Escena
I
|
|
El REY y soldados
salen marchando por una parte, la REINA, PEDRO SESÉ y
acompañamiento, por otra.
|
REY |
Gozoso ofrezco a tu pomposa
vista, |
|
oh corte coronada, los trofeos |
|
de la ciudad augusta, porque
asista, |
|
pisándolos tus pies, a mis
deseos. |
|
De nuevo resplandor la cruz se
vista |
5 |
en tus siempre cristianos
Pirineos, |
|
y sobre el árbol de tus
canos riscos |
|
estandartes al sol ferie
moriscos. |
|
|
|
REINA |
Ya no quiero más dicha, Rey,
esposo, |
|
dueño y señor del
alma, que os espera; |
10 |
a los brazos remito más
airoso |
|
el silencio que mudo la
pondera. |
|
|
|
REY |
Mi amor, esposa cara,
victorioso, |
|
apresurando hazañas, porque
os viera, |
|
os presenta por timbre de
Sobrarbe, |
15 |
la Menfis de Aragón, Babel
alarbe. |
|
|
|
PEDRO SESÉ |
Añada, gran Señor, a
tu corona |
|
lo que de España resta. |
|
|
REY |
Y vos en ella
|
|
Gobernador, tendrá en
vuestra persona |
|
segura paz y favorable
estrella. |
20 |
¿Qué es de mis
hijos? |
|
|
PEDRO SESÉ |
Quieren en Pamplona,
|
|
cuando te acerques a su vega
bella, |
|
que abriendo muros, triunfos te
aperciba |
|
el laurel, abrazado con la
oliva. |
|
|
|
REY |
¿Cómo está mi
caballo encomendado? |
25 |
|
|
PEDRO SESÉ |
Racional esta vez y discursivo |
|
demonstraciones hace,
alborozado |
|
apetece el jaez, desea el
estribo. |
|
|
|
REINA |
¡Oh si supieses lo que me ha
costado |
|
tus órdenes guardar! |
|
|
REY |
Siempre recibo,
|
30 |
que ausente estoy y bárbaros
molesto, |
|
pesares de García. Mas
¿qué es esto? |
|
(Tocan dentro cajas destempladas.)
|
¿Agora destemplados
tambores |
|
y lúgubres las
fúnebres trompetas? |
|
¿Quién nunca vio que
en trágicos horrores |
35 |
la púrpura presagie las
bayetas; |
|
el ciprés, los laureles
vencedores; |
|
apellidar victoria las
baquetas? |
|
¿Qué es esto,
Sesé, que mis ojos miran? |
|
|
|
Escena
II
|
|
DON GARCÍA,
DON FERNANDO, DON GONZALO y acompañamiento;
todos de luto. Dichos.
|
|
|
DON GARCÍA |
Postrárame yo festivo |
|
a tus pies, oh gran
Señor, |
|
coronando lo triunfante |
|
del árbol, desdén del
sol; |
|
conmigo aplausos te hicieran |
45 |
los infantes; pero no. |
|
Que en tu ofensa interesados, |
|
cubren de luto el honor. |
|
¡Ah, si lazo el
sentimiento, |
|
si mi verdugo el dolor, |
50 |
anudado a la garganta, |
|
de tu fama protector, |
|
me impidiese al pronunciarlo |
|
los conductos de la voz! |
|
La condesa de Castilla, |
55 |
no ya reina, esposa no |
|
del padre que un tiempo tuve, |
|
y su adúltera
afición |
|
han malogrado... |
|
|
|
|
REY |
Mordazas pon
|
60 |
a los sacrílegos
labios; |
|
que a la luz que te
elevó |
|
sobre la esfera del aire, |
|
le impides el resplandor. |
|
¿Contra tu madre y tu
reina |
65 |
frenético acusador? |
|
¿Para tu sangre
verdugo? |
|
¿Para mí, para tu
honor? |
|
¿Tú eres fruto de tal
árbol? |
|
¿Tú de tal rama eres
flor? |
70 |
¿Tú príncipe
de Navarra? |
|
|
|
DON GARCÍA |
Ni lo estimo ni lo soy. |
|
Quien me infama no es mi
madre; |
|
no tu esposa quien
rompió |
|
coyundas al sacramento, |
75 |
privilegios a su unión. |
|
No ilusiones quimerizo, |
|
no crédito a indicios
doy |
|
que ajenos labios refieran; |
|
testigos mis ojos son |
80 |
de tu deshonra y mi afrenta. |
|
Ese que gobernador |
|
de tu reino, ingrato busca |
|
tu yalimiento, creyó |
|
que del modo que tu reino |
85 |
rige, también tiene
acción |
|
al tálamo que
honestaste, |
|
dos veces conspirador. |
|
Los infantes, mis hermanos, |
|
te dirán si es
presunción |
90 |
o certidumbre este aviso; |
|
mientras que con ellos yo |
|
salgamos, según los
fueros, |
|
desde que el primer albor |
|
de la aurora esmalte orientes |
95 |
hasta que la confusión |
|
de la noche ocasos manche, |
|
contra cualquier guerreador |
|
que frenético defienda |
|
ser falsa la acusación |
100 |
que todos tres intimamos. |
|
Un mes de plazo les dio |
|
la ley a los delincuentes; |
|
busquen en él defensor, |
|
que a ese mismo, cada
día |
105 |
armados, satisfacción |
|
a tu afrenta buscaremos. |
|
Juez te aclamo, padre no. |
|
Navarros, siempre las leyes |
|
en vuestro antiguo valor |
110 |
se veneraron intactas; |
|
no se quebranten pues hoy. |
|
La verdad sólo es mi
madre; |
|
ésta defiendo. Pues
sois |
|
sus conservadores recios, |
115 |
viva en vuestra
protección. |
|
|
|
|
(Vuelven a tocar las cajas, y vase DON GARCÍA con el
acompañamiento; los infantes pretenden seguirle, y el
REY los
detiene.)
|
Escena
V
|
|
Plaza a vista de la torre de Aybar.
|
|
BUSCÓN,
SOL.
|
BUSCÓN |
¿No basta que os lo he
jurado? |
|
|
|
|
BUSCÓN |
Sol, pescudadora,
|
150 |
dígovos que ésta es
la hora |
|
que Ramiro ha renegado, |
|
porque la tal infantesa |
|
es más bella, aunque entre
perros, |
|
que la misma diosa Berros. |
155 |
|
|
|
|
|
BUSCÓN |
Yo no;
|
|
mas vi una galga
preñada, |
|
que es a ella pintiparada. |
|
|
|
SOL |
¡Verá el tonto!
Cuidé yo |
160 |
que allá se te había
olvidado |
|
lo frío. |
|
|
BUSCÓN |
¡Si es la corriente
|
|
del Ebro linda aguardiente |
|
para salir abrigado! |
|
|
|
SOL |
A lo menos le levantas |
165 |
ese falso testimonio |
|
a Ramiro. ¿Él
matrimonio |
|
con una morisca? |
|
|
BUSCÓN |
Infantas,
|
|
como dellas no se guarde |
|
el hombre, descrismarán |
170 |
a cualquiera. |
|
|
SOL |
¿Qué
dirán
|
|
los nuesos de que cobarde |
|
huyes la guerra, culpando |
|
a tu señor? |
|
|
BUSCÓN |
No lo es mío
|
|
ni tuyo, sino del río, |
175 |
que garrote me iba dando. |
|
Y lo que decirse puede, |
|
si de mi mal se imagina, |
|
¿es mas de que soy
gallina? |
|
A muchos buenos sucede. |
180 |
Quien lo dijere no miente; |
|
que yo, porque mas te cuadre, |
|
desde el vientre de mi madre |
|
me desnudé de valiente. |
|
Es religión muy
estrecha, |
185 |
y yo en ella no he de entrar; |
|
que nunca peco en matar: |
|
con que quedas satisfecha. |
|
|
|
Escena
VII
|
|
FORTÚN,
BUSCÓN,
SOL.
|
FORTÚN |
(Aparte.
|
¡Carta del Rey para
mí, |
|
y aun no aguarda que la lea! |
210 |
Aunque éste el primero
sea |
|
favor que al Rey le
debí, |
|
lo misterioso que oculta |
|
sobresalta mi temor; |
|
mas, si vuelve triunfador, |
215 |
y su victoria resulta |
|
de las hazañas que debe |
|
al nieto, con que le obligo, |
|
comunicará conmigo |
|
sus medras. La carta es breve. |
220 |
(Lee.)
|
«Si es, Fortún, la
lealtad muestra |
|
de la nobleza que cría, |
|
ni Ramiro es sangre
mía, |
|
ni la puede tener vuestra. |
|
Información fue
siniestra |
225 |
la que os escuché, en
efeto: |
|
matarme quiso en secreto |
|
por reinar; y así,
colijo |
|
que a quien yo niego por hijo, |
|
no le tendréis vos por
nieto». |
230 |
¿Creeré tal infamia
yo? |
|
¿Desmentiréme yo a
mí? |
|
El Rey me lo escribe
así, |
|
mi sangre dice que no. |
|
Jamás Ramiro nos dio |
235 |
indicios menos que reales; |
|
jamás ¡ay ansias
mortales! |
|
pudo la envidia notar |
|
átomos con que eclipsar |
|
luces de mi honor leales. |
240 |
Que es engaño es
evidente; |
|
pero ¿para qué
eslabono |
|
discursos, si de su abono |
|
tengo el testigo
presente?) |
|
Ven acá Buscón,
¿qué hizo |
245 |
Ramiro contra el valor |
|
de bien nacido? |
|
|
BUSCÓN |
Señor,
|
|
sentenciarse a un romadizo |
|
cuando se nos volcó el
barco; |
|
convertirse de hombre en pez. |
250 |
Y tras que segunda vez |
|
le bautizó el dicho
charco, |
|
renegar de nuestra ley, |
|
adorar el zancarrón, |
|
y sin decirle a Buscón |
255 |
chus ni mus, armarle al Rey |
|
la muerte. Y halo emperrado |
|
una mora, que se llama |
|
la infanta Zaina; y es dama |
|
tan amiga de pescado, |
260 |
que apenas le escupió el
Ebro, |
|
creyéndole, aunque en
jubón, |
|
que era atún o
salmón, |
|
cuando le arrojó un
resquiebro. |
|
|
|
FORTÚN |
¿Que, en fin, mi infamia es
notoria? |
265 |
|
|
BUSCÓN |
Yo pienso que debe ser |
|
el diabro de la mujer |
|
de la orden de la Vitoria. |
|
|
|
Escena
VIII
|
|
RAMIRO.
Dichos.
|
RAMIRO |
(Al
paño.)
|
Quimeras de la
ambición, |
|
pues en mi centro me veis, |
270 |
ya no me perseguiréis. |
|
|
|
|
BUSCÓN |
Y sobre traición,
aguada. |
|
El Ebro la culpa tiene; |
|
mas hétele por dó
viene |
275 |
el moro por la calzada. |
|
|
|
RAMIRO |
(Llega.)
|
Aunque el hado riguroso |
|
pudo negarme, Señor, |
|
premios (que medra el valor, |
|
desdichado, victorioso), |
280 |
sólo en veros soy
dichoso; |
|
porque siempre que os venero, |
|
de suerte me considero |
|
vencedor, que entre los lazos |
|
de vuestros afables brazos |
285 |
laureles dignos espero. |
|
(Vale a abrazar, y retírase FORTÚN.)
|
Tío, ¿vos os
retiráis? |
|
¿Mudo vos conmigo
así? |
|
Algo os han dicho de mí |
|
cuando la voz me
negáis. |
290 |
¿Hasta aquí,
engaños, llegáis? |
|
|
|
FORTÚN |
Ni será sin fundamento, |
|
si excusar tu vista intento. |
|
Aparta; que la traición |
|
es contagio, en mi
opinión, |
295 |
y mata con el aliento. |
|
|
|
|
FORTÚN |
(A los
criados.)
|
Salíos afuera.
|
|
|
|
BUSCÓN |
(Aparte a SOL.)
|
Sol, yo le vó a acusar |
|
en casa de un familiar, |
|
porque le quemen siquiera. |
300 |
|
|
SOL |
Calla, que es todo quimera. |
|
¿De Ramiro eso
creías? |
|
|
|
BUSCÓN |
Tú en no creerlo
porfías |
|
y de ti vengo a creer |
|
que eres la primer mujer |
305 |
que no cree en
parlerías. |
|
|
|
|
(Vanse SOL y
BUSCÓN.)
|
Escena
XI
|
|
La REINA, de luto;
soldados. RAMIRO.
|
|
SOLDADO 1.º |
Ésta es,
Señora,
|
|
la torre de Aybar, en cuya |
|
fuerza manda el Rey que quede |
365 |
Vuestra alteza. |
|
|
RAMIRO |
Ya ¿qué dadan
|
|
los ojos? La Reina es
ésta. |
|
|
|
REINA |
¡Ay de mí! |
(Cae
desmayada.)
|
|
|
RAMIRO |
Mortal ocupa
|
|
el suelo. |
(Llega a
levantarla.)
|
|
|
SOLDADO 1.º |
(A RAMIRO.)
|
Tened, soldado.
|
|
|
|
|
|
RAMIRO |
(Aparte.
|
Aún mas se turba
|
370 |
el ánimo.)
Caballeros, |
|
si no yerra quien pregunta, |
|
decidme, por Dios,
¿qué es esto? |
|
|
|
SOLDADO 1.º |
Nadie encubrirlo procura, |
|
pues es público desde
hoy |
375 |
que los infantes acusan |
|
de adúlteros a la Reina |
|
y Pedro Sesé, por cuya |
|
causa viene presa ahora. |
|
|
|
RAMIRO |
¿Sus hijos mismos la
acusan? |
380 |
|
|
|
RAMIRO |
Y ¿dicen que hay
|
|
sospechas ciertas? |
|
|
|
|
SOLDADO 1.º |
Y podéis
|
|
creerlo con causa justa. |
|
|
|
RAMIRO |
¿Hay tal maldad? ¡Que
sus hijos |
385 |
proprios!... Mas la infamia,
suya |
|
ha de ser; pues no la vengan |
|
primero que la divulgan. |
|
Movido me ha a
compasión |
|
|
|
REINA |
(Vuelve en
sí.)
|
¡Ay, cielos! ¡Ah,
suerte dura! |
390 |
|
|
|
|
|
|
SOLDADO 1.º |
Un hombre
|
|
que hablarte intenta. |
|
|
REINA |
Si juzga
|
|
mi dolor, y hablarme quiere, |
395 |
algún alivio procura. |
|
Dadle lugar, caballeros, |
|
para que me hable, si alguna |
|
piedad merecen los reyes |
|
en el teatro o la tumba. |
400 |
|
|
|
(Los soldados se retiran a un lado.)
|
RAMIRO |
(Arrodíllase.)
|
A tus pies, ¡oh
esclarecida |
|
Reina!, a cuyas luces puras |
|
ceden las del sol, se postra |
|
hoy un hombre, a quien tu
injuria |
|
dice el alma que le toca, |
405 |
y que vengarla asegura. |
|
|
|
REINA |
Caballero, levantáos, |
|
pues en miserias tan sumas, |
|
el que hoy se me postre
está |
|
por cuenta de mi fortuna. |
410 |
Mas ¿quién sois, que
a esta mujer |
|
infeliz piadosa ayuda |
|
ofrecisteis, cuando el alma |
|
ni la quiere ni la busca? |
|
|
|
RAMIRO |
Ramiro soy de Moncada, |
415 |
Señora, que de una
gruta |
|
de esta sierra humilde hijo, |
|
nací para penas muchas. |
|
|
|
REINA |
¡Ay, hijo mío! Del
Rey |
|
tú lo eres sólo,
tú ilustras |
420 |
su sangre; al paso que
aquellos |
|
bárbaramente la
enturbian. |
|
|
|
RAMIRO |
¿Es verdad lo que oigo, o
son |
|
afectos de tu ternura? |
|
Señora, aunque a honor tan
alto |
425 |
piadosamente me subas, |
|
yo trocara mis favores |
|
al premio de tus venturas. |
|
Mas el cielo vive, a quien |
|
nada en los orbes se oculta, |
430 |
y en quien la verdad sagrada |
|
indefensa quedó nunca, |
|
que han de morir los
traidores, |
|
quitando la mancha inmunda |
|
en tu fama, del delito |
435 |
que aleves falsos te imputan. |
|
|
|
REINA |
Plegue a Dios que en inmortal |
|
dolor, que en eterna cuita, |
|
negada al común
descanso, |
|
a la quietud de la urna, |
440 |
viva yo siempre; o que muera |
|
con la infamia, que es más
dura |
|
maldición, si en la
inocencia |
|
conyugal no estoy segura. |
|
Mas no merezco, Ramiro, |
445 |
tu favor; la causa escucha: |
|
hijo eres del rey don Sancho, |
|
Acaya fue madre tuya, |
|
cuya nobleza veneran |
|
Castilla y Navarra juntas; |
450 |
que habías de aspirar al
reino |
|
no agüeros vanos
anuncian; |
|
y Fortún al Rey le
intima |
|
que el cetro real te ajusta. |
|
Conspirados mis temores, |
455 |
asechanzas te conjuran |
|
hasta ahora, desde cuando |
|
las aguas del Ebro surcas. |
|
Yo he pensado ¡ay de
mí triste! |
|
Yo he creído que
promulga |
460 |
la sentencia de mi muerte |
|
el hado con causa justa, |
|
pues a tu vida inocente, |
|
que ya de la envidia triunfa, |
|
tantos riesgos busqué
cuantas |
465 |
traiciones hoy te acumulan. |
|
Y pues al mortal suplicio, |
|
en cuyas sombras
fluctúa |
|
todo el sentido, esta
unión |
|
se acerca casi difunta, |
470 |
perdón de tantas
ofensas |
|
te pido. Y porque se anudan |
|
las palabras en el pecho, |
|
estas lágrimas las
suplan. |
|
|
|
RAMIRO |
Señora, a los tiernos
ojos |
475 |
el clemente llanto enjuga; |
|
que el llanto las culpas lava, |
|
y en ti no hay que lavar
culpa. |
|
Y ya que el cielo no quiso |
|
que más mi origen se
encubra, |
480 |
mis infortunios pasados |
|
se descuenten a la suma |
|
de lo que logro en saber |
|
cuánto mi sangre se
encumbra. |
|
Y por si también ahora |
485 |
permite el cielo que de una |
|
desdicha nazca un abono, |
|
como tal vez acostumbra, |
|
yo juro por esta espada |
|
(que de reliquias
purpúreas |
490 |
y de humor rojo vertido |
|
del alarbe aún no
está enjuta), |
|
que no he de creer quién
soy |
|
hasta que en batalla dura, |
|
de tanta infamia te vengue |
495 |
y tanto traidor destruya. |
|
Y esto por mí mismo;
pues |
|
que sea su sangre augusta |
|
¿qué importa, si un
falso duelo |
|
basta para hacerla impura? |
500 |
Soldados, llegad. Y
adiós, |
|
Señora; que se apresura |
|
el valor a la venganza. |
|
|
|
REINA |
El cielo sea en tu ayuda. |
|
|
|
|
(Vanse.)
|
Escena
XII
|
|
Palenque delante de la torre, con dos tribunales, uno mayor
que el otro.
|
|
SOL, BUSCÓN.
|
SOL |
Yo no lo creo, Buscón; |
505 |
pero he de ver en qué
para. |
|
|
|
BUSCÓN |
Sola sol en el nombre y cara, |
|
que no perdona rincón |
|
ni uracho de sabandijas |
|
que no atisbe y mire alerta; |
510 |
y si te cierran la puerta, |
|
se entra por las rendijas. |
|
|
|
SOL |
Una reina que acusada |
|
por sus tres hijos está |
|
y si defensor no da, |
515 |
diz que ha de morir quemada; |
|
ellos, que armados desde hoy, |
|
han de salir cada día |
|
contra quien los
desafía, |
|
¿es como quiera? Yo soy |
520 |
perdida, Buscón, por
ver |
|
cosas que salgan del uso. |
|
|
|
BUSCÓN |
La mala madre mos puso |
|
las cormas de la mujer; |
|
pues siendo fuerza querellas, |
525 |
con ser el peor cojijo, |
|
no en balde un discreto dijo: |
|
«Ni con ellas ni sin
ellas». |
|
Con ellas no, que mos paran |
|
de llodo, y son rejalgar; |
530 |
sin ellas no, que a faltar, |
|
los hombres no se
engendrarán. |
|
Amallas y aborrecellas |
|
nos hacen y no podemos |
|
vivir, cuanto ser tenemos, |
535 |
ni con ellas ni sin ellas. |
|
Pero paso, que ya tañen |
|
los guerreros tamboriles. |
|
|
|
|
(Tocan cajas.)
|
Escena
XIII
|
|
DON GARCÍA,
DON FERNANDO y
DON GONZALO, bizarros, con
rodelas; ORDOÑO, de
padrino; pueblo. Dichos.
|
SOL |
Mujeres hay varoniles |
|
que a Lucrecias
acompañen; |
540 |
que también saben las
tocas |
|
estar en la vertú
duchas. |
|
|
|
BUSCÓN |
Sol, las aviesas son muchas, |
|
pero las perfetas pocas. |
|
|
|
DON GARCÍA |
Corte ínclita de
Navarra, |
545 |
metrópoli más
antigua |
|
de cuantas por imitarte |
|
blasona el hispano clima; |
|
biznieta del argonauta, |
|
sacra excepción de las
iras |
550 |
de Dios, que en el arca nave |
|
guardó al mundo sus
reliquias; |
|
diadema del Pirineo; |
|
del valiente Tubal hija, |
|
que olvidando por ti el Asia, |
555 |
pasó a tus tierras su
silla: |
|
navarros, príncipe
vuestro |
|
he sido, ya me apellidan |
|
su vengador vuestras leyes; |
|
término es de treinta
días |
560 |
concedido al adulterio |
|
para que en ellos elija |
|
o en la palestra su amparo, |
|
o en las llamas sus cenizas. |
|
El primero hoy de los treinta |
565 |
manda el derecho que asista |
|
armado con mis hermanos |
|
al pie de esta torre altiva |
|
de Aybar, donde está la
Reina, |
|
que es la palestra elegida. |
570 |
Si hay quien la defienda,
salga; |
|
mas no habrá, pues que le
obliga |
|
un hijo que deste agravio |
|
da fe, testigo de vista. |
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Ármese presto;
¿qué espera, |
575 |
qué aguarda el Rey, cuando
estima |
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fama que difunta llora, |
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si el valor la resucita? |
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La verdad es sobre todo, |
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navarros; ésta os
intiman |
580 |
tres hermanos: don Fernando, |
|
don Gonzalo y don
García. |
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Escena
XIV
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El REY, dos
jueces, soldados; la REINA, de luto, con un tafetán
en los ojos. Dichos.
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(Salen al compás de música triste, y ocupa la
REINA el tribunal
pequeño, y el REY
con los jueces el otro.)
|
REY |
¡Oh qué cansados que
son |
|
los males, si se amotinan! |
|
¡Cuán léjos de
los consuelos! |
585 |
¡Cuán cerca de las
desdichas! |
|
(A sus hijos.)
|
¿Os persuadiréis
vosotros |
|
a que la suma malicia |
|
contra la suma inocencia |
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esta vez no os precipita? |
590 |
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JUEZ 1.º |
Señor, el cielo
averigua |
|
dudas a sí reservadas; |
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y pues por costumbre antigua |
|
se deja a las armas, ellas |
|
pleito tan arduo decidan. |
595 |
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JUEZ 2.º |
No basta discurso humano, |
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Gran Señor, a hallar
salida |
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a laberinto tan ciego. |
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REY |
Decís bien; guardar
justicia. |
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REINA |
Los cielos a mi inocencia |
600 |
amparen, que a su divina |
|
protección mi confianza |
|
todas las verdades libra. |
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BUSCÓN |
(Aparte a SOL.)
|
Sol, ¿no parecen los
tres |
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en sus escaños o sillas |
605 |
la fachada burgalesa |
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con los jueces de Castilla? |
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SOL |
No está el tiempo para
gracias, |
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Buscón; asómate y
mira |
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el fin de tanto nublado. |
610 |
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BUSCÓN |
Bien; pero ¿cómo se
olvidan, |
|
ya que está aquí la
Reinesa, |
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dell otro? |
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SOL |
El postrero día
|
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del plazo los sacarán |
|
par de la hoguera. |
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BUSCÓN |
No guisan
|
615 |
buen manjar los tres infantes, |
|
por más que contra ellos
digan. |
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¡Asado el Gobernador! |
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¡Tostada su madre misma! |
|
¡Fuego en tales
cocineros! |
620 |
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SOL |
Confunda Dios las mentiras. |
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BUSCÓN |
Oye; que otros atabales |
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suenan. |
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(Suenan cajas destempladas.)
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Escena
XV
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RAMIRO, de luto,
con una banda negra por el rostro. Dichos.
|
SOL |
Y la gallardía
|
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del que los sigue se lleva |
|
tras sí el alma con la
vista. |
625 |
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REINA |
El cielo, que patrocina |
|
inocencias contra
engaños, |
|
un rayo espado le ciña. |
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BUSCÓN |
¿Por qué la cara mos
tapa? |
630 |
|
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|
(Tocan.)
|
BUSCÓN |
Será, si no es por el
polvo, |
|
cofrade de disciplina. |
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RAMIRO |
Rey Invicto, un forastero, |
|
puesto que desobligado, |
635 |
de sí mismo estimulado |
|
por piadoso y caballero; |
|
para coronar su acero |
|
del árbol que monstruos
doma, |
|
diadema antigua de Roma, |
640 |
contra el rigor y violencia |
|
protector de la inocencia, |
|
su defensa a cargo toma. |
|
A Navarra representa; |
|
por ella enlutada llora |
645 |
a su natural señora, |
|
que un hijo arrojado afrenta. |
|
Su amparo está por mi
cuenta; |
|
ya traigo su compromiso |
|
en fe de que el cielo quiso |
650 |
que de tan bárbaro
engaño |
|
de tres hijos, otro
extraño |
|
les dé escarmiento y
aviso. |
|
No quiero ser conocido |
|
mientras que triunfos no
canto; |
655 |
que si os desmaya el espanto, |
|
dirán que no os he
vencido |
|
de la verdad persuadido. |
|
Si contra tanta ilusión |
|
prevalece la razón |
660 |
a la luz de la justicia, |
|
añadirá mi
noticia |
|
gozosa la admiración. |
|
Ilustres jueces, mandad |
|
que el sol nos partan. |
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DON GONZALO |
(Aparte a DON FERNANDO.)
|
Fernando,
|
665 |
el temor me está
anunciando |
|
que amparo la falsedad. |
|
|
|
DON FERNANDO |
Trocó la temeridad |
|
mi valor en cobardía. |
|
|
|
DON GONZALO |
Engañónos don
García. |
670 |
|
|
DON GARCÍA |
(Aparte.)
|
¡Oh antojos de una
mujer! |
|
¡Qué de ellos
echó a perder |
|
vuestra temosa porfía! |
|
|
|
JUEZ 1.º |
Infantes, en vuestro acero |
|
estriba la conclusión |
675 |
de vuestra proposición. |
|
|
|
JUEZ 2.º |
Volved por vos, caballero. |
|
Hagan la señal. |
|
|
REY |
Si adquiero,
|
|
cielos, la fama perdida, |
|
premios el que os rige mida |
680 |
a tal defensor. |
|
|
|
(Tocan a acometer, embiste RAMIRO con los infantes, y cae
DON
GARCÍA.)
|
DON GARCÍA |
Tened
|
|
las armas, y suspended |
|
el que yo pierda la vida. |
|
El negarme Pedro Sesé |
|
y la Reina, mi señora, |
685 |
el caballo, oh Rey invicto, |
|
estando tú en Zaragoza, |
|
cerró puertas al
discurso; |
|
que el enojo en la edad moza |
|
es tempestad resistida, |
690 |
que rompe con cuanto topa; |
|
y ocasionó que
intentase |
|
una acción tan
afrentosa, |
|
una traición contra ti, |
|
y contra mí una
deshonra. |
695 |
La Reina es luz de Navarra, |
|
es pura y cándida
aurora, |
|
excepción de toda
eclipse, |
|
fénix única
española. |
|
Pedro Sesé en la
lealtad |
700 |
merece que se anteponga |
|
a cuantos inmortalizan |
|
los bronces y las historias. |
|
Los dos infantes creyeron |
|
persuasiones marañosas |
705 |
de un hermano que veneran, |
|
sucesor de tu corona. |
|
A tus pies, padre y
señor, |
|
aguardo el castigo ahora; |
|
mas donde está la
venganza |
710 |
los demás castigos
sobran. |
|
|
|
|
(Bájase el REY del tribunal, y llega donde
está la REINA.)
|
REY |
Ya no hay que esperar más
dicha; |
|
salió de las tenebrosas |
|
confusiones de mis penas |
|
más clara la luz de mi
honra. |
715 |
Llega, Señora, a mis
brazos, |
|
pues el alma, que te adora, |
|
siempre, a pesar de traidores |
|
te estimó. |
|
|
REINA |
Ya se transforman
|
|
fúnebres lutos en
galas; |
720 |
mis lágrimas sean mis
joyas. |
|
|
|
REY |
¡Oh feliz protector
mío! |
|
No el semblante se me esconda |
|
que mis dichas manifiesta. |
|
(Descubre a RAMIRO.)
|
Si a esto me atrevo, perdona. |
725 |
Ramiro, ¿quién sino
tú |
|
mitigara mis congojas? |
|
Tu inocencia se acredita |
|
hoy con acción tan
heroica. |
|
|
|
RAMIRO |
Señor, si engaños
pudieron... |
730 |
|
|
REY |
Calla, porque será
ociosa |
|
ninguna satisfacción, |
|
pues en tu crédito
sobran. |
|
|
|
REINA |
Tú sólo, oh joven del
cielo, |
|
eres mi hijo; a ti te tocan |
735 |
mis herencias, mis estados, |
|
mi sucesión y corona: |
|
más perfecto sale
siempre |
|
el que la elección
adopta |
|
que el que la naturaleza |
740 |
tantas veces defectuosa, |
|
perseguida me amparaste, |
|
y mis hijos ¡oh qué
impropria |
|
acción de naturaleza! |
|
Lutos a mi afrenta cortan: |
745 |
luego tú sólo
mereces |
|
que mi Castilla te ponga |
|
de sus condes la diadema; |
|
feliz, si dueño te
goza. |
|
|
|
REY |
Yo también la de
Navarra, |
750 |
pues fue tu madre mi esposa. |
|
|
|
RAMIRO |
No, padre, no, gran monarca; |
|
no, mi reina y mi
señora; |
|
que este nombre os daré
siempre, |
|
felicidad que me sobra. |
755 |
Sucedan en vuestro reino |
|
los tres, que mudos invocan |
|
mi amistad y vuestra gracia. |
|
Esto ha de ser, o la gloria |
|
eclipsaréis al servicio |
760 |
que os hice, siendo forzosa |
|
mi ausencia donde jamás |
|
los compita mi memoria. |
|
Así los nobles se
vengan. |
|
|
|
REY |
Y así tu alabanza
heroica |
765 |
dejarás eternizada, |
|
que el tiempo no se le oponga. |
|
|
|
|
|
|
|
BUSCÓN |
¡Qué valentón
es Ramiro! |
770 |
|
|
REINA |
El estado en que me dota |
|
mi esposo son bienes libres; |
|
y así, el condado me
toca |
|
de Aragón. Yo te le
doy. |
|
|
|
REY |
Y para que más airosa |
775 |
salga esta acción, mi
Ramiro, |
|
su primero rey te nombra. |
|
|
|
RAMIRO |
A tus pies estaré
siempre. |
|
|
|
BUSCÓN |
Esto se ha hecho sin boda; |
|
que es novedad de comedia. |
780 |
|
|
REY |
A Sesé en libertad
pongan. |
|
|
|
RAMIRO |
Y así, Senado, se
vengan |
|
los nobles. |
|
|
|
|