El comercio del Cauca i el contrabando por el Caquetá: Noviembre de 1880

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Registro bibliográfico

• Título: El comercio del Cauca i el contrabando por el Caquetá: Noviembre de 1880
• Autor: Restrepo, Juan de Dios
• Publicación original: Bogotá: Imprenta de Gaitán, 1881
• Descripción física: PDF
• Notas de reproducción original: Digitalización realizada por la Biblioteca Virtual del Banco de la República (Colombia)
• Notas:
  • Colombia
  • Resumen: Por su inmensa importancia de actualidad; por sus concluyentes e irrefutables demostraciones; por la fuerza de razonamiento que contiene la hoja volante que con el título que encabeza estas líneas ha publicado el ilustrado señor doctor Juan de Dios Restrepo, creemos conveniente su reimpresion.
  • Resumen: \ J EL COMERCI0 DEL CAueA 1 EL CO'. N!T RABANDO 1~5'111:t5 Bogotá, 28 de marzo de 1881. Por su inmensa importancia de actualidad; por sus concluyentes e irrefutables demostraciones; por la fuer­za de razonamiento que contiene la hoja volante que con el título que encabeza estas líneas ha publicado el ilustrado señor doctor Juan de Dios Restrepo, creemos conveniente su reimpresion. En el Congreso se discute la grave cnestion que elucida el trabajo del señor Restrepo. El Oongreso va ----allecidir de la suerte del comercio del Canea, del por­venir del ferrocarril de Cali a la Buenaventura, de la renta de aduanas, del comercio en gran parte. Jamas estnvieron en debate tan grandes intereses; i es de es­perarse que el ilustrado Congreso de Colombia haga prevaLGcer, en sus sabias determinaciones, los verda­deros intereses na~ionales, sobre los de entidades par­ticulares que, en el caso actual, son antagónicos en aquellos. La hoja aludida dice así: El Presidente de la República por decreto de 22 de octubre en Panamá, ha concedido al señor RaDtel Réyes esencion de derechos.Ae importacion a las mercancías que se introduzcan por e~ Caquetú.a los .municipios de Pasto, Túquel'res i Obando, por cI.nco años 1 medIO; por un año mas pagando 25 por ciento i por otro pagando el 50 por ciento. ' . Lo~ ~eño'res Réyes, (el a:~unto es tan grave que no pode­mos omItir 10s nombres propIOS), no han podido hacer nada en el Caquetá con el negocio de quinas sino arruinarse, apesar de toda su actividad i enerjía. H ace tiempos que su principal objetivo ha sido conseguir franquicias para introducir mercan­cías en gr/1nde escala, sin aduanas se entiende. El permiso que tenían para introducirlas para el camino del territorio del Caquetá que consumirá 500 o 1,000 pesos al año, no los satisfacia naturalmente. Pero ellos no pecan por timidez, i sen por sorpresa o por falta de estudio en la materia, recabaron del Gohierno un radio de introduccion sin derechos a tres grandes municipios, o sea a cien mil habitantes. Esto es algo demasiado, como dicen los franceses, pero no sirve sino parn. abrir el apetito. Si ¡el contrabando por Carlosama, contrabando grosero, ,no se puede impedir en lo mínimo, i cómo se impedirá que ~Ínercancías que llegan legalmente a los alrrmcenes de Pasto, desborden sobre toda la Repüblica '7 ¿ Cómo locali¡mr i distin­guir las que vienen por el Caquetá, de las introducidas por . Tumíl.co o compradas en cualquiera otra parte? ¿ Quién im­pide que los enormes cargamentos de anis, de mercancías pastusas i ecuatorianas vengan a Popf1,yan rellenas de mercan­' nías de quinta clase? Decir, como dice cándidamente el de­, treto ejecutivo, que se tomarán medidas para que las mercan­, as ~ntroducidas, por- el Caquetá, no invadan su radio de constil' ""':l; dBcir esto es provocar una esplosion de risa a toda l?el's9"~a Ejue tenga la menor sospecha de c6mo marchan las "Io.k'.l1Ís i c6mo se vijilan los contrabandos en el sur del Cauca. ( Queda pues sentado como cosa incuestionable que los . señores Réyes introducirán a Popayan i por consiguiente a l centro de la República, todas las mercancías que les dé la gana. Pedimos a nuestros lectores un poco de atencion. Con los actuales enormes derechos de aduana, una carga I de merc.ancías de quinta clase, de zarazas por ejemplo, de peso ~de 75 kIl6gramos el bulto, carga corriente, pagfl. introducida a Cali: Derechos de la Nacion . . ............... $ 90 .. " del Estado ........... , . . . . . . 15 .. Gastos a Córdoba. .. ..............•... 4-30 Flete... . .. .. ... . . ... ....•........•• 8 .. , . $ 117-30 \_ Los señores Réyes haciendo una mediana. trocha de bueyes,- vale la pena de gastar algo, ..::. ponen esta carga. en Po­¡ \payan con $ 25, o para que no haya diacueion, eupongamos 30. I . - \ POR EL CAQUETÁ. A H{>" g3 6 J . . (lV-l' Aun sm ca mm o, con unapoblacion enorme de robustos i baratísimos cargueros, pueden poner 2 o 300 a arrastrar mer­cancías a Pasto, i no les saldria en Popayan a más de $ 30 la car~a. Con $ 5 más de los 30, ponen su carga de zarazas en Cah; con 11 sobre los 30, en Manizáles' con 10 sobre los 30 en el Tolima; con 15 en Honda i con 20 en Bogotá o en Ba~ rranq ui Ila. . Partimos ~el princ~pio que no tendrán los señores Réyes el. mal gusto, m la candIdez de pagar derechos al Estado del Cauca, como no los paga,n los contrabandistas de Carlosama. Pueden pues traer su carga de zarazas a Cali con $ 82 ménos que los majaderos que intl'oduzcan por Buenaventura. 1 con 70, 60 o 50 ménos respectivamente al Tolima Cundi­namarca, Antioquia i Bolívar que los introductores' por el Atlántico a esos Estados. . ~ uestros lectores verán que ' el negocio tiene algun por­vemr 1 que no es enteramente desagradable. 1 no Se hará con los :ecul'sos limitados de los señores Réyes sino con fuertes c.aprtales de casa.s de los Estados U nidos o Europa. . ConsecuencIas probables de la proteccion al territorio del Caquetá: Regalía a los señores Réyes de los derechos de aduana que deben pagar tres grandes municipios, o sean $ 30 o 40,000 al año. Anula~?n completa ~e la aduana de Tumaco. Entrega a esa compama del comercIO del Cauca, al mén02 en los artículos que pagan quinta clase, que constituye las tres cuartas partes de los derechos de aduana. 1 supresion de recursos para el ferro carril. Desfalco para el Gobierno del .Estado de su principal renta. . Ruina de Buenaventura i de Cali, que viven esclusiva­mente del comercio, i de los variados negocios que éste pro­porciona. 1 ~Itirnamente, si casi la totalidad dd comercio del Cauca no H<Llu:lfu.ce la amhicion de ios seno res del Caquetü, pueuen hacer una competencia t rionfánte i ruinosa :.1 comercio en el Tolúna, Antioquin., Cundinamarca i Bolívar. En l~ que ménos se piensa es en colonizar el Caquetá, ni f~n~ar alh nada: se ~a tratado. de esportar la quin¡t recojida, IIquIllar la compañía 1 abandonar esas comarcas. Roi con el decretico del 22 de octubre, la empresa tiene horizont~s radio­~ os. Las acciones se venderán pronto en los Estado.~ Unidos, 1 el halago para la venta, - hai que llamar las cosas por sus nombres,- s:r,á el con~rabando. jign.ntesco que se puede hacer de meJ'canClas, con el apoyo lllvoluntal'io, pero re¡d i \'fectivo del Gobierno. En valles remotos i desiertos, con climas ardientes i 11101'­tíferos, p~e~ender pl'eci pitar poblaciones por rne d io ~ art.ificiales es un delJrl~ : a esas comarcas les,l!eg:uá su hora de progrí:'so ; no es todavln. En u n Estado vashsmIO como ' el Cauca donde abundan bn.ratísirnos terrenos sanos, de condiciones admirables ?on. una l?o~l~lcion relativamente peq ueña, solo las fieras i lo~ mdlos prlmltIvos pueden .ha~ita~ el Caqu~tá . Tfl.mpoco puede fund.arse r:ada en un terntorIO smo con mdustrias permanen­tes, .Imposlbles allí por los altos jornales i sus condiciones re­calcItmntes. La esplotacion de riquezas naturales como el caucho i la quina, con nuestro sistema salvaje de cortar los árboles, atraen alguna poLlacion miéntras estos árboles se agoten: concluidos que sean, todos recojerán sus tiendas de campaña, i quednrá como ántes la eterna soledad del desierto. El señor Hurtado, en cuya honradez i lealtad como ad­ministrador de los intereses públicos te nemos plena' confianza, sabemos que se ha opuesto a que se estienda la franquicia de mercancí~s a mas del territorio del Caquetá: la mayor parte de los SOCIOS de esta compañía no se han mezclado en este asunto, i sus intereses están en que no se arruine el comel'cio de Buenavent~ra. Esta operacion, majistral como negocio, la c~eemos escluslva de los señores Réyes, a quienes no hacemos nmgun c?:~go : . están en su ~erecho: a ellos nadie les paga porque vIJllen 1 defiendan los mtereses nacionales. Cali, noviembre de 1880. JUAN DE D. RESTREPO. 11lPRlIlNTA DE GAITAN. --:-
  • Resumen: Contrabando; Comercio; Legislación; Evasión; Volantes
  • Dominio público
• Forma/género: unidad documental
• Idioma: español
• Institución origen: Biblioteca Virtual del Banco de la República
• Encabezamiento de materia:
  • Generalidades; Generalidades / Colecciones generales