11
«Exijo a todos mis predecesores, aquellos a quienes Amor les inflamó el corazón, y a los vivos y a los que han de nacer, que, gracias a mis palabras, comprendan mis lamentos».
12
«Como el enfermo que largo tiempo lleva en cama y un día se esfuerza en levantarse, sin que las fuerzas le acompañen, antes bien, puesto en pie, repentinamente cae doblado, así me pasa a mí: me esfuerzo contra el Amor y quiero seguir aquello que mi juicio determina, pero no lo puedo cumplir porque me quita las fuerzas un mal extremo causado por el Amor».
13
«Soy la imagen de una nave que naufraga en un golfo, que hubiera ya perdido el mástil y el timón, y que no pudiera caminar porque hay dos vientos encontrados. Los marineros están espantados y cada uno de ellos echa puntos sobre la carta y no se ponen de acuerdo en su opinión: uno quiere estar cerca de la tierra, a sólo cien pasos, otro, tan lejos como el viento puede empujarle».
14
La reciente, y por lo demás muy bella, edición de Joaquín Molas (Madrid, 1978) presenta los textos traducidos en verso por Pere Gimferrer, según se ha dicho ya.