61
Ivi, p. 27.
62
Ivi, p. 9.
63
Ivi, p. 28.
64
A. Cruz-Luis, «Prólogo» a A. Roa Bastos, Hijo de hombre, La Habana, Casa de Las Américas, 1970, p. XIV.
65
Cfr. ivi, p. XIV: «Pero no todos están concientes
de la difícil misión que se proponen, y se lanzan a
luchas sin armas y contra un mundo que desconocen. De este batallar
a ciegas se deriva un círculo vicioso de nuevas y mayores
frustraciones a las que generalmente no logran sobreponerse;
éstos enloquecen, aquéllos renuncian a la vida y
toman el camino de la resignación o del martirologio, los
otros son asimilados por el medio...»
66
A. Roa Bastos, Hijo de hombre, op. cit., p. 14.
67
Ivi, p. 222.
68
Ivi, p. 14.
69
Ivi, p. 222.
70
Ivi, p. 201.