser, en efeto,
pues tal vanidad te atiza,
como los hay de ceniza
el miércoles de Barreto.
GUIOMAR
Pícaro de bajas prendas,525
¿Qué no ves las que hay en mí?
Yo pienso ser para ti
martes de Carnestolendas.
 

(Tocan guitarras, y dice dentro el REY.)

 
REY
Cantad, cantad hasta el día,
que mi amor no me da espacio530
para volverme a Palacio.
GUIOMAR

  (Ap.) 

El Rey vuelve a su porfía.
MÚSICOS

 (Cantan.) 

Sale Estela Dalva,
amañese obeim,
recordai mi ñalma,535
naom durmais meu beim.
JUAN

 (Ap.) 

El Rey ha vuelto a la calle;
¡Ah sospechas! ¡Bien teméis
su temeridad tirana
en el dominio del Rey!540
Esto es tomar la paciencia
de un vasallo de mi fe,
con sangre y honor de Acuña
y celos de portugués.
MÚSICOS

 (Cantan.) 

Vida de mi ñalma,545
naom vos posse ver,
esta naom he vida
para se sufrer.
JUAN
Ni esto se puede tampoco
sufrir; estoy por hacer,550
por intentar, aunque arriesgue
mil vidas, y el interés
de tanto blasón, ganado
a costa de tanta fe,
sangre noble, un desatino555
que fama inmortal me dé.
Castigarme en el honor
una omisión, por no haber
pedido licencia para
mi casamiento, es cruel560
recompensa, es tiranía,
es bárbaro proceder,
que el Rey es rey de las vidas,
y no puede ser juez
de las almas, pues allí565
es solar el interés;
aquí del Rey contra él mismo,
o aquí de Dios contra el Rey.
DOÑA LEONOR
Gran Juan Lorenzo de Acuna,
Señor, esposo, mi bien570
adorado dueño mío,
reportaos, no os destempléis
de suerte en esta ocasión
y aunque mayor os la den,
que ofendáis la confianza575
que de mí debéis tener,
que mi valor es diamante
de tan generosa ley,
que está con el sol al tope,
y el dorado rosicler580
compitiéndole en el fondo
corre parejas con él,
que estos desaciertos son
escándalos del poder,
no riesgos de vuestro honor585
ni asaltos de mi desdén;
que, vive Dios, que a pensar
que os pudieran ofender
a mí ni a vos en las sombras,
que hay sangre en mi que heredé590
de los Tellos de Meneses,
y en ella valor también;
sin aventuraros vos
para intentar, por mujer
vuestra en primero lugar,595
y por quien yo soy después,
la satisfacción bastante
a la opinión, con los pies
con las manos, con los dientes,
con los ojos, que beber600
sabrán, hechos basiliscos
llenos de hidrópica sed,
sangre, y venenoso aliento
a los áspides por él;
que para mujer tan grande605
como con vos llego a ser,
es mucho mundo su honor
y flaco enemigo un Rey.
Esto me lo debo a mí,
y por vos lo debo hacer610
cuando por mí no lo hiciera
y, vive Dios, otra vez,
si en este particular
llego de vos a entender
el escrúpulo menor615
en ofensa de la fe
de mi amor y vuestra sangre
que me mate, que me dé
ponzoña, que del acero
invencible que traéis620
me pase de arte a parte
el pecho, donde se ve
vuestro retrato por alma
y toda mi vida en él,
habiendo hecho primero625
en la vuestra, que adoré
el mismo mortal estrago,
resuelta, honrada y cruel
esto lo tened por dicho
y por hecho lo tened,630
cuando otra vez el recelo
sea con vos descortés.
Canten en la calle o lloren,
pongan sitios a mi fe
y asaltos al imposible635
alcázar de mi amor den,
porque vos sois Juan Lorenzo
de Acuña, y soy y he de ser
yo siempre doña Leonor
Téllez de Meneses, prez640
de Castilia y Portugal,
que, antes que sus reyes, fue
mi apellido generoso
timbre del blasón leonés.
Ésta soy yo y vos sois éste,645
a la memoria os traed
quien sois vos, y quien soy yo,
y no tendréis qué temer,
si estáis con vos y conmigo,
ningún siniestro vaivén650
de la fortuna, rigores,
fuerzas, tirano poder,
amenazas, Reyes, rayos
mundos y esferas, porque
vos sois el muro, y yo soy655
hiedra de vuestra pared.
JUAN
Mienten con vos, Leonor, cuantas
celebra el tiempo, después
que hubo griegos y romanos;
dame los brazos.
BARRETO
El Rey.
660
JUAN
¿Cómo el Rey?
BARRETO
De Portugal.
 

(Sale EL REY, EL MAESTRE, VASCO y EL PRIOR.)

 
REY
No todo os lo habéis de haber,
Señora doña Leonor,
con vuestro esposo.
DOÑA LEONOR
No sé
a qué efecto vuestra alteza665
nos hace tanta merced.
REY
Vengo, como tan parienta,
a daros el parabién
de vuestra boda, que soy,
como suele acontecer,670
el primero que lo siente
y el postrero que lo sé;
que me tocaba ser vuestro
padrino por justa ley
del deudo que en Portugal675
los dos conmigo tenéis.
JUAN
Guarde Dios a vuestra alteza
los años que ha menester
el reino, por las mercedes
y por las honras también680
que nos hace.
REY
Levantad,
que muchas os pienso hacer,
Juan Lorenzo, que he mudado
el primero parecer,
porque a los servicios vuestros685
lo mucho que debo sé;
Vasco de Almeida ha mostrado
que es muy vuestro amigo, a quien
como el Maestre, mi hermano,
muchas finezas debéis,690
y no menos al Prior
de Ocrato, que os quiere bien.
JUAN
Esclavo de todos soy.
REY

 (Ap.) 

¡Cielos, que he venido a ver
con otro dueño a Leonor!695
Los sentidos perderé,
si ya no vengo sin alma.
DOÑA LEONOR
Aquí no tengo qué hacer;
vuestra alteza me perdone,
y me dé licencia que700
a mi cuarto me retire.
REY
 (Ap.  ¡Qué despego, qué desden!)
Guardeos Dios.
DOÑA LEONOR
El cielo os guarde.

 (Vase.) 

REY
 (Ap.  Del imperio del Argel,
del encanto de esos ojos705
que estrellas desprecian ser,
muero de celos y amor.)
Tarde es, y querrá también
Juan Lorenzo recogerse.
JUAN
Acompañando os iré,710
como tengo obligación,
primero.
REY
No hay para qué
ahora, vedme mañana
en Palacio.
JUAN
Iré a poner
mi cabeza en vuestras manos,715
y mi vida a vuestros pies.
BARRETO
A Madrid, corte en Castilla,
se quiere el Rey parecer,
que dicen que a un mismo tiempo
llueve y hace sol también;720
quien le vio contra mi amo
no ha una hora chuzos llover
de amenazas y rigores,
no le creerá, si le ve
ahora sin una nube725
dispensar rayos, y ser
lisonja de la cabaña
al dorado chapitel.
¡Qué presto que se mudó
del rigor a la merced,730
de la amenaza al favor!
¡Oh rey Madrid! ¡oh rey mes
de Febrero, oh rey movible,
no del calendario rey!
Quien no te entiende te compre.735
VASCO
Su alteza ha de conocer
vuestro valor, Juan Lorenzo
de Acuña, o yo no seré
Vasco de Almeida, de vuestro
padre amigo tan fiel.740
JUAN
Merezco a vueseñoría
ese favor.
MAESTRE
Yo, después
de Vasco de Almeida, Acuña,
soy vuestro amigo también.
JUAN
Vuestra alteza llegue a verse745
rey del mundo.
PRIOR
Yo sabré
también serviros, señor
Juan Lorenzo, porque sé
que sois tan gran caballero.
JUAN
Siempre hará como quien es750
vuecelencia.
VASCO
El Rey se va.
REY
 (Ap.  Paredes, que de mi bien
sois dichoso albergue, adiós,
y él quiera que os vuelva a ver
sin celos y con más dicha.)755
Quedaos, Juan Lorenzo, y ved
que es bueno un rey para amigo,
y que vuestro lo he de ser.
JUAN
Levantará vuestra alteza
mi humildad.
REY

 (Ap.) 

Poco podré,
760
o Leonor ha de ser mía,
triunfando de su altivez.

 (Vase.) 

JUAN
Recelos, sed confiados,
que tengo heroica mujer.
BARRETO
Noche toledana ha sido,765
yo me voy a recoger
con mucho sueño y sin cena,
mirad con quién y sin quién.
 

(Sale un PINTOR con un retrato de DOÑA LEONOR, de medio cuerpo arriba, cubierto con un tafetán.)

 
PINTOR
El Rey está enamorado
y será mucho que duerma,770
porque quien de amor enferma,
le despierta su cuidado;
y así a Palacio he venido
tan de mañana con esta
pintura, que no me cuesta775
del pincel y del sentido
haberla acabado poco
trabajo, por el sujeto;
mas venció el arte, en efeto,
cuando pensé quedar loco780
y hoy el plazo se ha cumplido
de la apuesta que hemos hecho,
y he de quedar satisfecho
de lo que me ha prometido,
y libre de la cruel785
pena que me impuso; aquí
un hombre sale.
 

(Sale BARRETO.)

 
BARRETO
Sin mí
ando de puerta en cancel
en este del Rey retrete
que llaman, para saber790
si se levanta, y volver
a casa como un cohete
a dar aviso a mi amo
que a Palacio ha devenir,
y me lo podrá decir795
este hidalgo, que le llamo
así ahora, y puede ser
que después no se contente
con vizconde solamente,
que aquí suele anochecer800
uno cerezo, y salir
San Roque por la mañana,
porque es mano soberana
la de un rey para esculpir,
como Dios, hombres de nada;805
pero este tiene sin duda
cara de olicial o ayuda;
llamarele camarada,
pues en la cámara está
por no errar la ocupación;810
mejor será camarón,
pescado que este mar da.
PINTOR
Hidalgo, ¿es del Rey criado?
BARRETO
Caballero, no, que soy
criado de Dios, y estoy815
a su imagen fabricado.
PINTOR
Parece hombre de placer.
BARRETO
¿Porqué, señor don Diablo?
PINTOR
Porque juega del vocablo,
y esta casa suele ser820
destas sabandijas jaula.
BARRETO
Buenas señas, sin lisonja.
¿No puedo haber sido monja,
y don Amadis de Gaula,
que son los que más han sido825
de este lenguaje fulleros?
¡Oh qué grandes majaderos
siempre a Palacio han venido!
Ya sé que no es el menor
el señor cabo de escuadra:830
notablemente le cuadra
un cuento, oiga por mi amor;
mas el Rey sale imagino;
haga cuenta que es Inés;
yo se lo diré después.835
PINTOR
¡Hombre extraño y peregrino!
 

(Sale EL REY, leyendo una carta, EL MAESTRE y EL PRIOR.)

 
REY
Escríbeme el de Aragón
en razón del casamiento
con notable sentimiento.
MAESTRE
Y tiene mucha razón;840
perdóneme vuestra alteza
si ésta parece osadía,
ya que Portugal porfía
que se case, y la grandeza
de un rey de Aragón no es justo845
ofender con omisiones,
pues las capitulaciones
se han hecho; bien sé que al gusto
no os hablo en esta ocasión,
pero sé que a la verdad850
sí, que a vuestra autoridad
toca y a mi obligación
hablaros desta manera;
lo demás será, Señor,
ser lisonjero y traidor,855
no sangre tan verdadera
vuestra y tan cercana.
REY
Hermano,
vuestros consejos estimo
y al rey don Jaime, mi primo,
a satisfacer me allano860
en las quejas de no hacer
el tratado casamiento,
cuyo justo pensamiento
por obra habéis de poner,
yendo a Aragón por su Infanta,865
que ya al mismo sol igual
vendrá a ser de Portugal
Reina con grandeza tanta;
siga a un desdén un despecho,
venza a un desdén otro amor,870
y saque aquella Leonor
estotra Leonor del pecho;
hoy por la posta a Aragón,
porque más mi fe se muestre,
habéis de partir, Maestre.875
 

(Llega a hablar el PINTOR con EL PRIOR DE OCRATO.)

 
PINTOR
Yo vengo a buena ocasión.
PRIOR
A buena ocasión venís,
no desconfiéis.
PINTOR
Señor,
no haré con vuestro favor.
REY
Basta un Maestre de Avís880
para honrar en ocasiones
de casamientos iguales,
no sólo mil Portugales,
sino un mundo de Aragones.
MAESTRE
Vuestra alteza favorece,885
como siempre, mi persona
por rayo de su corona.
REY
Vuestro valor lo merece,
y aun hay, por la astrología,
quien diga que habéis de ser890
Rey de Portugal, y hacer
dilatar su monarquía,
y que el Príncipe Perfecto
España os ha de llamar,
que os ha de inmortalizar895
por valeroso y discreto.
MAESTRE
La edad pase, soberano
Fernando, al sol vuestra alteza,
que no quiero más grandeza
que llamarme vuestro hermano,900
y verán como lo muestro
en la ocasión de Aragón.
REY
No ha menester ocasión
de lucir el valor vuestro;
hoy la partida ha de ser905
no la habéis de diferir.
MAESTRE
Yo me voy a prevenir,
y empezar a obedecer.
PRIOR
Colgadlo, para que pueda
verlo aquí mejor el Rey.910
PINTOR
Sabéis del arte la ley;
ya como mandáis lo queda.

 (Cuélgalo en la pared.) 

REY
¿Qué es eso, Prior?
PRIOR
Señor,
como el plazo se ha cumplido
de aquella apuesta, ha venido915
con el retrato el Pintor;
y aunque trata vuestra alteza
de casarse, y que el Maestre
de Avís en Aragón muestre
de Portugal la grandeza,920
y con tanta brevedad
de parecer ha mudado,
a pagar está obligado
al Pintor la cantidad
que prometió en el contrato,925
que la palabra de un rey
es inexcusable ley.
REY
¿Cómo fue, Prior de Ocrato?
PRIOR
Que si dentro de dos meses
que desde entonces contaba,930
un retrato no le daba
de la Téllez de Meneses,
porque con dificultad
del sol se dejaba ver
y era intentarlo emprender935
la mayor temeridad,
ahorcarlo mandaría
de la almena más civil;
y si no, darle dos mil
cruzados el mismo día940
que el retrato le entregase
dentro del plazo.
REY
Es así.
PRIOR
Ya él está con él aquí
antes que el término pase;
cumpla corno él ha cumplido945
vuestra alteza su concierto,
y haga luego del retrato
lo que más fuere servido.
REY
Mando al contador mayor
que otros dos mil le acreciente,950
y llévese juntamente
el retrato de Leonor;
basta el estrago que ha hecho
el original en mí;
váyase el retrato, así955
pudiera echarlo del pecho.
PRIOR
Pues el desdén lo merece
de Leonor, eso así sea
pero vuestra alteza vea
primero si le parece;960
mire si a la semejanza
con vida el pincel le anima,
que el grande artífice estima
más que el oro la alabanza.
REY
Decís bien, Prior, veamos965
retratado este prodigio,
este monstruo al breve espacio
deste lienzo reducido.
 

(Quita el PINTOR el tafetán.)

 
PINTOR
Éste es.
REY
Parece que está
con alma, si no es el mismo970
original el que veo;
él es, o estoy sin sentido;
la imaginación ha hecho
caso hoy tan raro, que miro
delante de mí la causa975
de mi enamorado hechizo;
desenojo es de mis celos,
de mi amo milagro ha sido;
Leonor, señora, mi bien,
hermoso dueño, ángel mío,980
un rey tenéis por esclavo
a vuestras plantas rendido,
sin alas un corazón
y un alma sin albedrío.
¿Por que encanto de mis ansias,985
por qué, dichoso peligro,
conmigo tan desdeñosa?
¿Por que tan cruel conmigo?
Aguardad, pero ¿qué es esto?
Loco estoy, pues imagino990
ilusiones, sueño engaños,
o por lo menos, dormido,
hasta los desdenes son
sueños en mí y parasismos,
y en mí son, como los bienes,995
hasta los males fingidos.
PRIOR
Fuerza ha sido del pincel,
y de su amor excesivo,
suspenderse con el cuadro.
PINTOR
Que al Rey satisfaga estimo1000
tanto, como las mercedes
que de su mano recibo.
PRIOR
Venid, os despachará,
que por las muestras he visto
que quiere con él quedarse,1005
por raro, por peregrino,
que Amor, como es niño, siempre
anda mudando designios.
 

(Vanse el PRIOR y el PINTOR.)

 
REY
En fin, a despecho vuestro
os tengo, Leonor, conmigo,1010
que incurable a los remedios,
sólo con engaños vivo;
todos buscan en pinturas,
engañando a los sentidos,
lejos para la esperanza,1015
sombras para los alivios.

 (Sale VASCO DE ALMEIDA.) 

¿Qué hay, Vasco de Almeida?
VASCO
Darle
a vuestra alteza infinitos
parabienes de la nueva
resolución, que me ha dicho1020
el Maestre que ha tomado,
desenojando a su primo
el rey de Aragón, y haciendo
lo que tiene tan debido
y todos tan deseado,1025
como es casarse.
REY
Ayo mío,
de vuestros consejos son
efectos, que los admito,
como de mi padre propio.
VASCO
Guardeos el cielo los siglos1030
que vuestros reinos desean;
Juan Lorenzo...
REY
¿Es vuestro amigo?
VASCO
Fuilo mucho de su padre.
REY
Pues ¿qué decís?
VASCO
Ha venido,
como anoche le mandó1035
vuestra alteza.
REY
Sus servicios
merecen que dél me acuerde,
poniendo el yerro en olvido
de no pedirme licencia
para casarse.
VASCO
Delitos
1040
que se han perdonado, son
como si no hubieran sido.
REY
En mis celos no, que siempre
son eternos, por ser míos,
decidle que entre.
VASCO
Ya voy,
1045
que hoy soy con vos su Padrino.
REY
Eligió el mejor, Almeida.
 (Ap.  Así le hubiera elegido
yo con Leonor, que nació
de las entrañas de un risco.)1050
VASCO
Entrad, señor Juan Lorenzo
de Acuña.
 

(Sale JUAN LORENZO.)

 
JUAN
Al blasón altivo
deberán de los Almeidas
los Acuñas.
VASCO
Este oficio
de nuestra amistad es deuda,1055
y en mí, Acuña, muy antiguo;
llegad, que os aguarda el Rey.
JUAN
A vuestra alteza suplico
me dé su mano.
REY
Seáis,
Juan Lorenzo, bien venido.1060
( Ap.  ¡Con qué rabia, con qué envidia
y con qué celos le miro!)
Levantaos; ¿cómo estáis?
JUAN
Siempre
deseando en qué serviros,
porque nunca he estado ocioso,1065
Señor, en vuestro servicio.
REY
¿Cómo está doña Leonor?
JUAN
Como vuestra... ¿cómo digo?
Como vuestra esclava. ( Ap.  Cielos,
¿Qué es lo que a los ojos míos1070
se ha puesto delante? ¿No es
(¡estoy perdiendo el sentido!
De Leonor este retrato?
¿Este nuevo basilisco?
¡Cielos, Leonor retratada,1075
y en el aposento mismo
del Rey y de amante suyo,
con tan notables indicios!
¡Perderé el seso mil veces,
y no sé como estoy vivo!1080
¡Oh mal haya la hermosura
que da el cuidado al marido,
y el primero que el honor
puso en tan grande enemigo!
¡Mal haya quien...)
REY
Juan Lorenzo,
1085
¿Qué es lo que os ha suspendido?
JUAN
Una rara novedad
extranjera de mi honor,
pues es contra mí traidor
con quien he hecho amistad;1090
una fingida verdad
que de agravios se sustenta,
una calma con tormenta
y una espía, al fin perdida,
que corre contra mi vida1095
la campaña de mi afrenta;
un empañado cristal,
donde el que a verse llegó,
de la muerte el rostro vio
por prodigiosa señal;1100
una atalaya inmortal
que a todos mi ofensa avisa,
un ladrón que el monte pisa,
que robando al alma, ingrato,
dejó sin vida al recato1105
y a la vergüenza en camisa;
un reloj de horas menguadas
en mi fortuna siniestra,
que con ser sólo de muestra,
da mayores campanadas;1110
un huésped que en las posadas
ajenas se anda a poner
mi honor al riesgo, al poder,
y un vidro de agua en que yo
vi el perro que me mordió,1115
que rabiando he de beber,
esto en tan dura ocasión,
es lo que me ha suspendido,
que parece que he venido
para esta demostración.1120
¿Estos los favores son
que de vuestra alteza espero?
¡Mal haya el tirano fuero
que ató en sucesos iguales
las manos de los leales,1125
el corazón y el acero!
Porque sino en el estado
que miro mi deshonor,
hoy se vendiera el valor
de lo vivo a lo pintado;1130
mas vuestra alteza, fiado
en la dignidad suprema
de Rey, por amor o tema,
tanto infama mi opinión,
que es auto de inquisición1135
que en estatua me la quema.
REY
Yo quise a Leonor primero
y vos con ella os casasteis,
yo la perdí y vos la hallasteis
más dichoso y más grosero;1140
yo de celos desespero
y vos os gozáis el bien;
yo muero de su desdén;
paso entre mi amor hagamos
y vuestro honor, y partamos1145
los sentimientos también.
JUAN
Pues sin morir he escuchado
hablar a un rey desta suerte,
poco le debe a la muerte
la vida de un desdichado.1150
REY
Juan Lorenzo, estáis casado
con invencible mujer;
nada tenéis que temer,
aunque en trance tan terrible
mi amor es más invencible,1155
pues no le puedo vencer;
esta locura, que amor
ya no se puede llamar,
dicen que se ha de curar
también con otra Leonor;1160
y acreditando el valor
de tan grande caballero,
honrando al Maestre, quiero
que vais a Aragón, pariente,
porque con él juntamente1165
seáis mi casamentero;
y este retrato que os dio,
Conde, en mi cámara enojo,
le llevaréis por despojo
que vuestro valor venció;1170
bandera es que os intimó
guerra al honor arrogante,
vaya arrastrando delante
y del fuego triunfo sea,
porque la beldad no vea1175
otra a Leonor semejante;
decidle que queda aquí
en ausencia vuestra un rey
que cumplirá con la ley
del que soy, no del que fui,1180
por vos, por ella y por mí;
y decidle, finalmente,
que vais, si veis que lo siente,
de mi amor por un olvido,
porque con este partido1185
llevará el veros ausente.
Y con esto a Dios que os dé
buen viaje, y de Aragón
os vuelva a la dulce unión
de tan invencible fe.1190
JUAN
Ni al Rey entiendo, ni sé
qué intenta, ni dónde voy.

 (Mirando el REY el retrato.) 

REY
Leonor, de otra Leonor soy,
rindiose mi sufrimiento.

 (Mirando JUAN LORENZO DE ACUÑA el retrato.) 

JUAN
Leonor, pues de vos me ausento,1195
y sois mujer... ¡Loco estoy!

IndiceSiguiente