51
Ibid., pp. 130-131.
52
Ibid., p. 132.
53
Ibid., pp. 135-140.
54
Sicroff, A. A., Les controverses des statuts de «pureté de sang» en Espagne du XVe au XVIIe siècle, Paris, 1960, pp. 66-67.
Sobre la «limpieza de sangre» ver:
Revah, I., Des marranes à Spinoza (textes réunis par H. Mechoulan, P. F. Moreau, C. L. Wilke), Paris 1995, pp. 29-77, 327-337.
Amiel. C., La «pureté» du sang en Espagne, Etudes Inter-ethniques, 6 (1983), pp. 27-45.
55
Crónica de los Reyes Católicos, ed. de Cayetano Rosell, Biblioteca de Autores Españoles, pp. 599-601.
Consultar, sobre el tema:
Pérez, J., Historia de una tragedia. La expulsión de los judíos de España, Barcelona, 2001.
Suárez, L., La expulsión de los judíos de España, Madrid, 1991.
56
Historiadores como: I. Baer, H. Beinart, I. Revah, L. Suárez, E. Benito Ruano, etc. está de acuerdo en afirmar que esta fue la principal razón de su creación; a esto se opone B. Netanyahu, ver:
B. Netanyahu, ¿Motivos o pretextos? La razón de la Inquisición, en Ángel Alcalá, Inquisición española y mentalidad inquisitorial, Barcelona, 1994, pp. 37-38.
57
Pérez de Guzmán, Generaciones y Semblanzas, Biblioteca de Autores Españoles, 68 (1924), cap. XXVI.
58
Domínguez Ortiz, A., La clase social de los conversos en Castilla en la Edad Media, Madrid, 1955, p. 27, 53-60.
Sicroff, A. A., Les controverses, pp. 66-67
59
Nació hacia 1486, en una familia humilde. Estudió nueve años en la Universidad de París, llegando a ser uno de los educadores del futuro Felipe II y arzobispo de Toledo. Parece ser que su verdadero nombre era «Guijarro», el cual latinizó al de «Siliceo».
Domínguez Ortiz, A., La clase, pp. 37-38.
60
López de Ayala y Álvarez de Toledo, J., Toledo en el siglo XVI, Madrid, 1901, pp. 46-47, 132-133.
Domínguez Ortiz, A., La clase, pp. 39-40.