Al público

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  en Biblioteca Virtual del Banco de la República

Registro bibliográfico

• Título: Al público
• Autor: Ricaurte, Gil
• Publicación original: Bogotá: José Ayarza, 1835
• Descripción física: PDF
• Nota general:
  • Hemos leído con bastante satisfacción un papel que ha dado á luz un amigo, que no dudamos lo sea verdadero, aunque ignoramos su nombre, pues en él manifiesta el grande interés que ha tomado por nosotros, y lo que le han molestado los ultrajes é injurias que gratuita é inmerecidamente nos irrogó el Gobernador Mantilla en la cárcel de esta ciudad.
    
• Notas de reproducción original: Digitalización realizada por la Biblioteca Virtual del Banco de la República (Colombia)
• Notas:
  • Colombia
  • Resumen: f AL PUBLICO. ft/-1 W 44-.3.,2. P2.o63 ( s:) 'H emos leido con bastante satisfaccion un papel que ha dado á luz un .amigo, qu e no dudamos lo sea verdadero, aunque ignoramos su nombre, pues -en él manifie sta el grande interés que ha tomado por nosotros, y lo que le han molestado los ultrajes é injurias que gratuita é inmerecidamente nos irro z ó 0 , el Gobern ador Mantilla en la carcel de esta ciudad. Nuestro amigo ( á quien tributamos las mas expresivas gracias por sus buenos oficios, ) solo se ha impuesto de Jos hechos en jeneral, y así los ha referido; mas nosotros de­- searnos que el p úblico se instruya de los pormenores; con este objeto toma­mos la pluma, y con el de que se conozcan algunos hombres. El Sr. José Maria de la Serna, nuestro apreciado primo y hermano po. lítico, se hallaba en capilla, y era un 'deber nuestro proporcionarle hasta los últimos momentos de su vida todos los auxilios espirituales y corporales. En­tramos la víspera de su muerte en la carcel á procurar que se alimentase, ~ .l levar]e un vestido pa'raque saliese 'al patíbulo con alguna desencia, y á .acornpaña rle un rato. ' E stos pasos que estaban en el órden, y que eran muy propios de nosotros en aqu ellas circunstancias, fueron para Mantilla un deli­. to imperdonable, y quiza nos espusirnos por haberlos dado, á quedar tambien en capilla y al dia siguiente se hubiesen sacrificado dos víctimas mas. Ape­. nas nos v é en la carcel cuando nos dice en un tono grosero y ajeno de una buena cducacion. "Que eramos unos hombres sospechosos, enemigos del gobierno, " dando á entender que inteutabamos sacar el preso , No contento -con sus primeros insultos añade, .~ que proyectabamos darle veneno, y ord ena qu e vijilen mucho para que esto no se efectúe. " Scíior Mantilla, .V. absolutamente no nos conoce cuando se figur6 que pertenecíamos al número de los asesinos, Muy lejos estamos de abrigar ideas san­. guiuarias propias unicamente de hombres viles, vengativos y cobardes. .... N osot ros salvemos ~j . todos sn1JC'11, q:¡ ~ es ' , 111 delito atroz q uitar la vi­da al hombre condenado á muerte antes de la hora design ada para la cjec ucion r vno ignoramos .que esta dl:be · veri ficar se en las pla zas públic as pa­ra que el pueb lo la pr esen cie, pues as í lo disponefermi unntemen tcla ley 11, tit. 3 1 de la partida 7.a qu e imponeal juez qu e lo contrario hiciere, -Ia misma pen a q ue mer ece el que mata {¡ otro á trai cion. : tambi en hemos leido el ar­t ículo 1'16 de la Consti t ucion, y en ·él vemos, qu e solo á los tribunales y j uzgados corresponde, 'h acer ' q u e~ s e ejecute lo juzgádo,y que si los po~e­res Lcjislat ivo y Ejecut ivo no pued en hac er -esto, mucho menos dos ·ciuda­d an os parti cul ar es. Nuestros ·plldres bien conocidos en esta capital, nos en­señaron la moralevanj élica , creemos por '10 'mismo en la espiritualidad ' é ' in­mortalidad de la alma, y no habiamos de ' ser ' tan bárb aros, tan 'crueles 'Y . d esapiadados para privar de la vida v á un cristiano antes 'de hab er conclui­do , su confesion , ' y de haber recibido ' el augusto Sacramento d e' la Euca­ristia, Continuemos la narraciou de ' los hechos. . Era t al el deseo que Mantilla ' tenia de molestarnos, y de agravar las ])enas del Señor Serna, que ' sus 'esprecicnes las vierte en la misma 'Puerta de la Capilla, para que las oyese un-hombre : desgraciado en los últimos' pe­riodos de su vida, y cuando necesitaba -de mayor silencio y tranquilidad . Yá 'le par ecia . que se escapaba -de sus manos la víctima, y ' olvidandose que e ra Goberna dor, usurpa al alcaide sus funciones y las ejerce. Pone luces al frente de la cama para que no ·pudiese dormir: 'hace que se ·levanteu las 'cortinas para privarle del ab rigo, y d á: órde nes ridículas suponiendo que pret endi an sa­ea rle por el tejado. Los mismos oficiales de guardia conocían la prevencion 'con que procedia yse burlaban de Mantilla al oir y ver sus rep etidas neced ades. S eguramente nuestro gobernador fué en ' algu n "t iempo cómitre 6 carcelero en, Jiron cuando es tan 'aficionado al 'ej ercicio de e stos oficios. -T ratar de sosp ech osos á los Ricaurtes, .y suponerlo s -enemigos del Go­b iern o, es olvidarse de los distinguidos servicios ·q ue 'en diferentes épocas ha prestad o la familia á la causa de la ' independencia y libertad . Nuestros her- { 1 l' , manos Felix, é Isidoro perecieron en los campos de batalla en la guerra con Jos E spañoles, y dieron pruebas nada equívocas de su valor y patriotismo. Si hu­bi eran existido en es ta Capita l en el mes de Agosto de 1830, tambi en ha­brian expuesto su vida , y no se hab rian limitado á guardar el mono de la pila, corno lo hicieron a lgunos . Uno de los que suscribimos ha serv ido igua lme nte en clase de oficial en la guer ra de ind ependencia, y ambos cont ribuimss po­derosamente al restablecimiento del actual Gobierno. Despu és de tantos pade­cimientos y habiendo contrahido un mérito positivo, no disfrutamos sueldos de la República, y dedicado el mayor á la car rera del comercio, ha pagado cerca de 5000 pesos al Estado de derechos de alcabala é irnportacion en estos ulti­mos meses, y el segundo dedicado á la agricultura contribuye con las pen­cienes que gravitan sobre esta profecion. Estos son los hombres sospecho­sos y perj udic iales. Al tomar la pluma nos proponemos tambien invitar á la Cámara de Provincia para que usando de sus facultades, escoja indi viduos de esta 6 de c ualquiera ot ra, con ta l que sus virtudes cívicas y morales hagan la feli­cidad de esta Provincia, guardando la circunspeccion y delicadeza correspon­diente al alto empleo de Gobernador. ,Nuestro objeto ha sido igua lmente manifestar al público, el buen comportamiento con que se han conducido los oficiales que entraron de guardia en la cárcel yel alcaide, los que sin faltar á sus deberes y sin comprometer su responsabilidad, no molesta ron á nuestro pariente y antes bien procuraron aliviarle en lo posible. La familia toda se halla muy reconocida y les tributa las gracias, lo mismo q ue al Seño r J efe Político de l Cantan. Cua nto se ha dicho en este papel esta mos prontos á justificarlo, y lo sostendremos del modo que se nos exija. Bogotá Abril 27 de 1835. Gil Ricaurte. Bartolomé Ricaurte. BO$ot6.-Impr. por José Ayarza.-1835.
  • Resumen: Carta; Condena condicional; Delitos contra la persona; Difamación; Injuria; Reclamaciones
  • Dominio público
• Forma/género: unidad documental
• Idioma: español
• Institución origen: Biblioteca Virtual del Banco de la República
• Encabezamiento de materia:
  • Generalidades; Generalidades / Colecciones generales; Ciencias sociales / Problemas y servicios sociales - asociaciones