1
Esta rima, «Flores tronchadas, marchitas hojas», incluida durante muchos años en ediciones populares como la de «Colección Austral», se dio a conocer en las Páginas desconocidas de Gustavo Adolfo Bécquer, recopiladas por FERNANDO IGLESIAS FIGUEROA, Madrid, Renacimiento, s. f. [1923-1924], tomo II, pág. 15; y como esa otra rima más famosa «¿No has sentido en la noche...?», parece ser de la cosecha del propio recopilador y haber derivado, como esta última, aunque menos directamente, del libro de versos del mismo Iglesias Figueroa titulado Tristeza, Madrid, Renovación, 1916, cuyo primer poema (págs. 5-6) empieza: «Lirios tronchados, amores muertos».
2
GERTRUDIS GÓMEZ DE AVELLANEDA, Poesías y epistolario de amor y de amistad, ed. de Elena Catena (Biblioteca de Escritoras, 9), Madrid, Castalia/Instituto de la Mujer, 1989, pág. 205.
3
GABRIEL GARCÍA Y TASARA, Poesías, Madrid, Rivadeneyra, 1872, pág. 96.
4
JOSÉ DE ESPRONCEDA, «Canción del pirata», Poesías líricas, ed. de Marrast, pág. 227.
5
En BÉCQUER, Rimas, ed. de Torres, Apéndices, pág. 211.
6
En The Complete Essays and Other Writings of Ralph Waldo Emerson, ed. de Brooks Atkinson (The Modern Library), Nueva York, Random House, 1950, págs. 56-57.
7
En BÉCQUER, Rimas, ed. de Torres, Apéndices, pág. 212.
8
MENÉNDEZ PELAYO, Obras, ed. cit., X, pág. 408.
9
En Gustavo Adolfo Bécquer, ed. de Sebold, pág. 70.
10
RAMÓN DE CAMPOAMOR, Obras poéticas completas, Barcelona, Luis Tasso, Impresor-Editor, s. a., I, pág. 64.