La Fama, y sus clamores representan la Admiración, y Expectación de Europa a vista de una Empresa tan fuera del Humano discurrir.
El no atender Jacinta a las noticias, y Historias con que su Padre procuraba divertirla, declara, que sólo atiende, y gusta de Sucesos Amorosos quien tiene Amor, estando violento en todo lo demás.
La Tempestad que luego se forma espantosa acuerda las Penas, y Angustias, en que este poderoso Afecto hace fluctuar los Amantes. La Isla verde de la Esperanza, donde encuentran algún alivio, y a cuyo abrigo sepultados en el Letargo de su Enajenamiento, se sueñan algún rato entre felicidades, con los falsos bienes de su Pasión que sólo tienen de verdaderos el Pesar con que atormentan al desvanecerse.
Muéstrase verosímil con este naufragio, lo que muchos pensaron de que hubiese Colón registrado antes aquel Orbe nuevo, llevado allá por semejantes impaciencias de las Ondas; Opinión que tiene apoyo en muchos Autores de gran Crédito.
Advierto aquí, que en las antecedentes dilatadas Navegaciones de Colón, quiere introducir el Poeta, que yendo por el Mar Atlántico se le aparece una inteligencia, y le dice: Ahora estás sobre una de las principales Cortes desta grande Isla hundida, la cual llegando a merecer el último enojo del Cielo la sumergió Dios, conservando en el fondo milagrosamente sus edificios, y dándole por castigo que estén ejerciendo debajo de las Ondas las Acciones que le merecieron esta ruina, con el conocimiento de cuán malas son. Y diciendo esto se hace más diáfano el Mar, y ve Colón sus Casas, Ejércitos, Armadas, etc. y las causas porque se pierde un Imperio.
El Nuevo Mundo
Poema Heroico de Don Francisco Botello de Moraes y Vasconcelos.
1 | ||||
Dilatose en el Aire, como el Lino | ||||
el Ruido, el Humo, y Voz de los metales, | ||||
con que el dejar la Tierra el Ligurino | ||||
rompe aún tiempo de Favonios, y Cristales. | ||||
Resonó el Oceano; Cual vecino, | ||||
bramar fueron de Atlante estruendos tales; | ||||
y en fin llegó el Rumor que alto se inflama | ||||
al alcázar y Oídos de la Fama. |
2 | ||||
Tiene Esta su Palacio y Mansión digna | ||||
(donde nunca el Olvido entró siniestro) | ||||
puesta en el Aire; allá donde confina | ||||
con el Celeste Mundo el Mundo nuestro. | ||||
En densos globos de Vapor que afina | ||||
sus cimientos dispuso Estudio diestro, | ||||
donde movible, oh grande Alcázar, subes | ||||
sobre volantes Cáucasos de nubes. |
3 | ||||
Raro es el Orden, rara la Estructura | ||||
desta alada Mansión que el Viento alista, | ||||
y rara la Materia en quien se apura | ||||
en vano de los ojos la conquista. | ||||
Cristal parece. pero aún es más pura; | ||||
congelado Aire se negó a la Vista; | ||||
y Base, Frisos, Arcos y Todo hermoso, | ||||
es deste No sé qué maravilloso. |
4 | ||||
Como en Sueño al Pensamiento humano, | ||||
que en él se usurpa a los Desasosiegos, | ||||
muestran mal diciendo Alcázar vano | ||||
Combinaciones de Fantasmas ciegos; | ||||
O cual las Nubes en el Viento ufano | ||||
forman dudosas Torres sin sosiegos, | ||||
pretendiendo en sus densas Tropelías | ||||
ser las Casualidades Simetrías; |
5 | ||||
Así mal divisado Estotro Existe; | ||||
mas tan sólido y fuerte se celebra, | ||||
que el Bronce ante él es Cera que desiste; | ||||
Las Cordilleras de Alpes, fácil Hebra. | ||||
Sus acerados Dientes, cuando insiste | ||||
en roerle el Cimiento, el Tiempo quiebra; | ||||
y pierde, conspirando a hacerle daños, | ||||
Catapultas de Siglos, Huestes de años. |
6 | ||||
Todo está desgarrado en partes cientos | ||||
con Ventanaje y Pórticos el Muro; | ||||
De Orificios se criba el Pavimento; | ||||
Más es Red, que Palacio, el que aseguro. | ||||
No es tan abierta la Extensión del Viento; | ||||
Y solo sirvió en ella el Lienzo puro | ||||
para hacer que se viese sin desaire | ||||
en más roturas más patente el Aire. |
7 | ||||
No hay Puerta alguna en Pórtico o Ventana; | ||||
y en vez della em Columnas tiene presos | ||||
Biombos de Papel que da en su Plana | ||||
los Poemas más célebres Impresos. | ||||
Y como en nuestro Oído la Membrana | ||||
del Tímpano hace el son, así en excesos | ||||
crece cualquiera Estruendo allí descrito, | ||||
y Ecos innumerables grita un Grito. |
8 | ||||
Calle los Ecos de Lucrecio el Mundo; | ||||
Los Ruidos de Elis mil; y el Hueco Aonio; | ||||
De nueva admiración a este fecundo | ||||
sonante muro Antiguo Testimonio. | ||||
Todo rumor del Orbe y del Profundo | ||||
por las diáfanas Fauces del Favonio | ||||
es siempre un Soplo que hace en voces puras | ||||
los Albogues sonar destas Roturas. |
9 | ||||
De mil locuaces Turbas voladoras | ||||
están llenos los Atrios y las Cuadras; | ||||
Vuelan mezcladas las Engañadoras | ||||
Voces, y Verdaderas, en escuadras. | ||||
Con la Credulidad a todas horas, | ||||
sin Autor, o susurro infiel, taladras | ||||
sus estancias; siempre habla sin reposo | ||||
el Error temerario, el Gusto Ocioso. |
10 | ||||
Va la Curiosidad, y con exceso | ||||
para mil Corros ver, distancias corta; | ||||
la Admiración, donde hay mayor suceso, | ||||
arqueadas las cejas queda absorta. | ||||
Busca el Aplauso, el Triunfo de más peso; | ||||
la Poesía a imitar lo Sumo exhorta; | ||||
y examina la Historia, dando leyes, | ||||
Virtudes ya, ya Infamias de los Reyes. |
11 | ||||
En la parte exterior del Edificio, | ||||
que remata en un Globo de Topacio, | ||||
descansa de su rápido ejercicio | ||||
tal vez la Reina deste gran Palacio; | ||||
De su rostro el Relámpago propicio | ||||
huyen las nubes a distante espacio, | ||||
cual huyen de la Aurora el lucimiento | ||||
los nocturnos Escándalos del Viento. |
12 | ||||
Pisa la hermosa Bola; y la Pureza | ||||
del blanco pecho al Céfiro entregada, | ||||
(en acción de volar) la ligereza | ||||
de sus Plumas mereciendo está templada. | ||||
A cualquier ruido vuelve la cabeza; | ||||
y en la punta del pie toda librada, | ||||
hacia la parte del rumor se explica | ||||
inclina el Cuerpo, y el Oído aplica. |
13 | ||||
Apenas llegó aquí el Sacro Celo | ||||
de Colón, y su Empresa el Noble ruido, | ||||
luego la Fama para honrar el Suelo | ||||
cayó del Globo al Aire esclarecido. | ||||
No tan sólo los ímpetus del Vuelo, | ||||
más aún Beldad le aumenta aquel Sonido: | ||||
parecía cuajarse Venus suma | ||||
del Golfo Vano en la Invisible Espuma. |
14 | ||||
Menos bella Corinto Misteriosa | ||||
(de Eterno florecer Tempe inconstante) | ||||
buscando el Templo de la mayor Diosa | ||||
fingió la Descendencia de Taumante. | ||||
Menos de Arabia al Ave portentosa | ||||
del gran Nilo la bruma ve espumante | ||||
acreditar en Pompas sucesivas | ||||
reiteradas las Horas fugitivas. |
15 | ||||
Jamás tanta Hermosura floreciente | ||||
hospedaron los Céfiros risueños; | ||||
parecía batir, Flora luciente, | ||||
por Pluma fragrantísimos empeños. | ||||
Nunca (sembrando a rosas el Oriente) | ||||
con Alas de Arreboles halagüeños, | ||||
Triunfa tan dulce de la Noche fiera | ||||
el Hipérbole hermoso de la Esfera. |
16 | ||||
Purpúreo al claro Monstruo defendía | ||||
un Velo en quien Oídos, Lenguas, y Ojos | ||||
tejió el Destino; hidrópica bebía | ||||
la Trompa aliento de sus Labios rojos. | ||||
Era Bajel del Euro, que impelía | ||||
de su Pelo y su Púrpura despojos; | ||||
Remos las Alas son que explaya el Vuelo; | ||||
el Cabello Fanales; Vela el Velo. |
17 | ||||
Más que nunca en Carrera portentosa | ||||
rasgó el Noto su impulso arrebatados | ||||
y más que nunca se vertió armoniosa | ||||
toda en Soplos al Bronce enmarañado. | ||||
Si al hinchado Semblante ardiente Rosa | ||||
añadía su Aliento violentado, | ||||
se hacen del Rapto en las agitaciones | ||||
los Astros de su Vista Exaltaciones. |
18 | ||||
Suspirando ambicioso en Solio inmune | ||||
tener el Austro tantas Claridades, | ||||
porque en fluidas sendas se desune | ||||
culpa sus infelices Raridades. | ||||
De aves inmensas en la escuadra, que une | ||||
excesivo el Primor de sus Beldades, | ||||
turban (siguiendo el ínclito Portento) | ||||
Babilonias dulcísimas el Viento. |
19 | ||||
Por donde en Vuelos doran centelleantes | ||||
sus Plumas el Favonio esclarecido, | ||||
en sucesos las Trompas incesantes | ||||
llueven inundaciones de Sonido. | ||||
Repiten las Frondosas las Undantes | ||||
grutas de Tierra y Mar el Sacro ruido; | ||||
y aún lo duplica en el indeficiente | ||||
Convexo Azul la Bóveda Luciente. |
20 | ||||
De Colón generoso los Intentos, | ||||
de la Española Hueste la alta suma, | ||||
y el inmenso Oceano en sus alientos | ||||
dispara el Monstruo de Sonido y Pluma. | ||||
Ya en agudos, ya en Ásperos acentos | ||||
Armas, Naves, Ejércitos, y Espumas | ||||
son Víboras que en Voz rasgan entonces | ||||
las cóncavas Entrañas de sus Bronces. |
21 | ||||
Ni olvida de Fernando, que esclarece | ||||
a España, en tanto Auxilio inmensa Gloria; | ||||
Fernando, que en sagrada Lid merece | ||||
desta Gloriosa Unión la Real Victoria. | ||||
En todo el Orbe grande pasmo crece; | ||||
previene altos Aplausos la Memoria. | ||||
Así la Fama vuela hermosa, en cuanto | ||||
de la Paz besa Iberia el Rostro Santo. |
22 | ||||
Puesto glorioso término a la Guerra | ||||
que ahuyentó tanto tiempo el Ocio blando, | ||||
a gozar bienes que la Paz encierra | ||||
despidió sus Ejércitos Fernando. | ||||
Ya del Campo el Asombro se destierra; | ||||
Y la Yerba levanta respirando | ||||
el verde Cuello, que perdía renombres | ||||
pisado de Caballos, Carros, y Hombres. |
23 | ||||
Del Pecho y de la Frente desasidos | ||||
los Yelmos, y la Malla se advertía; | ||||
como en la Espada ociosa estar dormidos | ||||
los ceños que inquieto Belona impía. | ||||
El Hijo y el amante enternecidos | ||||
llevan en su presencias alegría | ||||
a la Madre y la Esposa, en quien ha tanto, | ||||
sus Osadías murmuraba el Llanto. |
24 | ||||
Quien ansioso a abrazar corre el Amigo | ||||
que en su ausencia hasta allí vivió infelice; | ||||
quien a la Dama cuenta, en el abrigo | ||||
del Lecho, hazañas de su lid felice; | ||||
cual pondera el Valor del Enemigo; | ||||
y cual, para explicarle en lo que dice, | ||||
pinta el Campo, el Ejército, o la Almena | ||||
con la Espada (ya báculo) en la Arena. |
25 | ||||
A las aras se pagan reverentes | ||||
Ofrendas que de Marte en los enojos | ||||
enseñó el Riesgo a la Piedad, pendientes | ||||
visten la Pared Sacra altos Despojos. | ||||
Sobre las ricas Lámparas ardientes | ||||
con globos que hace el Aura en sus arrojos | ||||
ondeaban ya (sin Bélicos afanes) | ||||
nuevo humo de la Luz los Tafetanes. |
26 | ||||
Guillelmo, anciano, entre otros victorioso | ||||
pagar rendido un Voto procuraba | ||||
que de la Virgen Madre hizo piadoso | ||||
a un Templo en que Alta Cádiz la adoraba. | ||||
Málaga deja, donde El Rey su honroso | ||||
Esfuerzo con Haciendas mil premiaba; | ||||
hallose en su Conquista El gran Guillelmo: | ||||
Marcial su Edad encaneció en el Yelmo. |
27 | ||||
Mas no dejar de Málaga las Playas | ||||
pudo sin la Hija en quien vivió felice. | ||||
Quiso (oh Jacinta) que en la Nave vayas | ||||
y tu Esplendor los Piélagos matice. | ||||
Jacinta, a cuya vista (oh Sol) desmayas; | ||||
de Carlos dulce Ardor, si ya infelice | ||||
le era Noche en la Ausencia, ardiendo enojos, | ||||
la sombra de las Luces de sus Ojos. |
28 | ||||
A su Belleza en misteriosas calmas | ||||
añade la Poesía y lo Entendido; | ||||
de Esmirna y Mantua competir las palmas | ||||
se ve en su Plectro acierto repetido. | ||||
No, por mostrar no hay Sexo entre las almas, | ||||
Safo así pisó el Monte que es, florido | ||||
[manando Discreción y Eternidades] | ||||
terreno Impíreo en líquidas Deidades. |
29 | ||||
Y otro Encanto en su Voz [que del más rudo | ||||
peñasco árbitro suena] se atendía. | ||||
Las aves enfrenó, suspendió el mudo | ||||
Pueblo absorto del Agua su Armonía. | ||||
Con su Rumor callar el Cielo pudo; | ||||
y el Mundo olvidar Pasmos que fingía | ||||
movieron por distintos Horizontes | ||||
los Monstruos fríos y los Tirios Montes. |
30 | ||||
También Fadrique, de Guillelmo hermano, | ||||
los sigue; y Padre de Leonor, la Dama | ||||
que de Jacinta y Carlos, el tirano | ||||
Afecto supo y amorosa llama. | ||||
Mas Leonor no acompaña al Tío anciano, | ||||
porque faltó, y noticia o leve fama | ||||
della no hubo, después que al gran camino | ||||
se ausentó de Iberia al Ligurino. |
31 | ||||
¿Qué no hizo el Padre Noble? ¿cuál despecho | ||||
no lo encendió? Mil medios inquiría. | ||||
Obró (mas siempre en vano) cuanto un pecho | ||||
generoso en suceso tal debía. | ||||
Desesperado en fin, no satisfecho, | ||||
su Discurso al del Tiempo el vuelo fía; | ||||
y reprimiendo el grito de su Agravio | ||||
es Dedo el Juicio, del Silencio al labio. |
32 | ||||
Es prudente Fadrique; ni desprecia | ||||
el Rey su acierto y brío en la Campaña; | ||||
y aunque los libros no trató, se aprecia | ||||
de Estado en el alta Experiencia extraña. | ||||
Por eso Embajador fu ya en Venecia; | ||||
y fiel Mercurio lo atendió de España | ||||
la siempre Augusta con triunfal Destino | ||||
grande Reliquia del Honor Latino. |
33 | ||||
Los dos Hermanos pues, con la Hija bella | ||||
buscando Cádiz Málaga dejaban; | ||||
dormía el Mar; la Nave atropella | ||||
de vidrio Obsequios que sus Breas lavan. | ||||
Todo el velamen del Bajel descuella | ||||
que altas preñeces cóncavas hinchaban: | ||||
del Soplo más fecundo y más benigno | ||||
pródiga Inspiración concibió el Lino. |
34 | ||||
Ya dentro allá del Mar los divertía | ||||
de su Cerúlea tez la alta belleza; | ||||
Sólo a Jacinta amor entristecía | ||||
y a Fadrique ofendida su Nobleza. | ||||
Guillelmo, opuesto a su melancolía, | ||||
grande Conversación discreto empieza: | ||||
allá (dice) está ahora el Clima Hispano, | ||||
y acá la Libia a la siniestra mano. |
A África vasta, donde inunda errante | |||
un Despueblo arenoso mil regiones, | |||
de su Obelisco es Zócalo espumante | |||
La Sal Mediterránea a los Triones. | |||
al Ocaso y al Austro del Mar de Atlante | |||
y el de Etiopía baña sus mansiones: | |||
sus Latitudes que alto incendio exhalan | |||
las Gorgones y Arómata señalan. |
36 | ||||
La Cumbre es el riscoso Tormentorio | ||||
que halló del Luso la obstinada Entena | ||||
del Mar de Hércules a este Promontorio | ||||
su Longitud vastísima se llena. | ||||
A romper va el Bermejo Mar notorio | ||||
un Istmo que con Asia la encadena, | ||||
un Istmo que con Asia la encadena, | ||||
y en Suez trunca absorto al curso el hilo | ||||
bramar oyendo en fauces siete al Nilo. |
37 | ||||
Desta del Mundo tercer Parte ardiente | ||||
me dio un Moro noticia peregrina. | ||||
Madagascar grande Isla hacia el Oriente | ||||
el Trópico del Austro le domina. | ||||
Lagos mil, Profundísima corriente | ||||
de Ríos la atención allí examina, | ||||
hinchadas Venas donde el Clima abona | ||||
la eterna Fiebre de su ardiente Zona. |
38 | ||||
En Minas de Oro la peor encierra | ||||
Peste de cuantas en sus Orbes crecen; | ||||
tiene Piedras preciosas; que en su tierra | ||||
ardiendo los Peñascos, resplandecen. | ||||
No sólo peregrino se destierra | ||||
el Pueblo que los Cielos le ennegrecen; | ||||
aún vaga el Campo allí; vuelan extrañas | ||||
con las Sierpes en Montes las Campañas. |
39 | ||||
La Noticia que más deleitó afable | ||||
mi Oído, es cuando a hablar se determina | ||||
de la fuente en que nace la admirable, | ||||
Fecundidad de Egipto cristalina. | ||||
Buscando este Secreto sudó instable | ||||
la Persiana ambición, Griega, y Latina: | ||||
curiosidades mil ahogo profundo | ||||
en una fuente que no había, el Mundo. |
40 | ||||
De Séfotris fue digno el soberano | ||||
Intento; y del que uncía no diverso | ||||
Reyes al eje; inquiéralo el Romano, | ||||
Farsálica Inquietud del Universo. | ||||
¿Qué es ver cuando se escupe y llega ufano | ||||
al gran Mediterráneo en cristal terso | ||||
de un Río a siete bocas sucesiva | ||||
ser muchos Mares pródiga saliva? |
41 | ||||
¿Qué es ser vueltos en lluvias los raudales | ||||
(del Cielo haciendo a Egipto independiente) | ||||
Nembrot de sí en sus Torres de Cristales | ||||
introducir lo Undoso a Omnipotente? | ||||
Que es del Julio en los hórridos fanales | ||||
fabricarse su Invierno su Corriente? | ||||
De no agotar sus fértiles diluvios | ||||
late el celeste Can rabia en Vesubios. |
42 | ||||
Del Reino de Goiam lindes apura | ||||
la Provincia de Agaos, que al nacido | ||||
Fénix de vidrio mece en grama pura: | ||||
Sabala es de la Tierra el apellido. | ||||
Hínchase en grande monte la llanura | ||||
de espesísimos árboles vestido; | ||||
dando la Primavera en risco hermoso | ||||
Recatos verdes al Misterio undoso. |
43 | ||||
En la más alta y más frondosa cumbre | ||||
(a dos pies cada diámetro no llega) | ||||
cela breves dos fuentes la techumbre | ||||
del gran Boscaje que el Favonio anega. | ||||
No sale el agua; mas la escasa lumbre | ||||
sólo mira, que el Bosque allí le entrega; | ||||
abriendo (a ver si es bueno aquel ambiente) | ||||
los Párpados de un Césped floreciente. |
44 | ||||
Llena de agua la altísima Montaña | ||||
casi se hunde al tocarla los Mortales: | ||||
sin duda, allá en sus Golfos, de la extraña | ||||
floresta las raíces son Corales. | ||||
Trémulo el Monte, en senos inmortales | ||||
que en fecundas pinturas la Destreza | ||||
a la gran Madre da Naturaleza. |
45 | ||||
L'África lo publique de ondas llena; | ||||
que, en vez de blanca sangre en cándido hilo, | ||||
bebe sediento el labio de su arena | ||||
al pie del Monte derramado el Nilo. | ||||
Aves mil de Cristal después su Vena | ||||
siguen, mirando que en monstruoso estilo | ||||
renace el Mar con espaciosas Plumas | ||||
del gran Vistoso Pájaro de espumas. |
46 | ||||
Rompe el Lago de Bed; y inquiero luego | ||||
su curso encuentra, y vuelve hacia su Fuente, | ||||
como que a morder vuelva, Dragón ciego, | ||||
sus Ondas porque impelen su Corriente. | ||||
Por vastos climas lleva el vasto Riego | ||||
cerca de su gran Cuna floreciente, | ||||
mas no halla al fin el Monte en que ha nacido, | ||||
en los ardientes Páramos perdido. |
47 | ||||
Va a la interna Etiopía, discurriendo | ||||
sus broncos Reinos que el Zenit infama, | ||||
donde en sudor, el rudo Pueblo ardiendo, | ||||
verdinegros aljófares derrama. | ||||
Ya en estrechas canales que abre horrendo, | ||||
como los Tigres de su margen brama, | ||||
ya rápido gran sierra en que borbolla | ||||
despedazada en mármoles arrolla. |
48 | ||||
Ya en los Campos se explaya; todo un Clima | ||||
a un Egeo [sin margen] corresponde; | ||||
y manto de Cristal, por que no imprima | ||||
su rabia el Sol, una Provincia esconde. | ||||
Venle el Cirrheo; y el que en Patria opima | ||||
ya el Ébano o Marfil arranca; y donde | ||||
son las flechas [que allí ponen sus gentes]. | ||||
Cólera aparatosa de las frentes. |
49 | ||||
Busca Méroe; los Blemias baña fieros; | ||||
a Siéne llevar sus ondas quiere, | ||||
y prófugo, en diluvios extranjeros, | ||||
de ajeno Mundo extraña Zona inquiere. | ||||
Corre el Cancro donde África, en severos | ||||
arenales y polvo, triste aún muerte, | ||||
pues copiando en color la onda Eritrea | ||||
[que de Asia la divide] bermejea. |
50 | ||||
Fertilizando al fin Egipto ufano | ||||
muere en sus Bocas que hablan tanto al Mundo. | ||||
Linde al Mediterráneo el Oceano | ||||
es aquí, y allá el Nilo sin segundo. | ||||
Mas no lo he dicho bien; truncan el vano | ||||
Jaspe al Mediterráneo Mar profundo, | ||||
de aquella parte con soberbio estilo | ||||
siete Oceanos, y de estotra un Nilo. |
51 | ||||
Dijo Guillelmo: Mas ya en la alta Popa | ||||
al Estrecho ancho en fama se acercaban | ||||
donde del Mundo (la África y Europa) | ||||
dos Partes en un Piélago se lavan. | ||||
Aquí (Prosigue) con su undante Copa | ||||
a España y Libia que antes se enlazaban | ||||
sus dos Zonas el Mar partió interpuesto, | ||||
Trópico de Cristal al Cancro opuesto. |
52 | ||||
Tanto puede la Edad: Así sin duda | ||||
la Propóntide, de Asia nos separa; | ||||
y así y de la gran Bota desanuda | ||||
parte del pie en Sicilia, Tetis clara. | ||||
En Eubea, en Bitinia, en la ya muda | ||||
Leocosia, y en mil partes con la lid rara | ||||
discorde el Mundo amigo hacen las solas | ||||
espumantes Cizañas de las Olas. |
53 | ||||
Mira el Abila y el Calpe (que hoy divides | ||||
oh Mar) cada uno un Mundo en monte aunado; | ||||
Columnas (vocal puerta las dio Alcides) | ||||
del Oceano al Pórtico erizado. | ||||
Broncos se miran, amagando lides; | ||||
y como antes de paz mano se han dado | ||||
la Tregua rota por Provincias bellas | ||||
ascienden a honestar con las Estrellas. |
54 | ||||
Ceuta allá ves, (del Lusitano Aliento | ||||
gran Conquista en piadosas Guerras duras) | ||||
Que de Abila a la Cumbre dando aumento | ||||
es peñascoso Airón de Arquitecturas. | ||||
Porque el Sol no temiese otro ardimiento | ||||
viendo elevar sus riscos, le son puras | ||||
al Sol las cinco Quinas fieles Martes; | ||||
las cinco Zonas Foso a estos Baluartes. |
55 | ||||
Mira Alcázar, y Tánger que glorioso | ||||
su nombre a esotra parte difundiendo | ||||
va de la Mauritania que el famoso | ||||
Medo en la antigua edad dominó horrendo. | ||||
Aquí en el Huerto Hesperio misterioso | ||||
la Fábula en la Libia entra queriendo | ||||
Ramos de Oro a la puerta dio lucientes | ||||
dese Averno de Tigres, y Serpientes. |
56 | ||||
Es el Reino de Fez el que eriza | ||||
riscoso hacia el Estrecho, y tierra Hispana; | ||||
Lo aparta de Marruecos la onda riza | ||||
de Umarabia, al Ocaso en Vega llana. | ||||
Umarabia, que en giros se desliza | ||||
al Mar de Atlante, Víbora Africana; | ||||
y entre las peñas que humedece opimo | ||||
verdes Camisas da de musgo, y limo. |
57 | ||||
Otro linde a este Reino es al Oriente | ||||
del pródigo Malúa la onda fría; | ||||
otro el Atlante al Austro, que impaciente | ||||
de allí a Numidia sus peñascos guía. | ||||
Numidia, que con Sangre antiguamente | ||||
impartible el Imperio escribió impía: | ||||
De su Cetro la línea fue importuna | ||||
un Bárbaro Renglón de la Fortuna. |
58 | ||||
Mira (prosigue) las Victorias | ||||
del Berberisco en nuestro monte horrendo, | ||||
donde el grande Alcides las memorias | ||||
en la célebre Heraclea están viviendo. | ||||
Aquí muchas clarísimas Historias | ||||
la Antigüedad obscura confundiendo | ||||
al Papel destos montes cuajó extraños | ||||
Borrón de Siglos con Diluvios de Años. |
59 | ||||
Juntó (cegar queriendo el Golfo) activo | ||||
Hiraclis destas Sierras los descuellos. | ||||
¡Oh error! Dos Montes en un Pecho altivo | ||||
caben, y aun cupo la Ambición con ellos. | ||||
Por Monte de Tarif después nocivo | ||||
es Gibraltar el Calpe: A muchos Cuellos | ||||
yugo imponer le vio Nuestro Horizonte; | ||||
y hoy su Nombre es fatal, coyunda al Monte. |
60 | ||||
............................................................ | ||||
............................................................ | ||||
............................................................ | ||||
............................................................ | ||||
............................................................ | ||||
............................................................ | ||||
............................................................ | ||||
............................................................ | ||||
............................................................ |
81 | ||||
Mas ya de Trafalgar Montado el Cabo | ||||
(Dejando el de Espartel a la siniestra) | ||||
el Oceano dividían bravo | ||||
costeando por su humor la Hesperia nuestra. | ||||
Dejan mil Pueblos que a l rueda el clavo | ||||
no pusieron, y humildes hoy los muestra; | ||||
y ya la alta Isla ven, que hacen ligeras | ||||
las Columnas de Alcides sus Banderas. |
82 | ||||
Cádiz digo; a quien pródigo el Mar lava, | ||||
la que otro tiempo en no difuso asilo | ||||
Gades por los adobes se llamaba | ||||
que dio a sus Muros el Fenice estilo. | ||||
La que a Alcides triunfante veneraba | ||||
en e Gran Templo a que ofreció Lucilo | ||||
entre los humos de Amomo, y Casia | ||||
las Opulencias Bárbaras del Asia. |
83 | ||||
Ese emporio que a Mundo hoy corresponde | ||||
(Oh Cádiz) otra edad fue mansión breve; | ||||
si ya es tal, que en el fondo el Mar se esconde, | ||||
y apenas a besar tu pie se atreve. | ||||
Aun Garganta voraz no eras adonde | ||||
con Sed de Oro Infernal, ansiosa bebe | ||||
por tantos Vasos de atrevida Popa | ||||
las Venas de l América la Europa. |
84 | ||||
Mas (¡oh Mar siempre infiel, siempre de ruinas | ||||
Teatro!) Arrepentido el Campo undoso | ||||
de hacer Valles sus Libias cristalinas, | ||||
en altas Sierras se encrespó furioso. | ||||
Sin duda a nuevo Centro Peregrinas | ||||
vanas las Ondas van del peso hermoso; | ||||
y al ver (Jacinta) que su emporio pules | ||||
rebalsar quizá en Orbes quiere azules. |
85 | ||||
Sin Viento antes tu tez (que aun no desgarra) | ||||
hinchando al Golfo, lo mecía injusto | ||||
el Huracán que concebido amarra | ||||
en su gran Seno el Mar, para lato susto. | ||||
No de otra fuerte que al tirar la Barra | ||||
de grave hierro el Español robusto | ||||
columpia el peso que después vibrado | ||||
el Euro rompe, y estremece el Prado. |
86 | ||||
A poco espacio en raptos fluctuantes | ||||
descolló la Tormenta; Y dividido | ||||
su Mármol, Vagas furias disonantes | ||||
abortó el Mar con hórrido bramido. | ||||
Clama el Piloto inquieto; Y los restantes | ||||
de la Nave prorrumpen en gemido; | ||||
Mas lleva airado el Euro a Extraña parte | ||||
los Votos del Temor, la Ley del Arte. |
87 | ||||
Las Nubes otra Tierra en bronco asiento | ||||
negras parecen; Sólo a horror se aclaran; | ||||
Montes obscuros son del Firmamento | ||||
más tupidos si al Mundo se comparan. | ||||
Cuaja el Bóreas la Olas; Contra el Viento | ||||
en Granizo, hechas Riscos, se disparan; | ||||
Y a macizar de Hielo, oh Golfo, subes | ||||
las volantes Cavernas de las Nubes. |
88 | ||||
Creyeras que allí el Mundo vuelta afuera | ||||
la interior masa en ímpetus fatales | ||||
retiraba la Luz a oculta esfera, | ||||
nieblas vertiendo y furias Infernales. | ||||
Del Aire ciego otra Tormenta fiera | ||||
llenó el Orbe de Truenos, y fanales; | ||||
Fanales, con que al Cielo (oh Rayo) le ajas | ||||
las Púrpuras azules de sus Fajas. |
89 | ||||
Llueven mil Rayos, vuela el Mar violento | ||||
en Cumbres a encontrarlos con desdoro; | ||||
Son mordiéndose la Onda, y Rayo al Viento | ||||
broche medio de Plata, y medio de Oro. | ||||
Sino es que al muerto Sol honra el sangriento | ||||
Mar en sus nudos con infiel decoro, | ||||
siendo cada Ola en el horrendo ensayo | ||||
blandón de Vidrio con luz del Rayo. |
90 | ||||
Más se erizaba el Horizonte plano | ||||
del Mar: mayores cúmulos lo infaman; | ||||
Más Montes de agua a su irritado Llanto | ||||
membrudos Monstruos d'ella se derraman. | ||||
Síguelos el furioso Viento ufano, | ||||
y Ellos por todo el Mar huyendo braman, | ||||
hasta que salpicando arenas pocas | ||||
Ciegos se hacen pedazos en las Rocas. |
91 | ||||
A los Nautas el vuelo del Navío | ||||
no distinguir cual sea el Centro le hace; | ||||
Mil veces usurpando el sitio frío | ||||
a la Quilla, la Gavia en Ondas yace. | ||||
Los Golfos lleva al Cielo el Noto impío, | ||||
y al ímpetu que Estrellas le deshace | ||||
ruedan con velocísimos extremos | ||||
rechinando los Círculos Supremo. |
92 | ||||
En l'Agua que se impele con ensayos | ||||
de Averno, el mismo Sol que extingue, suena; | ||||
Arrancada articula con desmayos | ||||
la Osa el bramido con que el Polo truena. | ||||
Desciende la Región Celeste en Rayos; | ||||
La Tierra asciende en agitada arena; | ||||
Es, confundido en embrión perverso, | ||||
ceño del Aire todo el Universo. |
93 | ||||
Desnudo de Agua, en Peñas desiguales | ||||
se vía el Esqueleto de la Tierra; | ||||
Donde por nuevas Grutas Infernales | ||||
se exhala el central Fuego a tanta Guerra. | ||||
Etnas viendo, y Relámpagos fatales | ||||
aquí, y allá, difunto el Pino yerra; | ||||
surca otro Orbe en el Viento a quien externos | ||||
por Cielos circundaban dos Infiernos. |
94 | ||||
Dispárase infeliz su buque en tanta | ||||
pólvora cristalina que lo hiere; | ||||
La Gente al Árbol se ata aunque la espanta | ||||
el Mar; Trabaja; Y el morir difiere. | ||||
Mas con todo el Mar vago la quebranta, | ||||
y aun las Grutas bramando el Austro inquiere, | ||||
por si hay más Ondas; Viose errando asiento | ||||
volar la Espuma, fluctuar el Viento. |
95 | ||||
Corren furiosos todos porque muera | ||||
triste un Leño; Cada uno atroz se exhala; | ||||
todo Árbol le cortó en la Lid primera | ||||
el Aquilón con la Segur de un ala. | ||||
Dio el Leño tal balance que se hundiera | ||||
a no llegar otra Onda que lo iguala: | ||||
Onda, que era (arrollando el Cristal roto) | ||||
la faz hinchada con que sopla el Noto. |
96 | ||||
No haría estruendo tal, si deshiciese | ||||
el Cielo sus Estrellas con desmanes; | ||||
ni el Aire si a uno sólo redujese | ||||
juntos sus Truenos todos, y Huracanes; | ||||
Ni en la Tierra tal ruido es dable hubiese | ||||
reventando a una todos sus volcanes, | ||||
como el que hace en la Nave que maltrata, | ||||
cada monstruoso Ariete de Plata. |
97 | ||||
¡Triste Jacinta! En tanto horror que aún calma | ||||
la alta seguridad de Estrellas puras, | ||||
¿qué hará tu Corazón, que ociosa palma | ||||
del querer sólo adquiere en las ternuras? | ||||
Aflígese infeliz; mas en el Alma | ||||
combatida de ráfagas tan duras | ||||
no llegó, con perder cuanto es denuedo, | ||||
a ser igual del Cielo Amor al Miedo. |
98 | ||||
Aquel Vendado a cuyas impiedades, | ||||
y a cuyo error no copian las Esencias, | ||||
todas en su Cendal las Ceguedades, | ||||
y en su Carcax violento las Violencias; | ||||
Aquél, en cuya cárcel las Edades | ||||
miran que, en vez de huir las inclemencias, | ||||
se abraza el peso, y porque no se ausente | ||||
la prende a la prisión el Delincuente; |
99 | ||||
Aquel Mago de Glorias, y pesares, | ||||
que astuto al Universo da en su llama | ||||
mayor Veneno que hacia los Altares | ||||
de su Chipre allá el Nilo Ondas derrama; | ||||
Aquél, entre el horror de Viento, y Mares, | ||||
rasgaba ardiente para herir la Dama | ||||
(Más que uno instable, y que otro más sangriento) | ||||
la espada infiel del Mar, l'ala del Viento. |
100 | ||||
Porque no des tu aliento cuando lloras | ||||
(Oh Jacinta) a las ráfagas deshechas, | ||||
disparaba con órdenes traidoras | ||||
a dominarlo ejércitos de flechas; | ||||
Quedaban las Saetas voladoras | ||||
en el cándido Seno Espadas hechas; | ||||
Es guarnición el Pecho al leño junta, | ||||
y pomo el Corazón a cada punta. |
101 | ||||
De su amante infeliz por quien suspira | ||||
le finge el Rostro Amor con dulce alarde; | ||||
y acordarselo ausente es más que al Ira | ||||
del Viento, y Mar para que este cobarde. | ||||
El Aire fue el gran lienzo en quien lo mira; | ||||
Donde las nubes eran Sombras; Y arde | ||||
en rojos coloridos sus confines | ||||
desgreñado el Relámpago a Carmines. |
102 | ||||
No impedía su Vista el Globo fiero | ||||
de Ondas que al Reino ascienden de la pluma: | ||||
Las Nubes para verlo eran acero | ||||
que espejo hacen el vidrio de la espuma; | ||||
Si caen Rayos más el Lisonjero | ||||
Objeto vía con su hoguera suma; | ||||
Y hallaba más Retratos si fatales | ||||
más quebrantaban las Ondas sus cristales. |
103 | ||||
La confusión del Viento su cuidado | ||||
venció, de un Bien sintiendo los retiros; | ||||
Su pensamiento el vuelo arrebatado | ||||
del Leño en que se lograba el Mar sus tiros. | ||||
Excede el Corazón tierno arrancado | ||||
la Acción que al Rayo impele; Y los suspiros | ||||
los Truenos con que gime su desaire | ||||
la garganta vastísima del Aire. |
104 | ||||
Así por Soles diez fue infaustamente | ||||
juego el Abeto a la Tormenta extraña; | ||||
suspirando al crujir trágicamente | ||||
del Bosque el Buque la primer Campaña; | ||||
Al Otro una Ola el Mar creció eminente | ||||
más alta que los Riscos que allí baña; | ||||
(¡rara caída!) dando el Pino en tierra | ||||
se despeñó del Mar, sobre la Sierra. |
105 | ||||
Como en su Anfiteatro un tiempo Roma | ||||
al mirar que a una Fiera el hierro encuentre, | ||||
notó que por la herida el parto asoma | ||||
renunciando las cárceles del Vientre; | ||||
Y el tierno hijo que sale, y vida toma | ||||
por donde percibió que el acero entre, | ||||
ni bien la arena, ni el congreso vía, | ||||
confuso al estrenar la Luz del Día; |
106 | ||||
Así Jacinta que el furor airado | ||||
huyó del Mar, y su Campaña incierta, | ||||
(Rompiéndose la Nave) salió al Prado, | ||||
de la obscura mansión de la Cubierta; | ||||
Y así en la claridad que ha recobrado | ||||
la fuerza del Sentido mal despierta | ||||
debía (oh Cielo) a cuanto ardor conduces | ||||
su Vista absorta ceguedad de Luces. |
107 | ||||
Corta es la Isla; Más verde maravilla | ||||
de Cuya Cumbre hasta aquel Mar se mueve | ||||
entre mil Flores tierna Fuentecilla | ||||
porque vive felice a vivir breve. | ||||
Parece, angosto el Monte, y poca orilla | ||||
Árbol del fondo que a la Luz se atreve; | ||||
No el Golfo la opugnó, que su Pimpollo | ||||
sufre por Alga el Mar, no por Escollo. |
108 | ||||
Sosegose del Piélago la ira | ||||
viendo que el risco ya el Bajel se vaya; | ||||
Sino es que en la Isla, o la Beldad que admira | ||||
embelesado su furor desmaya. | ||||
Cortés se alarga ya, ya se retira | ||||
tendiendo espumas por la hermosa Playa; | ||||
Dientes del Mar, que en trozos de Azucena | ||||
blancos se quiebran al morder la arena. |
109 | ||||
Cobró la Bella Aliento, y Vista errantes, | ||||
quizá porque otro tiempo en su ardor ciego | ||||
el Objeto a sus Ojos debió amantes, | ||||
y al aliento el crecer su amante Fuego. | ||||
Mas viendo que no ve los Navegantes, | ||||
ni otra Gente, vertió todo el ver luego | ||||
en una triste Lágrima, y perdido | ||||
ahuyentó el respirar en un Gemido. |
110 | ||||
En fin llegaste (oh Muerte) ansiosa dice; | ||||
en fin ya el fin impones a mi fuerte. | ||||
Muerte esta despoblada Isla predice | ||||
a mi angustia; predice el Golfo muerte. | ||||
En este extraño Páramo infelice | ||||
donde me ignoren todos, llegó a verte; | ||||
porque aun muerte ocultando esta Victoria | ||||
le sobre de mi Vida a mi Memoria. |
111 | ||||
Viví infeliz, pues cuando a arder alcanza | ||||
mi Pecho entre un Volcán de Abismos ciertos, | ||||
sólo debí al Amor una Esperanza | ||||
Sueño (¡ay cuanto engañoso!) De despiertos. | ||||
Faltome el Cielo, hizo el Cristal mudanza | ||||
y en fin si acaso (oh Sustos nunca inciertos) | ||||
le negáis el de Adversa y importuna, | ||||
todo el Ser le desmiento a la Fortuna. |
112 | ||||
Buscaba el Sacro Templo Peregrino | ||||
para hallar la Piedad del Cielo Santo, | ||||
y hoy conozco intentaba así el Destino | ||||
de mi Patria aparteme a inmenso llanto; | ||||
Mas en vano me quejo, pues previno | ||||
siempre el Hado a mi Vida ahogo tanto; | ||||
y a esta Patria de Monstruos, Susto, y Pena | ||||
no podrá mi dolor llamarla ajena. |
113 | ||||
El Bajel, dese Escollo al golpe fuerte | ||||
mira sus Tablas, y Árboles deshechos; | ||||
la Gente que auxiliar pudo mi fuerte | ||||
dio al fondo undoso los difuntos pechos. | ||||
Ya nada hay que esperar sino mi muerte; | ||||
pues ¿por qué no la buscan mis despechos? | ||||
Y si no aguardo entre el dolor en que ardo | ||||
la Vida ya, ¿por qué la Muerte aguardo? |
114 | ||||
Membrudas Fieras que en esta Isla oculta | ||||
habitáis de sus Grutas las pizarras, | ||||
siendo en el hueso de su roca inculta | ||||
difusa animación de greña, y garras; | ||||
Broncas Aves, oh furias que me oculta | ||||
con bastos troncos, y silvestres parras | ||||
en ese Caos de hoja que así enreda | ||||
vuestro confuso Abismo de arboleda; |
115 | ||||
Venid todas; lograd la más violenta | ||||
hazaña (oh Cielo) por quien hoy suspiras; | ||||
Si tanto (Hado cruel) tu Ley sangrienta | ||||
lloro, ¿por qué estos Monstruos me retiras? | ||||
En brutas Bocas halle otra Tormenta | ||||
mi Vida, presa infausta de sus iras; | ||||
sean los fieros dientes con lid suma | ||||
riscos; y espumas la rabiosa espuma. |
116 | ||||
Mas aún duermen los Brutos perezosos | ||||
por no librar mi Aliento de mis penas; | ||||
sino es que aún de vivientes horrorosos | ||||
sólo el despueblo puebla estas arenas. | ||||
Llorad, Ojos, llorad, hasta que ansiosos, | ||||
si es cierto que al Mortal guardan las venas | ||||
Vida y Alma en la Sangre, deis vertida | ||||
en la Sangre del Alma aquí la Vida. |
117 | ||||
Era mi Vida Amor; y en sus despojos | ||||
el llanto mis estragos ya me avisa, | ||||
pues al raudal sangriento y sus enojos | ||||
quita el rojo color, de Amor divisa. | ||||
Si viví viendo un Bien. Tenga en los Ojos | ||||
(Pues tuve el respirar) muerte precisa; | ||||
y anegándome fiel Piélago tanto | ||||
dense a alientos de Vista urnas de Llanto. |
118 | ||||
Así se aflige; y tantas maravillas | ||||
de Beldad viendo la Isla, y Mar llorosas, | ||||
blando susurro el uno en las orillas | ||||
hizo, y la otra en las Ramas cuidadosas; | ||||
Su vuelo las pintadas Avecillas | ||||
a escucharla pararon obsequiosas; | ||||
y suspensas del Céfiro en las salas | ||||
las tuvo más su oído que sus alas. |
119 | ||||
Del Cielo que la aflige murmuraba | ||||
tierno el Favonio en aura balbuciente; | ||||
y en fe de que Jacinta respiraba | ||||
más llenaba de Aromas el ambiento. | ||||
Trémula cada Flor se desvelaba | ||||
por templar la Quejosa floreciente; | ||||
todo parece que su afán sentía, | ||||
y estorbando sus lágrimas decía: |
120 | ||||
No llores, no; no juzgues que alto origen | ||||
a mil penas tiene hoy tu hermoso Abismo; | ||||
muy presto en ansias que tu Esfuerzo rigen | ||||
fiel mudanza hallará tu parasismo. | ||||
Si han sido tan groseros que te afligen, | ||||
como pueden tener a un tiempo mismo | ||||
tan discreta Elección los Sustos fieros | ||||
que de espacio se estén con tus Luceros? |
121 | ||||
No es tan poco Celeste el Cielo, y la ira | ||||
no así los Sacros Ánimos contienen | ||||
que olviden tu Beldad, con quien suspira | ||||
la Alfombra que estas Flores te previenen. | ||||
Mírate el Ciclo; y aun contigo mira, | ||||
pues copiándote a Estrellas, todos tienen | ||||
los Ojos de la Esfera luminosa | ||||
hermosa Niña en tu niñez hermosa. |
122 | ||||
Como entre el Sol y Estigias de horror llenas | ||||
la Humana Vida está, bañan sus Velos | ||||
ya del Humo Infernal borrón las penas; | ||||
ya las Glorias, colores de los Cielos; | ||||
Si el Bajel despeñado a estas arenas | ||||
roto como ondas causa tus desvelos, | ||||
muy presto a darte Puertos más seguros | ||||
se volverán las ondas Palinuros. |
123 | ||||
Al que opugna con sustos el Abismo | ||||
da luego dichas al Zafir brillante; | ||||
y más si es por Amor al Parasismo; | ||||
o en lo hermoso, a sus Orbes semejante. | ||||
La Beldad cerca está del Cielo mismo | ||||
y ser debe su Angustia breve instante, | ||||
pues el Padecer, y el Gemir fiero | ||||
en Provincias Celestes Extranjero. |
124 | ||||
Mira esa Fuentecilla que risueña | ||||
si del Mar que ama sale a aquella Cumbre | ||||
otra vez a sus ondas se despeña | ||||
ardiendo en su Cristal constante Lumbre. | ||||
El Cielo a auxilios del que amó se empeña; | ||||
y Amante de la Tierra su techumbre, | ||||
no es (circundando Flores y Ondas bellas) | ||||
más que un abrazo azul lleno de Estrellas. |
130 | ||||
Pierde sus Hermosuras el fecundo | ||||
Campo, y de Sombra en Piélagos severos | ||||
Luceros de matiz sumergió inmundo | ||||
cuando es Jardín el Aire de Luceros. | ||||
En muda Soledad yacía el Mundo; | ||||
callan las Aves, Viento, y Brutos fieros, | ||||
sólo el agua, al batir la Arena fría | ||||
viéndose entonces menos, más se oía. |
131 | ||||
Jacinta habiendo con el mal que llora | ||||
batallando gran rato, al fin rendida | ||||
sobre el Lecho en que mece ámbares Flora | ||||
suspendió lo angustiada en lo dormida. | ||||
Mas como de las Fábulas, y ahora | ||||
del Mar, la Fantasía halla teñida, | ||||
soñó cuanto ya el juicio fiel desprecia | ||||
mentir supersticioso de la Grecia. |
132 | ||||
Soñó que el Mar bruñido en perezosa | ||||
quietud risueña adormecía su bruma; | ||||
y la amarga ya al Gusto Plata undosa | ||||
se endulzaba a la Vista en beldad suma. | ||||
Grande pella de espuma ondeaba hermosa, | ||||
nata de ampos, espuma de la espuma; | ||||
y eran, cuajando risas que atesora, | ||||
labios del Mar los pechos de la Aurora. |
133 | ||||
No sé si al Vientecillo que suave | ||||
la circundaba sin osar lamerla, | ||||
o tiritando tierna entre humor grave, | ||||
se endureció en carámbano de Perla. | ||||
Grande una Perla se hizo, porque lave | ||||
de blanca Lumbre el Mar que ha de merecerla; | ||||
Corre el Golfo, y gastando allí un tesoro | ||||
la eriza de Coral, la raya de Oro. |
134 | ||||
Rasgado luego el Risco nada bronco, | ||||
vertió al Golfo otro golfo de Hermosuras, | ||||
transformando con Luz al rubio tronco | ||||
en Estrellas sus ramas mal seguras. | ||||
Quedó suspenso el vientecillo ronco, | ||||
y emulando sus galas nunca obscuras | ||||
cuantas al Mar Deidades ya fingieron | ||||
Perla abortada de la Perla fueron. |
135 | ||||
En un cóncavo Nácar que excedido | ||||
el precio a todo aljófar asegura, | ||||
Concha que el Mar cuajó desvanecido | ||||
del Sudor Celestial de l'Alba pura, | ||||
Salía el gran Neptuno esclarecido | ||||
con la Esposa en que Amor su incendio apura, | ||||
dando el Carro a una, y otra Deidad grata | ||||
Doseles de Coral, Tronos de Plata. |
136 | ||||
Por la espuma feliz los conducían | ||||
sus marinos Caballos que fogosos | ||||
con intrépidas manos dividían | ||||
en pedazos los vidrios espumosos. | ||||
Salpican con el Golfo que rompían | ||||
el Golfo mismo en vuelos ambiciosos, | ||||
despidiendo a la herida de sus huellas | ||||
los jaspes vagos húmedas centellas. |
137 | ||||
De sus Ovas al Dios de la Ribera | ||||
verde Barba, y Cabellos adornaban, | ||||
que al vasto Cuerpo (en limos de esfera | ||||
ceñido) blandas lluvias destilaban. | ||||
De juncos en la Sien que el Mar venera | ||||
bien tejidos Diadema se enredaban, | ||||
y la Diestra en tres puntas muestra sumas | ||||
la eterna Ley que enfrena las espumas. |
138 | ||||
Tetis Divina en la corriente grata | ||||
es mejor Venus de Ondas más lucientes; | ||||
Al Viento en ricas Nubes que dilata | ||||
sus Cabellos fió resplandecientes; | ||||
Cuantas hebras dulcísima desata | ||||
tantas Almas anuda reverentes; | ||||
Beldad fecunda, más que la de Guido, | ||||
de quien cada cabello era un Cupido. |
139 | ||||
En la Cándida Frente se ilustraba | ||||
(de las Ninfas del Ganges real tarea) | ||||
un Cerco de Zafiros que igualaba | ||||
del velo Celestial la azul librea. | ||||
En el Cuello, y los brazos enroscaba | ||||
hilos de Perlas que su Patria ondea, | ||||
Tramos que Egipto venerara en ellos | ||||
de Cleopatra inmortal Áspides bellos. |
140 | ||||
Precedía Tritón; Y en mil marinos | ||||
Monstruos delante van de sus Señores | ||||
muchas Ninfas del agua, y mil Divinos | ||||
Amantes suyos, Dioses nadadores. | ||||
Quien brocados vestía de Oro finos | ||||
que del Pactolo halló en los esplendores; | ||||
Cual Ninfa vistió azul porción del Cielo; | ||||
Y cual del Limo floreciente velo. |
141 | ||||
Con festivo bullicio en competencias | ||||
se explayaba la Escuadra Soberana, | ||||
siendo de las Sirenas las cadencias | ||||
triunfales ruidos en la espuma cana. | ||||
De Doris, y Anfitrite en las presencias | ||||
quedaba obscuro el Sol, si l'agua ufana; | ||||
Y hacían mejor Cielo en Luz difusa | ||||
Hesperia, Forba, Spio, y Aretusa. |
142 | ||||
La inquieta juventud de los Tritones | ||||
en Tropas por el Golfo travesea; | ||||
Cual se hunde, y sale luego; Y cual porciones | ||||
de l'Agua arroja al que irritar desea. | ||||
Danzan con Dioses que aman sus prisiones | ||||
Acasta, Nise, Thoa, y Deyopea; | ||||
Y obsequioso a su amante devaneo | ||||
la Beldad de Sicilia sigue Alfeo. |
143 | ||||
De Azucena, y jazmín (con vituperio | ||||
de Flora) cada Ninfa está ceñida; | ||||
Triunfa el Campo al mirar que hurtan su imperio | ||||
Primaveras del Piélago con vida. | ||||
Pasmó al Mayo en el líquido Hemisferio | ||||
ver su halagüeña pompa introducida, | ||||
cuando en las trenzas de Astros nadadores, | ||||
troncos de musgo producían flores. |
144 | ||||
No las Nereides ya, no los incastos | ||||
Tritones cruzan sólo aquella Esfera; | ||||
Danzan las Focas; los Escollos vastos | ||||
estrenan movimiento en la Ribera. | ||||
Suena su ruido aún en los verdes pastos; | ||||
Y en los Faunos, y Dríades de altera | ||||
corren absortos al Cristal poblado | ||||
los Divinos Espíritus del Prado. |
145 | ||||
Con tan vario espectáculo apacible | ||||
que a Jacinta más dulce hizo el reposo | ||||
le bordó en vanos rasgos perceptible | ||||
su Pabellón el sueño perezoso. | ||||
Vivo admiran sus Ojos el falible | ||||
congreso del Alcázar espumoso; | ||||
Y halla su Oído (no las Voces solas) | ||||
aún los lentos murmúreos de las Olas. |
146 | ||||
Mas ¿cómo será firme a un triste Amante | ||||
un delirar feliz? Cuando se alegra | ||||
Jacinta a tal Objeto, el Pueblo undante | ||||
se hizo todo una informe Nube negra. | ||||
La Nube a poco espacio fue un Gigante | ||||
cual no se finge en la alta Lid de Flegra; | ||||
Lavose; y todo el Mar, y la Agua, oculta | ||||
quedó en la Esponja de la Barba inculta. |
147 | ||||
Sobre un Caballo Bárbaro camina | ||||
tan grande como el Dueño portentoso; | ||||
al Mar, del gran Bucéfalo declina | ||||
la clin, y es ya mojada limo undoso. | ||||
La Cabeza, que fue vital colina, | ||||
se vuelve de Pantera, y caudaloso | ||||
un Río da de inundación no poca | ||||
la animada Caverna de su Boca. |
148 | ||||
Vuelan luego los Dos, y en un instante | ||||
caen en la Isla en que Jacinta estaba; | ||||
y ya para comerla abrió el Gigante | ||||
una, y otra de Dientes Sierra brava. | ||||
Tiembla la Dama en sueños; el Volante | ||||
del pecho, más con la ansia palpitaba: | ||||
Llenose al ver del Mar Monstruos impíos | ||||
de otro Mar muerto de sudores fríos. |
149 | ||||
Mas luego el Briareo y toda aquella | ||||
Visión fatal de Sombra no sucinta, | ||||
se convirtió en su Amiga Leonor Bella; | ||||
riose; y se rió también Jacinta. | ||||
Pasa sin saber cómo, al Mar con ella; | ||||
solídase el cristal que un Mayo pinta, | ||||
y en la espuma cuajada errantes lavan | ||||
la blanca espuma que sus Pies quejaban. |
150 | ||||
Porque juegue una, y otra tierna Aurora | ||||
transformaron del Mar luego los baños, | ||||
bolas de Oro las Ondas que atesora, | ||||
gran tabla azul sus Piélagos extraños; | ||||
Infelice Hermosura, logra ahora | ||||
que no sientes, de espacio esos engaños; | ||||
vive hoy que sueñas, sin que angustias libes; | ||||
ya vendrá el tiempo de soñar que vives. |
Fin del Libro segundo