Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
  • Vida del P. Baltasar Álvarez

    • Al cristiano lector

    • Capítulo I

      Del nacimiento y crianza del Padre Baltasar; de su entrada en la Compañía, noviciado y estudios

    • Capítulo II

      De la inclinación grande que tuvo desde novicio a la oración y trato familiar con Dios nuestro Señor, y de las diligencias que hizo para alcanzarle con excelencia

    • Capítulo III

      Cómo comenzó por la meditación de los misterios de la Humanidad de Cristo nuestro Señor, y de la especial devoción que siempre le tuvo, y de los provechos que sacó

    • Capítulo IV

      De las veras con que procuró desde novicio la mortificación de sí mismo en todas las cosas, y la prosiguió toda la vida con muchas obras de penitencia

    • Capítulo V

      Cómo hizo los tres votos de castidad, pobreza y obediencia, y de la perfección con que siempre los guardó

    • Capítulo VI

      Cómo se ordenó de sacerdote, y de la devoción con que rezaba el Oficio divino y decía Misa cada día

    • Capítulo VII

      Cómo comenzó luego a ejercitar los ministerios con los prójimos, y de las ayudas y avisos que tuvo de nuestro Señor, para crecer juntamente en su propia perfección

    • Capítulo VIII

      De la prudencia y destreza que tenía en ayudar a las almas, y de los medios en general que tomaba para ello

    • Capítulo IX

      Del grande fruto que hizo en Ávila en muchas personas de insigne virtud

    • Capítulo X

      Cómo ayudó en Ávila a la Madre Mari Díaz en sus heroicas virtudes, y de una conferencia muy provechosa que tuvieron sobre cinco suertes de padecer

    • Capítulo XI

      De lo mucho que ayudó a la santa Madre Teresa de Jesús, y de una revelación que ella tuvo de la predestinación del mismo Padre, para alentarle

    • Capítulo XII

      Cómo le mudaron a Medina del Campo; y el año de 1567 hizo la profesión de cuatro votos, y cuán bien cumplió con las obligaciones della

    • Capítulo XIII

      Cómo este mismo año nuestro Señor le concedió el señalado don de oración y contemplación que tuvo, con doce admirables frutos. -Pónese la relación que él mismo hizo de ellos por obediencia a los superiores

    • Capítulo XIV

      En que se declara más este modo de oración, y las causas por que nuestro Señor se le concedió al P. Baltasar, y se lo dilató algunos años

    • Capítulo XV

      Cómo entró en este modo de oración por especial vocación de Dios; y decláranse más las señaladas mercedes que recibió para su mayor perfección, y para ayudar más a los prójimos

    • Capítulo XVI

      De las cosas maravillosas que en Medina y otras partes hizo en los prójimos con la eficacia de su oración, y descubriendo a muchos cosas secretas del corazón, o cosas que estaban por venir

    • Capítulo XVII

      Del grande fruto que hizo en muchas personas seglares y religiosas con la eficacia de sus pláticas espirituales

    • Capítulo XVIII

      De los trabajos y peligros a que se puso por el bien de las almas; y de algunas cosas notables en que mostró su grande caridad

    • Capítulo XIX

      Cómo entabló el orden de la probación en Medina con gran perfección.-De su gran caudal en criar novicios, y del fervor que tenían

    • Capítulo XX

      De algunos novicios muy insignes y fervorosos que tuvo en Medina en este tiempo. Pónese las cosas notables de los hermanos Francisco de Godoy y Antonio de Padilla

    • Capítulo XXI

      Cómo se aparejaba para las pláticas y en ellas procuraba que los novicios cobrasen noticia, estima y amor de su Instituto

    • Capítulo XXII

      De otras muchas cosas que tomaba por materia de las pláticas, para la entera y perfecta enseñanza de los novicios

    • Capítulo XXIII

      De la excelencia con que hizo el oficio de Rector en Medina y otros colegios; y del gran talento que tuvo de gobierno

    • Capítulo XXIV

      De su celo y cuidado en promover el ministerio de leer latín, y criar bien la juventud de la República, y enseñar la doctrina cristiana

    • Capítulo XXV

      De la jornada que hizo a Roma, y cómo se previno con la confianza en Dios, y experimentó los efectos de su divina Providencia y la guarda de los Ángeles

    • Capítulo XXVI

      Cómo visitó la casa de nuestra Señora de Loreto, y trajo el retrato de la imagen que pintó San Lucas; y de la gran devoción que tuvo con la Virgen y otros Santos

    • Capítulo XXVII

      Cómo quedó en lugar del Provincial que iba a Roma con otros dos Padres graves, y fueron presos de los herejes, y lo que hizo para su rescate

    • Capítulo XXVIII

      De algunas enfermedades graves y otros achaques que padeció en este tiempo, y de la grande paciencia y perfección que mostró en ellas

    • Capítulo XXIX

      Cómo fué por Rector del Colegio de Salamanca, y procuró que se juntasen letras con espíritu, y del gran fervor que puso en nuestros hermanos estudiantes

    • Capítulo XXX

      En que se ponen algunos ejemplos notables de dos hermanos estudiantes muy fervorosos, Juan Ortuño y Francisco de Córdoba

    • Capítulo XXXI

      Cómo tenía especial cuidado de que los maestros fuesen perfectos, y de la insigne virtud del Padre Francisco de Ribera, que leía allí sagrada escritura

    • Capítulo XXXII

      Del fruto que hizo en muchas personas de la Universidad y en otras seglares muy principales (Año 1574)

    • Capítulo XXXIII

      De los avisos que dió para el modo de hablar en las cosas espirituales, contra los malos lenguajes de los alumbrados que se levantaron en este tiempo

    • Capítulo XXXIV

      Del celo con que ayudaba a los ausentes con sus cartas, y de la prudencia y eficacia que mostraba en ellas. Pónense algunas muy espirituales

    • Capítulo XXXV

      Cómo fué por Rector del Colegio de Villagarcía; y de lo mucho que ayudó a Doña Magdalena de Ulloa, su fundadora, para las cosas grandiosas que hizo en servicio de nuestro Señor (Año de 1577)

    • Capítulo XXXVI

      Cómo la ayudó por cartas, y de la grande perfección a que nuestro Señor la levantó

    • Capítulo XXXVII

      Del fruto que hizo entonces en otras personas muy principales; y cómo a una de ellas dió dos meditaciones muy devotas de la divina Providencia

    • Capítulo XXXVIII

      Cómo en este tiempo fué a Burgos: y de un modo de vida muy concertado que dió a dos personas devotas, deudas suyas

    • Capítulo XXXIX

      De la profunda humildad que tuvo siempre en medio de oficios y sucesos tan honrosos y prósperos. Pónense sus admirables sentimientos cerca desta virtud

    • Capítulo XL

      De una grande borrasca que se levantó en este tiempo sobre su modo de oración, y de la heroica humildad y paciencia con que llevó sus desprecios (Año de 1576 y 77)

    • Capítulo XLI

      De las ocasiones que hubo para esta borrasca, y cómo respondió a las dificultades que se le pusieron contra el modo de oración de quietud y silencio; y el fin que tuvo todo

    • Capítulo XLII

      De la grande importancia y seguridad que tiene el modo de orar por meditaciones, afectos y coloquios con nuestro Señor, y cómo éste se ha de proponer y enseñar a todos

    • Capítulo XLIII

      Cómo los de la Compañía han de seguir este modo de orar, que se enseña en nuestros Ejercicios. Declárase su grande excelencia, y pónese una plática dellos, muy espiritual y provechosa

    • Capítulo XLIV

      Como fué por Visitador de la Provincia de Aragón; el modo como la hizo, y cómo descubrió allí la gran virtud del hermano Juan Jimeno; pónese una relación que hizo della

    • Capítulo XLV

      De otras cosas notables del Hermano Jimeno, y algunas que le pasaron con el Padre Baltasar

    • Capítulo XLVI

      Cómo fué nombrado por Provincial del Perú. Y de una cosa milagrosa que le sucedió volviendo a Villagarcía (Año de 1579)

    • Capítulo XLVII

      De lo que hizo en Villagarcía con los que tenían su tercera probación acabados los estudios, y de algunas cosas notables que entonces pasaron (Año de 1579)

    • Capítulo XLVIII

      Cómo fué nombrado por Provincial de la Provincia de Toledo, y se aparejó con unos ejercicios; y de los grandes sentimientos que tuvo de la pobreza, desprecios y dolores de Cristo nuestro Señor

    • Capítulo XLIX

      Cómo llegó por sus grados al supremo de la perfección en el amor de Dios y de las principales virtudes que encierra. Pónense algunos altos sentimientos que tuvo deste amor

    • Capítulo L

      Cómo alcanzó la perfecta resignación y conformidad con la divina voluntad en todas las cosas, prósperas y adversas; y los sentimientos que tuvo cerca de esto

    • Capítulo LI

      De algunas graves sentencias de la resignación y confianza en la divina providencia, sacadas de cartas que escribió a enfermos y atribulados, consolándoles en sus trabajos

    • Capítulo LII

      Cómo se partió a Toledo, y comenzó a hacer su oficio de Provincial, y al cuarto mes murió santamente en Belmonte (Año 1580)

    • Capítulo LIII

      De algunas revelaciones que hubo de su dichosa muerte y de su gloria, y cómo después de muerto ayudó en espíritu a algunos a quienes había ayudado cuando vivo

    • Capítulo LIV

      De la traslación de sus huesos al Colegio de Villagarcía

    • Sermón del P. Rodrigo de Cabredo, S. I. En la traslación al Colegio de Villagarcía de los restos del P. Baltasar

    • Apéndice I

      Algunos documentos espirituales del P. Baltasar

    • Apéndice II

      Algunos avisos espirituales del Padre Baltasar

    • Apéndice III

      Cartas