«Nueva guía del viajero en España y Portugal»

Pedro de Madrazo

La Dirección general de Instrucción pública pide informe á esta Real Academia acerca de la obra de D. Emilio Valverde y Alvarez, titulada: Nueva guía del viajero en España y Portugal, para los efectos del Real decreto de 12 de Marzo de 1875; y cumpliendo el deber que esta superior disposición le impone, lo evacua en los términos siguientes:

La obra de que se trata es, según su mismo título lo indica, ó aspira á ser por lo menos, la relación verídica de un viaje geográfico, artístico y pintoresco por la Península Ibérica. Comprende, por lo tanto, todas estas materias: geografía, topografía, historia, descripción de las entidades de población más importantes y de todas las líneas férreas y carreteras, itinerarios detallados, excursiones artísticas y de recreo, estadística general, industrial, comercial y agrícola y datos de utilidad general.

Empieza con la descripción geográfica y topográfica, después de una breve reseña histórica, en que, favorecido por la misma rapidez con que la traza, evita prudentemente el repetir vulgares afirmaciones que la moderna crítica repudia, señala la división territorial de la Península, civil y militar, eclesiástica y política; establece la división regional histórica como la más adecuada para facilitar las descripciones parciales, y considera cada una de estas regiones desde los diversos puntos de vista de su geografía y topografía, su historia, su producción agrícola é industrial, sus ferrocarriles y carreteras, su estadística, etc. Consagra un capítulo á dar útiles consejos al viajero, adoptando en esto el excelente método que puso en práctica en el Manual de Murray el erudito aunque excéntrico Richard Ford, que luego se ha seguido en todas las guías de los ya famosos Joanne.

El tomo I del titulado Guía práctico Valverde comprende cinco regiones, ó sean los antiguos reinos de Toledo, Castilla, León, Galicia, Principado de Asturias, Navarra y Provincias Vascongadas,   —345→   y en estos las 25 provincias que forman la zona central y septentrional. El tomo II, consagrado á la zona oriental, occidental y meridional, comprende las seis regiones restantes de España, es decir, los antiguos reinos de Aragón, Principado de Cataluña, Valencia y Murcia, Córdoba, Sevilla, Jaén y Granada, Extremadura, Islas Baleares, Canarias y posesiones de África, en los cuales se cuentan 24 provincias de la actual división moderna, y como región 11.ª Portugal con todas sus provincias.

Dicho se está que para dar noticia cabal al viajero ilustrado de nuestros días, de todo cuanto puede interesarle en las diversas comarcas y poblaciones adonde le conduzcan sus particulares aficiones ó sus negocios, el autor de una moderna Guía debería ser un hombre consumado en todos los ramos del saber. La librería moderna tiende á conseguir este resultado, y la casa Hachette de París puede decirse que lo intentó con éxito, confiando á M. Reclus tres ó cuatro volúmenes de la colección que lleva el nombre de Guides Joanne; á M. Du Pays, la excelente Guía de Italia y los dos conocidos Itinerarios de Bélgica y Holanda; á M. Esquiros, el justamente elogiado Itinerario de la Gran Bretaña; á uno de los Joanne, el de la Suiza; á M. Germond de Lavigne, el de España y Portugal; y dando á luz el magnífico Itinerario del Oriente, que es una verdadera enciclopedia. Estos libros, pues, extendidos hoy á todos los países civilizados del mundo, á la Europa entera, la Argelia, el Egipto, Siria, Palestina y la Turquía de Asia, no se escriben ya solamente para los que corren tierras por mero pasatiempo, los cuales, sin embargo, necesitan informes verídicos para dirigirse, hospedarse, alimentarse y ver con comodidad y provecho todo lo que puede excitar su curiosidad, sino también para los hombres estudiosos que desean adquirir nociones exactas y completas sobre la historia, la estadística, los monumentos, las colecciones de objetos artísticos, científicos, etc.

Y á las precitadas Guías, que pueden considerarse como modelos en su género, ha procurado imitar en la suya D. Emilio Valverde. No diremos que su obra pueda compararse en cuanto á crítica artística con el Hand book de Murray, ni aun con el Itinerario de Germond de Lavigne; pero en los demás ramos independientes de las artes no les va en zaga.

Puede, en suma, considerarse el libro que la Academia examina como un laudabilísimo esfuerzo digno de recompensa, y desde este punto de vista no ha de ponerse en duda lo relevante de su mérito. Y como, por otra parte, la obra es original, y de utilidad para las bibliotecas públicas, donde su manejo puede en ocasiones ahorrar mucha lectura y facilitar el conocimiento de las condiciones de nuestro suelo y de las diferentes historias locales de la Península Ibérica, la Academia no titubea en recomendarlo á esa Dirección de su digno cargo para que obtenga su laborioso autor la subvención á que aspira.

V. I. resolverá lo más acertado.

Madrid, 30 de Junio de 1893.