Selecciona una palabra y presiona la tecla d para obtener su definición.
IndiceSiguiente


Abajo

Electroterapia

Humorada en un acto y tres cuadros, original y en verso, parodia del drama en cinco actos Electra

Gabriel Merino



portada



PERSONAJES
 
ACTORES
 
PECTRA.SRTA. BRÚ.
LA SEÑÁ EVA.SRA. VIDAL.
VOZ DE MUJER.SRA. CARCELLER.
MAXIMINO.SR. RODRÍGUEZ.
EL URBANO.SR. J. MESEJO.
SANTONJA.SR. CARRERAS.
CUESTA-ARRIBA.SR. ONTIVEROS.
CHICO 1.ºSR. SORIANO.
CHICO 2.ºSR. OTERO.
Dos guardias de orden público que no hablan.
Varios comparsas niños.
Un perrito de lanas.
 

La acción en Madrid. Época actual.

 




ArribaAbajoActo único


ArribaAbajoCuadro I

 

Telón corto de sala. Trastienda de una casa de préstamos. Forillo de anaquelería con ropas y efectos. Puertas en los primeros términos laterales.

 

Escena I

 

LA SEÑÁ EVA y EL URBANO, que hacen salida por el foro.

 
LA SEÑÁ EVA
No descanso en todo el día,
¡qué manera de empeñar!
Si esto sigue va a faltar
hueco en la anaquelería.
EL URBANO
Es que el negocio llevamos5
de una manera muy seria...
LA SEÑÁ EVA
Y es que hay la mar de miseria...
¡En buena hora lo digamos!
EL URBANO
¿Y Pectra?
LA SEÑÁ EVA
¡Pues recogida
en la mitad de la calle!10
¡Ése sí que es un detalle
que me tiene ya aburrida!
EL URBANO
¡Válgame Dios, qué muchacha!
LA SEÑÁ EVA
Ya de educarla desisto.
¡En toda mi vida he visto15
niña de tan poca lacha!


Escena II

 

Dichos y CUESTA-ARRIBA, con capa (tipo de prendero del Rastro).

 
CUESTA-ARRIBA
¿Se puede?
EL URBANO
Pase adelante
el amigo Cuesta-Arriba.
CUESTA-ARRIBA
Muy buenas tardes, señor
Urbano y la compañía.20
LA SEÑÁ EVA
¿Qué hay de bueno? ¿Se ha hecho algo?
EL URBANO
¿Trae usté algunas noticias?
CUESTA-ARRIBA
Na más que por lo mediano:
los pañuelos de Manila
creo que se quedará25
con ellos una corista,
porque se los paga un primo
de ésos de primera fila;
el remontoir lo he dejado
pa que lo lleven a vistas30
y he vendido los pendientes,
la cadena y las sortijas.
EL URBANO
¡Usté es un hombre!
CUESTA-ARRIBA
Mil gracias.
LA SEÑÁ EVA
¿Y cuánto?
CUESTA-ARRIBA
¡Una porquería!

 (A LA SEÑÁ EVA.) 

Pero como usted me dijo35
que lo largara en seguida...
LA SEÑÁ EVA
¡Claro!... Como que hace falta.
CUESTA-ARRIBA
Pues nada, aquí está la guita.

  (Saca la cartera y cuenta unos billetes que entrega a LA SEÑÁ EVA.) 

¡Y conste que he trabajado
como si fua cosa mía!40
LA SEÑÁ EVA
Pero ¿en cuánto se ha vendido?
CUESTA-ARRIBA
En treinta duros.
LA SEÑÁ EVA

 (Rápidamente.) 

¡Mentira!
CUESTA-ARRIBA

 (Ofendido.) 

¿Qué dice usté, señá Eva?
LA SEÑÁ EVA

 (Transición.) 

Déjeme usted que prosiga.
¡Mentira... paece que estén45
las cosas tan remalismas!
CUESTA-ARRIBA
Rematás del todo... Y eso
que aunque está mal que lo diga,
a correr con las alhajas
no hay quien me gane.
EL URBANO
Es la fija.
50
¡Parece que ha sido usté
ratero toda su vida!
CUESTA-ARRIBA

 (Escamado.) 

¿Qué dice usted?...
EL URBANO
No se ofenda,
es un decir.
CUESTA-ARRIBA
¡Ah, creía!
EL URBANO

 (Aparte.) 

Éste lo menos se guarda55
otros treinta de propina.
LA SEÑÁ EVA

 (Aparte.) 

¡Es un corredor que corre
hasta perderse de vista!

  (LA SEÑÁ EVA guarda en el bolsillo el dinero.) 

EL URBANO
Pues a primeros de mes
le daré a usté otras cosillas60
que cumplen en esa fecha.
CUESTA-ARRIBA
Como usté guste.

 (Pausa.) 

¿Y la chica?
LA SEÑÁ EVA
¿No la ha visto usté en la calle?
CUESTA-ARRIBA
No me he fijado.
LA SEÑÁ EVA
Esa niña
nos va a matar a disgustos.65
CUESTA-ARRIBA
Déjela usté, ¡pobrecilla!
A su edad es natural
que se divierta la chica.
LA SEÑÁ EVA
¡Pero, hijo, si es una golfa
que no para en todo el día!70
EL URBANO

  (Con maliciosa intención.) 

Pus miste, a mí no me extraña,
son costumbres de familia.
Su madre... ya sabe usté
que era una bala perdida...
CUESTA-ARRIBA

 (Dramático.) 

¿Que su madre...?
EL URBANO
Sí.
CUESTA-ARRIBA

 (Transición cómica. En tono chulesco.) 

¡Ay, su madre!
75

  (Suspira, solloza y se atraganta.) 

EL URBANO
¿Qué le pasa a usté?
CUESTA-ARRIBA

 (Disimulando.) 

Una angina,
que me está dando la lata
hace tres o cuatro días.
EL URBANO
Cuando yo recogí a Pectra...
Y, por cierto, que entoavía80
no he entendido por qué han puesto
nombre tan raro a esa niña...
CUESTA-ARRIBA
Yo se lo explicaré a ustés,
porque estoy en la combina.
Pectra es una contracción85
extraña de Pectronila,
que era el nombre de la madre.
LA SEÑÁ EVA
¡Pues cualquiera lo adivina!
CUESTA-ARRIBA
Son capricchos del ingenio.
EL URBANO
Me pacsman esas noticias.90

  (Recalcando mucho todas las ces.) 

CUESTA-ARRIBA
Adelante.
EL URBANO
Usté ya sabe
que serví en la Policía
urbana bastante tiempo
y que al dejar las insignias
municipales fui y puse95
casa de empeños. La chica,
que se había quedao sola
por muerte de su familia
más cercana, con la cual
yo no me traté en la vida,100
porque su madre oservaba
una conduta aireadísima...
CUESTA-ARRIBA
¡Ejem! ¡Ejem!

 (Tose y se emociona de nuevo.) 

EL URBANO
¿Otra vez?

  (Con sorna.) 

¡Cuídese usted esas anginas!
CUESTA-ARRIBA
No es nada, prosiga usted.105
EL URBANO
Pues me traje a mi sobrina
para el mostrador, porque ella
al parecer era lista
y dispuesta y laboriosa...
LA SEÑÁ EVA
Pero hijo, a los pocos días110
dio en escaparse a la calle
a charlar con las vecinas...
EL URBANO
O a jugar con los chiquillos,
que es su constante manía,
porque hay que advertir que los115
chiquillos son su delicia.
Y en fin, que ya no hay quien pueda
sujetar aquí a esa chica.
LA SEÑÁ EVA
Y por si esto fuera poco,
se ha hecho además muy amiga120
de Maximino, el albéitar
de enfrente, y se pasa el día
viendo poner herraduras
y curar caballerías.
CUESTA-ARRIBA
Eso demuestra aficiones125
delicadas.
LA SEÑÁ EVA
¡Y finísimas!


Escena III

 

Dichos y SANTONJA por el foro con levitón negro y sombrero de copa. Tipo sacristanesco. Lleva en la mano un gran rosario.

 
SANTONJA
Alabado sea Dios.
LA SEÑÁ EVA
Él le guarde.
SANTONJA
Ave María.
EL URBANO

  (Aparte.) 

Ya está aquí el Año Cristiano,
el Santoral... ¡y la Biblia!130
CUESTA-ARRIBA
¿Qué tal, amigo Santonja?
SANTONJA

  (Con marcada beatitud.) 

Pues tirando de esta vida
hasta que el Señor se acuerde
de mi persona humildísima.
EL URBANO
¿Qué? ¿Trae usted algo de nuevo?135
¿Qué hay por esas sacristías?...
SANTONJA
Que el mundo está pervertido,
que la humanidad peligra
y que las almas se pierden
con facilidad que indigna.140
CUESTA-ARRIBA

 (Aparte.) 

Adiós, ya empieza el sermón.
SANTONJA

  (Indignado.) 

Ahora mismo en la herrería
he visto a Pectra jugando.
LA SEÑÁ EVA
¡Toma! Vaya una noticia;
allí está constantemente.145
SANTONJA
Pues eso a mí no me digan
que está bien.
CUESTA-ARRIBA
No estará bien,
pero tampoco la chica
comete un crimen estando
allí un rato distraída.150
El veterinario siempre
la obsequia con golosinas
y los chicos, ya se sabe,
donde ven calor, se arriman.
Y la pobre que no tiene155
ni el calor de la familia
y que ve que en el invierno
está esta casa muy fría
sin braseros, ni choubeskys,
ni cok, ni cisco, ni encina,160
pues, ¡claro!, se va a la fragua
y se calienta la chica.
SANTONJA

 (Sentenciosamente.) 

¡Ese fuego es peligroso!
CUESTA-ARRIBA
¡Basta con que usted lo diga!
SANTONJA

 (En tono poéticamente cursi.) 

¡En él quemará sus alas165
la gentil mariposilla!
CUESTA-ARRIBA

 (Con mucha guasa.) 

¡Gachó, me resulta usté
un tomo de poesías!
 

(Ruido de cascabeles dentro.)

 
LA SEÑÁ EVA
Me parece que oigo ruido.

 (Al foro.) 

EL URBANO
¡Justo! ¡Ya está aquí la chica!170


Escena IV

 

Dichos, PECTRA y MAXIMINO. Ella con un látigo y sosteniendo con la otra mano las bridas de un cinto de cascabeles que MAXIMINO lleva rodeado a la cintura.

 
PECTRA
¡Arre, caballo!

 (Sonando el látigo. Dan una vuelta por la escena.) 

SANTONJA

 (Indignado.) 

¿Qué es esto?
PECTRA
¡So!... Ya basta.
LA SEÑÁ EVA

 (Incomodada.) 

¡Pero niña!
¿Qué confianzas son éstas?
MAXIMINO
Déjela usted, ¡pobrecilla!
Le gusta jugar y yo175
me presto por divertirla.
PECTRA
Bueno, luego seguiremos.

  (Quitándole el cinto.) 

Y a todo esto, buenos días.
LA SEÑÁ EVA
Pero ¿cuándo tendrás juicio?
PECTRA
No tendré juicio en la vida.180
CUESTA-ARRIBA

 (Aparte a SANTONJA.) 

¿Lo ve usté? ¡Si hay que comérsela!
¡A mí me encanta esta chica!
SANTONJA

 (Aparte.) 

En cambio a mí me da cien
patadas en la barriga.
EL URBANO

 (Fijándose en los bolsillos del delantal de PECTRA, que están atestados de papeles.) 

¿Qué tienes aquí?
PECTRA
Unas cartas.
185
EL URBANO
¿Unas cartas, hija mía?

 (Sacándolos.) 

Dirás dos o tres barajas.
PECTRA
Cuestión de las simpatías
de los muchachos del barrio.
EL URBANO
A ver, a ver...

 (Leyendo una.) 

«Señorita,
190
no sé qué pasa por mí
desde que tuve la dicha
de ver a usted...».
SANTONJA

 (Con sorna.) 

¡Muy bonito!
EL URBANO

 (Leyendo otra.) 

«Ayer estuve en la esquina
esperándote dos horas».195
LA SEÑÁ EVA
¡Caracoles con la niña!
EL URBANO

 (Lee otra.) 

«¡Me tienes loco perdío,
serrana del alma mía!».
SANTONJA

 (Santiguándose.) 

¡Qué depravación! ¡Qué escándalo!
CUESTA-ARRIBA

 (Entusiasmado y riendo.) 

¡Superior!... ¡Deliciosisma!200
LA SEÑÁ EVA

 (Regañándola.) 

¡Pectra, esto es una vergüenza!
PECTRA
¿Yo qué culpa tengo, tía?

 (Con ingenuidad.) 

Los chicos me escriben cartas,
¿qué voy yo a hacer?
CUESTA-ARRIBA
Recibirlas,
tiene razón.
SANTONJA
¡Qué frescura!
205
EL URBANO

 (Muy enérgico.) 

Pues todo esto se termina
tomando una decisión
enérgica con la niña.

 (A PECTRA.) 

Voy a ponerte a un oficio.
PECTRA
Muy bien dispuesto: aprendiza210
en casa de Maximino,
contando con que él me admita.
EL URBANO
¡Pero esta muchacha es tonta!
SANTONJA
¡Su desahogo me admira!
PECTRA
Él mismo puede decir215
si soy torpe o si soy lista.
MAXIMINO
Es verdad, me ayuda mucho,
pone cuidado y se fija;
y en los inventos, que son
mi especialidad científica,220
me secunda dignamente
y me descansa y me anima.
Porque la Electroterapia
que en mi casa se cultiva,
obteniendo en los clientes225
curaciones rapidísimas,
requiere un buen ayudante
y ella ha salido tan lista,
que los bichos que me llevan
a curar, ella los cuida.230
PECTRA

 (Con alegría infantil.) 

Ahora tiene unos perritos,
¡huy qué cosa más bonita!
Hay uno con unas lanas
y con unas orejitas...
¡Vamos, que es una monada!235
SANTONJA

 (Aparte.) 

¡Cuando digo que esta niña
acaba en un manicomio!
MAXIMINO

 (A LA SEÑÁ EVA y EL URBANO.) 

Por cierto, que yo venía
a pedirles un favor
como premio a la aprendiza240
por su buen comportamiento.
EL URBANO
Tú dirás.
MAXIMINO
Es bien sencilla
la cosa: que mi compadre,
ya sabe usted, Juan Bautista,
aprovechando las fiestas245
de Carnaval de estos días
da en un solar de su barrio
una fiesta muy lucida.
EL URBANO
¿Hombre, sí?
MAXIMINO
Un baile de máscaras,
para cuyo baile invita250
esta noche a una porción
de personas distinguidas.
Me ha dicho que de ir ustedes
le darán mucha alegría,
y que si por no dejar255
la tienda sola no iban,
que por lo menos dejaran
ir un rato a la chiquilla.

  (Por PECTRA.) 

SANTONJA

 (Horrorizado.) 

¿Bailecitos? ¡Vade retro!
PECTRA

 (Aparte, por SANTONJA.) 

¡Ya está este tío que trina!260
EL URBANO
Pues hombre, a mí, francamente,
no me hace gracia maldita.
LA SEÑÁ EVA
Ni a mí. Hay que cerrar la tienda,
y eso... pues nos perjudica.
Y como ella no va a ir sola...265
CUESTA-ARRIBA
No faltará compañía
si es por eso; yo me ofrezco
a acompañar a la chica
y Santonja hará lo mismo,
¿no es verdad?

 (Con guasa a él.) 

SANTONJA
¿Yo?... ¡Ave María!
270
MAXIMINO
Pero tendrán que vestirse,
porque es condición precisa
ir de máscara.
EL URBANO
¿También
los hombres?
MAXIMINO

 (Muy chulo.) 

¡A ver qué vida!
PECTRA
Eso no es inconveniente;275
entre las prendas cumplidas
tenemos una porción
de trajes de fantasía
que son muy propios del caso.
Vengan ustedes y elijan.280

  (A SANTONJA, riendo.) 

¡Usted si va de lechuza
le conocen en seguida!
EL URBANO y
LA SEÑÁ EVA

 (Reprendiéndola.) 

¡Pectra!
SANTONJA
¡Insolente!
CUESTA-ARRIBA

 (Riendo.) 

¡Ay, qué gracia!
PECTRA
¿Conque me dejas ir, tía?

  (Echándose al cuello de LA SEÑÁ EVA.) 

EL URBANO
¡Qué torbellino!
SANTONJA

 (Aparte.) 

¡Esta golfa
285
me saca de mis casillas!
PECTRA
Yo ya he pensado mi traje.
EL URBANO
¿De qué vas?
PECTRA
De ama de cría.
 

(Asombro en todos.)

 
SANTONJA
¡Jesús!
EL URBANO
¡Qué barbaridad!
PECTRA
¿Qué? ¿No es la ropa bonita?290

 (Contoneándose.) 

Pues poco bien que va a estarme
con collares y caídas
y una muñeca en los brazos.
SANTONJA

 (Aparte a EL URBANO y LA SEÑÁ EVA.) 

¿Lo ve usté? Es cosa perdida.
Vengan, tenemos que hablar295
de cosas importantísimas.
EL URBANO

  (A MAXIMINO y CUESTA-ARRIBA.) 

Con su permiso, un momento.
LA SEÑÁ EVA

 (Aparte a CUESTA-ARRIBA.) 

Entretenga usté a la chica.
MAXIMINO
Y yo también me retiro.
Tengo que ir a una visita.300

 (A EL URBANO y LA SEÑÁ EVA.) 

¿Irán ustedes?
EL URBANO
Veremos.
LA SEÑÁ EVA
Según lo que se decida.
MAXIMINO
Pues luego vendré. Adiós, Pectra.
PECTRA
Adiós, maestro.
MAXIMINO
¡Monísima!
 

(Mutis MAXIMINO.)

 
SANTONJA

 (Aparte.) 

¡Cuando digo que me escamo305
del maestro y la discípula!
PECTRA

  (Desde la puerta del foro despidiéndoles.) 

Vayan sacando la ropa,
que yo entraré de seguida.
 

(Mutis foro LA SEÑÁ EVA, EL URBANO y SANTONJA.)

 


Escena V

 

PECTRA y CUESTA-ARRIBA. Ella, al volverse, ve que CUESTA-ARRIBA se ha quedado.

 
PECTRA
¡Ah! Pero ¿usted no se va?
CUESTA-ARRIBA
¿Para qué, si he de volver?310

 (Pausa. Con misterio.) 

Necesitamos tener
una intervieu reservá.
PECTRA
¿De qué se trata?
CUESTA-ARRIBA
De cosas
antiguas que son muy graves.

  (Con mucha importancia.) 

¡Pobre niña! ¡Tú no sabes315
qué historias tan espantosas!...
PECTRA
¡Dios mío!, ¿qué podrá ser?
CUESTA-ARRIBA

 (Muy destacado esto.) 

Lo que tengo que decir
ni tú lo debes oír
ni lo puedes entender.320
PECTRA
Entonces no se moleste;
¿para qué lo he de escuchar?
CUESTA-ARRIBA
No hay remedio, te he de hablar
cuésteme lo que me cueste
de una manera embozada.325

  (Se emboza hasta los ojos.) 

PECTRA

 (Después de mirar a todos lados.) 

Hable usted, nadie se entera.
CUESTA-ARRIBA
Te lo diré de manera
que tú no comprendas nada.

 (Pausa. Acercándose y con mucha importancia.) 

¡Yo conocí a tu mamá!
PECTRA
¿Usted? ¡Pobre madre mía!330
CUESTA-ARRIBA
La conocí...

 (Muy serio y en tono grave.) 

vin cor dia
inquiaran cáloma ya.
PECTRA
¿Qué ha dicho usté?
CUESTA-ARRIBA

 (Conmovido.) 

¡Era muy buena!
PECTRA
Pero tuvo mala gente
a su lado.
CUESTA-ARRIBA
¡Justamente!
335
PECTRA
¡Jesús, Dios mío, qué pena!
 

(Pausa corta. Quedan los dos muy preocupados.)

 
CUESTA-ARRIBA
No te puedes figurar
lo que gozo al contemplarte
ni lo que sufro al mirarte
sin poderlo remediar.340
PECTRA

  (Impaciente.) 

Pero no le entiendo a usté.
Hable claro, por favor.
CUESTA-ARRIBA

 (En tono sentencioso.) 

La conciencia es... ¡ser falor
caleóptero de mi fe!
PECTRA

 (Asombradísima.) 

¿Cómo?
CUESTA-ARRIBA
¡Que yo soy tu amigo!
345
PECTRA

 (Perdiendo la calma.) 

Esto es un juego de prendas.
CUESTA-ARRIBA
Lo mejor es que lo entiendas
sin saber lo que te digo.
Lo que sí puedo decirte
es que desde hoy te protejo;350
y que como ya soy viejo
y quiero de algo servirte,
declaro solemnemente
que es tuya mi prendería
y que si acaso algún día355
quieres ser independiente,
Pectra, no te faltarán
en ese nuevo horizonte

  (Conmoviéndose mucho y casi llorando.) 

¡ni una libreta en el Monte
ni una libreta de pan!360
PECTRA
Pero a mí, ¿por qué razón?
CUESTA-ARRIBA
¡No preguntes, hija mía!
Tu madre... ¡por firio anchía
marfendolio escalafón!
PECTRA

 (Fuera de sí.) 

¡Pero eso es tomarme el pelo365
y va usté a hacer que me cuadre!
¿Por qué al nombrar a mi madre
siempre me habla usté en camelo?
CUESTA-ARRIBA
No debo decirte más;
y si Dios no lo remedia,370
al final de la comedia...
¡tampoco te enterarás!
PECTRA
¿Por qué no habla usted a los otros?
CUESTA-ARRIBA
Porque yo no puedo hacerlo.

 (Confidencialmente.) 

¡Esto... no debe saberlo375
más que el público y nosotros!
¡Y ahora, adiós!...

 (Medio mutis. Conmovido, vuelve y la coge de un brazo. Con interés.) 

¿Me llorarás
el día que yo me muera?
PECTRA
Hombre, siendo su heredera...
¡Pues no faltaría más!380
CUESTA-ARRIBA

 (Va al foro.) 

¡Adiós, pues, rosa temprana!
PECTRA

 (Deteniéndole.) 

Antes quiero preguntarle,
¿qué nombre debo a usted darle?

 (Pausa. Con mucha importancia.) 

CUESTA-ARRIBA
Pues... ¡Furcio encárabe andana!

 (Mutis foro, sollozando cómicamente.) 



Escena VI

 

PECTRA.

 
PECTRA
¡Espantosa confusión!385
¿Qué pasa aquí?... No lo sé,
pero sin saber por qué
me escama esa protección.

 (Pensativa.) 

Me ha hablado de su conciencia,
a mi madre ha conocido390
y luego se ha enternecido
al anunciarme la herencia.
¡Dios mío!, ¿qué podrá ser?...
Cualquiera sospecharía
la cosa... ¡Yo todavía395
no la puedo comprender!...

  (Queda pensando.) 



Escena VII

 

Dicha y SANTONJA, foro.

 
SANTONJA
(He visto salir a Cuesta
y aunque volverá, supongo,
para lo que me propongo
ninguna ocasión como ésta.)400
¡Pectra!...

  (Acercándose.) 

PECTRA

 (Asustada.) 

¡Ay!, ¿qué pasa?... ¿Es usté?
SANTONJA
Yo, hija mía, yo, que trato
de que charlemos un rato
si no te opones.
PECTRA
¿Por qué
me he de oponer?...
SANTONJA
¡Es muy serio
405
lo que aquí a tratarse va!
PECTRA
(¿Otra consulta?... ¿Estará
en crisis el Ministerio?)
SANTONJA
Pectra, por cierta ocurrencia
que ya sabrás algún día,410
es una obligación mía
y un deber de mi conciencia
el protegerte.
PECTRA

  (Desesperada.) 

¿Un segundo
protector?... ¡No aguanto más!
¿Soy responsable de las415
conciencias de todo el mundo?

  (Con firme energía.) 

SANTONJA
Mi obligación es sagrada.
Escúchame...
PECTRA

  (Con energía.) 

¡Se acabó!
Ya me voy cansando yo.
SANTONJA
Pero hija...
PECTRA
No escucho nada.
420
Me hace usted perder el tino
con este nuevo sermón.
SANTONJA
Comprendo que mi intención
es traerte al buen camino;
quiero enseñarte a rezar,425
que olvides tus chifladuras,
que en lugar de hacer locuras
y correr y retozar,
te hagas digna de mi elogio
y tengas siempre en la mano430
bien el Santoral romano
o bien el Martirologio;
que dejes de visitar
esa endiablada herrería
donde te pasas el día435
dando a las gentes que hablar
y, por último, deseo
que si al baile piensas ir
y no quieres desistir
de ese inocente recreo,440
hagas caso de Santonja,

  (Conmovido y en tono de cariñosa persuasión.) 

y no vayas, hija mía,
vestida de amo de crías,
¡sino vestida de monja!
PECTRA
¿De monja? ¡Porque usted quiera!445
SANTONJA
¡Te caerá divinamente
y es el traje más decente
para una chica soltera
que aún no ha abandonado el seno...
del hogar!
PECTRA

 (Llevándole aparte.) 

Oiga usté, amigo,
450

 (Con mucho interés.) 

¿sabe usté lo que le digo?...

  (Destacado.) 

¡Que me alegro verle bueno!
SANTONJA
¿Cómo?
PECTRA

 (Con gran decisión.) 

¡Que en vano se afana,
que no se moleste usté
y que yo ahora y siempre haré455
lo que me dé la real gana!
SANTONJA
Pero eso es un desatino.
PECTRA
Nadie manda en mí hoy por hoy,
y con su permiso... voy

  (Con guasa y muy descaradamente.) 

a casa de Maximino.460
 

(SANTONJA quiere protestar.)

 
Quitarme a mí esa manía

 (Con firmeza.) 

es pedir peras al olmo.
SANTONJA

 (Escandalizado.) 

¡Pues, señor, éste es el colmo
de la sinvergüencería!
PECTRA
Conste que resuelta estoy465
a ir de nodriza.
SANTONJA
¡Esto más!...

  (Amenazador.) 

¡Ay de ti, si al baile vas!
PECTRA
Pues, ¡ay de usted, si no voy!

 (Mutis foro, después de hacer un desdeñoso desplante.) 



Escena VIII

 

SANTONJA.

 
SANTONJA

 (Paseándose agitado.) 

¡Nada, que es cosa perdida!
¡Tiene un genio montaraz!470
Está acostumbrada a hacer
lo que quiere, y nada más,
y nos traerá de cabeza,
sí, señor, que nos traerá.


Escena IX

 

Dicho, LA SEÑÁ EVA y EL URBANO foro.

 
EL URBANO

  (Entrando con gran curiosidad e impaciencia.) 

¿Qué ha pasado?
LA SEÑÁ EVA
¿Está más dócil?
475
SANTONJA
No, señora. ¡Qué ha de estar!
EL URBANO
¿Cómo?
SANTONJA
¡Por poco me pega!
LA SEÑÁ EVA
¿Ve usté? ¡Si es muy desahogá!
SANTONJA
Aquí no hay otro recurso
que un encierro temporal:480
un colegio, o un asilo,
o un taller.
EL URBANO
Pero, ¿quién va
a atreverse a proponérselo?
SANTONJA

 (A EL URBANO.) 

Usted, con su autoridad.
EL URBANO
¡A mí me da cuatro tortas485
en cuanto principie a hablar!
SANTONJA
No, porque se le da un susto.
LA SEÑÁ EVA
¡Si no se asusta de na!
SANTONJA
Yo me encargo, si usted quiere.

  (A EL URBANO.) 

Lo importante es evitar490
que visite a Maximino,
y para eso tengo un plan.
El delegado es amigo;
la pareja siempre está
ahí cerca.
EL URBANO
¿Qué es lo que intenta?
495
SANTONJA
No teman, ya lo sabrán;
una cosa que no tiene
nada de particular.


Escena X

 

Dichos y CUESTA-ARRIBA desde el foro.

 
CUESTA-ARRIBA

 (Riéndose.) 

El demonio es esta chica.
EL URBANO
¿Qué ocurre?
CUESTA-ARRIBA
Vengan acá.
500

 (Indicando que miren por el foro.) 

SANTONJA

 (Aparte.) 

¡Qué apostamos a que ha hecho
alguna barbaridad!
 

(Yendo a mirar todos.)

 
CUESTA-ARRIBA
Miren a Pectra.
LA SEÑÁ EVA

 (Fijándose.) 

¿Qué trae
envuelto en el delantal?
CUESTA-ARRIBA
Es el cuerpo del delito.505

 (Riendo.) 

¡Ha hecho un robo!
SANTONJA
¿Cómo?... ¿Ya?...
CUESTA-ARRIBA
¡Un perro de aguas!
LA SEÑÁ EVA
¡Qué escándalo!
SANTONJA
¡Qué falta de dignidaz!


Escena XI

 

Dichos y PECTRA con un perrito en los brazos.

 
TODOS

 (Indignados y alzando la voz.) 

¡Pero, niña!
PECTRA

  (Con amoroso interés.) 

¡Más bajito,
que se puede despertar!510
EL URBANO
¡Tire usté eso!
PECTRA
¡Enseguidita!

 (Acunándole.) 

¡Duerme, rico!
LA SEÑÁ EVA
¡Estás guillá!
SANTONJA

 (Amenazador.) 

¡Venga el palo de la escoba!
PECTRA
¡Hombre, no sea usté animal!

 (Huyendo con el perro en brazos. Con dramático entusiasmo.) 

¡Es mío!... ¡Nadie lo toque!515
SANTONJA

  (Persiguiéndola.) 

¿Conque es tuyo?... ¡Ahora verás!
PECTRA

 (Después de dar una vuelta por la escena.) 

Huyamos, que aquí hay laceros...
¡Ven a casa de papá!

  (Sale por el foro.) 

CUESTA-ARRIBA
¡No me negarán ustedes
que es un rasgo maternal!520
EL URBANO
Sí, es un rasgo propio de la
casa de Maternidad.


Escena XII

 

Dichos, menos PECTRA. Todos quieren salir detrás de ella. SANTONJA los detiene.

 
LA SEÑÁ EVA
¡Vamos por ella!
SANTONJA
Dejarla.
Oigan ustedes mi plan...
 

(Mutis todos por la puerta del foro.)

 


 
 
MUTACIÓN
 
 


IndiceSiguiente