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ArribaAbajoActo III


ArribaAbajoCuadro I

 

Telón corto que representa un locutorio.

 

Escena I

 

CASTA sola en escena, doblando un equipo de monja y colocándolo en una canasta. Por un lado y fuera, el Coro de Hombres con acompañamiento de guitarras y bandurrias; por otra el Coro de Mujeres entonando un canto religioso. Es de día.

 
 

Música.

 
CORO DE HOMBRES
Una bella se engalana
para hacer su exploración,
porque quiere esta mañana
elegir su profesión.
Del placer que el mundo tiene5
despedirse quiere así
y, por eso, el mundo viene
para despedirla aquí.
   Aunque la ingrata
    nos va a dejar,10
   la última serenata
   debe escuchar.
Al salir hoy del claustro
    ve si lo dejas
antes de que te encierren15
    puertas y rejas,
    que ya en clausura
no hay llave que descorra
   la cerradura.
La mujer que en su celda20
   vive escondida
es que teme las luchas
    de nuestra vida.
   Suelta ese velo,
que ofreciéndote gloria25
nos cubre un cielo.
CASTA
¡A las voces de la vida
les contestan los responsos!
¿Si será cierto que el mundo
es una casa de locos?30


Escena II

 

CASTA y TELLO, que entra en escena por la derecha.

 
 

Hablado.

 
TELLO
Te encuentro muy pensativa.
CASTA
Es natural, porque doblo
el sayal de mi señora
que se entierra en vida pronto.
TELLO
¿Qué remedio? Doña Luz35
profesa por gusto propio;
no es el Conde como dicen
el que le impone sus votos.
CASTA
Él la colocó en clausura
tras del lance...
TELLO
Poco a poco;
40
pero ella es quien ha querido
profesar.
CASTA
Aquí hay de todo:
cuando la encerró su padre,
halló en el claustro reposo,
porque pudo llorar sola45
un pesar de los más hondos;
después, cuando las hazañas
de su capitán famoso,
allá en Granada, lograron
producir tan grande asombro...50
TELLO
Como que el rey don Felipe
sintió calmado su enojo
y hasta el Santo Tribunal
si oyó el nombre se hizo el sordo.
CASTA
Para doña Luz entonces55
fue la celda un calabozo
donde llegaban muy tarde
los mundanales elogios;
pero hoy, que hace más de un año
que, sin saber nadie cómo,60
desapareció Centellas
de la tierra y sus contornos,
hoy que, cantando su vida
todos los ciegos con ojos,
en cada jácara nueva65
tiene un fin más desastroso,
hoy doña Luz toma el velo
en vez de tomar un tósigo,
porque es un medio cristiano
de irse de este mundo al otro.70
TELLO
Éstas son las consecuencias
de aquel terrible alboroto
en que estuviste mezclada...
CASTA
Y en que tuvo parte Goro,
y en que tú, Tello, también75
anduviste medio tonto
para convencer al Conde
de que era su sangre el mozo.
TELLO
No hay mal que por bien no venga,
dice un adagio famoso,80
y aquel mal, que fue muy grande,
dejó un bien que no fue corto,
pues le trajo al señor Conde
una hija que es un tesoro.
CASTA
Sí, y un servidor gitano,85
que se entiende y baila solo.
TELLO
No murmures.
CASTA
A mí el lance
me dejó sin acomodo.
TELLO
Pero nunca mi señor
te ha negado sus socorros.90
CASTA
A no ser por doña Luz,
que me da bastante apoyo,
ya estaría bajo tierra
en vecindad con los topos;
pero gracias a ella voy95
viviendo de lo que como.
Soy sota demandadera,
que es oficio provechoso:
compro el vino de las misas,
del cual hago mis ahorros,100
rebaño algunas lengüetas
cuando las traigo del horno,
cobro las sobrepellices
en casa de los canónigos,
si encuentro una vela sucia105
le suelo limpiar los mocos,
llevo el niño de las madres
a pedir por los contornos...
y limando un poco allí
y royendo aquí otro poco110
con muchas gotas de cera
me sostengo y hasta engordo.
TELLO
¡Buena pájara!
CASTA
Es verdad,
a veces parezco un loro.
TELLO
¿Por lo que hablas?
CASTA
Porque ceno
115
sopa en vino de bizcocho.


Escena III

 

CASTA, TELLO y EL CONDE, que viene a escena por la derecha.

 
TELLO
El señor Conde.
EL CONDE
¿Qué hacéis?
CASTA
Yo, nada, señor, recojo
las tocas de doña Luz
para llevarlas al coro.120
EL CONDE
Ellas den a su alma triste
el anhelado reposo.
CASTA
Amén.
EL CONDE
Dios la llama al claustro.
CASTA
¡Ay! Gratias hagamus Domino.

 (Sale por la izquierda llevándose la canasta con la ropa.) 



Escena IV

 

EL CONDE y TELLO.

 
TELLO
Llegada ya la ocasión125
en que nadie se desdice,
siento, señor, que realice
doña Luz su profesión.
Nada sabemos de cierto
con relación a Centellas,130
nadie descubre sus huellas;
mas ¿quién afirma que ha muerto?
Y si llega a aparecer
y Luz llegó a profesar,
no quiero ni sospechar135
lo que puede suceder.
EL CONDE
Él murió.
TELLO
No lo concedo.
EL CONDE
¿Por qué niegas con voz fuerte?
TELLO
Porque pienso que la muerte
le ha llegado a cobrar miedo.140
EL CONDE
Cierto que a continuación
de su locura frustrada,
cuando Valor en Granada
promovió la rebelión,
él, con española saña,145
combatió a los descendientes
de aquellos moros valientes
que arrojó Isabel de España.
TELLO
En aquella lucha horrible
de moriscos y cristianos,150
siempre al venir a las manos,
él fue cristiano invencible.
EL CONDE
Cierto que hizo una epopeya
venciendo con patrio ardor
a don Fernando Valor,155
mal llamado Aben-Humeya.
TELLO
Él solo en toda ocasión
terror del morisco fue:
luchó por amor, por fe
y por desesperación,160
y quebró las cimitarras
que esgrimió el bando agareno
en las grietas del terreno
de las agrias Alpujarras.
EL CONDE
Pero quince meses van165
desde entonces trascurridos;
los moriscos, o vencidos
o sepultados están,
y el mundo ignora la suerte
de Centellas... Y por ello170
juzgo, sin rencores, Tello,
que este silencio es de muerte.
TELLO
Se me ha fijado una idea
terca, tenaz, importuna,
que cuando yo tengo alguna175
suele ser de esta ralea,
y, aunque nadie hasta el momento
la pudo nunca entrever,
vos la debéis conocer
por si le halláis fundamento.180
Centellas, entre los varios
accidentes de la guerra,
pudo mandar a esta tierra
diferentes emisarios
que hablaron más de una vez185
con Casta y otras conmigo,
y aunque yo no era su amigo
les recibí sin doblez;
mas ¿quién nos dice, señor,
que aunque él viva y amor sienta,190
los que han venido a dar cuenta
de su vida y de su amor
no han tropezado después
con algún hombre taimado
que todo se lo ha callado195
por un laudable interés?
EL CONDE
Explícate.
TELLO
Pasionaria
ama al capitán.
EL CONDE
Modera...
TELLO
Vos lo sabéis, considera
la reserva innecesaria.200
EL CONDE
¿Y recelas?
TELLO
No recelo
de ella, no.
EL CONDE
¡Pobre hija mía!
TELLO
Recelar de ella sería
ver maldades en el cielo.
Mas Goro ama solamente205
a Pasionaria en el mundo,
conoce el amor profundo
que su protegida siente,
y en su cariñoso afán,
como hacerlo haya podido,210
de seguro ha intervenido
las nuevas del capitán;
y se callará impasible
hasta ver que doña Luz
jurando al pie de la cruz215
hace su amor imposible.
Y así en un solo momento
se hallarán, según concibo,
la una libre, el otro vivo,
y la monja en su convento.220
EL CONDE
Esa idea me intimida;
no sé si dude o si crea...
TELLO

 (Golpeándose la frente.) 

Señor, lo dicho, esa idea
la tengo yo aquí metida.
EL CONDE
Quizás tu mente delire.225
TELLO
Yo me mantengo en mis trece.
EL CONDE
Si ese hombre vive, merece
el mayor premio a que aspire.
Pero amándole las dos
nada conciliar espero...230
Ver si existe es lo primero,
después... lo que quiera Dios.


Escena V

 

Dichos y PASIONARIA, que sale a escena por izquierda.

 
PASIONARIA
Padre.
EL CONDE
¿Y Luz?
PASIONARIA
Junto a estas salas
en su celda recogida,
se viste lujosas galas,235
porque va a tender sus alas
la última vez en la vida.
TELLO
¿Y si el capitán viviera?
PASIONARIA
¡Qué decís! Infamia fuera
saber tal cosa y callar240
cuando Luz va a profesar.
EL CONDE
Ya ves que ella nada espera.
TELLO
Si lo sé, si yo no creo...
Si el engaño que preveo
sólo es de Goro.
PASIONARIA
¿Qué engaño?
245
Él no puede hacer el daño
de que vos le juzgáis reo.
TELLO
Quizás olvida el dolor
de Doña Luz en tal modo
por haceros un favor.250
PASIONARIA
No es cierto.
TELLO
Por vuestro amor
es Goro capaz de todo.
EL CONDE
Pero eso es una maldad.
TELLO
Yo dudo, no le sentencio.
PASIONARIA
Id a indagar la verdad,255
no juzguéis que en su silencio
tengo yo complicidad.
Que nada mi amor influya,
que esta pasión soñadora
el bien de Luz no destruya:260
si mi alma a su amante adora
nunca llegaré a ser suya.
¿Acaso os parece grave
esta franca confesión?
Mi hermana misma lo sabe,265
que todos tenéis la llave
de mi honrado corazón.
Todos veis que nada espero;
si compartí con mi hermana
nombre y fortuna, no quiero270
cometer la acción villana
de robar su amor entero.
Aunque Doña Luz profese
y Centellas vuelva un día
y por mi amor se interese,275
no uniré, mal que me pese,
su existencia con la mía.
Por eso acojo este indicio
de una y del otro en servicio
y repruebo si hay engaño,280
porque puede hacer un daño
sin sombra de beneficio.
Corred ese hombre a buscar,
que si lo podéis hallar,
cogeré su mano ufana285
para llevarlo al altar
y enlazarlo con mi hermana.
TELLO
¡Qué noble es su corazón!
EL CONDE
Nos anima en contra suya.
PASIONARIA
Luz, hermana.

 (Llamándola.) 

EL CONDE
Ten razón.
290
TELLO
No le habléis de esta ilusión.
EL CONDE
Quizás pronto se destruya.
 

(EL CONDE y TELLO salen de escena por el foro; PASIONARIA se dirige a la puerta de la izquierda, donde aparece DOÑA LUZ.)

 


Escena VI

 

DOÑA LUZ, PASIONARIA.

 
 

Música.

 
DOÑA LUZ
Oyendo que me llamas
   acudo yo a tu voz.
PASIONARIA
No puedo acostumbrarme295
   a tal separación.
DOÑA LUZ
   Hermana mía,
   lo quiere Dios.
PASIONARIA
   Deja tan triste
    resolución.300
DOÑA LUZ
      ¡Ah! No.
PASIONARIA
      Sí.
DOÑA LUZ
      No.
PASIONARIA
No puede ver con calma
   mi cariñoso afán,305
que siempre dobles rejas
   nos deban separar.
DOÑA LUZ
Aunque un muro de hierro
    a separarnos va,
por siempre nuestras almas310
    unidas estarán.
PASIONARIA
Si el amante por quien lloras
cariñoso vuelve a ti.
DOÑA LUZ
Hoy que sé que tú le adoras
no hay consuelo para mí.315
PASIONARIA
Si aparece al fin tu amado,
a él te debes enlazar.
DOÑA LUZ
De mis votos a tu lado
se tendrá que consolar.
PASIONARIA
   La misma nobleza320
    tenemos tú y yo.
DOÑA LUZ
   Las mismas congojas
    sentimos las dos.
PASIONARIA
   Ni de él ni de nadie.
DOÑA LUZ
   Sin él sólo Dios.325
LAS DOS
   ¡Ah! ¡Somos hermanas
    hasta en el amor!
DOÑA LUZ
¡Ay, hermana, si tomo ese velo
en que hallo cifrado mi buen porvenir,
a mis penas será un gran consuelo330
que viva mi amante y te haga feliz!
PASIONARIA
¡Ay, hermana, si dejas el velo
que al mundo le oculta tu buen porvenir,
a mis penas será un gran consuelo
que viva mi amante y te haga feliz!335
 

(Se retiran por la puerta de la izquierda.)

 


 
 
MUTACIÓN A LA VISTA
 
 



ArribaAbajoCuadro II

 

Telón corto que representa la fachada de un convento con puerta practicable. A la izquierda, segundo término, un trasto que figura la puerta de una iglesia, practicable también; a la derecha, calle. Es de día.

 

Escena VII

 

GORO, que llega por la derecha.

 
 

Hablado.

 
GORO
A no ser yo tan gitano,
se descubre la verdad,
que las sospechas de Tello
al Conde hicieron dudar;
los dos me estrechaban mucho,340
por vida del capitán,
pero yo, firme en su muerte,
casi les hice llorar.
Nadie tuvo hasta hoy recelos
de que yo tramase un plan,345
y llevo ya quince meses
en este enredo infernal,
callando nuevas del uno,
mintiendo de los demás.
Para aquél ha muerto Casta,350
Tello en las indias está,
y doña Luz y su padre
le aborrecen a cual más;
para éstos ni una palabra,
un silencio sepulcral:355
ni que aquél, peregrinando,
fue a ver a Su Santidad,
ni que de vuelta en España
tuvo una audiencia real,
ni que se encuentra en camino,360
ni que a estas horas quizá
le detienen por mi encargo...
Con decir nada, no hay más.
Pero el capitán es hombre
que aún puede torcer mi plan;365
por si acaso, a todo evento
hay que salirle a esperar,
dando tiempo a que la monja
haya profesado ya.
Goro, de todas maneras370
lo tienes que pasar mal,
que la misma Pasionaria
no te puede perdonar...
Pero si expongo mi vida
es por su felicidad.375
¿No me engañó a mí Centellas?
Pues yo le engaño y en paz.


Escena VIII

 

GORO y CHISPAS, que entra por la derecha.

 
GORO
¡Chispas! ¡Tú! ¿Cómo has venido?
CHISPAS
¿Pues qué, no nos esperabas?
GORO
Yo... sí...
CHISPAS
Pero vengo solo.
380
GORO
Del mal el menos.
CHISPAS
¿Qué charlas?
GORO
Digo que bien vengas mal...
CHISPAS
No me recibas con chanzas,
porque llego más quemado
que un hereje.
GORO
¿Qué te pasa?
385
CHISPAS
Pues salimos de la corte...
¿Tú has oído hablar de las alas
del amor? Con esa ayuda
mi amo el capitán volaba,
y yo tras él desalado390
iba siempre tan en zaga
que veía con pena el polvo
que mi señor levantaba.
Apretó al fin de manera
que ya ni polvo ni nada;395
cuando, al doblar una loma,
descubro a un lado una mancha
oscura y digo: «Allí hay gente,
y no son los de la Santa
Hermandad, no, son bandidos,400
hijos de mi noble casta,
que Toledo es una tierra
donde no muere la raza».
Mi intención fue volver grupa,
pero me fijé y estaba405
mi amo cogido y atado;
por supuesto que con trampa,
pues, según colegir pude,
él quiso darles batalla,
ellos se echaron a un lado410
y él siguió dándoles caza,
hasta que aquellos traidores
le llevaron a una zanja,
muy bien oculta con tierra
y lentiscos y retamas,415
en donde cayó el jinete
con la fiera que montaba.
Sólo pudieron atarle
valiéndose de estas mañas,
que a mi amo nadie le vence420
frente a frente y cara a cara.
GORO
Muy bien.
CHISPAS
¿Pero es que te alegras?
GORO
De que conserve tan brava
condición.
CHISPAS
Pues sí, la tiene.
GORO
¿Y tú, cómo aquí te hallas?425
CHISPAS
En vez de volverme atrás,
me eché a la parte contraria:
«Alto», dicen los bandidos;
mi capitán grita: «Anda».
Pico bien, los arcabuces430
me sueltan una descarga,
yo me sacudo las moscas
y, a favor de la algazara,
se me desboca mi jaco
más ligero que sus balas,435
y hecho un brujo por los aires
llegó al fin a la posada.
GORO
¿Allí con quién has hablado?
CHISPAS
Con nadie, ni una palabra.
No tengo los documentos440
que son nuestra salvaguardia,
y sólo he de descubrirme
a gentes de confianza.
GORO
¿Como yo, pongo por caso?
CHISPAS
Ya ves, no viviendo Casta,445
y estando Tello en las Indias,
¿a quién vuelvo yo la cara?
GORO
Tienes razón.
CHISPAS
Si encontráramos
a Gilo, a Meco y a Lapa...
GORO
Échales un galgo.
CHISPAS
Es fuerza
450
que formemos una banda
y salgamos sin demora
a zurrarles la badana
a esos cuatro aventureros,
que cuando a mi amo maltratan455
es porque ni le conocen,
ni son bandidos, ni nada.
GORO
Estás muy valiente, Chispas.
CHISPAS
Ya ves, quien con lobos anda...
GORO
Al que propongas tu empresa460
le debes hablar en plata.
CHISPAS
La tengo: si he desnudado
más moriscos en Granada...
Además, soy tesorero
de mi señor, y esto basta,465
que a fuerza de arrepentido
he vuelto a su confianza.
GORO
(Hay que quitarle de en medio...)
CHISPAS
(Si parece que está en Babia.)
GORO
(Por si Casta resucita,470
o si Tello desembarca.)
CHISPAS
¿En qué piensas?
GORO
¿No estás seco
con esa continua charla?

 (Después de una pausa y con intención.) 

Hay un Yepes aquí cerca...
CHISPAS
¿Y hallaremos gente de armas475
tomar?
GORO
Eso de seguro.
CHISPAS
Pues entonces, Goro, en marcha.
Y di..., ¿conque el señor Conde...?
GORO
Odia a tu amo: no se ablanda,
aunque le templa la niña.480
CHISPAS
¿Quién, doña Luz?
GORO
Pasionaria.
CHISPAS
Pero explica... ¿Y doña Luz?
GORO
Pronto, muy pronto se casa.
CHISPAS
¿Con quién?
GORO
¡Cuánto preguntar!
No sé, con Dios.
CHISPAS
Tienes gracia.
485
Pues como yo libre a mi amo,
a Dios le roban la dama.
 

(Se marchan por el primer término de la izquierda.)

 


Escena IX

 

Coro de gentes del pueblo. Después saldrán a escena DOÑA LUZ, PASIONARIA, CASTA, EL CONDE y TELLO. Un preludio en que suenan campanas.

 
 

Música.

 
CORO DE MUJERES
Como somos muy curiosas,
no perdemos la ocasión
y acudimos presurosas490
para ver la exploración.
CORO DE HOMBRES
La novicia se asegura
que es más bella cada vez;
hoy veremos su hermosura,
su donaire y su esbeltez.495
CORO DE MUJERES
La veremos con la pena
que al que van a ejecutar,
porque así en cabeza ajena
siempre es bueno escarmentar.
CORO DE HOMBRES
Con respeto muy profundo500
a esperar vamos aquí,
para ver que pierde el mundo
encerrándose ella así.
TODOS
La puerta del convento
se abrió de par en par;505
las madres con sus tocas
salieron al portal.
Allí está el Arzobispo,
Don Diego está detrás;
allí está la novicia,510
sí, sí. ¡Qué hermosa está!
DOÑA LUZ
El alma tiende el vuelo
de la esperanza en pos
y, alzándose del suelo,
quiere elevarse a Dios.515
Fui nave combatida,
surqué el revuelto mar
y el puerto de mi vida
está al pie del altar.
PASIONARIA,
EL CONDE,
CASTA y
TELLO
Que no te ciegue el sentimiento,520
que no te aturda la pasión;
antes de hacer el juramento
consulta bien tu corazón.
DOÑA LUZ
   La nave combatida
    no teme zozobrar,525
    el puerto de mi vida
   comienzo ya a tocar.

  (Se dirige a la iglesia seguida de todas las personas que hay en escena.) 

CORO
Ella en su empeño va adelante
sin la menor vacilación,
y debe ser edificante530
    su profesión.
 

(Queda sola la escena. Algunos compases de música preparan la salida de CENTELLAS.)

 


Escena X

 

CENTELLAS, que sale a escena por la derecha.

 
 

Canto.

 
CENTELLAS
Por fin tras largas luchas he logrado
el término a mis súplicas hallar;
la tierra que pisó mi bien amado
humilde mi rodilla ha de besar.535
    Luché en las Alpujarras
   por la cristiana fe
    y siempre victoriosa
    la santa cruz llevé.
    Descalzo fui a Roma540
    en peregrinación,
   y al verme el Padre Santo
    me dio su bendición.
   Viniendo a mis hogares
   al rey de España vi,545
    y de mis penas todas
   indulto conseguí.
    Tranquila la conciencia
    e inquieto el corazón
    aquí hallaré mi gloria550
   o mi condenación.
No quiera el cielo en un instante
todos mis sueños desmentir;
no le destruya al pecho amante
toda la paz del porvenir.555
    ¡Si doña Luz no me ama,
    si de pesar murió,
    si esposo a otro hombre llama,
    si no la alcanzo yo!...
   No quiero ni yo mismo560
   al alma hacerle ver
   el hondo y negro abismo
    en que puede caer.
   En vano me exaspera
    esta intranquilidad,565
    que acaso aquí me espera
    vital felicidad.
   Que unido con mi amada,
    gozando el dulce bien,
    nuestra alma enamorada570
    del mundo hará un edén.


Escena XI

 

CENTELLAS y CHISPAS, que vendrá por el primer término izquierda.

 
 

Hablado.

 
CHISPAS
¡Qué miro! ¡Tú aquí, señor!
Cuéntame tus aventuras.
¿Hallaste un libertador?
CENTELLAS
¿Quién opone ligaduras575
a la fuerza de mi amor?
CHISPAS
Habla.
CENTELLAS
Aquellas malas gentes,
viéndome ya bien atado,
me llevaron diligentes
hasta una casa de al lado580
que habitan dos penitentes,
me encerraron, yo rugía,
furioso me retorcía,
sin vislumbrar ni esperanza,
en un cuarto donde había585
utensilios de labranza.
De pronto, si Dios es bueno,
mi libertadora sed
se aplacó al mirar de lleno
una hoz fija en la pared590
para segar fresco el heno.
De espaldas, sus mellas fieles
cortaron mis inhumanos
lazos, con penas crueles;
yo me destrocé las manos,595
pero rompí los cordeles.
Y arrancando ensangrentada
aquella arma salvadora,
dije, con la diestra armada:
«Dios me protege y ahora600
no me detengo por nada».
Rompí las puertas aquellas
con las mismas fieles mellas
que cortó lazos malditos
y salí diciendo a gritos:605
«Paso al capitán Centellas».
Un bandolero se espanta,
otro corre con recelo,
el dormido se levanta
y el valiente besa el suelo610
en que yo puse mi planta.
Aunque mi triunfo te asombre,
no quedó en la casa un hombre,
que espantados como grajos
huyeron ante mi nombre615
a la furia de mis tajos.
Esto logró mi valor
y vine sin descansar
a ver si alcanzo el favor
a que pueden aspirar620
mi fe, mi gloria y mi amor.
CHISPAS
Pues se han lucido los zorros
que te cogieron con maña,
y ese vejete alimaña
que se gastó sus ahorros625
en prepararte esta hazaña.
CENTELLAS
¿Quién?
CHISPAS
Goro.
CENTELLAS
No acierto el plan.
CHISPAS
Quiso embriagarme el truhán.
CENTELLAS
¡Cómo cuando Tello!
CHISPAS
Es llano;
pero le gané la mano...630

  (Haciendo signos de beber.) 

Donde las toman las dan.
CENTELLAS
¿De modo que así?
CHISPAS
He sabido
que, en favor de Pasionaria,
a quien robaste el sentido,
ese gitano ha mentido635
como indica esta sumaria:
Tello está aquí y te enaltece,
Casta vive fresca y sana,
el Conde no te aborrece...
CENTELLAS
Pero ¿y Doña Luz?
CHISPAS

 (Con temor.) 

Parece
640
que profesa esta mañana.
CENTELLAS
¡Aún hay que hacer otro alarde!
CHISPAS
Claro.
CENTELLAS
¿En qué iglesia?
CHISPAS
Aquí junto.
CENTELLAS
Corre, no lleguemos tarde.
CHISPAS
Tú siempre llegas a punto.645
(Ya está el convento que arde.)
 

(Entran por la puerta de la iglesia.)

 


 
 
MUTACIÓN A LA VISTA
 
 



ArribaCuadro III

 

Iglesia del convento, vista desde el altar mayor y formando por consiguiente el fondo, el coro con sus cuerpos alto y bajo: en el alto se ven el órgano, las celosías, etcétera; en el bajo están las rejas abiertas, para tener en comunicación la iglesia con el convento. Dentro del coro se hallará la comunidad; fuera estarán EL ARZOBISPO, PASIONARIA, EL CONDE, CASTA, TELLO, Señoras, Caballeros y Gentes del pueblo. DOÑA LUZ podrá pasar del coro a la iglesia cuando lo requiera la situación. Mucho acompañamiento de órgano.

 

Escena XII

 

Todos.

 
CORO DE MONJAS
   Veni Creator Spiritus,
    mentes tuorum visita:
   imple superna gratia,
    que tu creasti, pectora.650
PASIONARIA,
EL CONDE,
CASTA,
TELLO y
CORO GENERAL

 (Muy quedo.) 

       ¡Qué tranquila
       oye el cantar!
       No vacila
       en profesar.
CORO DE MONJAS
La dama que se empeña655
    en consagrarse a Dios
elige entre el mundano
   y entre el eterno amor.
El velo y vuestras galas
   se encuentran ante vos:660
coged lo que os agrade,
   que es libre la elección.
DOÑA LUZ

 (Cogiendo el velo.) 

Muralla será el velo
contra el mundano amor,
tras él, latiendo un alma665
que entera ofrezco a Dios.
CORO DE MONJAS
Haced fervientes votos
   de vuestra profesión.
DOÑA LUZ
Señor de cielo y tierra,
    divino Redentor,670
esta criatura humilde
    os hace voto.
CENTELLAS

 (Debe empezar antes de que lo vea el público y sostener la nota hasta que llegue al centro de la escena.) 

      No.
Al pronunciar tus votos
    engañarás a Dios:675
tú no puedes hacerlos
    mientras que viva yo.
DOÑA LUZ
      ¡Es él!
PASIONARIA
      ¡Es él!
EL CONDE
      ¡Es él!680
CORO DE MONJAS
   ¡Qué profanación!
CORO GENERAL
   ¡Qué profanación!
CENTELLAS
Decir pueden si falto,
o cumplo con la ley,
una bula del Papa685
y un decreto del Rey.

  (Entrega dos pliegos a EL CONDE.) 

CORO GENERAL

 (Siempre muy quedo.) 

Todos, todos nos hallamos
muertos de curiosidad.
¿Qué dirá el Rey don Felipe?
¿Qué dirá Su Santidad?690
EL CONDE
Si Roma al peregrino
le da el perdón divino
y el Rey al caballero
le otorga su perdón,
al fiel enamorado695
que está regenerado
un padre venturoso
le da su bendición.
CENTELLAS
¿Renuncias a ese velo?
¡Responde a mi ansiedad!700
DOÑA LUZ
¡Sí! Quieren tierra y cielo
nuestra felicidad.
PASIONARIA
La dicha que tú dejas
la encuentra aquí mi amor;
tú sueltas este velo705
y lo recojo yo.
EL CONDE
Tuvieron sus dos almas
tan sólo una pasión;
preciso es que padezca
alguna de las dos.710
CORO DE MUJERES
Sin que me llame el claustro
novicia fuera yo;
si terminara en boda
también mi profesión.
CASTA,
CHISPAS y
CORO
El capitán Centellas715
logró por fin su amor:
a fuerza de constancia
la monja se llevó.






 
 
FIN DE LA ZARZUELA