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ArribaAbajo- 445 -


El poeta se regala un soneto


ArribaAbajo   Me voy a regalar un buen soneto,
con sabor a vainilla y chocolate;
para endulzarme bien este cuarteto
y que de tanta gula me rescate.

   Para calmar mis hambres me sujeto  5
al rojo circular de un buen tomate,
y al dulce que más quiero y más respeto
dispongo para el último combate.

   Por un lado me ataca el caramelo,
por el otro es el dulce de membrillo  10
y sin piedad, de frente, un pan de gloria.

   Me derrumbo a la sombra de un ciruelo,
donde llega el olor de un solomillo,
que consuela las hambres de mi historia.




ArribaAbajo- 446 -


Momentos mágicos


ArribaAbajo   Hay un momento mágico del día
en que la luz total, de ti la toma.
Cuando la flor expande tanto aroma
que cada son regresa a su armonía.

   Es la revolución de la anarquía  5
en la que todo tiene el mismo idioma,
y sobre nuestras almas se desploma
el azul convertido en melodía.

   Yo me dejo llevar por este verso
que me nace en la paz de la rutina,  10
por alcanzar la gloria que presiento.

   Es como si meciera al universo
en esta claridad de mi retina,
poniéndole por sábanas el viento.




ArribaAbajo- 447 -


A Sabina


ArribaAbajo   No te olvido Sabina. No te olvido.
Lo que pasa es que estoy veraneando
y tengo a los sonetos sesteando
a la sombra de un tiempo prometido.

   Que merecen descanso y han cumplido  5
con el qué, con el cómo y con el cuándo,
de todo lo que pido y les demando,
en este frenesí desconocido.

   En Valencia a Joaquín le dicen Ximo
y a Ramón, Ramonet, que mal no suena,  10
si tratamos de dar con la armonía.

   Yo disfruto del vino en el racimo,
tú en la copa que ansioso miras llena,
y los tres si contamos la ironía.




ArribaAbajo- 448 -


A mi amigo Lope de Vega


ArribaAbajo   Por nacer inquilino en tu soneto
hoy me siento más Lope que García.
Pertenezco a la misma Cofradía
y termino con esto este cuarteto.

   Grande es mi admiración y mi respeto  5
al llevarte por sombra y compañía,
que a los buenos poetas Dios los cría
y a los malos les pone en un aprieto.

   Cada vez es mi Vega más extensa,
más natural, si cabe, y más sencilla,  10
sólo para lograr el parecido.

   Cada uno que piense lo que piensa,
ancho es mi corazón, y ancha Castilla,
que en tu nombre y el mío no haya olvido.




ArribaAbajo- 449 -


A mi querido Madrid


(San Jacinto. Juega el Madrid en Lisboa un amistoso, andamos de pena)


ArribaAbajo   Cada vez me produce más tristeza,
ver jugar al Madrid fuera de casa,
aunque juega a jugar no sé que pasa
que su juego no tiene ya belleza.

   Competir y ganar fue su grandeza,  5
si su historia y su nombre se repasa,
¡cómo puedo vivir cuando fracasa,
si me siento morir cuando tropieza!

   A esta Madrid le sobran millonarios
y le falta el coraje del que entiende  10
que en la entrega está siempre el ser figura.

   Son del balón redondo mercenarios,
el que tiene millones los pretende,
con un pago que roza la locura.




ArribaAbajo- 450 -


Soneto a las «bodas de plata» de Manolo y Julia


ArribaAbajo   Como nuestros amigos han llegado
en veinticinco años de camino,
a sus Bodas de Plata, con un vino,
debemos de brindar por lo logrado.

   Y preguntarnos todos si este estado,  5
es un simple regalo del destino,
o de un amor que se hizo peregrino
para alcanzar lo eterno y lo sagrado.

   Se merecen tal gloria en este día,
que esta Plata la fundan con el Oro,  10
y el dorado metal con el Diamante.

   Y si este brindis vale como guía,
alcancemos con ellos el tesoro,
y con ellos digamos ¡Adelante!




ArribaAbajo- 451 -


Hacia el final


ArribaAbajo   Aquí no queda ya ni la basura.
Han pasado los últimos traperos
y el alma me han dejado, casi en cueros,
en un arranque ciego de locura.

   Las deudas que ha dejado mi ternura  5
serán pagadas todas por terceros,
ya que en mi vida fueron mis veneros
y modelo de amor y de lectura.

   Explico, como veis, mi descontento,
pues tengo que dejar, sin merecerlo,  10
las cosas que se llaman sólo vida.

   Me agarro a cualquier hora, en un intento,
de ser aunque me cueste parecerlo,
un ser que hasta la muerte se le olvida.




ArribaAbajo- 452 -


A Juan, querido por todos


A mi hija, Consuelo


ArribaAbajo   Se nos murió de ser buena persona.
De ser tan generoso de ternura,
de haber dado a mi casta una criatura
y de su Coronado, una corona.

   Se nos murió. La muerte no razona.  5
Y nos dejó su manto de amargura,
mientras el Dios estaba en su clausura
sin importarle quien nos empadrona.

   Pero a pesar de todos los dolores,
que tu ausencia nos da cada mañana,  10
vivimos con tu amor como latido.

   Que quien siembra el amor, recoge amores,
y el poeta que canta en tu ventana;
también supo querer lo que has perdido.




ArribaAbajo- 453 -


Un soneto de visita


ArribaAbajo   Aquí no cabe un verso de amargura,
ni una ola del mar que rompa en pena,
aquí la pegatina es azucena
y el cielo es sólo un lienzo sin moldura.

   Aquí no hay hombre cuerdo, ni locura,  5
ni amante que se da por cuenta ajena,
aquí hay unos apóstoles sin cena
y un mendigo de amor en la basura.

   Aquí nadie comulga con verdades,
si vive en la ciudad de la mentira  10
y tiene que comer y pagar piso.

   Aquí vive quien vende sus bondades,
y luego a sus caprichos se retira,
sabiendo que no existe el paraíso.




ArribaAbajo- 454 -


Soneto


ArribaAbajo   La Duda, el Buen Obrar y la Prudencia.
El saber Escuchar. El ser Oído.
En Amores, ser fiel Correspondido
y en el Gozar estar la Penitencia.

   Darle puerta castrense a la Obediencia.  5
Ser buen Padre, después de buen Marido.
Florecer la Amistad sobre el Olvido
y una playa en las Costas de Valencia.

   Con la edad ser más digno con tu Aseo.
Esperando que el día te Despierte  10
con la Pluma dispuesta y bien surtida.

   Por pedir que no quede algún Deseo:
El momento más breve ante la Muerte
y un soneto de Amor de Despedida.




ArribaAbajo- 455 -


Cómo debía empezar El Quijote


ArribaAbajo   En un lugar Manchego que aún ignoro,
vivía Dulcinea del Toboso,
que tuvo a un tal Quijano como esposo,
y en su propia leyenda su tesoro.

   Soñaba el caballero ser del moro,  5
el nuevo Cid llamado a ser coloso,
aunque su padre fuera el mentiroso
mayor que nunca tuvo piel de toro.

   La Dama que sabía sus andanzas,
dejó lugar y casa suspirando,  10
buscar en otro amor mejor gobierno.

   Mas tal fue la leyenda en alabanzas
de este deshacedor de entuertos, cuando,
ella fue la inmortal y él sólo eterno.




ArribaAbajo- 456 -


El poeta asoma su esperanza...


ArribaAbajo   Después de descubrir la Poesía,
y hacer de mis alforjas, casa y cuna;
llevar en mi linaje mi fortuna
y estar en la prudencia cada día;

   tener en las estrellas compañía,  5
y un cierto compromiso con la Luna;
y en cada decisión ser oportuna
la paz que me dejó servir de guía.

   De haber dado mil vueltas a mi sueño
y abrir alguna puerta necesaria...  10
pregunto con mi verso más sereno:

   Si haber puesto en el logro tanto empeño,
debiera ser mejor que una plegaria;
decir que sobre todo he sido bueno.




ArribaAbajo- 457 -


Desde el siglo XVII, el poeta da las gracias a su «editora» Francesca


ArribaAbajo   Estos que ven volar mis esperanzas,
versos fueron oscuros en mi pecho,
resignados a ser en este lecho
dulces ruegos sin otras alianzas.

   A la espera de un tiempo de mudanzas  5
que pudieran servirme de provecho,
nunca pude sentirme satisfecho,
ni alcanzar con mi fe nuevas fianzas.

   Altos muros me fueron levantados
donde no pudo el Sol ver con sus ojos  10
el triste luminar de mi tesoro.

   Sólo tú, con esfuerzos renovados,
a otro cielo llevaste mis despojos,
dando, Francesca, a todo, brillo de oro.

Jávea, verano 2003.




ArribaAbajo- 458 -


¡Viva Madrid, que es mi pueblo!


ArribaAbajo   Por la gracia de un ser que me ha parido
en el viejo Madrid, me siento gato.
Sin que tenga el alcalde por mandato,
pregonar que por ley lo he merecido.

   Soy un gato de Lope y mantenido,  5
por su verso tocándome a rebato,
aunque a veces por gusto le retrato
como a un dios que en su vega dios ha sido.

   Mis paisanos poetas me enseñaron,
como ver el Madrid de mis amores  10
con los ojos de un hijo madrileño.

   Que de niño con versos me mandaron,
a sentir al Madrid en mis colores
y el aroma del río de mi sueño.




ArribaAbajo- 459 -


Al amado Sabina


ArribaAbajo   Tú, piensas que te cuidas ¡qué ignorante!
Te tratan el pulmón con hemotórax,
y el hígado al olvido de las horas
buscando la cirrosis del tunante.

   Con pelas, que te busquen un transplante,  5
saltándote la lista de demoras,
que no hay en la otra vida, mecedoras,
ni pagan los derechos al amante.

   Hazme caso, Sabina, ¡ten cuidado!,
no confundas «no fumo» con «me curo».  10
No lo esperes con el actual sistema.

   Poca carne y más platos de pescado.
No le des a tu cuerpo trato duro
y al alma una salida: el enfisema.




ArribaAbajo- 460 -


Soneto


ArribaAbajo   Quien piensa celebrar horas de gozo,
contando a quien le escucha su experiencia,
o es socio de la Luna de Valencia,
o es del sol de los bobos un buen trozo.

   La estupidez es siempre un calabozo,  5
donde se hace el patán la competencia,
ya sea en soledad o con audiencia,
acabando su risa en un sollozo.

   Molesta es la presencia del cretino
y más que del cretino de su corte,  10
pues reyes más parecen que vasallos.

   A mí, que estos me importan un pepino,
bien sé que aunque no hay Dios que los soporte,
son hijos de su madre y nuestros fallos.




ArribaAbajo- 461 -


Nada...


ArribaAbajo   Teniendo sed de todo, no ser nada.
Llegar de pura lástima a la meta.
Sin ser un mal tullido ni un atleta,
ni haber dado prestigio a una morada.

   La nada fue en mi caso tan variada,  5
que no sé si he llegado a ser poeta,
por una insensatez de la ruleta
que sabe donde tiene la parada.

   Cuando llega la nada sólo queda
dejar algún vacío, por si quiere,  10
hacer nido esta noche en tu costumbre.

   Que la nada por nada deshereda
y sólo se da cuenta el que se muere,
de haber sido de nada servidumbre.




ArribaAbajo- 462 -


Soneto


ArribaAbajo   No está el horno, Señor, para sonetos,
ni las hambres están para demoras,
ni los cuentos para contar las horas,
ni las bocas para contar secretos.

   Que ni lo harán los hijos de mis nietos,  5
es más cierto que duda que devora
y la esperanza vaga se evapora
en miles de proyectos y decretos.

   Si una dolencia al hombre le amenaza
de inmediato se ponen los millones  10
para cortar cualquier plaga extranjera.

   Y cuando yo pregunto a nuestra raza,
si la hambruna tendrá sus soluciones
el silencio me dice: ¡iluso, espera!




ArribaAbajo- 463 -


A Lope, hermano en el verso


ArribaAbajo   Nunca se da el olvido por vencido,
ni la derrota olvida su venganza,
ni el miserable pierde la esperanza,
ni ver su bien, el rico, repartido.

   Nadie quiere en el mal hacer su nido,  5
ni el honrado vender su confianza,
ni la mar despreciar una bonanza,
ni el creyente perder lo prometido.

   Nadie quiere romper su lazo amado,
ni dejar que su esfuerzo se derrame  10
como un río en las aguas de los mares.

   Solamente yo soy quien ha soñado,
que al morir sea Lope quien me llame
y comparta conmigo sus cantares.




ArribaAbajo- 464 -


Con las hambres del poeta


ArribaAbajo   Me levanto con hambre de comida
y me acuesto sin ver calmada el hambre.
Por su culpa gasto piernas de alambre
porque el hambre que tengo es desmedida.

   No conozco razón más conocida  5
que pensar en el pan y en el fiambre
y si el vientre me da algún mal calambre
es señal de que el hambre no me olvida.

   Que me acuerdo de ÁNGEL y MERCEDES,
cada vez que me pone, BLANCA, el plato,  10
es un hecho basado en la abundancia.

   Menos mal que lamiendo las paredes
me consuelo de tanta vigilancia
y del bote con el bicarbonato.




ArribaAbajo- 465 -


ArribaAbajo   Siempre habrá quien incite a la bebida
y otro más peligroso con la droga.
Quien te anime a robar teniendo toga
y el que nunca te deje ser querido.

   Siempre habrá en tu sendero un forajido  5
y un pervertido juez que te interroga.
Un demente que escucha y que dialoga
y algún dios que te niegue haber nacido.

   Habrá seres al borde del suicidio;
dictadores que ocultan sus crueldades,  10
inventado sus nuevos crucifijos.

   Inocentes penando en el presidio.
Y detrás de estas mil calamidades:
Una madre penando por sus hijos.




ArribaAbajo- 466 -


ArribaAbajo   No me gustan los gestos del Sabina
recordando sus pleitos con la droga,
pues paréceme siempre que dialoga
con su faz del espejo más dañina.

   Pregonero de Entierro de Sardina.  5
se le nota que quiso llevar toga;
como juez que sentencia e interroga
ocultando su lengua viperina.

   Mas también lo que gusta hay que decirlo
que algo tengo del «El Hombre Enmascarado»  10
y es mejor tu virtud que tu cicuta.

   Esa voz medio rota de hábil mirlo.
Las canciones que me han enamorado.
Y esos bailes con Ana: ¡hijo de ruta!




ArribaAbajo- 467 -


ArribaAbajo   Te imagino nocturno y aburrido,
por las calles buscando un agujero;
confundiendo pensión con sumidero,
y dejando en la acera lo bebido.

   Otras veces, dictándole a Cupido,  5
una letra de amor, que en tu vaquero,
le guardabas al último trapero
que se fue por la calle del Olvido.

   Me imagino tu voz en la resaca,
esa voz en la tasca de la esquina,  10
reclamando un jerez y un bocadillo.

   Sin saber donde escondes la petaca,
o si todo con hoy ya se termina,
en el humo del mismo cigarrillo.




ArribaAbajo- 468 -


ArribaAbajo   Me subía la calle de Segovia,
con la misma ilusión cada mañana,
encontrar un trabajo y una novia
que no fuera ni china ni gitana.

   Y en la Puerta del Sol, me detenía,  5
en el número cero de las rutas,
donde está mi calvario y mi agonía
pues no encuentro ni el árbol ni las frutas.

   Si trabajo no encuentro, ni a la chica,
que en mis sueños primeros esperaba,  10
es que todo lo bueno mucho cuesta.

   Pero soy tesonero y no claudica
mi manera de ser, por si a la octava,
a mis ruegos me dan una respuesta.




ArribaAbajo- 469 -


ArribaAbajo   Que no te falta nada es bien sabido,
pues tienes buen olfato par todo;
incluso para darte de algún modo
la raya que has dejado en el olvido.

   ¿Tú de qué vas? Es término manido  5
y a florecer se empieza desde el lodo;
si no tienes un nombre con apodo
da lo mismo desnudo que vestido.

   Presumir de ser nada, nada dice,
al que riega con lágrimas el valle  10
y le cuesta un filete mil sudores.

   Sólo espero si el Papa te bendice,
que no deje de hacerlo con detalle
y que la darte la paz cobre de autores.




ArribaAbajo- 470 -


Sucesos


ArribaAbajo   ¡Me tenía que dar a mí este amago!
o este infarto que así es como se llama,
cuando estaba tan cerca de la fama
y por este dolor casi la cago.

   Desde entonces no sé ni lo que hago  5
cuando apenas me alejo de la cama,
cuando no es un tendón el que se inflama,
es un nuevo dolor o es el lumbago.

   Como veis no está el horno para bollos
ni hay doctor que me cure de armonía  10
a pesar de ser casi de este gremio.

   Menos mal que es mentira y estos rollos
son las cosas que pienso cada día
y me dan un soneto como premio.




ArribaAbajo- 471 -


Para nacer Madrid...


ArribaAbajo   Para nacer Madrid. No cualquier parte.
Para morir da igual pueblo que villa.
Que si en nacer está la maravilla
para morir nos sobra el estandarte.

   Madrileño es decir: Hablar con arte.  5
De lo que está de moda o se apolilla.
En no poner jamás la otra mejilla
ni que el primo se escape en un descarte.

   De nacer en Madrid se recomienda
hacerlo en Chamberí; si ello es posible.  10
Aunque no está la alcance de cualquiera.

   Yo no sé si soy yo o soy el menda,
que se siente conmigo imprescindible...
Sólo sé que soy gato hasta que muera.




ArribaAbajo- 472 -


Soneto para Ángel


ArribaAbajo   Un soneto me manda hacer mi hermano,
cuando tengo la pluma jubilada,
y las ganas de estar sin hacer nada
hasta ver lo que pasa este verano.

   Mientras tanto recibe lo más sano  5
que hay en el corazón de tu cuñada,
donde sabes fue siempre la morada
de un poeta que escribe en castellano.

   Pero no están las cosas, hoy en día,
para darle al amor más hermosura;  10
yo en la orilla del mar y tú en la sierra.

   Y si está en tu pincel mi poesía,
y en mis versos latiendo tu pintura,
grite el Arte, también, un ¡no a la guerra!

Último día de febrero, 2003.




ArribaAbajo- 473 -


¡Qué hijo de puta!


ArribaAbajo   El que venga detrás que coma mierda
o que espere a que sacie el apetito
y se coma las obras si repito
o que vote de nuevo por la izquierda.

   Buen sabor al puchero da una cuerda  5
que ha servido a un chorizo de manguito,
o una raspa de atún o de bonito,
que es pecado pensar en una cerda.

   Si seguís mis consejos gratuitos,
nunca tendréis ni úlcera ni ardores,  10
que no esté en la comida vuestro gusto.

   Pero más que ser pobres, sois cabritos,
y aún teniendo tan buenos profesores,
os coméis lo que dejo que es lo justo.




ArribaAbajo- 474 -


A mis «bodas de diamante» con la vida (75 años)


ArribaAbajo   Ya no me quita nadie que me muera
sin cumplir esa edad de caminante,
que por dura la llaman de diamante,
y que yo siempre digo de quimera.

   ¿O es acaso posible al que venera  5
del soneto su parte más brillante,
el llegar a estos lustros siendo amante
y aún tener en la rima compañera?

   No ha de ser el final, en mí, la muerte,
que dicta el corazón con su parada  10
y ofrece tras el fuego la ceniza.

   Sino cuando te nombre y, ya no acierte,
a escribir con mi voz enamorada
el verso que en mis ojos agoniza.




ArribaAbajo- 475 -


Soneto a Blanca en 2003


(En las «bodas de oro» de nuestro matrimonio)


ArribaAbajo   ¡Cuántas veces cruzando el Manzanares,
por el pino Paseo Extremadura,
he subido buscando la dulzura
de tus labios que son mis colmenares!

   ¡Cuántas veces soñando esos lugares  5
la nostalgia, que duele, se me cura,
al pensar que un tesoro en tu cintura
me hizo llevarte a un huerto de azahares!

   Dura cincuenta años este lazo,
que por ser de ternura en ti nacida,  10
es eterno par el eterno amante.

   Déjame darte, amor, en este abrazo,
el soneto más tierno de mi vida,
con la luz de tus ojos más brillante.




ArribaAbajo- 476 -


Terminaciones


ArribaAbajo   Te cambio por un cromo mi esperanza
que tenga a mi Madrid en el escudo.
Y todo lo que soy por un saludo
que acabe con la sed de la venganza.

   De todo siempre saco una enseñanza  5
que en esto de aprender soy testarudo.
Te cambio por tu sombra mi desnudo
y el odio de tu mar por mi bonanza.

   La hora de mi muerte no está en venta
ni nada que merezca ser cambiado.  10
Siempre es imprevisible la mañana.

   Te gusta que te quiera y que te mienta
y alabe tu magnífico guisado.
Acabo este soneto y la semana.




ArribaAbajo- 477 -


Esfuerzos


ArribaAbajo   Cada vez cuesta más hacer camino;
más apartar la broza de una idea,
y suspirar al ver como jadea
por mala digestión el intestino.

   Cuesta que haga las cuentas el destino  5
sin que exista palabra que se atreva,
ni que pague con versos lo que deba
o comulgue con ruedas de molino.

   Cada vez cuesta más lo que no cuesta,
o lo que antes se hacía sin esfuerzo  10
y en la repetición estaba el gusto.

   Ni estoy para el espejo ni de fiesta,
y mira que hago ayuno, que no almuerzo.
No me muero por no darme un disgusto.




ArribaAbajo- 478 -


¡Feliz Año Nuevo! ¿O no?


A mi sobrino, Juanma, como feliz citación...


ArribaAbajo   Empiezo este soneto el día treinta,
del mes de Navidad y de Año Viejo;
el año dos mil dos, y no me quejo,
de si el sol me da frío o me calienta.

   Soy por naturaleza de placenta,  5
poco dado a seguir ningún consejo,
y a mirarme lo justo en un espejo,
que a esto lleva la edad, aunque te mienta.

   El año dos mil tres, está llamando,
¿Será el último año de mi vida,  10
o viene dando leches sin recibo?

   Escribo este soneto reafirmando,
que no le doy al cuerpo lo que pida,
por dar fe en el ayuno de que vivo.

Escrito entre el día 30 de diciembre de 2002 y el 1 del año 2003. ¡Joder cómo estoy!




ArribaAbajo- 479 -


Puedes...


ArribaAbajo   Puedes decir que el tema no te gusta.
Puedes pensar que escribo como un viejo.
Puedes hacerme daño y no me quejo
aun siendo tu razón un poco injusta.

   Puedes decir aquello que disgusta.  5
Puedes ir para atrás como un cangrejo.
O me puedes pedir algún consejo
por creer mi palabra noble y justa.

   Puede que tanto puede, no me puede,
y que del puede salga victorioso  10
o que me traiga un niño la cigüeña.

   Pero también, que el cielo me conceda,
la alegría de ser un mentiroso,
que dice con su verso lo que sueña.




ArribaAbajo- 480 -


El mejor soneto del mundo


ArribaAbajo   Alabado por Lope y por Quevedo
y por el mismo Góngora leído;
y por Cervantes dándole apellido
y Teresa la gracia de su enredo.

   Gran amigo de Baco y su viñedo  5
y por todos los ángeles vestido
fue en los mares el más reconocido
y entre vates la gloria de su credo.

   Pero el olvido le hizo tan secreto
que fueron más sus gozos que sus penas  10
y más sus infortunios que su suerte.

   Y esto vengo a decir de aquel soneto
que al librarle mi fe de sus cadenas,
al dárselo a la luz, le di la muerte.




ArribaAbajo- 481 -


Hacia el final


ArribaAbajo   Cuando te falta el aire en los pulmones
y te cuesta gritar pidiendo ayuda
y tu lengua se queda ciega y muda,
suspendiendo las próximas funciones.

   Cuando vas de ventanas a balcones,  5
deshojando las flores de tu duda,
y al salir a la calle te saluda
el que va recogiendo peticiones.

   Cuando ves que repasan los recibos,
que tardas en pagar la vida entera,  10
por un palmo de tierra o ser quemado.

   Adivina que son estos motivos
los que anuncian que acaba tu carrera,
en un simple papel certificado.




ArribaAbajo- 482 -


Hita


(El poeta se queja de su empinada geografía)


ArribaAbajo   Hita es Guadalajara y es España.
Atalaya romana de vigía.
Libro del Buen Amor, que luz envía,
al subir y subir de esta campaña.

   Hita no te defrauda, ni te engaña,  5
que la Virgen que sirve como guía
de la Cuesta se llama, todavía,
y debiera de ser de la cucaña.

   Buen lugar para el frío, caminante,
que se quita subiendo largas cuestas,  10
o te mata si paras un momento.

   Yo que me viene el llano como un guante,
y que son mis andanzas más modestas,
si llego a estar en Hita ¡ni lo cuento!




ArribaAbajo- 483 -


ArribaAbajo   Quien se puede salir de la cordura
y meterse en camisa de once varas,
si le miras de frente no te aclaras
donde tiene la rana su ranura.

   Pero si alguien dispone de mesura  5
repartiendo las próximas cucharas,
y te toca la chica y no disparas
te mereces la hostia más oscura.

   Si dispones de tiempo y un momento
reflexionas en todo lo que he escrito;  10
¡por favor! si adivinas mi secreto:

   Sal a buscarme y di si lo que siento
es ganas de inventarme algún delito
o burlarme de ti en este soneto.




ArribaAbajo- 484 -


Virginia


ArribaAbajo   Dime dónde no estás. Dónde eres nada.
En que neón no anuncian tu presencia,
de que mundo perdido eres ausencia
o en que brisa te vas evaporada.

   Dime que no eres tú; que eres un hada  5
dando vueltas en mi circunferencia.
Que eres música, coro, una cadencia,
un silencio de luz, de luz cansada.

   Dime que eres mi voz o mi palabra,
o una sombra perdida con los años  10
que de nuevo recobra forma y beso.

   O quizás es mi sueño el que te labra
en mi fuente de bálsamos y paños
para ser una Musa de regreso.




ArribaAbajo- 485 -


A mis queridos catedráticos


ArribaAbajo   Son, de la Facultad de Medicina,
los pilares de un logro permanente;
derramada virtud, eterna fuente,
que hace del pensamiento luz divina.

   Sol de sabiduría que declina  5
por hacer luminar más su presente;
y un pasado que brota refulgente
sobre un alba de cándida rutina.

   Todo el saber humano que deslumbra
con poderoso celo nuestra ciencia,  10
es de vuestro tesón firme venero.

   Quiera mi verso amigo, en la penumbra,
bendecir con la flor de vuestra herencia:
la salud de mi humilde cancionero.




ArribaAbajo- 486 -


A mi cuñado, Ángel González Santiago, rey de los fogones y sus derivados, con un cariño bien aderezado


ArribaAbajo   La cocina que esté limpia y dispuesta,
que no falte del ajo a la guindilla,
si queremos guisar la maravilla
donde asombre, la mesa más modesta.

   Después de la consulta habrá propuesta  5
si será con aceite o mantequilla,
o será un buen Rioja o Manzanilla,
justo dando el sabor que no molesta.

   Y una vez, hecho el rezo y los amenes:
¡tiemblen las cacerolas y sartenes!  10
que la jornada es larga por esmero.

   Y para dar principio a estos belenes
entra por la cocina mi cuñado
con su sufrida esposa de escudero.




ArribaAbajo- 487 -


Lugares


ArribaAbajo   Estaba la mujer: La más hermosa.
Que ofrece sus manjares al más pobre.
Y el rico, aprovechando lo que sobre,
que se ha vuelto la Luna caprichosa.

   Comer y disfrutar: Cosa gozosa.  5
Y nadie está presente que nos cobre.
Aquello que no es gratis es salobre
y el oro es la palabra más dudosa.

   Es un depredador quien me despierta
marcándome los días y las horas,  10
de todos mis ensueños y quimeras.

   ¿Por qué no habrá algún gesto que convierta
los males que me acechan en mejoras
y a todas mis mentiras verdaderas?




ArribaAbajo- 488 -


Aquí, donde me lees...


ArribaAbajo   Aquí, donde me lees, estoy despierto.
Mañana no sabremos si termina
este soneto mío en una esquina
o eres tú la que ofrece este concierto.

   De tus gracias me siento mal cubierto  5
y me curo de todo en la cantina,
porque se ha puesto cara la morfina
y aún no tengo valor para estar muerto.

   Yo te sigo queriendo. Y tú lo sabes.
Pero tanto te gusta la riqueza,  10
que le vendes el alma a un chatarrero.

   Me dedico a volar, como las aves,
aunque dicen que llevo la tristeza,
del que vive en tus ojos prisionero.




ArribaAbajo- 489 -


Aquí cuando termina...


ArribaAbajo   Aquí cuando termina todo evento,
hay siempre una medalla que te espera,
o alguna nota, donde, se te entera
que vales más que dos y más que ciento.

   Aquí no se valora lo que miento,  5
por darle a un alma en pena lo que quiera,
y hacer de esta aburrida rinconera
el lugar más feliz del firmamento.

   Se teme del audaz por sus arrojos
y del conservador por su pasado.  10
Aquí el que mueve un dedo se condena.

   Le quitan las medallas a los rojos,
después a los azules su pecado,
y, a mí, me dan por nada: cuarentena.




ArribaAbajo- 490 -


Ofrenda a mi hermano


ArribaAbajo   ¿Tú sabes lo que dice la leyenda?
«Que no ha nacido aún, Manolo malo»
Y yo con mi soneto te regalo,
la cosa que haya en mí más estupenda.

   ¿Qué no sabes lo que es? Sí que lo sabes.  5
Allí donde yo esté, tú me acompañas,
igual me da la mar que la montaña,
o quien lleve el timón de nuestras naves.

   Lo nuestro es compartir la misma fuente,
el mismo manantial, la misma nata,  10
y la primer caricia de la Madre.

   Lo nuestro es ser hermanos, felizmente,
y un haz entre los dos donde se ata,
la luz que tuvo siempre nuestro Padre.




ArribaAbajo- 491 -


Reventa


ArribaAbajo   Te vendo un corazón en buen estado,
que sólo vale ya para un trasplante,
pues tuvo en el amor tan poco aguante,
que apenas se mojó quedó calado.

   Regalo al que lo de ya por comprado  5
su voz que presumía de cantante
y el sueño de un poeta delirante
que estuvo alguna vez enamorado.

   El precio no lo digo por vergüenza,
pues, la verdad, le tengo en poca estima,  10
y espero deshacerme de él con suerte,

   que no empiece a latir y me convenza,
que al venderlo, quizás, también suprima,
el derecho de darme yo la muerte.




ArribaAbajo- 492 -


Con letras de mi amor al triste tango


(A los parias que no se arrepintieron)


ArribaAbajo   Por vivir solamente de tristeza
y arrancar con mis lágrimas el fruto,
me comporto como un innoble bruto
que perdió por el tango la cabeza.

   Mis andanzas cobrándome la pieza  5
con apenas abriles de instituto,
me han llevado, por fin, al rojo esputo,
y a esconder mi pecado en la cerveza.

   Como un paria que arrastra su delirio
por el Hotel del Negro y por San Marcos,  10
hoy trato de vender el alma al diablo.

   Mi tez es azulada, como el lirio,
me peino en los espejos de los charcos,
y como en vez de pan algún vocablo.




ArribaAbajo- 493 -


Sorpresa


ArribaAbajo   A mí nadie me dijo que dolía,
para que yo tuviera precauciones.
Que la primera vez, sin excepciones,
empieza el corazón con su sangría.

   Poco a poco, sin darle tregua al día,  5
el tormento que causan las pasiones
que levanta el amor, sin dar razones,
del natural instinto te desvía.

   A mí nadie me dijo; Ten cuidado.
Que la primera vez deja una huella  10
tan profunda, que es una eterna sima.

   De aquel leve temblor este cuidado:
Evocar en mis sueños esa estrella
que sin saberlo fue mi primer rima.




ArribaAbajo- 494 -


Momento


ArribaAbajo   Al fin está la sierra más serrana;
y el río más fluido en su corriente;
el agua sale clara de la fuente
y el cielo es más azul esta mañana.

   La charca tiene música de rana;  5
y el campo con sus flores, sonriente;
y todo viene a mí, graciosamente,
indicio de una vida simple y sana.

   Se nota que te tengo en la alegría,
que pongo en cada cosa que te ofrezco,  10
y en esta mejoría en mis despojos.

   Sin ti, casi ni humano, yo sería,
que toda la locura que padezco,
me curas, simplemente, con tus ojos.




Arriba- 500 -


Lugares


Arriba   Aquí, los que no saben como duele,
cualquier dolor que tenga consistencia.
Aquí, los que han perdido la paciencia,
en un Dios que no llega y los consuele.

   Aquí, del pensamiento el que más vuele,  5
y ponga en cuarentena la conciencia.
Aquí, los cazadores sin licencia,
que matan sin que nada les desvele.

   Y allí, sobre la loma de mi sueño,
donde es azul el aire y limpio el cielo;  10
poner a mi esperanza, tan errante,

   que no intenta siquiera un nuevo empeño.
Pero que al menos tenga este consuelo:
Que aunque hizo lo que pudo, no es bastante.


 
 
FIN DE Memoria del silencio
 
 




En Valencia, a 8 de septiembre de 2003.



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