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El que esto escribe tuvo a honra alcanzar de la Santa Sede, por medio del Excmo. y Rmo. Monseñor Efrem Forni, Nuncio Apostólico en el Ecuador, que se eliminara del Índice la obra del P. Rodríguez.

 

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Introducción al Tomo II del Diario de un misionero de Mainas, XXXII.

 

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Diario de un Misionero de Mainas, por el P. Manuel J. Uriarte. S. J. Trascripción, Introducción y Notas, por el P. Constantino Bayle. Consejo Superior de Investig. Cient. Madrid. M C M. LII.

 

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Clérigos o frailes son también la mayor parte, si no todos, los autores de relaciones de carácter local, que suministran idea de lo que fue en su integridad la Presidencia, organismo meramente subordinado en apariencia, pero que procedió como si tuviera, en hecho de verdad, primera categoría. Las Relaciones Geográficas, publicadas en 1897 por el Ministerio de Fomento Español o, mejor dicho, por don Marcos Jiménez de la Espada, contienen las que, en la segunda parte del siglo XVI, presentaron, entre otros, los beneficiados: fray Andrés Rodríguez (Lita); fray Jerónimo de Aguilar, mercedario como el anterior (Cahuasqui y Quilca); Antonio Borja, clérigo (Pimampiro); fray Juan de Paz Maldonado O. F. M. (San Andrés) fray Domingo de los Ángeles O. P. (Pecha); fray Melchor de Pereira O. F. M. (San Luis de Paute); fray Gaspar de Gallegos (San Francisco Peleusi del Azogue); Pedro Arias Dávila (Pacaybamba); fray Juan Gómez, agustino (Cañaribamba); Martín de Gaviria, presbítero (Santo Domingo de Chunchi); Hernando Italiano, clérigo también (Alausí), etc. Las demás relaciones, o son anónimas o hechas en España, sobre meros recuerdos, aparte de las de algunos seglares, como la de Cuenca, firmada por Hernando Pablos y la de Otavalo, redactada por el propio Corregidor don Sancho de Paz Ponce de León

 

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Varios de los Jefes de la Audiencia escribieron, después de concluido el término de su oficio, obras importantes. El primero entre todos, don Hernando de Santillán, compuso la Relación del origen, descendencia, política y gobierno de los incas, estudio estimable por su seriedad. El Licenciado Pérez de Salazar escribió una memoria sobre el estado del mineral y población de Potosí. Don Antonio de Morga publicó la Historia de la conquista de Filipinas, notable por el estilo y la veracidad del relato. Sánchez de Orellana redactó, en fin, una Relación de los funerales del Presidente Montúfar. El más fecundo fue, sin duda, don Dionisio de Alcedo, que escribió numerosísimos estudios monográficos, respecto a impuestos, comercio, diezmos y otros aspectos de América. En lo concerniente a la Presidencia legó, como fruto de su inteligente amor a la tierra que gobernó, valiosos trabajos, como el Resumen de la Real Hacienda de Quito, el compendio histórico de la provincia... de Guayaquil, la descripción geográfica de la Real Audiencia de Quito y aviso histórico político geográfico. Todos estos opúsculos se publicaron en Madrid durante los años de 1740 y 41.

 

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Las relaciones de Montúfar y Merisalde vieron la luz en Tres Tratados de América (siglo XVIII). Madrid, 1894.

 

397

El 27, según don José Toribio Medina, que da la bibliografía completa de Coletti, en Noticias biobibliográficas de los jesuitas expulsos. Págs. 77-82.

 

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Los escribanos eran, a la sazón, los dueños de los secretos de la sociedad y estaban enterados de mil detalles, que pasaban inadvertidos para los demás vecinos. Por eso Diego Rodríguez Urbán de la Vega dejó pintorescas páginas, que retratan la vida colonial, en su narración de las fiestas celebradas en febrero de 1631 con motivo del nacimiento del Príncipe don Baltazar.

El culteranismo bastardeó ensayos que, quizás, habrían sido interesantes, como la Breve suma de los afectos con que esta nobilísima ciudad de Quito se portó en los castigos que dios Nuestro Squiso enviarle por sus delitos, escrita por el Pbro. Dr. Juan Romero, a petición del Cabildo y con oportunidad de la erupción del Pichincha hecha el año de 1660. Reputábase a Romero «persona de gran talento», según dice una acta capitular; pero su obra es ilegible. La gravedad misma de los hechos imponía sencillez.

 

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Rel. Geog. IV, pág. XLIV.

 

400

Rel. Geog., Tomo III, Apéndice, pág. CLXI.

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