Da; pero escucha

Registre bibliogràfic

  • Títol: Da; pero escucha
  • Autor: Anónimo
  • Publicació original: Bogotá: Imprenta de N. Lora, 1836
  • Descripció física: PDF
  • Notes de reproducció original: Digitalización realizada por la Biblioteca Virtual del Banco de la República (Colombia)
  • Notes:
    • Colombia
    • Resum: Yo, don cualquiera, ó el ciudadano cualquiera, no soy de los que censura á la camara de representantes (es decir, á los 29) con insultos. Me gustan las razones maque todo.
    • Resum: 'PV-/4 , J-/ LV G3 2.:- N EJECUTI\'ISTA. ESCUCIIA. --00-­BOGOTA. IlIIp. ¡, ,¡ -, LlIra.-IS:l tenciario (asi dice el tra tado en inglés) de ~u a te ­mala, 6 Centro América: Que no se hizo el tr atado en la asamblea de plenipotenciarios prevenida por la ley de 1832 Se alega. ta~bien por los 29. - Sofisma. Esa no es ' ley constitu cional, como se ha dicho equivocndamente : si porque la primera disposicion transitoria de la cons­t itucio n previno, que la convencion prescribiria las reglas que debier an observarse para la c elebr aci oa de .ractol entre las diversa. partes de Colombia,se de­dujerd que el decreto de 10 de marzo de 1832 era parte de la constitu cion, tambien deben serlo todas las leyes, que la constitucion previno que se esnidicran, En la disposicion 8. d de la. transitori as 't ambiell prCl"inó, que la conveneion decretaría las leyes que ~ons itlerase mas necesarias para el arr eglo de obje tos Import antes: luego tolla. las leyes, quc dl é son parte ~ e la. const itucion. Qué absurdo l qué vergucnza incurrir en tan cras os errores!! No se hizo la asamblea porque Venezuela, '! el Ec uador ó uo quisieron ono pudieron. El poder ejecutivo de la Nueva Granada lo que ten ia ó rden e!a de promoverla con dichos gobierno., la promovió sm suceso J promover jam ás ha significado en lengua. de Cervantes otra cosa quc adeluntar, hacer esfuerzos, provocar á que se haga una cosa. Si ese decr eto de la eonvencion const ituyente hubiera dicho, que tIe no hacerse cn asamblea de plenipotenciarios, no se hiciera de otro moclo, el poder ejecutivo ni habra celebrado los t rat ados de paz con el Ecuador, apr o­bados por el congres . en 1883, ni los de amistad con Venezuela aprobados por el congreso en 1834. Que culpa tiene el poder ejecutivo de que las leyes no digan todo lo que despu es de cuat ro años se pre­tende que dicen? No hahiendose podido ve r ificar la asamb lea, el peder ejecutivo entró en uso de IlIS facultades naturales de dirijir las negociaciones diplomáti cas, i cele brar t ratados. ¿Y que ley se lo pro­hibia derogando la constitu cion? En que parte lo ha pr ohibido el decreto de la convenc icn ó la dis­posiclon tr ansitoria? E l poder ej ecutivo no ha consultado al consejo de Estado sobre este punto, ino sobre si seria con­veniente pl'Orr o,gar el plazo para el Ecua 101', que estaba en anarqu ía. De esto mismo habló al congreso por medio del senado. Es to. ion los hechos. Por esto se ha vejado al gobierno, se ha hecho retirar á los secr et ario. de Estado, se ha dado un dia de gusto á los enemigos, s ha enlutado {¡ la patria, se ha alarmado á los buenos ciudadanos y á los est rnnjeros, se ha detenido la mar­cha progresi va de la Nue r a Granada. Si el ar ticu lo es dudoso, si en la conducta del ej e uti vo 110 hay mala. fé j porque se I ccide que ha sido nada menos, que i7lcuJlStiluciollal, violadora de la constitu ciou, ho­lladora del pacto que reverenciamos todos los pa­t riotas ? ? ? Por Dios. por la patria, por nuestro propio honor 110 escribamos in ultus i grose l'ias en vez de razon.." DA; PERO .0 Yo, dOR 8ulllquiera, ó el ciuda dans cua lquiera, ~oy de los que censuran á 111 cámara de represen­tantes ( es deci r, á los 29 ) con insultos. Me gustan la s razones mas que todo. No escribo este papeluchito para los dipu tados, qus por alguna fatalidad bayan procedido por pasiones y resentimientos, indignos del pu esto con que hau sido honrados ; la escribo para aquellos diputados, que por equ ivocaciou, falta de bastante conocimiento en la materia, J zclo mal apli­cado por las ínstituciones liberales , hayan contribuido con su voto á causar tanto males á esta aflijida patria, y tantos placeres á los enemigo. del órden actual. No me met o en el fondo del t rat ado. Los millones de pesos me asust an. oJ á la cuestion de la in­c onstitucionalid ad. Convengamos , que en derech o p úblico I.ó de jcnt es se llaman ajwles diplom áticos los embajadores , los ministros plenipotenciari os, los ministros residentes los enviados e xtrao rdinarios, V los encarga dos de negocios. En el congreso de Yiena se ha arreglado la clasificacioa de lodos los ajcntcs dip lcmáticos &c. &c. Un ajentc diplsm átieo de cual ­quier a de las clase. dichas no se acredit a -sino de gobierno {\ gobie rno precisamente , y lleva de docu­mento una carta que se llama credencial escrita del j efe del eobierno que lo ha nombrad o al j efe del go­bierno cerca del cual vá, escepto el enca rgado de negocios. Cuando se jun ta en E uropa una asamblea de ajentes con poderes para hacer un aj uste ó con­Tenia, le estipula antes de que garantias, y prerro­gativas deben gozar ; pero no son ajenles diplomáticos, á menos que DO estén tambien acreditados cerca de un gobierno. Acorde con esta doctri na comun de las naciones usó el artícu lo 106, at ribucion l." de la constitu cion de las frases siguientes j nombrar (el poder ejecutivo) con consentimiento del consejo de E stado, los minis­tros plenip oten ciarios, enviados, y w alesquiera otros ajen/es diplomlÍ!icos, y cúnsulp" jenerales. Estando escrito e ste art íc ulo en lengua cas te llana es preciso dise car­lo gr-amati calrneate del modo siguiente: el pronom­bre relativo cualesquiera con el adjetivo otros que acompaña" á ajentes diplomáticos comprenden pre cisa­mente entre los ajente diplomát icos á los mini tra s plenipotenciarios, 'J enviados de que antes ha hablado. De aquí se deduce lIlu e el seño r Pombo no era ajentc diplom ático, aunque tubo poder es para nesociar el t ra tado, y que era de los que nonecesitaba el consen­ti miento del consejo de Es tado puesto que no tu bo credenci ales ce rca de gobie rno alguno. Lo mismo sucedió con cl seücr Vejez cuando ncgoció el t ratado c on la F ranc ia en 1833, .Y con el mismo señor Pombo cuando celebr ó el de amistad ., comercio con Vene­z uel a. Ambos t ratados fueron aprobados por los con­gr esos de 1833 y 1834 sin ohjec ion de ineonstitu cio­nalidad, y la conduc ta de dos congresos es au t o ~i d ad )' autor idad muy respet abl ar a entender un ar ticulo c on t itucional. El presidente de los. Es tados Unidos del N~r te euando dirijo la ce leb'?c'ondc tratado.s en Wa illJl~g­ton lo hace por medi o de l s ecl:et~1'I0 de re lacio ­nes este rior es sin ex ij ir el consclIlI.mlCnto ~l el sC~ l~d o , c omo lo e. ije cuando nombra UD aj ente diplomático. éase ent re 'ot ros tratados el celebrado eu 1825 por H eurique Clay sec re tario .de . Estad~ ~on Ant~lIio J osé Caña. cnviadu u/ ruordmclno '!J m~lro plclllpi': ...J
    • Resum: Poder ejecutivo; Historia; Política y gobierno; Volantes; Sátira
    • Dominio público
  • Forma/gènere: unidad documental
  • Idioma: español
  • Institució origen: Biblioteca Virtual del Banco de la República
  • Encapçalament de matèria:

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